Introducción
La estomatitis subprótesis se define como la inflamación de la mucosa bucal que está en contacto con la prótesis. Generalmente se localiza en el paladar duro y es casi invariablemente asintomática aunque en excepciones se puede presentar con dolor, prurito o sensación de ardor; observándose inflamación congestiva cuya coloración varía de aspecto de acuerdo con la intensidad de la lesión, pudiendo aparecer puntos hiperémicos los cuales pueden extenderse u observarse un eritema difuso que abarca toda la mucosa cubierta por la prótesis. El tono rojizo puede hacerse vinoso y a veces se distingue un punteado oscuro y zonas congestionadas. También en ocasiones el aspecto es granular en el centro del paladar ocasionado por hiperplasia de las papilas, originando el nombre de hiperplasia papilar. 1-4
En el mundo se reporta una alta incidencia de la afección, algunos estudios sugieren que aproximadamente dos tercios de la población mundial pueden padecerla; se destaca que entre los 40 y 59 años de edad los porcentajes están siempre por encima de 48 %. 5-7
Su prevalencia se manifiesta de manera desigual en cada continente; por ejemplo, en la India se registran cifras cercanas a 40 %, en otros como Filipinas, Taiwán y Malasia se muestran tasas elevadas; sin embargo, en la mayoría de los países occidentales estas tasas oscilan entre 3 y 5 %. 8,9
Estudios epidemiológicos realizados en países con alto nivel de desarrollo muestran cifras más elevadas, así lo demuestran las estadísticas en algunos países como Dinamarca 40-60 %, Chile 40 %, Japón 43 %, Brasil 56 %, Finlandia 52 % y Alemania 70 %. 10,11
En Cuba, a pesar de las conocidas garantías del sistema de atención estomatológica, llega a afectar a más del 45 % de los pacientes que utilizan prótesis dental mucosoportadas. (2,12,13
Se notifica, en la mayoría de los estudios sobre el tema, que su génesis es multifactorial y se refieren entre las posibles causas al trauma ocasionado por la dentadura que incluye el uso continuo de la prótesis, su higiene deficiente, la reacción irritante y la alergia al material de base, los factores dietéticos, la infección micótica en la que se le atribuye un importante papel a la Cándida albicans, el estrés, la edad, el sexo, el pH salival, hábitos nocivos propios del paciente como fumar, consumo de alimentos calientes, uso de sustancias irritantes para la limpieza de las prótesis y factores sistémicos, incluidos los predisponentes. (14-17
Hasta el momento no es suficiente el conocimiento que se tiene en cuanto a los diferentes factores de riesgo y la asociación de estos con la aparición de dicha alteración, por lo que el presente trabajo se propone como objetivo general identificar la posible asociación de algunos factores de riesgo con la aparición de la estomatitis subprótesis en pacientes de 45-59 años.
Métodos
Se realizó un estudio analítico de casos y controles con el propósito de determinar la posible asociación de algunos factores de riesgo con la aparición de la estomatitis subprótesis en pacientes de 45-59 años que ingresaron en la Clínica de Especialidades Estomatológicas durante el período Septiembre del 2016 a Marzo del 2018.
El universo del estudio estuvo constituido por 981 pacientes y la muestra por 96 individuos seleccionados aleatoriamente que aceptaron participar voluntariamente en el estudio, de ellos 32 casos y 64 controles. Se excluyeron los mentalmente incapacitados y con otros factores de riesgo de la estomatitis subprótesis que no fueron estudiados (Cándida albicans, hábito de fumar, ingestión de alimentos calientes, enfermedades sistémicas y pH salival).
La clasificación clínica de la estomatitis subprótesis fue considerada sobre la base de los 3 grados clínicos propuestos por Newton en 1962.
Se delimitaron las variables edad, sexo, estomatitis subprótesis, prótesis desajustadas, higiene inadecuada y el no descanso del uso de la aparatología. La información necesaria se plasmó en una planilla de recolección de datos.
Como medida de resumen se utilizaron frecuencias absolutas y relativas y métodos inferenciales para identificar asociación entre las variables. Se utilizó la regresión logística binaria o análisis univariado que incluye: la prueba de chi-cuadrado, el cálculo de Odds ratio (razón de productos cruzados), su intervalo de confianza (IC 95 %) y significación (p=0,05). Se consideró como factor de riesgo cuando OR y su IC 95 % fue mayor de 1 y p < 0,05; factor protector cuando OR y su IC 95 % fue menor de 1 y no hubo asociación cuando OR=1. Los resultados fueron expresados en tablas.
Resultados
Al analizar las características demográficas de los pacientes incluidos en el estudio se aprecia en los pacientes con estomatitis subprótesis el predominio del grupo de edad de 52-59 años (75,0 %) y el sexo femenino (81,3 %). En los que no presentaron la enfermedad se mostró mayor número en el grupo de edad de 52-59 años (67,2%) y el sexo femenino (56,3 %) (tabla1).
En relación con el estudio de las variables ajuste, higiene y descanso del uso de la aparatología en la población estudiada se encontró que en el grupo casos el 81,3 % presentaron problemas de ajuste, el 28,1 % manifestó tener una higiene inadecuada y el 78,1 % no descansaba del uso de la aparatología (tabla 2).
Cuando analizamos los resultados del análisis estadístico univariado de la edad y el sexo en la posible aparición de la estomatitis subprótesis se aprecia que el pertenecer al sexo femenino incrementó el riesgo de padecer la enfermedad en un OR=3,370 (IC 95 %: 1,220-9,308) con efecto estadísticamente significativo (p= 0,019); además se observa que el estar incluido en el rango de edad de 52-59 años incrementó el riesgo de presentar la enfermedad con un OR=1,465 (IC 95 %: 0,564-3,308), sin efecto significativo (p=0,433) (tabla 3).
Al realizar el análisis estadístico univariado del ajuste, la higiene y el descanso del uso de la aparatología relacionado con la presencia o no de estomatitis subprótesis se aprecia que el desajuste de las prótesis (OR=30,333 p=0,000 IC 95 %: 9,545-96,393), la higiene inadecuada de los aparatos (OR=12,130 p=0,002 IC 95 %: 2,436-60,393) y el no descanso de su uso (OR=10,714 p=0,000 IC 95 %: 3,898-29,453) reveló evidente asociación de forma estadísticamente significativa al incrementar el riesgo de la aparición de la enfermedad en aproximadamente 30; 12 y 10 veces respectivamente (tabla 4).
Cuando se ajusta el modelo a los datos con el objetivo de evaluar el valor independiente de los distintos factores de riesgo, se encuentra que el desajuste de las prótesis (OR=25,791 IC 95 %: 6,025-110,405), seguido de la higiene inadecuada (OR=11,113 IC 95 %: 1,169-105,646), del no descanso de su uso (OR=8,086 IC 95 %: 1,989-32,879) y del sexo femenino (OR=7,951 IC 95 %: 1,399-45,179) mostraron una relación independiente, estadísticamente significativa e importante con el riesgo de padecer estomatitis subprótesis(tabla 5).
Discusión
Nuestros resultados muestran similitud a los obtenidos por Ávila Chiong G y col., (18 ellos refieren que el envejecimiento supone un aumento del riesgo de la presencia de alteraciones y enfermedades de la mucosa bucal como consecuencia de la acumulación de factores internos fisiológicos que provocan enfermedades que inducen a cambios bioquímicos, funcionales y estructurales.
También son semejantes a los encontrados por Pachar Castro NA y Cordero Verdugo ED,19) donde la mayoría de los pacientes que padecían de estomatitis subprótesis oscilaron alrededor de los 52 años de edad. Son similares además a los de Romero Junquera CR y col. 13 Ellos consideraron que estas lesiones bucales tienen una mayor incidencia en la población adulta de avanzada edad y que más del 95 % se presenta en personas mayores de 40 años.
Los tejidos bucales sufren alteraciones del colágeno y es probable que su capacidad de regeneración vaya disminuyendo a medida que va envejeciendo la persona, disminuyendo de esta forma el área de soporte necesaria para la prótesis debido a la destrucción alveolar y a la disminución de la secreción salival.
Respecto al sexo, los resultados observados en el presente estudio son similares a los de la mayoría de los autores consultados. (14,16,18,19
Investigaciones realizadas sobre el tema argumentan que en la mujer se hace más frecuente su aparición debido al aumento de la fragilidad capilar a partir de la segunda década de la vida y a la presencia de las alteraciones psicosomáticas, tanto las que producen el estrés, el período menstrual, como las que aparecen durante y después del climaterio, las cuales tienen influencia sobre los tejidos bucales al alterar la irrigación, el flujo salival y la tasa de anticuerpos circulantes. 20
En opinión de la autora la mayor afectación encontrada en el sexo femenino se atribuye a que las mujeres mantienen una mayor preocupación por su estética y exigen la rehabilitación protésica, manteniendo el aparato protésico en la boca el mayor tiempo posible y por consiguiente tienen mayor probabilidad de padecer la afección. El acudir con más frecuencia a las consultas estomatológicas permite detectarse la afección con más frecuencia que en el sexo masculino; además las mujeres utilizan sus prótesis por períodos más prolongados por no aceptar ser vistas sin ellas.
Con respecto al ajuste de las prótesis los resultados observados en el estudio son similares a los de gran número de los autores consultados; ellos coinciden en que es un factor traumatógeno, incluso lo consideraron causa principal de la estomatitis subprótesis. (5,10,14,20
Ríos Dueñas MR, 4) Rocafuerte Acurio MA y col. 7encontraron una prevalencia de 97 % de pacientes afectados a causa de traumas que producen las prótesis desajustadas. La falta de estabilidad, las inadecuadas relaciones céntricas o interferencias en la oclusión se traducen en presiones que pueden causar alteraciones, o bien alterar canales circulatorios que originan lesiones de carácter degenerativo, como la atrofia del epitelio y el debilitamiento de sus funciones de defensa y protección, lo que trae como consecuencia la aparición de la enfermedad. 9
Los resultados relacionados con la higiene inadecuada de las prótesis son similares a los que mostraron autores como González Beriau Y y col. (14) y Pulgar Bustos LA 20 quienes plantearon que la misma es capaz de provocar irritaciones a los tejidos por la producción de ácidos a causa de la descomposición de los alimentos, lo que crea el medio propicio para la proliferación de hongos.
Afirman Ríos Dueñas MR, 4) Espasandín González S y col, 15) que la higiene deficiente tiene un papel muy importante en su desarrollo debido a que favorece el depósito de placa dentobacteriana en el interior de la base de la prótesis, lo que facilita la proliferación de microorganismos oportunistas como la Cándida albicansque pueden irritar la mucosa bucal en diferentes grados.
Los resultados obtenidos en este estudio coinciden con los de García Cubillas MD, 5) quien reporta que el 63.0 % de los pacientes en su estudio usaban de forma permanente las prótesis y al igual que Nápoles González I y col, (11) recomiendan el descanso de su uso. Ellos lo consideran necesario y beneficioso para los tejidos que se encuentran en contacto con ella, de esta forma se reduce la incidencia de lesiones inflamatorias al disminuir el tiempo de exposición a la posible proliferación de microorganismos y recomiendan la estimulación de la mucosa mediante masajes para evitar o disminuir las lesiones bucales.
Se ha demostrado que el uso continuo de la prótesis provoca degeneración de las glándulas salivales y a su vez bloqueo mecánico de sus conductos excretores, disminuye de esta forma la secreción salival y su pH debido a la disminución de la función buffer de la saliva. (5,11,12
Estos resultados también coinciden con los obtenidos por Gutiérrez CG y col. (1) quienes encontraron el mayor número de casos con estomatitis subprótesis en los pacientes que usaban la prótesis en forma constante con 65,6 %.
El uso de la prótesis de forma continua da lugar a un mayor cúmulo de placa bacteriana entre la base de la prótesis y la mucosa oral debido al entorno ácido y anaeróbico que se produce al disminuir la circulación sanguínea por la presión ejercida por la prótesis. Este aumento de placa y de microorganismos provoca una mayor predisposición a la estomatitis. 18) Muchos investigadores recomiendan un receso del tiempo de uso diario de 6 a 8 horas. 6
Conclusiones
El grupo de edad de 52 a 59 años y el sexo femenino fueron los más afectados por la estomatitis subprótesis. Se determinó que existe relación estadísticamente significativa entre los factores de riesgo: sexo, prótesis desajustada, higiene inadecuada y el no descanso del uso de la aparatología y la presencia de estomatitis subprótesis. El desajuste de la prótesis y el no descanso del uso de las mismas constituyeron los factores independientes con mayor influencia sobre la estomatitis subprótesis.