Introducción
Educar implica propiciar que cada nueva generación se convierta en generadora de pensamientos y acciones encaminados a resolver los problemas que debe afrontar en su vida. En el campo de la formación profesional, la educación superior debe dar respuesta a los requerimientos de un capital humano apto para proyectarse como elemento interviniente en el desarrollo social sustentable.
La transformación progresiva a lograrse en los estudiantes que ingresan a las universidades, es la esencia del proceso docente-educativo, pero no resulta posible imaginar el logro de esta evolución en la juventud universitaria sin que se alcance la necesaria conciliación oportuna de la gestión de la enseñanza-aprendizaje con lo que reclama el momento en que esta se haya produciendo lo que, sin dudas, guarda una estrecha relación con la adecuada ejecución del trabajo metodológico. No basta con la consideración solamente de su dimensión administrativa de manera formal, sino debe garantizar una acertada gestión didáctica del proceso formativo.1
Actualmente, hablar de la gestión didáctica del proceso educativo, obliga a tener en cuenta el aprovechamiento de las posibilidades que brindan las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC) para gestionar la información, materia prima indiscutiblemente requerida para la construcción del conocimiento, de manera autónoma, hecho que hoy por hoy requiere llevar a cabo una revisión de la manera de educar.2
En concordancia con lo previamente expuesto, Morales y Rodríguez3 han expresado que resulta indispensable impulsar la adopción de la virtualidad como un entorno utilitario contemporáneo en la enseñanza-aprendizaje en las universidades, dado el reconocimiento de su connotación educativa, en la que se incluye la posibilidad que ofrece de flexibilizar el desarrollo del proceso formativo de los estudiantes, así como la viabilidad de ser incorporadas desde las distintas modalidades de enseñanza en que se les puede emplear. De igual forma, Rodríguez4) ha recalcado la perspectiva didáctica que ofrece la tecnología digital como recurso reformador del tradicional espacio educativo presencial, al favorecer un aprendizaje más coherente con las necesidades formativas de nuestra época.
En el Departamento de Ciencias Básicas Biomédicas, de la Facultad de Ciencias Médicas Salvador Allende, se ha trabajado en los últimos seis años en el uso docente de la plataforma Moodle, a partir de una indicación metodológica recibida de la Vicerrectoría Docente de la Universidad Médica de La Habana. Por la experiencia alcanzada en esta tarea, se ha logrado un limitado pero progresivo avance en el uso de dicha tecnología. En relación con las decisiones departamentales tomadas para llevar a cabo esta actividad metodológica, estas deben ser objeto de un análisis valorativo, requisito justificado a partir de la sanción hecha por Olivares,5 al expresar que “[…] la calidad de la toma de decisiones en la gestión de la educación médica favorece la conducción adecuada de los procesos académicos, a la vez que implica una gran responsabilidad con la formación de los futuros profesionales […]”.
El objetivo de este trabajo fue analizar la proyección didáctica educativa asumida por el Departamento de Ciencias Básicas Biomédicas, de la Facultad de Ciencias Médicas Salvador Allende, con el uso de la plataforma Moodle en la enseñanza-aprendizaje de la Disciplina Bases Biológicas de la Medicina.
Desarrollo
Se desarrolló una indagación con la intención de comprender las decisiones departamentales con respecto al uso docente de la plataforma Moodle.
La indagación se condujo a partir de la búsqueda de respuesta a la pregunta: ¿qué sentido educativo han tenido las decisiones tomadas? Para la elaboración de las respuestas se consideró la información contenida en ocho publicaciones en revistas científicas registradas en la base de datos de Google Académico entre 2020 y 2023, hechas por el departamento, en las que se presentan resultados investigativos vinculados al objetivo de este trabajo, así como en un proyecto de investigación educativa aprobado este año para su ejecución por un equipo de docentes del departamento.
Se usaron métodos teóricos y empíricos. Dentro de los primeros se utilizaron: el analítico-sintético, para precisar los datos de interés contenidos en la información revisada y la relación que se establece entre estos; el inductivo-deductivo, con el propósito de llegar a inferencias generales en la respuesta a la pregunta conductora del análisis, a partir de los reportes particulares de las publicaciones revisadas; y el histórico-lógico, con la finalidad de comprender la evolución de la actividad docente-metodológica departamental en su relación con las características del contexto educativo. En el caso de los métodos empíricos, se emplearon la consulta bibliográfica, para la revisión crítica de la información registrada sobre el tema abordado; y el análisis de contenido, para la interpretación de la documentación consultada.
El análisis del contenido de la documentación consultada permitió determinar que, en el Departamento de Ciencias Básicas Biomédicas, de la Facultad de Ciencias Médicas Salvador Allende, la introducción del uso de la tecnología educativa estuvo asociada a la búsqueda de alternativas que facilitaran la forma de incidir sobre el desarrollo del estudio independiente, mediante la implementación de la evaluación formativa del aprendizaje, con la ventaja de la inmediatez que ofrece para ello el recurso cuestionario disponible en la plataforma Moodle, lo que ofrece la posibilidad de proporcionar una retroalimentación rápida sobre los resultados evaluativos obtenidos.
Este primer paso en el uso de la plataforma Moodle sentó bases para que, al llegar la pandemia de la COVID-19, ya existiera un espacio virtual complementario a la actividad presencial, en el cual, además del repositorio de materiales docentes, se contara con la posibilidad de que los estudiantes autoevaluaran los resultados de su proceso de aprendizaje, actividad docente que ha devenido en práctica sistemática en la gestión de la enseñanza-aprendizaje en la disciplina Bases Biológicas de la Medicina; además, ha constituido un procedimiento didáctico subordinado al compromiso de estimular la autogestión del conocimiento, que hoy día solicitan los estudiantes.
Enmarcada en esta estrategia metodológica que ha venido desarrollándose en el departamento, encaminada a fomentar la autogestión del conocimiento por los estudiantes, a partir del curso 2023-2024 se ha abierto una nueva línea de investigación, cuyo objetivo es elaborar una propuesta didáctica para promover la aptitud de los estudiantes para la autorregulación de su aprendizaje. Además de tenerse en cuenta las posibilidades que ofrece la explotación de las aulas virtuales como entorno para promover la concientización de los estudiantes, mediante la evaluación formativa, sobre el resultado de la forma en que ha sido conducido el proceso de aprendizaje, también se ha considerado la perspectiva de introducir el método de la inversión de clases en algunas conferencias, previa consideración de su factibilidad, acordada a partir del análisis de la estructura y organización de los temas, con la finalidad de enfatizar el papel central del estudiante durante su proceso de formación. Así se incrementa su participación consciente y activa en el procesamiento de información para la construcción de nuevos conocimientos.
Diversos factores de vital importancia que inciden en lo social, lo político y lo ambiental, están provocando la necesidad de llevar a cabo un reajuste en la dirección de los procesos involucrados en la vida en el planeta, lo que ha determinado la inaplazable necesidad de tomar decisiones para llevar a cabo rectificaciones en la conducción de una amplia gama de actividades humanas. A propósito de esta situación, en la reseña de un libro reciente sobre la educación, se cita el siguiente postulado como un aporte importante de este, al expresar la inclusión de la esfera educativa dentro de las actividades que deben ser readaptadas:
La educación no debe basarse solo en la trasferencia de conocimiento sino que debe ofrecer herramientas contextualizadas a la realidad (gestión emocional, proyecto de vida saludable, uso responsable de la tecnología y clima de respeto), el currículo requiere adaptarse a esa realidad.6
La creatividad y la innovación educativa buscan la transformación intencional de las prácticas educativas en el aula, hecho que involucra la participación de los diferentes niveles responsabilizados con la gestión docente-educativa, al ser un factor esencial para su manifestación el surgimiento de condiciones apropiadas, dentro de las que se registran el contexto social en que se organiza el proceso educativo, así como la factibilidad de que los cambios pensados puedan llevarse a la práctica.7 En contraste con esta noción, como consecuencia de la ocurrencia de la COVID-19, se debió acometer un cambio en la gestión docente de las universidades que, establecidas con un carácter presencial, se vieron obligadas a llevar a la práctica lo que se ha denominado “educación a distancia de emergencia”, mediante la acelerada incorporación del uso de las TIC, hecho ante el cual Arteaga y otros8 han sugerido la necesidad de que, en favor de la calidad educativa, se considere afrontar el desafío de explotar las potencialidades educativas que ofrecen las TIC.
En el Departamento de Ciencias Básicas Biomédicas, de la Facultad de Ciencias Médicas Salvador Allende, la introducción del uso de la tecnología educativa estuvo asociada a la búsqueda de alternativas que facilitaran la forma de incidir sobre el desarrollo del estudio independiente, mediante la implementación de la evaluación formativa del aprendizaje, sacando provecho del recurso cuestionario disponible en la plataforma Moodle. Este primer paso en el uso de la plataforma sentó bases para que, con la declaración de la pandemia, ya existiera un espacio virtual complementario a la actividad presencial, en el cual, además del repositorio de materiales docentes, se contara con la posibilidad de que los estudiantes autoevaluaran los resultados de su proceso de aprendizaje, actividad docente que ha devenido en práctica sistemática en la gestión de la enseñanza-aprendizaje y que, además, ha constituido un procedimiento didáctico subordinado al compromiso de estimular la autogestión del conocimiento por los estudiantes.
Al contarse con la experiencia precedente, enraizada en una consideración didáctica con respecto a la tecnología digital, con el establecimiento de la pandemia, el Departamento de Ciencias Básicas Biomédicas, de la Facultad de Ciencias Médicas Salvador Allende, reforzó la preparación de los docentes para propiciar la creatividad e innovación con la plataforma Moodle, lo que dio la posibilidad de expandir la perspectiva de aplicación de la tecnología como medio educativo auxiliar. Se inició así una aproximación del claustro a la cultura digital y sus beneficios, lo que Aguirre y otros9) (2023) consideran como una demanda social a la academia en el siglo xxi, al constituir un factor clave para llegar a alcanzar una formación estudiantil coherente con el contexto en que esta se produce. De este modo, se crearon condiciones para comenzar una actividad científico-metodológica departamental encaminada a impulsar la innovación docente, un aspecto señalado como requisito para trabajar por elevar la calidad educativa.10
En el reporte de una investigación sobre la utilización docente del aula invertida (AI), llevada a cabo en la Universidad de Málaga, en España, Masegosa11 ratificó esta metodología de trabajo como una forma de enseñanza que busca centrar la enseñanza-aprendizaje en los estudiantes, al integrar el uso de las TIC; así se impulsaba la autogestión del conocimiento, lo que se adscribe a la innovación educativa promotora de soluciones para algunas deficiencias educativas de la metodología tradicional, frente a las nuevas demandas sociales con respecto a la formación profesional. Dicho autor indicó también que el AI se ha afianzado como recurso metodológico, el cual, al no tener un esquema de diseño universalmente establecido, abre la posibilidad de que, sobre la base de la creatividad, se recurra a la investigación sobre el tema con la finalidad de dar respuesta a dificultades específicas identificadas en la planificación de la docencia.
La gestión universitaria a escala mundial, especialmente en Latinoamérica, progresa paulatinamente en la adopción de una modalidad de gestión, que preconiza como elemento valorativo primario de la gestión educativa su impacto social, estilo de dirección que se conoce con el nombre de “responsabilidad social universitaria”.12 Al hacer una valoración del impacto educativo de las universidades en la actualidad, se ha destacado un hecho, aparentemente contradictorio, pero que encierra una realidad que incide negativamente en la época en que se está presentando:
[…] el mayor impacto negativo de la institu ción universitaria en la sociedad es cognitivo: la híper-mono-disciplinarización de los egresados del sistema, después de haber rendido exámenes durante años que, más allá de la nota calificativa y del esfuerzo personal, no habrán tenido ningún efecto social significativo.13
Al referirse al papel del docente frente a la responsabilidad social universitaria (RSU), Nande y Molina14) han expresado su función como gestores y evaluadores de propuestas de diferentes recursos, métodos y ambientes de aprendizaje, con los que se procure centrar en el estudiante su propia formación, acción que está considerada como uno de los indicadores de pertinencia y calidad educativa. Aquí cabe referir la idea de que, en materia de RSU, las universidades tienen que sufrir un proceso de transformación interno, con un cambio en la visión global de sus obligaciones por quienes la dirigen.15 En consonancia con estos criterios, Gutiérrez16) ha manifestado que “[…] la universidad desde los altos mandos debe propiciar espacios para la inserción de la innovación educativa, es necesaria una infraestructura que establezca una estrategia y directrices para la innovación […]”.
Acorde con las opiniones previamente expuestas, la adopción de la innovación educativa haciendo uso de la plataforma Moodle como un problema departamental, evidencia una actitud de cambio en la gestión metodológica organizacional, que responde a la consideración del cumplimiento de una de las responsabilidades sociales asignadas por el plan de estudios vigente. Este hecho, según Vázquez y otros17 constituye una experiencia particular que debe socializarse, al servir como fuente de conocimientos para impulsar la necesaria transformación educativa a nivel institucional, lo que, en el caso de la Facultad de Ciencias Médicas Salvador Allende, apoyaría el necesario perfeccionamiento funcional del espacio virtual, mediante la sustitución de los repositorios de información por aulas, en la que los estudiantes realicen actividades conducentes al aprendizaje bajo el asesoramiento de los docentes,18) sin que omita la responsabilidad de asegurar el acceso y uso de dichas aulas.19
Conclusiones
El análisis hecho sobre las decisiones tomadas por el Departamento de Ciencias Básicas Biomédicas, de la Facultad de Ciencias Médicas Salvador Allende, con respecto al uso docente de la plataforma Moodle, permitió establecer que dichas determinaciones resultan adecuadas, al coincidir con las normas generales que suponen una gestión didáctica pertinente, característica que contribuye al cumplimiento de uno de los indicadores de la responsabilidad social universitaria. Se sugiere promover institucionalmente esta posición respecto al trabajo metodológico en otros departamentos docentes que solamente han desarrollado repositorios de información.