INTRODUCCIÓN
En los maxilares se encuentran diversas anomalías de forma, tamaño, número y estructura, durante el proceso de erupción dental, que deben ser bien conocidas por el odontólogo general y los diferentes especialistas de nuestra profesión.1
La erupción dentaria es un evento complejo provocado por diversas causas que hacen que el diente, sin estar completamente formado, migre del interior del maxilar a la cavidad bucal.1
Concomitantemente con la salida del diente hasta su posición definitiva en el arco, se construye la raíz, se remodela el alveolo para recibirla y se organiza el ligamento alveolodentario.2
La erupción de las piezas permanentes puede verse afectada por trastornos ocasionados por distintos factores etiológicos, y afectar a cualquier pieza del arco dentario.2
La ausencia en la cavidad bucal de alguna pieza dentaria en la época normal de su erupción, es un signo de dientes retenidos, que son aquellos que no logran erupcionar y se mantienen en su saco pericoronario dentro del hueso. Se define un diente retenido como aquel diente que se ha desarrollado total o parcialmente y que se queda alojado en los maxilares después de que ha pasado la época promedio normal de erupción.2,3
Actualmente se le denomina síndrome de retención dentaria por estar caracterizado por un conjunto de alteraciones locales y sistémicas, tales como dolores intensos, otalgias, neuralgias, cefaleas, caída del cabello, trastornos visuales diversos, además de la ausencia del diente en la cavidad bucal.4
Esta retención puede ser intraósea (cubierto por hueso) o submucosa (cubierto por encía). Es más común en el canino superior que en el inferior. Los dientes que se encuentran con frecuencia incluidos, son los terceros molares inferiores y superiores, luego le siguen los segundos premolares inferiores, los caninos superiores y los incisivos laterales superiores.4,5,6
Los incisivos centrales superiores, aunque menos frecuentes, no están exentos a estos problemas; su erupción es simultánea y en parejas, por no tener problemas de colocación en la arcada. Son las primeras piezas de recambio y disponen de suficiente amplitud para alinearse con las piezas vecinas. Debe servir de referencia al detectar una anomalía al compararlo con el incisivo contralateral. Es sospechosa toda alteración cronológica que separa la erupción de ambos centrales más allá de tres meses. Se indica tomar radiografías para analizar la zona e identificar el factor que obstruye la salida del incisivo.2,5,6
Las causas comunes son casi siempre locales: falta de espacio para la erupción, prolongada retención o pérdida temprana de dientes deciduos, posición anormal del diente a erupcionar, presencia de hendidura alveolar, anquilosis, formación neoplásica, trauma dental o alveolar, dilaceración radicular y dientes supernumerarios.
Entre las causas generales se encuentran enfermedades febriles, desórdenes endocrinos, hipovitaminosis y herencia. Las piezas dentarias incluidas pueden ocasionar lesiones en dientes vecinos, infecciones o quistes y representan un problema por sus implicaciones funcionales y estéticas. 6,7,8
La retención dentaria asociada a un diente supernumerario suele diagnosticarse mediante la exploración clínica y los estudios radiológicos convencionales (ortopantomografía y radiografía oclusal y periapical). Sin embargo, en ocasiones resulta difícil localizarlos o excluir otras patologías asociadas.9 Los dientes supernumerarios también pueden encontrarse en la cavidad nasal, la cavidad oftálmica, el seno maxilar y el mentón.10,11
El diagnóstico correcto es un factor fundamental para conseguir la alineación de estos dientes en la arcada dental. Hay casos en que el tratamiento debe ser conservador y es necesario eliminar al responsable del factor de retención para que el diente erupcione. En otros casos, sin embargo, la exposición quirúrgica y la tracción ortodóntica, son necesarias.(9, 10,11)
En el caso de los incisivos incluidos, es un reto para los especialistas por lo que es importante realizar un tratamiento lo más temprano posible. Entonces, es fundamental hacer un diagnóstico precoz con el objeto de evitar posibles malformaciones coronarias y, sobre todo, radiculares del diente retenido; se evita así, tanto la estabilidad como la salud periodontal del mismo.
En ortodoncia, como en la mayoría de las especialidades de las Ciencias Médicas, se estiman las particularidades de cada individuo y se realiza un manejo interdisciplinario para lograr una atención integral, en este caso: ortodoncia y cirugía maxilo facial.
Se presenta el caso con el propósito de realizar un tratamiento integral, innovador y económico, a un diente central retenido en un paciente con diente supernumerario.
PRESENTACIÓN DEL CASO
Paciente masculino de 10 años de edad, raza blanca, con antecedentes de salud, que acude a la consulta de ortodoncia del Policlínico Hermanos Cruz por presentar alteraciones en el brote de los incisivos superiores, la exploración intraoral muestra dentición mixta con ausencia clínica de 21, desviación de la línea media hacia la izquierda de 1.0 mm, relación de clase I de Angle. En Rayos X panorámico se observa 21 retenido en posición vertical asociado a diente supernumerario. (Fig. 1)
Se realizó ingreso en el servicio donde se decidió no utilizar aparatología fija como tradicionalmente ocurre, sino que se diseñó aparato tipo Hawley con modificaciones (guía anterior para cadeneta, resortes de distalización y gancho de tracción contralateral a la zona afectada ubicado a nivel del 1er molar), que permitieron recuperar el espacio perdido y ubicar al diente retenido en el arco a corto plazo, lo que además constituyó un considerable ahorro de recursos a la institución. (Fig. 2)
Se realizó remisión para la consulta multidisciplinaria (cirugía, ortodoncia y periodoncia), del Hospital Pediátrico Pepe Portilla, donde el paciente fue intervenido quirúrgicamente con éxito. En la cirugía se retiró diente supernumerario y se colocó brackets en el 21 con ligadura metálica. A los siete días se instaló aparato tipo Hawley, y se colocó cadeneta elastomérica a ligadura que se ajustaba cada 15 días, lo que permitió el brote del central en la cavidad bucal tres meses después, y su definitiva ubicación en el arco dentarios a los seis meses. (Fig. 2 y 3)
Con el tratamiento ortodóncico quirúrgico y las modificaciones realizadas específicas para este paciente con aparato tipo Hawley modificado, sin necesidad de grandes recursos materiales, el paciente recuperó la estética y la función. Esto evitó consecuencias psicológicas futuras. (Fig. 4)
DISCUSIÓN
El tratamiento de dientes incluidos es uno de los problemas que se presentan en pacientes que requieren tratamiento de ortodoncia, los cuales pueden ocasionar ciertos problemas como comprometer la movilidad dentaria, la estética, y los resultados funcionales.5
Los incisivos centrales impactados o retenidos se presentan con menor frecuencia, sin embargo, hay autores que indican que puede ocurrir hasta el 0.2 % de los casos de dientes retenidos, con mayor frecuencia en la población adolescente y adultos jóvenes, sin tener preferencia de sexo ni color de la piel. (3,6)
Los dientes supernumerarios asociados a un diente retenido ocupan aproximadamente del 67 al 96 % de los casos y se presentan en el maxilar, la premaxila es la zona más afectada. Tan solo el 25 % de los dientes supernumerarios se encuentra erupcionado, el 75 % restante están retenidos. No hay una predisposición por género en dentición primaria, pero en dentición permanente y mixta, el sexo masculino ha sido el más afectado.11
El retraso en la erupción de este diente es motivo de preocupación para odontólogos, ortodoncistas, cirujanos y familiares, debido a la importancia que tiene para la estética facial y de la sonrisa, además de la función en el aparato masticatorio.3,5,6 Para su tratamiento, habitualmente se utilizan técnicas fijas que encarecen el proceso.
Es indispensable el diagnóstico precoz en esta patología, con un manejo interdisciplinario donde exista una técnica de abordaje adecuada y una planificación correcta mejorando el pronóstico del paciente.3,5
Las opciones de manejo son varias, pero en este caso se utilizó un aparato Hawley modificado específico para el paciente y una intervención multidisciplinaria oportuna que logró el enlace, la tracción del incisivo y el éxito del tratamiento con un ahorro considerable de recursos. Además, se acortó la duración del tratamiento a seis meses que, según otros autores, es de un año aproximadamente.1,5,7
CONCLUSIÓN
Con un manejo interdisciplinario adecuado, y la utilización de técnicas innovadoras y económicas, se logró llevar el diente al arco dentario, corregir líneas medias, restablecer la estética y la función en un caso poco común por su localización en los dientes centrales, que, al ser más visibles, puede afectar estética y psicológicamente a los niños en su interacción con el medio social.