INTRODUCCIÓN
La leishmaniasis es una enfermedad típica de países tropicales y subtropicales causada por un protozoo parásito del género Leishmania. Se describen tres formas principales de la enfermedad: la visceral (la más grave porque, a falta de tratamiento, casi siempre resulta fatal), la cutánea (la más común, que en general causa úlceras cutáneas) y la mucocutánea (que afecta boca, nariz y garganta).1
A nivel mundial, la leishmaniosis se encuentra dentro de las diez primeras enfermedades tropicales desatendidas con más de 12 millones de personas infectadas. En 99 países y territorios se considera endémica, con más de 350 millones de individuos en riesgo de transmisión. Perú se encuentra dentro de los nueve países que reportan cerca del 85 % de los casos. De manera específica, en la región ocupa el tercer lugar, antecedido por Brasil y Colombia. Cada año a nivel global fallecen por esta causa entre 200 y 400 mil personas.2,3
El ciclo de la enfermedad comienza con la picadura de un flebótomo a una persona o animal que ha sido contagiado con anterioridad por el protozoo. La sangre ingerida por el insecto contiene células sanguíneas afectadas, de manera que, la enfermedad se transmite cuando el vector ahora infectado, pica a otra persona o animal, inoculándole las formas parasitarias (promastigotes metacíclicos).4
Se trata de una importante enfermedad en el contexto de la salud pública mundial, en la medida que engloba una serie de procesos. Se caracterizan por ser causados por parásitos protozoos del género Leishmania, que utiliza como agente transmisor mosquitos o insectos flebótomos hembra infectados, conocidos de forma común como jején o mosca de arena.1,3
El período de incubación puede extenderse por días, semanas o incluso meses, mientras que las lesiones cutáneas suelen manifestarse en áreas expuestas de la piel. El inicio de la infección es una pápula de color rosa que se agranda, convirtiéndose en un nódulo o una lesión con apariencia de placa, para luego provocar una ulceración indolora con un borde endurecido. La superficie puede estar cubierta con material fibrinoso blanco-amarillo grueso.5
En las pruebas diagnósticas, se emplean métodos como el frotis, cultivo, biopsia y Reacción en Cadena de la Polimerasa (PCR). En cuanto a los exámenes indirectos, se pueden mencionar la inmunofluorescencia indirecta (IFI) y el enzimoinmunoanálisis de absorción (ELISA), los cuales en conjunto incrementan la eficacia.4
En zonas endémicas, en especial en áreas rurales, es común el uso de tratamientos tradicionales como primera opción, debido a la falta de acceso a servicios de salud, desconfianza en la medicina occidental, poca disponibilidad del tratamiento estandarizado, temor a efectos secundarios, entre otros. Los tratamientos tradicionales implican la aplicación tópica de plantas, sustancias químicas o térmicas y antibióticos, para citar algunos.6
Con el propósito de reducir la incidencia y mortalidad por leishmaniasis bajo un enfoque integrado y sostenible, la Organización Panamericana de la Salud y la Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS) llevaron adelante una serie de acciones destinadas a implementar sistemas de vigilancias que aporten información sobre la presencia, distribución y comportamiento de vectores de enfermedades para el diseño de estrategias de prevención y control basadas en evidencias.7,8
De modo general, se trata una enfermedad que requiere de intervenciones integrales y sostenidas para su prevención y control. Aunque se presenta con un curso poco agresivo, causa lesiones que pueden ser motivo de estigmatización en poblaciones ya de por si vulnerables, como son los indígenas. En relación con lo antes descrito, el presente trabajo pretende caracterizar una serie de casos de leishmaniasis cutánea.
MÉTODOS
Se realizó una investigación observacional descriptiva, de corte transversal, en la Universidad Nacional de San Cristóbal de Huamanga, Ayacucho, Perú, durante el período comprendido entre julio y septiembre de 2023. De un universo de estudio de siete pacientes, se trabajó con una muestra de igual denominación, obtenida mediante un muestreo intencional.
Los casos procedían de los pueblos C.P Machente, Ccentabamba, San Pedro, Ayna y Carmen Pampa, pertenecientes al distrito Ayna, provincia La Mar, departamento Ayacucho, Perú. Es importante resaltar que, aunque se registraron varios casos en el mismo pueblo, en igual periodo de tiempo, no se constató nexo epidemiológico por lo cual no constituyó un brote. El primer caso fue identificado el 18 de febrero de 2023 y el último correspondió al 10 de abril del propio año.
Las variables analizadas incluyeron: ubicación geográfica, pueblo de procedencia, fecha del inicio de los síntomas, edad y sexo. De igual forma se consideraron el tipo y lugar de la lesión, tiempo de resolución, tipo de muestra y resultado, imágenes de las lesiones y valores de los exámenes de laboratorio.
Los expedientes clínicos integraron el registro primario de información, mientras para el secundario se utilizaron las encuestas epidemiológicas. El procesamiento de los datos se realizó con el Paquete Estadístico para las Ciencias Sociales (SPSS), versión 25,0, obteniéndose valores absolutos y porcentajes como medidas de resumen. Los resultados se presentaron en forma de textos, tablas y figuras.
El estudio fue aprobado por el Consejo Científico y la confidencialidad de los datos se mantuvo mediante la codificación de las variables, solo accesibles para los investigadores. La información obtenida no se empleó para otros fines ajenos a la investigación y se siguieron los principios bioéticos contenidos en la Declaración de Helsinki.9
RESULTADOS
Los casos de leishmaniasis cutánea procedían de cinco pueblos, pertenecientes al distrito Ayna, provincia La Mar, departamento Ayacucho, Perú (fig. 1).
En la tabla 1 se distribuye la serie de siete casos de leishmaniasis cutánea, los cuales procedían en su mayoría del pueblo Ayna (42,9 %). El 71,4 % refirieron el comienzo de los síntomas en el mes de marzo. La media de las edades se ubicó en 38,43 años, con una desviación estándar de 14,44. Cinco de los siete casos fueron del sexo femenino (5/7).
Casos | Pueblo de procedencia | Fecha de inicio de los síntomas | Edad | Sexo | |
---|---|---|---|---|---|
Masculino | Femenino | ||||
Caso 1 | C.P Machente | 18/02/2023 | 59 | X | 0 |
Caso 2 | Ccentabamba | 06/03/2023 | 40 | 0 | X |
Caso 3 | San Pedro | 06/03/2023 | 41 | X | 0 |
Caso 4 | Ayna | 16/03/2023 | 35 | 0 | X |
Caso 5 | Ayna | 16/03/2023 | 10 | 0 | X |
Caso 6 | Ayna | 10/04/2023 | 24 | 0 | X |
Caso 7 | Carmen Pampa | 13/03/2023 | 60 | 0 | X |
El tipo de lesión se relaciona en la Tabla 2, constatándose el 100 % en piel (cutánea), con predominio de las extremidades inferiores (57,1 %). Se tomó muestra de material biológico por raspado en el 85,7 % de los casos, positivos en su totalidad. El tiempo medio de resolución de las lesiones fue de 54,7 días.
Casos | Tipo de lesión | Lugar de la lesión | Tipo de muestra | Resultado | Tiempo de resolución (días) |
---|---|---|---|---|---|
Caso 1 | Cutánea | Brazo derecho | Raspado | Positivo a frotis | 19 días |
Caso 2 | Cutánea | Pantorrilla | Raspado | Positivo a frotis | 90 días |
Caso 3 | Cutánea | Nuca | Raspado | Positivo a frotis | 20 días |
Caso 4 | Cutánea | Mama derecha | Raspado | Positivo a frotis | 60 días |
Caso 5 | Cutánea | Rodilla | Raspado | Positivo a frotis | 90 días |
Caso 6 | Cutánea | Muslo derecho | Raspado | Positivo a frotis | 14 días |
Caso 7 | Cutánea | Pie izquierdo | Suero | Positivo a IFI | 90 días |
En la fig. 2 se muestran varias imágenes de las lesiones cutáneas causadas por la leishmaniasis en los casos en cuestión. En todas se observa la úlcera típica de fondo limpio, color rosado y tejido granuloso, redondeada, de bordes regulares y elevados.
Los valores de los exámenes de laboratorio se distribuyen en la Tabla 3, de tal forma que, el cálculo de la media para las cifras de hemoglobina resultó de 13,6 mg/dl. Los demás valores promedios, correspondientes al conteo de leucocitos, determinación de transaminasa glutámico pirúvica (TGP) y oxalacética (TGO), obtuvieron cifras de 6694 mm3, 16,5 U/I y 20,2 U/I en cada caso.
Casos | Valores de los exámenes de laboratorio | ||||
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Hemoglobina (mg/dl) | Leucocitos ( cels x mm3) | Plaquetas ( cels x mm3) | TGP (UI) | TGO (UI) | |
Caso 1 | 14,2 | 10360 | 312000 | 21,0 | 24,5 |
Caso 2 | 11,9 | 7260 | 274000 | 8,0 | 9,6 |
Caso 3 | 15,4 | 5350 | 248000 | 18,0 | 29,1 |
Caso 4 | 12,2 | 5130 | 247000 | 20,5 | 18,9 |
Caso 5 | 12,2 | 6210 | 179000 | 18,1 | 22,5 |
Caso 6 | 14,6 | 4890 | 274000 | 11,5 | 13,2 |
Caso 7 | 14,8 | 7660 | 210000 | 18,5 | 23,6 |
DISCUSIÓN
La leishmaniasis cutánea está muy propagada y ocasiona considerables problemas de salud. Sus características clínicas y epidemiológicas pueden abarcar un espectro variable, motivo por el cual deben ser conocidas por el personal de salud para establecer el diagnóstico certero en áreas de alta incidencia. En este sentido, se caracterizaron una serie de casos que serán motivo de discusión.
En Perú hasta la semana epidemiológica número cuatro se habían notificado 144 casos de leishmaniasis, y la presentación cutánea representó el 89,6 %. La región de Ayacucho ha mantenido una tendencia histórica de incremento, debido a lo cual alcanzó los 85 casos en el 2015. En ese mismo año los distritos con mayor reporte fueron Sivia y Ayna con 17 y 12 casos respectivamente.10,11
Los autores de la presente investigación encontraron resultados similares a los recogidos por Pineda Reyes y col.,11 quienes reportaron mayor incidencia de casos en los distrito Sivia y Ayna. Es criterio de los investigadores, que los escenarios epidemiológicos donde se encuentra la presencia del vector son la selva ayacuchana y los valles interandinos. Las personas al ingresar a estos lugares por motivos de trabajo agrícola y ganadera son infectadas y padecen la enfermedad.
La leishmanisis cutánea se caracteriza por lesiones ulceradas en la piel, por lo general indoloras. Casi siempre comienzan en el sitio de la picadura del flebótomo. El periodo de incubación es de dos días a cuatro meses desde la picadura. Son autolimitantes, lo cual implica que suelen curar incluso sin tratamiento, si bien la curación puede tardar meses y dejar secuelas como cicatrices.3,6
Esta enfermedad sistémica tiene un impacto significativo en grupos de edad más vulnerables como los niños menores de cinco años y los mayores de 50 años, además de los adultos con comorbilidades o condiciones de inmunosupresión como el VIH-SIDA. Afecta a algunas de las poblaciones más pobres del planeta, asociándose a factores como la falta de recursos económicos, malas condiciones de la vivienda, los desplazamientos, la malnutrición, la debilidad del sistema inmunitario y sistemas sanitarios poco eficientes.9,12
La leishmaniasis selvática afecta máxime a los adultos del sexo masculino entre los 20 y 40 años de edad, y las lesiones cutáneas se presentan con mayor frecuencia en miembros inferiores.10 Los resultados del presente estudio coinciden con lo antes dicho y puede estar en relación a un mayor contacto hombre-vector en áreas extradomiciliarias.
El diagnóstico se realiza mediante toma de muestra por raspado para el estudio microscopio. El material obtenido se extiende sobre una lámina portaobjetos limpio, desengrasado y rotulado. Se basa en la demostración de los parásitos en frotis o cultivos, y cada vez más en ensayos basados en la Reacción en Cadena de la Polimerasa (PCR). Las pruebas serológicas pueden ser útiles en el diagnóstico de leishmaniasis visceral, pero no de la cutánea.13,14
En esta ocasión el diagnóstico se realizó en el mayor número de casos a través de la toma de muestra de material biológico y su extensión en frotis para observar al microscopio. A este respecto existe similitud con los estudios recomendados para realizar el dictamen médico.
El tiempo de resolución de la enfermedad depende de la etapa en la que se haya realizado el diagnóstico. Por ejemplo, un paciente en etapa inicial, sintomático, sin grandes lesiones puede resolver a los dos o tres meses con el tratamiento adecuado, mientras algunos casos resuelven de forma espontánea en menos de dos años.15,16
En la presente serie se caracterizaron siete casos de leishmaniasis cutánea, de manera que, resulta material de interés para el personal de salud al hacer un llamado a tener en cuenta este diagnóstico y realizar una adecuada vigilancia epidemiológica. La principal limitante consistió en la muestra y el tipo de estudio realizado, sin que se pudiesen establecer relaciones causales.
CONCLUSIONES
Los casos de leishmaniasis cutánea estudiados, se caracterizaron por no presentar nexo epidemiológico y su presentación ocurrió en una época propicia para la proliferación de mosquitos. Las lesiones típicas permitieron el diagnóstico precoz y tratamiento oportuno. Ante la incidencia de la enfermedad, el personal de la salud debe dirigir las medidas preventivas y de educación para la salud, hacia evitar las picaduras de los mosquitos. Para ello, se recomienda colocar doseles de malla fina alrededor de las camas, en ventanas, así como usar repelente de insectos y ropa protectora.