INTRODUCCIÓN
La familia es la unidad básica de organización social, y determinante de la salud. El cuidado de la salud de la familia ha sido un asunto de reiterado análisis por las organizaciones Mundial y Panamericana de la Salud, que reclaman atención a la familia desde sus distintos programas.1,2
En Cuba, entre las estrategias de desarrollo, se ubicó en primer lugar el perfeccionamiento de la atención primaria de salud. Entre los programas priorizados se encontró el de la atención integral a la familia, dada la estrecha relación que existe entre la salud, el tipo de familia, la dinámica, el funcionamiento y los estilos de vida. Una familia emocionalmente estable es fuente de salud y bienestar.3,4
Se reconoce la necesidad de estudiar la familia desde las relaciones y los comportamientos; la comunicación, los conflictos y los problemas originados por la convivencia familiar son devastadores en la salud familiar, y se convierten, a su vez, en oportunidades para la promoción de la salud.5,6
Es necesario visualizar nuevos comportamientos en el desempeño profesional, pues la familia ejerce una función importante en el fortalecimiento de los factores protectores de salud. Su apoyo y ayuda son fundamentales y decisivos en la modificación de los estilos de vidas y la promoción de ambientes saludables, por lo que debe colocarse en el centro de la actuación de los enfermeros comunitarios.7,8
Sin embargo, en una entrevista grupal realizada a las supervisoras de enfermería del municipio de Matanzas, se encontraron insuficiencias en el desempeño profesional de los enfermeros comunitarios; entre ellas:
Insuficientes habilidades para la realización de la evaluación integral a la familia.
Escasas acciones de enfermería para tratar los problemas emocionales, sicológicos y sociales en la familia.
Insuficientes habilidades para identificar factores de riesgo que afectan la salud familiar.
Pocas habilidades para interrelacionar modelos y teorías de enfermería con el cuidado de la familia.
El personal consultado se proyectó hacia la necesidad de que estas insuficiencias sean tratadas. En tal sentido, esta investigación tiene como objetivo diseñar una estrategia de capacitación dirigida a la preparación de los enfermeros comunitarios en el cuidado de la salud familiar, en el municipio de Matanzas.
MÉTODOS
Se realizó un estudio analítico observacional, descriptivo y transversal, de desarrollo tecnológico, en el municipio de Matanzas, en el período comprendido de enero a diciembre de 2019. El universo estuvo conformado por los enfermeros que laboran en los consultorios del médico y enfermera de la familia. Se empleó un muestreo no probabilístico intencional y la muestra quedó conformada por 44 enfermeras de la familia.
La investigación transitó por tres etapas. La primera, de diagnóstico, permitió identificar los problemas en el desempeño profesional. La segunda, posibilitó el diseño de la estrategia de capacitación, y la tercera, fue la de evaluación por criterios de expertos sobre la pertinencia de la estrategia de capacitación en el cuidado de la salud familiar.
Se utilizaron métodos teóricos y empíricos.
Métodos teóricos
El análisis histórico-lógico posibilitó el estudio del desarrollo histórico de la formación del enfermero comunitario y facilitó examinar el comportamiento de la educación permanente, atemperada al cuidado de salud familiar.
El análisis sistémico-estructural-funcional permitió la determinación de las relaciones entre los componentes de la estrategia de superación profesional y el mejoramiento del desempeño profesional.
En cuanto a la sistematización, los resultados encontrados en la revisión se emplearon como referentes en la argumentación y conceptualización de la estrategia para el mejoramiento del desempeño profesional.
Métodos empíricos
El análisis documental, se empleó con el propósito de identificar y valorar, desde la historia clínica familiar y los informes de la visita al hogar, la descripción de las acciones de enfermería como respuesta a los problemas identificados en la familia, y las acciones de seguimiento.
La entrevista grupal se realizó con el objetivo de obtener información sobre los criterios que posee el grupo de supervisores en enfermería, y las insuficiencias en el desempeño profesional relacionadas con el cuidado de la salud familiar.
En cuanto a la guía de observación, permitió evaluar el desempeño profesional y comportamiento de los profesionales de enfermería en la ejecución de la visita al hogar. Se establecieron ocho criterios con valoración de:
Adecuado: cuando se observa (SO) cumplimiento de la actuación del personal de enfermería en cuidado a la familia en seis ítems o más, para un 75 %.
Inadecuado: cuando no se observa (NSO) cumplimiento en la actuación del personal de enfermería con la familia en dos ítems o menos, para un 25 %.
La consulta a expertos, con la finalidad de valorar las sugerencias y los criterios sobre la elaboración de la estrategia de capacitación propuesta, para la constatación de su viabilidad.
Los datos obtenidos fueron procesados a través de la estadística descriptiva con distribuciones de frecuencia absoluta y relativa. Se procesaron en el programa estadístico IBM SPSS versión 18.0; se empleó la triangulación de fuentes en el análisis de los datos obtenidos.
Se obtuvo el consentimiento informado de los participantes en el estudio, a quienes se les explicó el objetivo de la investigación y se les informó la posibilidad de retirarse de la misma si fuese su voluntad. El desarrollo del estudio contó con la aprobación del Comité de Ética institucional. Los datos obtenidos fueron procesados por los investigadores en anonimato. Se pusieron en práctica los principios éticos de la institución y el estudio se acogió a los principios estipulados en el Código de Núremberg (1947) y en la Declaración de Helsinki (1989).
RESULTADOS
La tabla 1 muestra los años laborados de las enfermeras en el consultorio y la categoría desempeño profesional, donde se apreció que, del total de ellas, el 65,9 % posee un desempeño profesional adecuado. En relación con el tiempo trabajando en consultorios del médico y la enfermera de la familia, se encontró que el 47,7 % tienen más de diez años. En el período que se evaluó, se demuestra que existe una sostenibilidad en cuanto a la permanencia de las enfermeras dentro del municipio.
En la tabla 2 se muestran los resultados de la guía de observación. De los 8 criterios de evaluación, 3 alcanzan el 100 %. Los resultados desfavorables se observaron en los criterios 4, 5 y 7. En el criterio 4, el 34,0 % no evaluó los recursos adaptativos y los factores protectores de la familia ante la ocurrencia de eventos familiares; en el 5, el 77,2 % no evaluó el comportamiento de la comunicación familiar, y en el 7, el 36,3 % no describió acciones de enfermería de promoción a los procesos psicológicos y emocionales que favorecieran un desarrollo saludable.
Los resultados ponen al descubierto insuficiencias en el desempeño profesional. La estrategia propuesta contribuirá, a mediano y largo plazos, al mejoramiento del desempeño profesional de los enfermeros comunitarios en el cuidado de la salud familiar.
La estrategia de capacitación a enfermeros comunitarios para el cuidado de la salud familiar se fundamenta en las definiciones de diferentes investigadores, y se organiza por etapas, objetivos y acciones. Se plantea como objetivo general contribuir a la formación de conocimientos y habilidades en el personal de enfermería para el cuidado de la salud familiar. Su estructura se organizó en tres etapas:
Primera etapa. Diagnóstico
Comienza con el diagnóstico del conocimiento y habilidades profesionales de los enfermeros comunitarios en el cuidado de la salud familiar, y las opiniones de los supervisores de enfermería del grupo básico.
Objetivos:
Sensibilizar a los directivos de enfermería y supervisores del grupo básico en la necesidad de diagnosticar insuficiencias en los profesionales de enfermería en el cuidado de salud familiar.
Actualizar conocimientos relacionados con teorías y modelos enfocados al cuidado de la salud familiar.
Se planifican las siguientes acciones:
1. Reunión metodológica con las jefas de enfermeras de las áreas de salud, para la organización del proceso de diagnóstico, establecer coordinaciones e interrelación entre los equipos de investigación.
2. Entrevista grupal con supervisores del grupo básico, para determinar criterios sobre el desempeño de los profesionales que laboran en los consultorios.
3. Taller para la familiarización del contenido.
4. Observación de los enfermeros de consultorios en visitas al hogar.
5. Revisión de los documentos de trabajos de los enfermeros de consultorios (historia clínica familiar e informe de vistas al hogar).
Segunda etapa. Diseño de la estrategia de capacitación (se organizó en cuatro fases)
Primera fase. Planeación
Objetivos:
Establecer las coordinaciones para el trabajo metodológico con el grupo de investigación y los facilitadores seleccionados por cada área de salud.
Preparar el programa del curso del taller de capacitación.
Se planifican las siguientes acciones:
1. Se organizan los facilitadores por cada equipo básico de trabajo y se distribuyen los profesores coordinadores de cada área de salud, para alcanzar niveles de integración hacia el logro de los objetivos propuestos.
2. Se organiza la capacitación profesional, en correspondencia con las posibilidades y el sistema de trabajo de cada área de salud.
3. Se establece una fecha para la programación de reuniones del colectivo de profesores.
4. Se realiza la acreditación del taller en el Departamento de Posgrado de la Universidad de Ciencias Médicas de Matanzas.
Se selecciona el taller como forma organizativa de la docencia, pues permite pesquisar el avance personal, valorar la creatividad y el esparcimiento individual; asimismo, posibilita el análisis, valoración, reflexión y debate en la solución de los problemas, y contribuye a actualizar e integrar la confrontación de ideas, juicios y opiniones en los participantes.9
Segunda fase. Diseño del programa de capacitación
El programa de capacitación está organizado en seis temas, con un total de 72 h/clases, distribuidas en 16 h presenciales, 48 h no presenciales -que serán utilizadas para la elaboración de los trabajos independientes- y 8 h de evaluación final (tabla 3). En el primer encuentro, los cursistas reciben información de los objetivos general y específicos, principales formas de organización de la enseñanza, trabajos independientes y el sistema de evaluación.
Tercera fase. Ejecución de la estrategia de capacitación
Se pondrán en práctica las acciones antes mencionadas, se analizarán las situaciones por cada área de salud, se valorará el cumplimiento del sistema de contenidos y las evaluaciones programadas, y se realizarán adecuaciones, de ser necesario.
Objetivo:
Se planifica una reunión metodológica con el colectivo de profesores, donde se organizan los profesores y facilitadores por cada área de salud, para alcanzar niveles de integración hacia el logro de los objetivos propuestos.
Cuarta fase. Control y evaluación de la estrategia de capacitación
Comienza desde la primera etapa y se mantiene su sistematización durante el desarrollo de la estrategia de capacitación propuesta.
Objetivos:
Controlar cambios en el desarrollo de la estrategia.
Valorar resultados de la efectividad de las acciones metodológicas desarrolladas en la estrategia de capacitación profesional, para el desarrollo de las habilidades y así mejorar el desempeño profesional.
Valorar los resultados de las acciones aplicadas en la práctica y el nivel de preparación alcanzado por los enfermeros comunitarios.
Acciones:
Dar seguimiento a los resultados del desempeño profesional por los facilitadores en cada área de salud.
Aplicación de los instrumentos como observación, entrevistas, para la valoración de los resultados obtenidos con la aplicación de la estrategia.
Intercambio, para valorar el desarrollo de las habilidades profesionales y de la estrategia de capacitación propuesta.
Presentación a los directivos de enfermería la estrategia para su valoración sobre el rediseño, e incorporación de otras acciones que consideren necesarias.
Tercera etapa. Evaluación
La estrategia de capacitación propuesta se sometió a la valoración del criterio de 21 expertos, con el objetivo de evaluar su pertinencia y obtener criterios cualitativos que permitieran perfeccionarla antes de su aplicación.
En la valoración, se tuvieron en cuenta las respuestas a las preguntas, y la coincidencia o no de las mismas; se destacan aquellos criterios que pueden enriquecer o mejorar la estrategia de capacitación.
Se evaluó de Muy adecuado por el 100 % de los expertos, la contribución de la estrategia de capacitación en el cuidado de la salud familiar. En cuanto al funcionamiento, etapas de la estrategia y acciones propuestas, es reconocido por el 95,2 % de los expertos como Muy adecuado. El 100 % evaluó de muy adecuado el sistema de contenidos propuesto y realizaron algunas sugerencias para los talleres teórico-prácticos. Además, el 100 % de los expertos reconoce la estrategia de capacitación como una solución necesaria a las insuficiencias de los enfermeros comunitarios, sin dejar de plantear algunas recomendaciones que contribuyeron al perfeccionamiento de la misma, así como sus acciones y ordenamiento en función del objetivo propuesto. Los resultados obtenidos avalan la pertinencia de la estrategia de capacitación y le otorga una categoría general de Muy adecuada.
DISCUSIÓN
Los resultados del estudio son congruentes con los reportados en la literatura en cuanto a la experiencia profesional. Se encontró que la mayoría de los enfermeros comunitarios tienen una permanencia mayor de seis años en los consultorios del médico y enfermera de la familia. Similares resultados se encontraron en un estudio realizado en 2018.10
Las observaciones evidencian un manejo inadecuado en el cuidado de la salud familiar. En este sentido, se concibió la estrategia de capacitación como una vía a la solución de las insuficiencias diagnósticas. Para ella se tuvieron en cuenta las opiniones de diferentes autores, entre los que destacan quienes definen el diseño de una estrategia como la herramienta para resolver problemas de la práctica y vencer dificultades.11,12
Se coincide con García-Parodi, Dueñas y Fouces, quienes consideran que la implementación de una estrategia de capacitación proporciona cambios en los profesionales, al modificar una actuación insuficiente a una de calidad.13-15
Los supervisores de enfermería reconocen la necesidad de transformar el desempeño profesional de los enfermeros comunitarios en el cuidado de la salud familiar; es importante que estos profesionales demuestren habilidades y conocimiento en la interacción con la familia.16,17
A partir de las posiciones de diversos investigadores, se asume la capacitación como un proceso para incrementar saberes, adquirir, mantener, renovar, actualizar conocimientos necesarios, así como la interpretación y solución de los problemas desde la ciencia.16,18
Se concluye que la estrategia de capacitación a enfermeros comunitarios en el cuidado de la salud familiar constituye un referente metodológico en la solución de los problemas develados. Se organizó en tres etapas y los expertos la valoraron, en sentido general, de muy adecuada, factible y aplicable.