Introducción
Los campos electromagnéticos son fuentes de radiación no ionizante que están presente durante el funcionamiento de cualquier equipo eléctrico, es por este motivo que su radiación es inevitable y solo puede ser disminuida con el aumento de la distancia a ellos. Las unidades de cuidados intensivos neonatales (UCI-N) o áreas de cuidados posnatales deben ser áreas de bajo riesgo en general.
Los neonatos pretérmino o con afecciones en el proceso del nacimiento, en su mayoría, llevan para su recuperación gran cantidad de equipos médicos asociados al diagnóstico provisto por el galeno. Generalmente estos se colocan alrededor de las incubadoras a distancias a veces propiciadas por el fabricante. Es en este contexto que la aparición de campos electromagnéticos se hace presente y debido a que los mismos son invisibles al ojo humano, son incapaces de ser detectados sin un equipo de medición.
Campo electromagnético, interferencia y riesgo tecnológico
Las incubadoras son el centro de los aparatos médicos de apoyo vital que necesita el bebé, aun así, esta puede llegar a necesitar la asistencia médica de hasta seis equipos. Los que deben encontrarse al alcance de las tomas de conexión tanto de corriente como de oxígeno que se encuentran en un único panel generalmente colocado sobre las paredes y en las cabeceras de las camas. En su mayoría, los fabricantes aportan cables de conexión y circuitos de paciente con dimensiones reducidas debido a que no tienen en cuenta el detalle de la gran cantidad de equipos a los que puede estar sometido un bebé en estas condiciones. Es entonces cuando se encuentran aglomeración de equipos, en una misma área, muy próximos a la cuna o incubadora donde se halla el niño, los que al funcionar se convierten en fuentes de campo electromagnético.
Los primeros trabajos acerca de la presencia de campos electromagnéticos en unidades de terapia intensiva aparecieron en 1999 [1], en estos se relacionaba la aparición de estos campos y el hallazgo de que al estar presente esta radiación durante 24 horas en esta área, los pacientes sufrían un déficit de melatonina, que es la hormona que regula el sistema inmunológico y permanecían mucho más tiempo internados que lo que debían. Esta temática hizo que otros investigadores realizaran diferentes análisis y experimentos, para concluir que éste fenómeno es debido a que la melatonina se segrega por la glandula pineal solo en presencia de oscuridad y en horas nocturnas.
Las regulaciones sobre interferencia electromagnética que deben seguirse en los hospitales en las áreas de cuidados intensivos, expresan que, para evitar fallos por interferencia en los equipos médicos, el uso de aparatos que utilizan alta frecuencia [2], y radiofrecuencia [3, 4, 5], está prohibido. Esto se debe a que el alcance de la interferencia de estos, llega incluso cuando los equipos están apagados. Este fenómeno que ha sido estudiado frecuentemente crea disturbios en el equipamiento médico a distancias mucho mayores que la que genera el cableado eléctrico [6, 7, 8], el cual aun siendo de baja frecuencia crea el llamado ruido blanco que da lugar a falsos positivos [9], y problemas en la señal [10], así como daños en la salud de los trabajadores [11].
Es por este motivo que el objetivo de este trabajo es hacer un análisis acerca del comportamiento del campo magnético generado por los equipos médicos según su colocación y cantidad en una UCI-N.
Materiales y métodos
El equipo para esta medición fue un gaussímetro modelo PCE-G28 que dispone de una sonda triaxial, con una apertura radial de un metro para su medición en cada eje, lo que permite recoger todos los datos que se generan en un radio de acción alrededor del punto donde se mide y cuyas características técnicas se muestran en la tabla 1.
Especificaciones técnicas | |
micro Tesla: 0 - 20 µT / 0 - 200 µT / 0 - 2000 µT mili Gauss: 0 - 200 mG / 0 - 2000 mG / 0 - 20000 mG | |
0,01 / 0,1 / 1 µT (dependiendo del rango) 0,1 mG / 1 mG / 10 mG | |
± 4 % + 3 d (en rango 20 µT y 200 mG) ± 5 % + 3 d (en rango 200 µT y 2000 mGs) ± 10 % + 5 d (en rango 2000 µT y 20000 mGs) Las precisiones dadas se refieren a: 50 - 60 Hz y < 3 V/m (RF). | |
30 - 300 Hz | |
pantalla LCD | |
1 batería de 9 V | |
dosímetro de campo magnético: 195 x 68 x 30 mm sonda: 225 x 75 x 55 mm | |
470 g (con batería incluida) |
Características del área a medir
Las mediciones se realizaron en el hospital ginecobstétrico Eusebio Hernández, el mismo presta servicios especializados en el área de la Ginecobstetricia y Neonatología. Esta institución es un centro de referencia para la atención del recién nacido con peso menor de 1500 g.
La UCI-N del hospital consta de varios locales, clasificados por dos servicios: el cuidado intermedio y cuidado intensivo. Los cubículos correspondientes al cuidado intermedio son C3 y C4. Mientras que los cubículos C6 y C7 corresponden al servicio de cuidado intensivo. Se observó que el cubículo C3 está dividido en dos secciones A y B a las que denominaremos C3-A y C3-B. En el cubículo C4 no había actividad de equipamiento por lo que se obviaron las mediciones al no haber pacientes internados.
Durante los siete días de medición se observaron el funcionamiento de diversos equipos médicos. Los mismos se relacionan en la tabla 2, junto con una serie de datos de interés sobre los pacientes. Los días de internamiento que se relacionan son los que llevaban en la UCI-N los pacientes al término de la medición.
Cubículo | Cama | Peso (g) | Edad gestacional (semanas) | Días de internamiento | Equipamiento |
1 | 1680 | 32,4 | 3 | Inc, MPF | |
2 | 1620 | 32,4 | 3 | Inc, MPF | |
1 | 1475 | 34,3 | 11 | Inc, MPF | |
1 | - | - | - | Ct | |
1 | 1240 | 30,5 | 20 | Inc, MPF, JP, VP,AA. | |
1 | 1480 | 29,0 | 14 | Inc, MPF,JP, N,VP,AA. |
Incubadoras (Inc), Monitor de parámetros fisiológicos (MPF), jeringas perfusoras (JP), Nebulizador (N), Ventiladores Pulmonares (VP), Aires acondicionados (AA), cuna térmica (Ct).
Métodos
Para realizar el trabajo se siguió el protocolo de mediciones ambientales de inducción magnética elaborado por un grupo de trabajo de la universidad de Cataluña en el año 2000 [13], al cual se le realizaron algunas adecuaciones acordes con los protocolos de bioseguridad del Ministerio de Salud Pública Cubano (MINSAP) seguidas por este grupo de trabajo en investigaciones anteriores [7]. Esta metodología se realizó de la manera siguiente:
Se comenzó a medir el cubículo por la parte más alejada de la puerta de entrada.
Se realizaron mediciones puntuales metro a metro, con la sonda del gaussímetro a un metro de distancia del piso.
Se recorrió el área en forma de zig-zag hasta cubrirla por completo.
Los valores obtenidos en cada punto se promediaron y se reflejaron en un mapa de colores con lo que se observó el comportamiento de la inducción magnética dentro del área teniendo como guía la barra de colores.
Las mediciones se realizaron en un espacio de siete días, en dos sesiones, para dar una aproximación del ambiente promedio real para una semana de trabajo, con la característica específica que posee este servicio de cambiar su dinámica de labor.
Se realizaron comparaciones de los resultados obtenidos con respecto a los valores recomendados por la Comisión Internacional de Protección contra las Radiaciones No Ionizantes (ICNIRP) emitidas en 2010 [14] y la norma IEC 2004 [15].
La figura 1, muestra el esquema general representativo de los materiales y metodología que se describieron, en el mismo orden de aparición, en este acápite.
Resultados
Se obtuvieron los planos en 2D de los cubículos, donde se llevó a cabo la medición del campo magnético. En cada croquis se colocó la posición de los equipos médicos que mantuvieron su funcionamiento durante los siete días de medición, tratando de reflejar la proximidad real existente entre ellos, como se observará en la figura 2. Además, se muestra el mapaeo de colores representativo de cada cubículo donde se refleja en la escala el valor en (µT) de la promediación de cada uno de los puntos de la medición del campo magnético.
Discusión
Los valores promediados que se exponen mapeados en la figura 2, fueron comparados con el valor máximo de exposición de campo magnético permitido para el público en general (2x10-4 T), recomendado por la ICNIRP. En la figura 3, se puede observar dicha comparación donde los valores ambientales promedio de la inducción magnética presentes en el área no sobrepasan el valor límite recomendado. Sin embargo, la población pediátrica es especialmente vulnerable a exposiciones crónicas de la radiación electromagnética de frecuencias extremadamente bajas, consideradas como seguras para los adultos. Dado que, este tipo de recién nacido necesita permanecer gran cantidad de tiempo en la UCI-N para que sus órganos maduren. Los valores obtenidos de la medición del campo magnético, en dicha área, debe tenerse en cuenta y mantenerse en vigilancia pues la exposición a bajas dosis, o constantes, pudiera influenciar en la aparición de efectos crónicos como la Leucemia Aguda Infantil [16, 17, 18].
Sin embargo, como se aprecia en la gráfica comparativa de la figura 4, en el caso de la compatibilidad electromagnética que debe existir entre los equipos, lo valores promedios se encuentran todos por encima de la norma emitida por la IEC que es de 3,8 µT, lo que se observa incluso en el caso donde el número de los equipos utilizados es el mínimo.
Esto se puede deber a la innecesaria aglomeración de los equipos médicos con los que sí tiene que contar el bebé para poner su vida fuera de peligro y lograr un peso y maduración de los órganos compatibles con la misma. Estos valores sobrepasan en porcientos altos como expone la figura 5, a lo estipulado por la norma de compatibilidad de la IEC 60601-1-2.
La compatibilidad electromagnética es la habilidad de un sistema de no causar interferencias electromagnéticas a otros equipos, pero al mismo tiempo ha de ser insensible a las emisiones que pueden causar otros sistemas [15]. Si se observan los mapas de colores, se apreciará cuan cerca se encuentran los equipos médicos unos de otros, esto provoca que el campo magnético en los alrededores de cada equipo se sume con el que le llega a modo de interferencia desde el equipo eléctrico vecino. Esta situación puede provocar diferentes escenarios como, por ejemplo:
La activación de alarmas, las que están comandadas por sensores de alta sensibilidad a eventos adversos que puedan ser generados por la electricidad.
Enmascaramiento de datos.
Reinicio de sistemas.
Fallo del software que procesa los parámetros fisiológicos del paciente.
La degradación de la calidad de la señal emitida.
La norma de la IEC, consta con medios para realizar el cálculo de la distancia a la que deben encontrarse los equipos para no interferir entre ellos, por lo que se realizaron los cálculos para este propósito y se realizaron las recomendaciones siguientes.
Recomendaciones
En el caso del cubículo C3-A se deben alejar las incubadoras entre ellas a 1,5 m y separar los equipos de parámetros fisiológicos Doctus de las mismas a 0,60 m, para disminuir la interferencia a un 15%.
En el cubículo C3-B se debe separar el equipo Doctus a 0,60 m de la incubadora disminuyendo la interferencia a un 3%.
En el cubículo C6 si se mueve el monitor a 0,60 m de la incubadora y el respirador artificial a 1,0 m la interferencia disminuye a un 25%.
En el cubículo C7 al mover el monitor Doctus en una posisción diferente al que está ubicado y separarlo a más de 0,60 m, aumentar la distancia a 1,0 m entre la incubadora y el respirador artificial y separar el nebulizador del aire acondicionado, separándolo a su vez del respirador y la incubadora a más de 0,50 m. De esta forma se pudiera lograr que la interferencia entre los equipos médicos disminuyese en un 22%.
De manera general se deben alargar los cables de conexión eléctrica y circuitos de paciente en el caso que lo requieran.
Como se observa en las cifras obtenidas en los cubículos, teniendo en cuenta estas recomendaciones se disminuye la interferencia electromagnética y el peligro de que ocurran eventos adversos tecnológicos que lleven a dificultar la estancia de los neonatos en la UCI-N y su futuro desarrollo.
Conclusiones
Aunque los valores de campo electromagnético medidos en el área de cuidados intensivos neonatales se encuentran dentro de los límites recomendados por la ICNIRP, deben ser controlados pues sobrepasan en todos los casos el límite fijado por la IEC como valor máximo para la compatibilidad electromagnética.
Al no poder disminuir la cantidad de equipos médicos destinados a salvar la vida de un recién nacido pretérmino , se deben tener en cuenta las distancias y la posición al ubicar los mismos para evitar interferencias electromagnéticas.
Al separar los equipos médicos disminuyen las causas de interferencia electromagnética y por ende las posibilidades de que ocurran fallos tecnológicos en el equipamiento médico que utiliza cada paciente.