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Introducción
El proceso de formación inicial del profesional de la Educación Superior en las últimas décadas está fundamentado por las apresuradas transformaciones que se experimentan en las investigaciones científicas en las Ciencias de la Educación y esto conlleva a que se presenten nuevos desafíos y circunstancias que ameritan una reflexión en su quehacer (Harrison, 2019).
Ante esta realidad, el desarrollo de los procesos lógicos del pensamiento en los estudiantes de la facultad Educación Infantiles fundamental para contribuir al desarrollo y fortalecimiento de un razonamiento consciente que permita la elaboración de sistemas de respuestas positivas y efectivas basadas en la criticidad a las diferentes situaciones históricas y sociales de la práctica educativa concreta.
Alonso, Cruz y Olaya (2020)refieren que el proceso de formación profesional es aquel que de modo consciente, planificado y organizado, se desarrolla en instituciones educativas y entidades laborales en estrecha vinculación, en una dinámica que integra la docencia con lo laboral, investigativo y extensionista desde la unidad entre lo instructivo y lo educativo por medio de la interacción socio-profesional entre los sujetos implicados: estudiantes, docentes, tutores, trabajadores, familiares y miembros de la comunidad, el cual tiene como finalidad lograr el crecimiento profesional del trabajador en formación inicial o continua.
Por ello, la formación del profesional de la facultad Educación Infantil se sustenta en un proceso permanente y continuo, fundamentado en los principios de la Pedagogía, principalmente el de la cientificidad y hacer ver a los estudiantes de este nivel de enseñanza que el conocimiento no es el único atributo de la competencia profesional, su valor está en el modo de razonar histórico socio-crítico para posibilitar su aplicación y pueda orientarse a satisfacer las necesidades de aprendizaje, vinculados a los problemas de la práctica profesional concreta.
Achón, Ramos y Molerio (2019) refieren que para la práctica profesional en el proceso de formación deja claridad en la necesidad del replanteamiento del diseño curricular en una perspectiva globalizadora que significa, en primer lugar, una manera de organizar y llevar a cabo la educación, que permita al estudiante y al profesor identificar e investigar los problemas sin ser restringidos por límites de cualquier forma, como por ejemplo: asignaturas, disciplinas, y que sitúen en primer plano el desarrollo profesional e integral del estudiante desde su modo de razonar.
El modo de razonar histórico socio-crítico constituye una respuesta alternativa para integrar el proceso de formación que se remite al trabajo como eje del proceso docente educativo, fuente de conocimiento y objeto de transformación, que privilegia la participación colectiva y multidisciplinaria que favorece la construcción dinámica de nuevos conocimientos a través de la investigación, el manejo analítico de la información y el intercambio de saberes y experiencias (Roschke, Darini y Jadead, 1993).
Se puede hablar de modo de razonar histórico socio-crítico, cuando se demuestra por parte del estudiante durante el proceso de formación profesional de la facultad Educación Infantil, cuando los sujetos se manifiestan con una actuación crítica al plantear argumentos de sus propios actos de aprendizaje y modos de actuación, siguiendo la lógica de ir más allá de una simple justificación, defender con actitud profesional y habilidades cada situación en el proceso de enseñanza aprendizaje, al proporcionar argumentos eficaces con referencia al contexto y a los criterios que la justifican, trascender los límites de la instrumentalidad y llegar de forma dialéctica al terreno de la validez de las ideas y las teorías para descubrir en el tiempo y el espacio la dimensión humana, las proezas del hombre, su esfuerzo, valores y su condición histórico social.
Todos estos rasgos que tipifican el modo de razonar histórico socio-crítico garantiza en el estudiante durante el proceso de formación profesional de la facultad Educación Infantil tener dominio pleno de los contenidos de aprendizaje del objeto de la profesión, que permiten al mismo la aprehensión de métodos para su actuación profesional, imbricándose en un sistema de acciones generalizadoras de su actividad, adaptables a variadas formas y contextos, tributando la interacción de las mismas a la conformación de cualidades y de rasgos distintivos de la personalidad que permite igualar la especificidad del objeto y el encargo social de la profesión y poder identificar a un estudiante de perfil amplio y competente.
Un estudiante de la facultad Educación Infantil de perfil amplio y competente con un adecuado desarrollo del modo de razonar histórico socio-crítico se precisan acciones estratégicas para su formación profesional generalizada, a partir de asumir una posición teórica relacionadas con las habilidades de identificar, caracterizar, diagnosticar, explicar, establecer relaciones, fundamentar, seleccionar, modelar, ejecutar, controlar, valorar, dirigir y tomar decisiones con carácter desarrollador, en dependencia de la situación problemática a dar solución y que permitan el cumplimiento de las tareas y funciones profesionales, desde el propio contexto de los problemas profesionales.
Dichas acciones están presentes en cualquier tipo de actividad educativa, por lo que tendrían que modelarse a lo largo de todo el proceso de formación, a partir de una clara comprensión de la acción estratégica asumida desde lo académico, laboral e investigativo, que caracteriza toda su actividad profesional y poder cumplir con la oportunidad, la responsabilidad o la obligación que puede recaer en muchos seres humanos como lo es en aquel que se convierte en un profesional competente, con determinadas habilidades técnicas, conocimiento científico y comprensión.
Al evaluar la situación contextual actual del proceso de formación del profesional de la Educación Superior se precisa diseñar acciones estratégicas en función del desarrollo del modo de razonar histórico socio-crítico durante el proceso de formación del estudiante facultad Educación Infantil.
Material y métodos
Los resultados alcanzados son consecuencia del proyecto de investigación relacionado con el proceso de profesionalización del estudiante de la Educación Superior perteneciente al Centro de Estudios de las Ciencias de la Educación Superior de la Universidad Hermanos Saíz Montes de Oca, que se sustentó sobre los lineamientos de la Investigación-Acción-Participación, en los que se une la reflexión a la acción y se comprende la realidad social como una totalidad concreta y compleja que supone generar posibilidades de respuesta, que puedan luego ser analizadas en su efectividad, a partir de la aplicabilidad de las mismas en contextos educativos concretos; además realizar un proceso secuencial, deductivo, probatorio y un análisis de la realidad objetiva, generalizando los resultados.
Se propuso como objetivo comunicar los resultados de las acciones estratégicas para el desarrollo del modo de razonar histórico socio-crítico del estudiante facultad Educación Infantil, durante el proceso de formación en la Educación Superior. Para ello, se determinan a partir de un estudio teórico y metodológico las acciones estratégicas necesarias para el desarrollo del modo de razonar histórico socio-crítico, durante el proceso de formación en la facultad Educación Infantil.
La muestra de la investigación estuvo compuesta por 60 estudiantes y 20 profesores de las carreras de la facultad Educación Infantil de la Universidad Hermanos Saíz Montes de Oca. Fue una muestra no probabilística de sujetos voluntarios conformada por estudiantes de tercer y cuarto año de las carreras y por profesores con más de 10 años de experiencia en la formación de profesionales de la Educación Superior. Estos criterios de inclusión respondieron a la necesidad de contar con sujetos con una visión amplia en las carreras del plan E, desde vivencias concretas y conocimientos sobre los fundamentos de la misma.
La metodología empleada se sustentó en el método Dialéctico Materialista, el cual determinó que sea de tipo cualitativo y descriptiva. Tiene como punto de partida la necesidad de generar procesos aplicables al proceso de formación encaminados a desarrollar el modo de razonar histórico socio-crítico en los estudiantes de la facultad Educación Infantil.
Se utilizaron métodos teóricos como:
el histórico lógico, para la explicación de la historia del desarrollo del proceso objeto de estudio y la revelación de su esencia, necesidades y regularidades de la Educación Superior en su devenir histórico.
analítico sintético, para la construcción de supuestos hipotéticos, así como en la formulación de conclusiones, la determinación de regularidades y tendencias del modo de razonar histórico socio-crítico de los estudiantes de la facultad Educación Infantil.
el sistémico estructural, para establecer la relación de sistema entre todos los componentes y relaciones de las acciones estratégicas.
Los métodos empíricos:
análisis de documentos: se empleó con el propósito de determinar desde lo teórico y metodológico las acciones estratégicas para el adecuado desarrollo del modo de razonar histórico socio-crítico, a partir del modelo del profesional de las carreras de la Facultad Educación Infantil para el proceso de formación de la Educación Superior.
encuesta: se aplicó con la intención de determinar según las condiciones históricas y sociales cuáles serían las acciones estratégicas que conformarían un sistema para el adecuado desarrollo del modo de razonar histórico socio-crítico, del estudiante durante el proceso de formación en la facultad Educación Infantil.
entrevista: se empleó por su utilidad para recopilar información a través de un diálogo profesional, sobre la importancia del adecuado desarrollo del modo de razonar histórico socio-crítico, a través de acciones estratégicas en el proceso de formación profesional en la facultad Educación Infantil.
Resultados
El enfoque profesional del proceso de formación del estudiante de la Educación Infantil
Gómez y García (2021) refieren que las instituciones de Educación Superior asumen la necesidad de llevar a cabo un proceso de formación en el que debe lograr un profesional capaz de cumplir con las exigencias laborales y la satisfacción de las necesidades de la sociedad y, a la vez, potenciar el pleno desarrollo personal de este profesional en dicho proceso de formación. Este se suscita en un entorno permeado de crisis ambientales, económicas y sanitarias, de vertiginosos adelantos científico-técnicos y de cambios sociopolíticos y culturales.
En este sentido, el proceso de formación del estudiante en la Educación Superior, se expresa en la organización y dirección del sistema de influencias educativas a partir de las exigencias que demanda la práctica profesional desde lo académico, laboral, investigativo y extensionista al futuro egresado, lo que implica la necesidad de formarlo desde la práctica profesional y para la práctica profesional.
La aplicación de este enfoque a la concepción de las actividades académicas, investigativas y laborales desde los primeros años permite trabajar simultáneamente y de forma gradual en el desarrollo de intereses, conocimientos y habilidades profesionales (René, 2010); así como en la formación de una adecuada autovaloración en su gestión profesional y en el desarrollo de un pensamiento reflexivo, lógico y crítico para contribuir al desarrollo de un modo de razonar histórico socio-crítico en la aplicación de dichos conocimientos y habilidades a la solución de los problemas de la práctica profesional.
Esto presupone dominar tanto los contenidos de aprendizajes que se traducen en los conocimientos, habilidades, valores y actitudes propios de la gestión del proceso de formación como los relativos al contenido de la ciencia y tener en cuenta la acción integrada de los docentes en la formación profesional de los estudiantes en la Educación Superior (Amaro, 2014).
Por otra parte, es entender el aprendizaje como descubrimiento, redescubrimiento, búsqueda de soluciones y orientados hacia la aplicación de los conocimientos a situaciones concretas vinculados al entorno cotidiano del que aprende a aprender.
Es también, construir espacios para propiciar la consulta y exploración de contenidos no contemplados en los programas académicos y los resultados obtenidos desde la práctica laboral sistemática e investigativa y que constituyan revelar un carácter activo, investigativo, problematizador de la teoría y la práctica social, sistémico, autocontrolado y autorregulado, flexible y diferenciado, integrador, histórico y crítico con un enfoque interdisciplinario sobre la base del reconocimiento como sujeto activo en la formación profesional.
Esto implica, trabajar desde los primeros años en el desarrollo de una actuación comprometida, reflexiva, crítica, independiente y transformadora del estudiante de la Educación Superior en la solución de los problemas profesionales a los que gradualmente se enfrentan durante la carrera, así como en la formación de una autoevaluación adecuada de su desarrollo profesional que le permita luchar por erradicar las insuficiencias en su formación y trabajar permanentemente en el perfeccionamiento de su gestión profesional y del trabajo de las diferentes instituciones.
Implica necesariamente tomar en cuenta a través del proceso de formación todo lo concerniente a sus diferencias individuales, así como considerar el colectivo pedagógico de año como nivel fundamental de la educación profesional de la personalidad del futuro profesional.
Es en este nivel se concretan e integran las influencias educativas que permiten dirigir el proceso docente educativo hacia la formación de intereses y habilidades profesionales a través de las actividades académicas, investigativas, laborales y extensionistas, apoyado en las diferentes formas del trabajo metodológico.
El trabajo metodológico del colectivo pedagógico de año debe garantizar el enfoque profesional del proceso docente educativo, a partir de la dirección del trabajo hacia el cumplimiento de los objetivos del año y sobre la base del conocimiento del nivel de desarrollo alcanzado por los estudiantes en sus intereses y los contenidos de aprendizaje profesionales, lo que implica la aplicación de acciones estratégicas diferenciadas que garanticen la calidad de la formación de un estudiantes con modos de actuación profesional competente en la Educación Superior.
Ronquillo, Cabrera y Barberán (2019) aseguran que en la Educación Superior, al tener en cuenta a la universidad como un sistema de procesos, transcurren de manera integrada los procesos sustantivos, por lo que se requiere formar a los estudiantes con sólidos modos de actuación profesional, modelado por diferentes factores: conocimientos, habilidades, experiencias, motivaciones, intereses, vocación, valores, actitudes, potencialidades y su estado de salud, entre otros, para la solución a diversas situaciones de aprendizaje con un adecuado razonamiento.
En este sentido, los modos de actuación profesional competente dependen mucho de su capacidad y agilidad para resolver los problemas profesionales, es decir ser competente. La competencia no se expresa en las capacidades que se poseen, sino en la manera o vía para resolver problemas, al poner en práctica el saber, el saber hacer y el saber actuar.
Por tanto, para la formación de estos modos de actuación se deben planificar y ejecutar acciones estratégicas diferenciadas que parten de la realización de un diagnóstico integral de los estudiantes de nuevo ingreso en la Educación Superior que permite una caracterización precisa y científica en el ámbito de la carrera, de las brigadas y a nivel individual para así poder atender tanto la esfera motivacional como la intelectual.
En este sentido, Ronquilloet al. (2019) consideran que se debe contribuir a la orientación y reorientación de la motivación profesional conjuntamente con el desarrollo de conocimientos, habilidades y hábitos profesionales tomando en consideración las diferencias de potencialidad intelectual, que permitan adecuar el nivel de exigencia a su rendimiento en el proceso de aprendizaje, lo que implica tomar en consideración en el proceso de formación el necesario tratamiento que deben recibir los estudiantes de alto, medio y bajo rendimiento en el aprendizaje, para facilitar un adecuado desarrollo del modo de razonar histórico socio-crítico consciente.
El modo de razonar histórico socio-crítico
El modo de razonar histórico socio-crítico contribuye al desarrollo y al fortalecimiento de los procesos lógicos del pensamiento y constituye una de las formas para la realización de razonamientos históricos y socio-críticos de los contenidos que favorecen no solo aprender objetos del conocimiento como la información acumulada desde los contextos locales, nacionales, internacionales, multiculturales y globales contemporáneos, sino se aprende a transformar la información con el uso productivo de los mensajes recibidos, haciendo significativos esos mensajes desde una ubicación contextual y apropiándose a los métodos de la ciencia y la tecnología, constituyendo esto los mecanismos de autoformación desde las dimensiones del contenido (Figura 1).(Díaz, 2016).
Nota. El esquema representa las dimensiones de los contenidos de aprendizaje y sus invariantes. Tomado de curso 8. Didáctica desarrolladora en la educación superior: un enfoque para la formación de competencias profesionales (p.25), por T. Díaz, 2016, Universidad 2016. 10mo Congreso Internacional de Educación Superior.Fig. 1 - Dimensiones del contenido de aprendizaje.
Por ello, es la metodología de saber, saber hacer y saber actuar para resolver problemas de manera flexible y pertinente, adaptándose al contexto y a las demandas que plantean situaciones diversas, no se limita a los aspectos procedimentales del conocimiento, a la mera posesión de habilidades y destrezas, sino que se ve acompañado necesariamente de elementos teóricos, metodológicos y actitudinales (Díaz y Rigo, 2016), posibilitando transitar por acciones críticas:
Decidir el tema o problema.
Clarificar los aspectos o variables a tener en cuenta.
Reunir información sobre esas variables o aspectos.
Comprobar la información reunida.
Diferenciar claramente los hechos de las opiniones.
Considerar todas las evidencias.
Valorar las ventajas e inconvenientes y arribar a conclusiones críticas.
Según Mauri (2019) plantean que estas acciones se fundamentan en el principio del dinamismo de la criticidad que constituye el cimiento para el modo de razonar histórico socio-crítico ya que sustenta de forma teórica y metodológica los modos de actuación profesional competente de los sujetos para poder plantear argumentos de sus propios actos de aprendizaje y cualidad de actuación, que le permita ir más allá de una simple justificación, defendiendo con actitud profesional y habilidades cada situación de contenido al proporcionar argumentos eficaces con referencia al contexto y a los criterios que la justifican, trascender los límites de la instrumentalidad y llegar de forma dialéctica al terreno de la validez de las ideas y las teorías descubriendo en el tiempo y el espacio la dimensión humana, las proezas del hombre, su esfuerzo, valores y su condición.
Cuestión que justifica que los estudiantes de la facultad Educación Infantil con un modo de razonar histórico socio-critico precisa la cualidad de un saber científico-académico, es entendido como aquel que surge desde el método científico y que permite comprender y explicar los fenómenos históricos, sociales y naturales, para reconocer las leyes de la realidad, mediante teorías (Cuadra, Castro y Juliá 2018). Para adquirir un suficiente desarrollo de las habilidades de analizar, interpretar, inferir, explicar, valorar, evaluar y autorregular para llegar a un juicio de valor y para pensar críticamente las invariantes del conocimiento de las diferentes disciplinas y poder aplicarlos en la solución de los problemas propios de la profesión, desde la individualidad a la colectividad en los contextos locales, nacionales, internacionales, multiculturales y globales contemporáneos.
Se razona mejor el contenido cuando se desarrollan los modos de actuación profesionales competentes a través de acciones estratégicas que permiten conferir a un razonamiento con una estructura más clara y ordenada, practicando el debate crítico sobre esos contenidos específicos para descubrir el conocimiento ideológico o los prejuicios implícitos en un texto, así como analizar las carencias o inconsistencias en la información, o bien los puntos de vista conflictivos que se exponen en varias fuentes y la crítica argumentativa de un determinado autor o teoría.
Acciones estratégicas para el desarrollo del modo de razonar histórico socio-crítico
La propuesta de acciones estratégicas para el desarrollo del modo de razonar histórico socio-crítico se fundamenta desde la Concepción de la Enseñanza Desarrolladora de la Educación Superior, la cual refiere al aprendizaje como el proceso de apropiación de la cultura por los profesionales en la formación inicial, bajo condiciones de autodirección de la actividad de aprendizaje, transitando por momentos o etapas con una interacción histórico social (Díaz,2016).
El desarrollo de la interacción histórico social en el estudiante de la facultad Educación Infantil en el proceso de formación depende del modo de razonar histórico socio-crítico, mediante el cual, la socialización y la colaboración con y entre los sujetos protagónicos del proceso hace posible que aprenda gradualmente acerca de los objetos, los procedimientos, las formas de actuar, de pensar acerca del contexto histórico social, del cual dependerá del razonamiento y del rol protagónico con los adecuados modos de actuación profesional.
Un aspecto de especial atención en este proceso, resultan el desarrollo de las actividades relativas a los contextos históricos y socio-críticos, los cuales requieren un trabajo más certero y motivacional en correspondencia con las potencialidades de estos, para el desarrollo del modo de razonar histórico socio-crítico, desde lo instructivo, lo desarrollador y lo educativo, a través de acciones estratégicas.
Acciones estratégicas
Sierra et al. (2019) aseguran que las acciones estratégicas se consideran como los procedimientos que hacen posible la realización de un modo de razonar para el logro de los objetivos con una autonomía durante el proceso de aprendizaje interactivo basado en la realización del estudio independiente, la búsqueda y análisis reflexivo y crítico de la información, la ejecución de las tareas y la realización de la investigación científica sustentada en los proyectos de investigación en función de la solución de los problemas profesionales.
Las acciones estratégicas para el desarrollo del modo de razonar histórico socio-crítico del estudiante (Figura 2) en la facultad Educación Infantil permite el progreso de la concepción acerca del proceso psicológico racional, subjetivo e interno del conocer, comprender, juzgar y razonar los proceso objetivos de los hechos histórico y sociales, en función de la solución de problemas profesionales que aquejan durante el proceso de formación profesional (Campaña, Gallego y Muñoz, 2019).Condiciona la formación de profesionales que sepan interpretar, comprender, detectar sus dificultades y piensen en posibles soluciones para las diversas dificultades de orden político, religioso, cultural, ético de la realidad objetiva y poder ser analizados los problemas de carácter histórico, social y personal.
Montoya y Monsalve (2018) consideran que las acciones estratégicas que se consideran para el desarrollo de un modo de razonar histórico socio-crítico durante el proceso de formación del estudiante de la facultad Educación Infantil determinan:
Buscar y ampliar la información sobre la base de su autonomía.
Decidir en colaboración con sus compañeros y el profesor, la forma de trabajo y la organización de los recursos.
Identificar y optimizar su estilo de aprendizaje.
Transferir la información a un nuevo contexto.
Solucionar los problemas de forma creativa.
Concertar las normas con sus compañeros y el profesor y asumir compromiso.
Criticar sobre su proceso de aprendizaje y el del grupo.
Discusión
La propuesta de las acciones estratégicas para desarrollar el modo de razonar histórico socio-crítico es un resultado científico que, favorece la implementación más viable del nuevo plan de estudio "E", que aspira el desarrollo de un proceso de formación de un estudiante de la facultad Educación Infantil con una actuación profesional competentes.
Nieto y Cacheiro (2021) refieren en saber hacer y saber actuar, es preciso tomar en cuenta algunos aspectos para orientar más adecuadamente el planteamiento de nuevos modelos basados en el modo de razonar que le facilite el establecimiento de relaciones de cooperación y colaboración entre los sujetos activos del proceso, para hacer uso de métodos y procedimientos de investigación participativa en la obtención de nuevos conocimientos, al permitir tomar conciencia de las condiciones histórico-sociales que pueden existir, con el fin de que puedan iniciar la construcción de una nueva realidad, desde la actuación crítica.
La actuación crítica da la posibilidad de que los estudiantes constituyan los sujetos protagónicos y activos con una determinada autonomía para la reflexión colectiva, del análisis, la participación y la observación de una realidad compleja y el uso de métodos y técnicas que contribuyen al esclarecimiento de los problemas y el enriquecimiento de sus soluciones teórico-prácticas y no trasciendan a la pasividad ya la aceptación de todo desde una simple inspección, como se venía realizando en dicho proceso.
La novedad científica radica en que la propuesta de acciones estratégicas de forma sistémica y secuenciada favorece el desarrollo del modo de razonar histórico socio-crítico durante el proceso de proceso de formación del estudiante de la facultad de la Educación Infantil en la Universidad Hermanos Saíz Montes de Oca, supone un razonamiento con una actitud colectiva de reflexión y transformación educativa, que persigue objetivos específicos para enseñar a construir el conocimiento, enseñar a pensar críticamente la realidad social, para formar un pensamiento dirigido a la acción y para la transformación de la realidad, a partir de los objetivos propuestos, en correspondencia con las necesidades socio-histórico concretas y la selección de los contenidos desde la cultura para el cambio.
Tomando en cuenta lo explicitado se consideran las siguientes conclusiones:
El desarrollo del modo de razonar histórico socio-crítico del estudiante de la facultad Educación Infantil se fundamenta en el principio del dinamismo de la criticidad.
Las acciones estratégicas: deductivas, inductivas, analíticas, creativas, sistémicas, interrogativas y críticas, de forma sistémica y pertinente favorecen el espíritu de un aprendizaje consciente, a partir de un desarrollo del modo de razonar histórico socio-crítico del estudiante durante el proceso de formación en la facultad Educación Infantil.
Es una necesidad para el proceso de formación del estudiante de la facultad Educación Infantilel desarrollo del modo de razonar histórico socio-crítico, en tanto contribuye a ser competente y poseer una determinada autonomía.
