INTRODUCCIÓN
La pandemia de COVID-19 desencadenó una crisis global sin precedentes, con impactos significativos en la vida y salud mental de las personas. La declaración de pandemia por la OMS el 11 de marzo de 2020 llevó a varios países a implementar cuarentenas para proteger a la población, lo cual resultó en restricciones en la movilidad y la interacción social en entornos educativos y laborales. Estas medidas tuvieron consecuencias socioeconómicas y sanitarias significativas.1
A nivel psíquico la pandemia por COVID-19 afectó diversos sectores de la población, lo cual generó estados emocionales como irritabilidad, falta de voluntad, signos de malestar anímico, ansiedad, pánico y rechazo de cualquier tipo de ayuda.1) La Organización de las Naciones Unidas (ONU) incluye la salud y el bienestar como metas para alcanzar el desarrollo sostenible y expresa que: “… garantizar una vida sana y promover el bienestar en todas las edades es esencial para el desarrollo sostenible”.2
La virulencia del SARS-CoV2 obligó a implantar restricciones y medidas para frenar su avance, entre ellas, el llamado “toque de queda”.3) La mayoría de las personas experimentan cierto grado de ansiedad por las sostenidas medidas de precaución; el cual se manifiesta más cuando la persona está cerca de instituciones médicas o en contacto con sujetos que presentan síntomas respiratorios.
La ansiedad es una respuesta normal ante el peligro, pero se convierte en trastorno cuando se activa de manera persistente en situaciones no amenazantes, interfiriendo en la vida diaria. Este trastorno se inicia a través de mecanismos cerebrales que integran información del pasado y presente para anticipar el futuro, e impacta negativamente en la vida del individuo.4,5
Entre las principales consecuencias de la ansiedad en estudiantes, en particular en los universitarios, se encuentra el impacto psicológico crítico generador de incertidumbre y relacionado con la ausencia de comunicación interpersonal; también el nivel de ingresos de los padres y vivir cerca de un paciente enfermo.6,7
Respecto a la ansiedad diversos estudios expresan diferentes resultados: Padrón et al.,8 cuyo objetivo fue conocer el daño psicológico causado por el virus en estudiantes españoles, observaron en su investigación que el 61,2 % y 65,8 % de los participantes sufrían altos niveles de ansiedad y depresión.
Uno de los trastornos presentado en jóvenes es el de ansiedad generalizada, originada por diversas causas, como las relacionadas con el rendimiento académico, las cuales llegan a afectar el sueño, la capacidad de concentración, provoca sensación de malestar, fatiga y depresión.6,7
La ansiedad en jóvenes ante situaciones de aislamiento desencadena respuestas cerebrales y hormonales que generan malestares psicosomáticos. Es fundamental prevenir y tratar estos síntomas a tiempo.8,9,10) La psicoterapia y el asesoramiento psicológico son herramientas efectivas para reducir la ansiedad, permitiéndoles al individuo aprender a enfrentar situaciones estresantes, gestionar emociones, expresar pensamientos y sentimientos de forma adecuada.9,10
Existen varios tipos de terapias psicológicas, pero todas tienen como objetivo esencial que el sujeto logre cada vez más confianza a través del empleo de conversaciones intensas, a nivel emocional, presto a responder inquietudes, proponer soluciones y brindar apoyo.7,9,10
Es importante tener presente la ansiedad-estado como condición emocional transitoria, caracterizada por sentimientos de tensión y aprensión subjetivos, conscientemente percibidos y por aumento de la actividad del sistema nervioso autónomo.9,10) Se debe tener en cuenta la ansiedad-rasgo, o sea, las diferencias individuales al responder a situaciones percibidas como amenazantes con subidas de la intensidad de la ansiedad-estado.8,10
Por consiguiente, el objetivo de la presente investigación fue: aplicar acciones académicas, extensionistas y vinculadas a psicoterapias de diversos tipos, en jóvenes universitarios en la carrera de Pedagogía-Psicología en tiempos post-COVID-19.
MÉTODOS
Se efectuó un estudio observacional descriptivo y transversal en la Universidad de Sancti Spíritus “José Martí Pérez”. Fueron seleccionados, de una población de 52 estudiantes y de forma intencional, una muestra aleatoria 25 (femeninos 23 y masculinos 2) de primer año de la carrera de Pedagogía-Psicología, quienes habían comenzado el curso escolar en febrero de 2021, el cual fue interrumpido hasta noviembre del mismo año, debido a medidas de aislamiento establecidas por aumento del número de casos por COVID-19 en Cuba.
Se emplearon métodos teóricos: inducción-deducción y analítico-sintético; y empíricos: la observación, entrevista y técnicas como los Diez Deseos e inventario de autoevaluación de ansiedad rasgo/estado IDAREN.
Como parte del diagnóstico inicial se aplicó a la muestra la técnica de los Diez Deseos, la cual consiste en identificar aspectos que motivan a un sujeto o grupo determinado, así como necesidades y deseos para el futuro.
A partir del mes de noviembre de 2021, al retomarse las actividades docentes presenciales, se realizó una observación e intercambio con la muestra. Ante los resultados, los autores de la investigación decidieron explorar diversos rasgos observados. Para esto se decidió aplicar instrumentos derivados de tests psicológicos. En este momento se retomó la técnica de los Diez Deseos para valorar el mantenimiento de las áreas de interés del estudiantado después del aislamiento, acompañado del inventario de autoevaluación de ansiedad rasgo/estado IDAREN. Esto se complementó con una entrevista grupal para valorar las consecuencias del aislamiento durante nueve meses y estado de ánimo al reincorporarse a las labores universitarias.
El IDAREN es un inventario autodescriptivo subdividido en dos partes. La primera pretende medir la ansiedad como estado (Escala A-Estado), que consiste en 20 afirmaciones con tres posibles respuestas: Nada, Algo y Mucho; valoradas en 1; 2 y 3 respectivamente. En las instrucciones se requiere que los sujetos indiquen cómo se sienten en ese momento “AHORA MISMO”. En la segunda parte se pretende medir la ansiedad como rasgo (Escala A-Rasgo); también consiste en 20 afirmaciones con tres posibles respuestas: Casi Nunca, A Veces y A menudo, valoradas igualmente desde 1 hasta 3. Sin embargo, las instrucciones aquí requieren que los sujetos describan cómo se sienten “GENERALMENTE”.
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
El grupo de estudiantes, en las pocas semanas de curso presencial manifestaron interés por la carrera, obtuvieron buenos resultados académicos, lograron satisfacer intereses cognoscitivos y mostraron buena participación en labores docentes planificadas. Al ser procesada la técnica de los Diez Deseos en ese momento, se concluyó que sus áreas de interés fueron la personal, familiar y profesional, con un equilibrio marcado.
Durante el período de confinamiento, 10 individuos de la muestra participaron en el centro de aislamiento instalado en la sede central de la Universidad de Sancti Spíritus. Igualmente, otros cinco participaron en sus respectivos municipios en labores de apoyo a la vacunación y atención a personas vulnerables.
Durante la interrupción del curso escolar el 60 % participó en labores de impacto dirigidas por el profesor principal, con un intervalo en las labores de estudio, y en el mantenimiento de relaciones interpersonales presenciales.
Es de resaltar que seis estudiantes tuvieron familiares fallecidos por COVID-19 y otros cinco perdieron amistades con estrechos vínculos. Estas situaciones incidieron en el estado de ánimo de un alto número de individuos de la muestra, lo cual mostró rasgos de pesimismo, depresión y no disposición para la participación en trabajos colectivos.
A partir del mes de noviembre de 2021 se retomaron las actividades docentes presenciales, se observaron en algunos estudiantes rasgos de apatía, miedo a incrementar la participación en clases y disminución de rendimiento académico, entre otros comportamientos.
Ante esta situación se aplicaron los métodos, técnicas e instrumentos planteados.
Con respecto al test de los Diez Deseos, se efectuó una comparación y se observó ligero cambio en las expectativas de los estudiantes, donde el área familiar ocupó el 80 % de interés. Esto reveló fuertes relaciones establecidas en el seno familiar durante los meses de aislamiento, cuestión valorada como positiva, y que coincide con otros estudios realizados que constataron la consolidación del papel de la familia en la garantía de la estabilidad hogareña.7,8
En el área profesional, vinculada a la obtención de buenos índices académicos hubo una disminución en relación con los resultados de la primera vez: 52 %, lo cual conllevó a interpretar la existencia de inseguridad en los estudiantes con respecto a sus potencialidades, dado por el largo tiempo de interrupción en la actividad de estudio.
A diferencia de los resultados en esas áreas, se apreció que el 88 % solicitaban participar en actividades de esparcimiento, lo cual revelaba las insatisfacciones expresadas por el período de confinamiento y de no compartir con amistades y compañeros en labores propias de jóvenes universitarios.
Ante la interrogante de la posible presencia de estados de ansiedad en el grupo, se tomó la determinación de aplicar el inventario de autoevaluación de ansiedad rasgo/estado IDAREN.
Al valorar la información obtenida se constató que:
Los resultados entre los estudiantes del sexo femenino y masculino no difieren.
En la primera parte del instrumento dirigida a valorar la Ansiedad-Estado, predominó el valor Algo en la escala, para un 68 % en los 20 ítems presentados. Esto denota ciertos rasgos de ansiedad entre 14 y 17 estudiantes, que expresaron tener miedos, preocupación, temor y desaliento.
En la segunda parte, dirigida a valorar Ansiedad-Rasgos predominó también el valor Algo en un 32 % de los estudiantes, lo cual revela que ocho de ellos mantienen ciertos rasgos de ansiedad de manera más estable, y que han respondido con más inseguridad a la situación que vivieron a pesar de haber pasado el confinamiento; además denotan cualidades de apartarse del resto de los compañeros, mostrando apatía e incluso rechazo.
Ante estos resultados se procedió a efectuar una entrevista grupal. Se les presentaron preguntas relacionadas con la situación vivida y su repercusión en su comportamiento actual al regresar a la normalidad en sus estudios. Algunas de las preguntas fueron las siguientes:
¿Se han sentido solos durante la pandemia?
¿Tuvieron dificultades para dormir? ¿En estos momentos mantienes esa situación?
¿Hablan de sus temores sobre la pandemia con sus compañeros de grupo?
¿Consideran que lo vivido en el periodo de aislamiento ha afectado su comportamiento al reincorporarse a sus estudios en la carrera?
¿En qué actividades en la universidad les gustaría participar para disminuir las secuelas del aislamiento físico durante la COVID-19?
Se promovió un profundo debate con el grupo para sensibilizarlos con lo vivido durante la pandemia y su disposición a incorporarse a las labores universitarias post-COVID. La mayoría de los estudiantes expresaron criterios de forma espontánea y honesta, reflexionaron sobre sus debilidades y fortalezas para enfrentarse a la nueva etapa en sus estudios.
Se les solicitó que expresaran acciones que podrían servir para el tratamiento grupal e individual por el estado de ansiedad revelado en los comportamientos e instrumentos aplicados. Se tomó como acuerdo realizar una sesión a profundidad para analizar acciones de atención, centradas en su protagonismo. Así propusieron varias las que después se agruparon en una estrategia de intervención.
Título: Mi actuación para hacer frente a la etapa de post-COVID-19
Objetivo: analizar fortalezas y debilidades personológicas para enfrentarse a situaciones post-COVID-19 durante la carrera en su rol de estudiante universitario.
Desarrollo
Se intenciona un debate grupal a partir del planteamiento:
“Los jóvenes universitarios de esta carrera han sido sometidos a situaciones estresantes en la etapa de la pandemia de COVID-19, mas ahora se enfrentan a una etapa post-COVID-19 en la que deben seguir con sus proyectos de vida, a pesar de estados personológicos que los afecten”. ¿Cómo lograr brindar atención a las consecuencias de las situaciones estresantes vividas en la etapa de pandemia en los jóvenes universitarios de la carrera de Pedagogía-Psicología?
El debate se divide en dos momentos:
Primer momento
Se les orientó un estudio individual sobre un resumen realizado desde la sistematización de estudiosos del tema a discutir. Allí se precisaban aspectos relacionados con la psicoterapia para atender situaciones de ansiedad.
Segundo momento
Se hizo un debate protagonizado por los estudiantes de las modalidades de esta psicoterapia, tales como:
Conductual dialéctica: permite enseñarles estrategias de comportamiento en momentos de recuperación, apoyados en sus fortalezas personológicas, para enfrentar debilidades como el miedo y la inseguridad.
De aceptación y compromiso: para aprender a hacerse consciente de sus pensamientos y sentimientos en el enfrentamiento de diversas situaciones; de esa manera se les enseña a reflexionar, tomar decisiones y resolver problemas en el plano personal e interpersonal en el contexto del grupo, la universidad y la sociedad.
Interpersonal: para estudiar las relaciones interpersonales y comunicativas, centradas en el desarrollo de habilidades sociales: habilidades sociales primarias, de avanzada, relacionadas con los sentimientos, para hacer frente al estrés y de planificación, entre otros.11,12,13
De apoyo: que refuerce su disposición para enfrentar situaciones difíciles, fortalecerse y ser capaz de transferir comportamientos de una situación a otra.
Después de dejar esclarecidos estos fundamentos teóricos y metodológicos de la atención diferenciada a sujetos sometidos a estrés por situaciones críticas como la etapa de la pandemia, se les preguntó: ¿Qué acciones de atención se pueden llevar a la práctica con este grupo?
Se presentan algunas ideas, los estudiantes aportan otras y se organizan para su realización.
Se les propuso participar en el Proyecto “Sonrisa” del Departamento de Formación Pedagógica General de la Universidad de Sancti Spíritus, el cual realiza un trabajo extensionista con sujetos de comunidades vulnerables, incorporarse a labores de apoyo donde se monten actividades culturales, centradas en el protagonismo, y participar en ellas a partir de sus potencialidades.
Para culminar esta sesión de profundidad se tomaron como acuerdos organizar diversos materiales y montar números culturales para participar en la Casa de Niños sin amparo familiar, y asistir a comunidades vulnerables de la provincia.
Se organizaron trabajos de preparación del grupo para la participación en las diversas actividades del Proyecto “Sonrisa”. En ellas se integraron sesiones de psicoterapias de los tipos analizadas. Producto del diagnóstico se determinaron ocho estudiantes con ansiedad/rasgo que se mantenían aislados en el grupo, con resultados académicos bajos e incluso disminución en la motivación por la carrera. Este grupo, en dúos, se incorporaron a cuatro subgrupos organizados con estudiantes que no mostraban rasgos estables, sino estacionarios de ansiedad e incluso ningún tipo de rasgo. Con ellos se aplicaron las terapias de forma ordenada en las actividades, mientras que con los restantes solo se utilizaron algunas de ellas. Es de señalar que esto se hizo de forma gradual en eventos previos a la realización de acciones del mencionado proyecto.
Especialistas del Gabinete Psicopedagógico del departamento de Formación Pedagógica General organizaron diversas acciones para reducir la ansiedad diagnosticada en el grupo.
Estas acciones fueron:
Una de las manifestaciones de la ansiedad es la dificultad para respirar. Para ello la técnica más eficaz es la respiración diafragmática, la cual es una estrategia clave en reducir la ansiedad, esta permite mejorar la oxigenación, aliviar o prevenir ataques de pánico y mejora capacidad pulmonar. Se organizaron sesiones de trabajo con esta técnica. Se situaron en círculo y se les orientó realizar movimientos desde el diafragma, con inhalación y expiración profunda de aire. De esta forma despejaban la mente y relajaban sus músculos, esto consiguió mayor disposición para otras acciones.
Este tipo de ejercicios tiene efectos positivos a nivel físico y mental. Esto mejora la autoestima, en ocasiones disminuida en estados de ansiedad, la atención, la musculatura, permite la socialización, cuestión importante afectada por el aislamiento provocado por la COVID-19, y que actúa directamente en la ansiedad. Se perseguía lograr el movimiento de los músculos del cuerpo, liberar tensiones, relajarse y estar en mejores condiciones para la socialización en la residencia estudiantil y otros espacios de intercambio grupal de los estudiantes en la universidad.
El estrés afecta el sueño debido a estados de ánimo alterados, como el miedo a enfermar o a que un familiar enferme. Esto afecta la atención, memoria y aprendizaje, además de influir en el humor y participación en actividades. Estudiantes becados con alteraciones del sueño presentaban mal humor y baja participación en actividades, lo cual motivó la realización de esta investigación.
Esta acción trajo consigo que los especialistas aconsejaran:
No fumar o consumir alcohol antes de dormir
Atenuar las luces a medida que se acerca la hora de sueño
Hacer rutinas que recuerden que se va a dormir
Levantarse a la hora programada y no alargar las horas de sueño en la mañana
Es de suma importancia la reincorporación social después del aislamiento prolongado, pues el hombre es un ser social, que realiza trabajo en equipo y necesita de la relación con los demás.
Esta acción se integra a las anteriores y debe evitarse comentar sobre situaciones estresantes, que produzcan alteraciones o hagan recordar situaciones o vivencias desagradables que hayan conllevado a las situaciones de ansiedad de los estudiantes.
Durante el aislamiento, la convivencia resultó ser difícil y pasó a ser un eje importante en el bienestar personal, familiar y social.
Debe apoyarse en una comunicación asertiva, intentar evitar hacer comentarios o reproches que no lleven a nada, tolerar emociones de los otros, respetar los espacios íntimos. Es importante que los estudiantes tengan espacio físico, salas de estudio, lugares de esparcimiento, áreas deportivas y culturales, en las cuales confraternicen y logren la reincorporación social.
Después de un período de aislamiento prolongado, es común que las personas estén ansiosas al participar en múltiples eventos. Por tanto, es importante priorizar las tareas en cada momento. En el contexto estudiantil, esto implica equilibrar la realización de trabajos académicos con actividades recreativas.
Ser flexible en la jerarquización de estas actividades permitirá enfocarse en aspectos clave como la comunicación, los síntomas físicos, la planificación diaria y la gestión de gastos para reducir el estrés.
La ansiedad provoca las manifestaciones de diversas emociones, tales como ira, miedo, alegría, sorpresa y tristeza, que deben ser evitadas. Para aprender el control de estas emociones deben seguirse diversas pautas, entre ellas:
Identificarlas. Es preciso enseñar y aprender cada una de las emociones enumeradas, tomar conciencia de ellas y recordar cómo las experimentan.
Entender qué significan para ti y qué sentido darles. En este caso deben aprender a interpretarlas. Como vivencia afectiva, permiten sostener la actuación del sujeto.
Compártelas con las personas allegadas.
Integra las dos anteriores, el conocimiento de sus emociones los prepara para compartirlas con otros sujetos, en este caso sus compañeros de grupo y de residencia. Esto les permite la adquisición de herramientas valiosas para el enfrentamiento a posteriores situaciones estresantes.
Después de realizar análisis metacognitivos y enfrentarse a su realidad, las personas están en mejores condiciones de autoaceptación sin juzgarse.
Esto preparó al grupo para enfrentar episodios de ansiedad, aumentó la autoestima y motivación para participar en las siguientes actividades extensionistas:
Presentación de una actividad cultural en la casa de niños sin amparo familiar de la ciudad de Sancti Spíritus como parte del Proyecto “Sonrisa”.
Todos participaron con protagonismo en diversas actividades culturales. Algunos apoyaron construyendo materiales necesarios para las representaciones, especialmente los estudiantes aislados.
En un evento conmemorativo de la universidad, los estudiantes realizaron una manifestación corporal en apoyo a una artista aficionada que cantaba en la actividad. Durante la presentación, dos estudiantes con estados de ansiedad se unieron de manera espontánea, mostrando interés y preocupación por participar.
Participación en el Acto Nacional de recordación de la muerte de Manuel Ascunce Domenech en Limones Cantero en la provincia de Sancti Spíritus. El grupo fue seleccionado para ser abanderado en el Destacamento Pedagógico “Manuel Ascunce Domenech”. En esta acción se manifestó en mayor medida la cohesión grupal, que permitió una valoración externa por directivos y estudiantes. Esto incidió en el aumento de la motivación por la participación en otras actividades.
Realización de una actividad cultural a la comunidad vulnerable de “Los Gavilanes” en Fomento, Sancti Spíritus como parte del Proyecto “Sonrisa”.
Ascendieron a la Loma de Caballete de Casas. Se evidenció una cohesión grupal progresiva, la incorporación del colectivo de estudiantes que se mantenían apáticos. Se expresaron niveles de ayuda entre ellos para lograr el ascenso y mostrar mayor perseverancia, actitudes positivas, eliminar miedos, entre otros.
Visita al Centro Psicopedagógico provincial para brindar asesoría, trabajos de orientación y eventos culturales.
El grupo planificó y ejecutó acciones profesionales las cuales aumentaron la participación espontánea en actividades culturales, mejoraron los resultados académicos y brindaron apoyo a estudiantes con necesidades cognitivas y emocionales. Se pudo observar, al culminar el curso escolar, que el grupo fue más coherente y participativo en trabajos de diversos tipos. Se apreciaron transformaciones en los estudiantes diagnosticados con ansiedad/rasgo, los cuales mejoraron el rendimiento académico.
Los resultados expresados en el presente estudio concuerdan con otras investigaciones como la de Andrades-Tobar et al.,4 y Gutiérrez Álvarez et al.,7 quienes abordan acciones para mitigar el estrés generado en diversos contextos. Diferentes sectores sociales tuvieron que adaptarse a las demandas que exigía la situación coyuntural sin planeación ni preparación previa.
La salud mental de los estudiantes universitarios durante y posterior a la pandemia por COVID-19 ha sido analizada por diversos autores, en donde se corroboran los resultados de esta investigación en relación con el impacto que tuvo el confinamiento, donde se apreciaron cambios en la dinámica familiar, económicos, en el trabajo académico, y sobre todo, emocionales, todo lo cual originó estrés.8,11,14
A pesar de ello, los autores del presente estudio consideran que los hallazgos encontrados permitieron analizar y reflexionar sobre la elevada capacidad de adaptabilidad de los estudiantes ante situaciones de contingencia, al resolver con eficacia múltiples dificultades a través de reacomodos de la vida cotidiana; se potenciaron nuevas estrategias de aprendizajes, adquirieron cierta autonomía para improvisar y resolver situaciones académicas a pesar de las adversidades, no sin tener que reorganizar aspectos de sus vidas cotidianas y redefinir del proceso enseñanza aprendizaje.
Las acciones propuestas guardan cierta coincidencia en lo planteado con las claves para el tratamiento de la ansiedad en tiempos de COVID-19,14,15 aunque difieren en algunas cuestiones tratadas en dicho artículo, tales como el manejo del enojo, la frustración, sentimientos excesivos de preocupación que pueden dificultar la acción y manejo efectivo de los recursos personales para hacer frente a la pandemia.
Una fortaleza de la presente investigación fue que se recopiló información importante sobre las diversas experiencias y aptitudes de los estudiantes a lo largo del periodo de estudio, lo cual permitió conocer sus reacciones ante diversas circunstancias. Una limitante fue que las herramientas utilizadas para la obtención de información tienen un recorte específico, al no admite indagar con más detalle en su vida personal.
Aporte científico
Los aspectos analizados demuestran la importancia de realizar estudios, desde un corte científico, acerca de las consecuencias del período de aislamiento durante la COVID-19 en el contexto universitario, y exponer, desde la psicoterapia, acciones para su atención.
CONCLUSIONES
Debido a la identificación de trastornos de ansiedad en la muestra por la interrupción prolongada de los estudios durante la COVID-19, se aplicaron acciones vinculadas a psicoterapias de diversos tipos, relacionadas con actividades extensionistas del Proyecto “Sonrisa”, en articulación con actividades académicas y extensionistas, las que permitieron apreciar cambios positivos en los estudiantes universitarios de primer año del grupo Psicología-Pedagogía.