INTRODUCCIÓN
Los cambios acontecidos en la educación superior, y en especial, en la educación médica demandan la necesidad de establecer indicadores de evaluación que midan y controlen su calidad en los servicios asistenciales e identifiquen sus instituciones como confiables en la formación de sus profesionales.
La formación de recursos humanos en salud tiene como objetivo elevar la calidad del proceso docente-educativo-investigativo-asistencial, y mantener y perfeccionar la calidad del claustro para garantizar la calidad en los servicios.1
La implantación de los procesos de evaluación institucional en la educación superior cubana transita por significativas transformaciones sociales, lo que implica la modernización continua de los procesos evaluativos, de manera tal que contengan las nuevas exigencias y los requisitos para consolidar los procesos y el impacto social de la universidad, y puedan sistematizarse los movimientos hacia los cambios organizacionales y el desarrollo general de la educación superior en condiciones de mejora continua.2
En la actualidad, la calidad en las instituciones de educación superior constituye un reto a nivel mundial, y específicamente en el Hospital General Universitario “Mártires del 9 de Abril”. En este sentido, existen dos formas de lograr la calidad, complementadas entre sí: su aseguramiento externo, basado en los modelos de evaluación y acreditación, y su gestión al interior de la institución.
La calidad representa una forma de gestión en la que predomina la preocupación por satisfacer al paciente y al estudiante, y por mejorar día a día los procesos asistenciales e investigativos y sus resultados.
El objetivo del presente trabajo es: exponer los resultados alcanzados con la implementación de un proyecto de intervención para elevar la calidad en el servicio de Ortopedia y Traumatología del Hospital General Universitario “Mártires del 9 de Abril”, de Sagua la Grande, Villa Clara.
MÉTODOS
Se realizó un trabajo prospectivo longitudinal con la implementación de un proyecto de intervención donde se incluyeron acciones para elevar la calidad docente e investigativa del claustro de posgrado en el quinquenio 2018-2022. Fueron conformadas después del análisis de las principales dificultades encontradas en la docencia de la especialidad de Ortopedia y Traumatología en el Hospital General Docente “Mártires del 9 de Abril” en la provincia de Villa Clara, Cuba.
La población de estudio estuvo constituida por el total de profesores (20) que conformaban el claustro de la asignatura Ortopedia y Traumatología durante el periodo de enero 2018 a diciembre 2022, los que brindaron su consentimiento para participar en el estudio.
En el proyecto de calidad se plasmaron 180 tareas o acciones a cumplir en el quinquenio, tres autoevaluaciones y tres talleres metodológicos, donde se identificaron y analizaron las principales dificultades metodológicas; se realizaron propuestas nuevas de mejoras con la participación del claustro en pleno, los asesores del departamento de posgrado de la mencionada facultad, y la dirección de la facultad y del hospital universitario.
Se utilizaron métodos teóricos (inductivo- deductivo, análisis-síntesis e histórico-lógico) y como método empírico la revisión de los documentos relacionados con el informe de acreditación. La información fue vertida en tablas de contingencia para su mejor exposición y comprensión.
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Después de analizar los documentos relativos al informe de acreditación y otros relacionados con las categorías científicas e investigativas de los docentes se constató que existían insuficiencias, factibles de perfeccionar con acciones dirigidas a mejorar su desempeño y nivel científico metodológico.
Dentro de las principales propuestas de mejora en el proyecto de calidad se encuentran acciones para incidir en la pertinencia e impacto, conformación del claustro, estudiantes, infraestructura, trabajo metodológico y escenario laboral. Algunas de ellas fueron:
Estudio de convenios de cooperación establecidos. Incremento de la colaboración interinstitucional con otros centros nacionales e internacionales.
Asesorar a los profesores que tienen resultados científicos para elaborar su expediente para la obtención de categorías investigativas.
Estimular la presentación de ponencias y trabajos investigativos en eventos científicos.
Incrementar el número de publicaciones en revistas científicas por los miembros del claustro.
Elevar el número de reconocimientos al claustro.
Revisar la documentación en expedientes de los estudiantes.
Actualizar sistemáticamente el banco de problemas y las líneas de investigación de la especialidad y orientar de trabajo de terminación de la residencia (TTR) en correspondencia con ellos.
Preparar a los profesores del claustro sobre la tutoría de TTR.
Estimular la producción científica de los residentes. Publicaciones sobre sus TTR. Presentación en eventos de cortes sus TTR.
Preparar una carpeta con la bibliografía del programa de la asignatura Ortopedia.
Evaluar sistemáticamente el cumplimiento de las actividades del programa de la especialidad.
Incrementar el trabajo metodológico del claustro que asegure la calidad en la planificación y desarrollo de las actividades del programa de estudio de la especialidad.
Plan de controles. Presentación y evaluaciones.
Evaluar sistemáticamente los escenarios laborales sobre las condiciones mínimas de calidad según normas y procedimiento para la gestión docente.
El claustro de posgrado de la especialidad Ortopedia y Traumatología en el Hospital General Universitario “Mártires del 9 de Abril” en Villa Clara está compuesto por 20 profesores, todos con experiencia profesional y docente, varios comenzaron la docencia en la década de 1970 y dos de ellos fueron delegados al primer Congreso de la Sociedad Cubana de Ortopedia y Traumatología, en 1975; pero aún tienen debilidades en las categorías docentes e investigativas al inicio de este estudio. El 55 % poseía categoría docente de profesor auxiliar; sin embargo, después de implementado el proyecto, esta cifra se elevó hasta el 70 %, el 20 % posee categoría de profesor titular, y solo el 10 % es profesor asistente, como se aprecia en la Tabla 1.
Respecto a las categorías científicas del claustro se puede estimar cómo en el inicio de la estudio solo el 15 % la ostentaban, sin embargo, después de la aplicación del proyecto de calidad, el 55 % obtuvieron la categoría de investigadores titulares e investigadores auxiliares, datos anotados en la Tabla 1.
La obtención de categorías científicas o su homóloga en las ciencias médicas -especialización de segundo grado- es vital para la evaluación y certificación de los claustros. En la Tabla 2 se aprecia cómo se elevó el número de los que obtuvieron el segundo grado de especialización de un 55 % hasta un 70 %, lo que sumado al 25 % de profesores con categoría de doctores en ciencias muestra un colectivo con elevada calidad científica, según se muestra en la Tabla 2.
En el periodo estudiado, y como expresa la Tabla 3, la producción científica del claustro fue intensa, pero afectada por la pandemia de COVID-19. Las orientaciones metodológicas y la posibilidad de aprovechar la disminución de la intensidad de la actividad asistencial, destinada solo a los pacientes contagiados con la COVID-19, facilitaron el aumento de las publicaciones, no así del resto de los indicadores. Los eventos presenciales disminuyeron o fueron sustituidos por eventos virtuales: en el inicio del estudio se presentaron 64 trabajos científicos, seguidos del año 2021 con 47; los cursos impartidos sí se elevaron con la implementación de acciones por la calidad con un máximo de 11 en el año 2021; pero hubo una disminución de proyectos aprobados.
El crecimiento desmedido de la educación superior a finales del siglo pasado generó preocupación a escala mundial, lo que conllevó a la creación de mecanismos de regulación a nivel nacional e internacional. Estos procesos conllevaron a la acreditación de las instituciones, de manera que se certificara la calidad de la educación superior en instituciones públicas y privadas.
Las primeras prácticas de acreditación de la calidad en la educación superior en Estados Unidos se desarrollaron en el año 1906, cuando varias universidades de Boston decidieron realizar procesos de evaluación y acreditación de la calidad. Europa se ha caracterizado por tener un papel predominantemente público en la educación superior: la mayoría de las instituciones son estatales y poseen capacidad para la entrega de titulaciones como Estados.
La acreditación de carreras en América Latina ha registrado, en los últimos años, un gran desarrollo, tanto en términos cuantitativos como cualitativos, a lo que ha contribuido la aprobación de estándares nacionales en la mayoría de los países de la región, como es el caso del Sistema Estatal de Acreditación en Cuba. Estas experiencias se iniciaron con programas de evaluación universitaria en México (1989), Colombia (1992) y Argentina (1995), enfocados al diagnóstico de los principales problemas que afectaban la calidad en las instituciones de educación superior de estos países.3
La acreditación universitaria es el resultado de un proceso de evaluación y seguimiento sistemático voluntario del cumplimiento de las funciones de una institución de educación superior, ello permite obtener información fidedigna y objetiva sobre la calidad de las instituciones y programas universitarios que desarrolla; además, aprueba certificar ante la sociedad la calidad de los recursos humanos formados, y de los diferentes procesos que tienen lugar en una institución educativa. Es el reconocimiento formal y público otorgado a una institución académica en virtud del grado en que dicha institución, carreras o programas han logrado avances significativos en el cumplimiento de su misión y objetivos declarados, y satisface un conjunto acordado de criterios, indicadores y estándares de pertinencia y calidad.4
A nivel global se reconoce la importancia de establecer los indicadores que permitan un enfoque único al evaluar la calidad de las universidades, de modo que se viabilice la comparación de la calidad entre las universidades en distintos países, sin embargo, resulta una tarea compleja alcanzar un grado de homogeneidad aceptable entre los países debido a la propia diversidad y naturaleza plural de los sistemas de evaluación.5
En un estudio realizado en cuatro países de habla hispana (España, Chile, México y Uruguay) sobre las exigencias en los procesos de acreditación, se concluye que los estudiantes deben formarse desde currículos que incluyan temas como: la movilidad de recursos humanos, la gestión de la innovación y la gestión del conocimiento.6
De acuerdo con Abreu-Valdivia, et al.7 también es necesario evaluar constantemente cuáles son las competencias requeridas en los docentes, según la relación enseñanza-aprendizaje, por lo que identificaron 40 indicadores que miden las competencias necesarias por cada sub-proceso que compone el proceso general de enseñanza-aprendizaje, entre los que se encuentra la articulación de la investigación con la formación; evidenciada en la gestión del conocimiento, desde su transferencia y posterior aplicabilidad.
En Colombia, la acreditación institucional es de alta calidad e impulsa la gestión del conocimiento en las instituciones de educación superior; los mejores resultados en sus dimensiones las poseen las instituciones acreditadas. La cultura organizacional tiene un impacto positivo y significativo sobre la gestión del conocimiento.8
Para Pino-Sera et al.,9) en Cuba las instituciones de educación superior han ido perfeccionando los procesos de calidad del posgrado de formación académica de forma gradual y sostenida; pero aún es limitada su ejecución teórico-práctico, su intencionalidad, integralidad y sistematicidad, a partir de que no se constató la existencia de criterios de medidas para evaluar la variable, impacto social de los resultados científicos.
Arias-Sifontes et al.,10 describen en su trabajo que en la Universidad de Ciencias Médicas de Camagüey, desde el año 2018 hasta hoy, las 37 especialidades de posgrado con créditos académicos actualizados se han evaluado; ya se han acreditado nueve programas de especialidades, y además existen ocho con expedientes de autoevaluación para someterse al proceso de evaluación externa virtual.
Aporte científico
La investigación aporta una caracterización del claustro profesoral en Ortopedia y Traumatología del Hospital General Universitario “Mártires del 9 Abril” donde se aprecia elevación de su calidad científica docente y metodológica en un período de cinco años, obtenida a partir de la aplicación de un proyecto evaluativo con vistas a lograr la acreditación institucional.
CONCLUSIONES
Se expusieron los resultados alcanzados con la implementación de un proyecto de intervención para elevar la calidad de los docentes del servicio de Ortopedia del Hospital General Provincial Universitario “Mártires del 9 de Abril”, donde se apreció la elevación de cifras relacionadas con las categorizaciones docentes, investigativas y científicas, y la producción científica del claustro, lo cual posibilitó presentar sus resultados a la Junta de Acreditación Nacional, para lograr su acreditación institucional.