Introducción
Las cooperativas son organizaciones socioeconómicas con una doble e importante función en el sistema actual: satisfacer las necesidades de sus miembros a través de procesos productivos y económicos eficientes y eficaces. Numerosa ha sido la literatura que en los últimos años se viene generando en relación con el rol que desempeñan este tipo de organizaciones en los sistemas socioeconómicos contemporáneos. Específicamente, en el sector financiero, se les reconoce su función de dotar de sistemas financieros y bancarios más justos a las poblaciones más pobres y limitadas, en un ambiente donde la gran banca ocupa un espacio considerable en el mercado.
La gestión en este tipo de entidades se encuentra marcada precisamente por esta dualidad como sistema socioeconómico, que tal como expresan Fernández, Fernández, Rivera y Calero (2016), requiere lograr equilibrio entre las aristas social y técnico-económica, imponiendo numerosos desafíos en el orden administrativo. La práctica de gestión se convierte en una actividad donde deben vincularse los principios y prácticas modernas de la Administración, de conjunto con el mantenimiento de su idiosincrasia, sistema estatutario, de principios y valores propios del movimiento cooperativo internacional, que de acuerdo con Labrador (2020, p. 164) "existe una relación evidente entre la gestión, basada en principios y valores y la RSC, pudiendo convertirse estas entidades en referentes en su aplicación".
Como indican Galarza, García, Ballesteros, Cuenca y Fernández (2017), en Ecuador, las instituciones financieras como parte del sector de economía social y solidaria han incrementado en los últimos años su importancia como parte del sector financiero nacional, incidiendo en que se logren resultados socioeconómicos superiores para sus miembros y la sociedad en general, en el marco del cumplimiento de la responsabilidad social empresarial y los objetivos de desarrollo nacionales (Fernández Lorenzo et al., 2017).
En el afán de lograr una gestión sostenible e integral, Las Cooperativas de ahorro y crédito en Ecuador deben continuar afianzando factores tanto sociales como técnico-económicos, tal como se manifiesta en el trabajo de Fernández, Hernández, Hernández y Chicaiza (2018). En particular, el control interno tiene la potencialidad de brindar una seguridad razonable en el flujo de operaciones y transacciones internas, mediante políticas y procedimientos correctamente estructurados. Esta es una de las herramientas empresariales con mayor beneficio sobre la calidad de los procesos internos y la verificación de requisitos y normativas fijadas por entes externos de control. Acorde con Quinaluisa, Ponce, Muñoz, Ortega y Pérez (2018, pp. 269-270) es "un proceso efectuado por el consejo de administración, la dirección y el resto del personal de una entidad, diseñado con el objetivo de proporcionar un grado de seguridad razonable en cuanto a la consecución de objetivos (…) comprende la estructura, las políticas, el plan de organización, el conjunto de métodos y procedimientos y las cualidades del personal de la empresa que asegure".
Dada la naturaleza de las instituciones financieras, estos factores son clave para desarrollar un manejo administrativo y contable adecuado y pertinente, rendir cuentas a los organismos de control internos y externos, especialmente en Las Cooperativas de ahorro y crédito a sus socios, así como administrar de forma eficiente los recursos comunes que garanticen una adecuada rentabilidad económica y social.
Dentro de las diferentes metodologías de control interno, destaca el modelo COSO, que de acuerdo con Mantilla (2007), se aborda como proceso ejecutado a todos los niveles de la organización, a partir de las preocupaciones que generaban las situaciones límites en las que se encuentran las organizaciones, debido a las fallas en la administración respecto al manejo de su patrimonio. "El modelo COSO es un instrumento eficaz en la evaluación del control interno, ya que incluye todos los aspectos a ser considerados, tales como ambiente de control, evaluación de riesgos, actividades de control, información y comunicación, así como el monitoreo" (Santa Cruz Marín, 2014, p. 40). De ahí que en el presente trabajo, se haya elegido la aplicación de este modelo con la finalidad de evaluar el proceso de control interno de las 14 cooperativas de ahorro y crédito del cantón "La Maná", provincia de Cotopaxi.
La selección del modelo COSO se basó en el alto nivel de aplicabilidad que este tiene a nivel mundial y especialmente en Ecuador, al ser considerado un instrumento que proporciona un nivel de seguridad razonable en el cumplimiento de los objetivos, a partir de la evaluación de sus componentes de control.
De acuerdo con registros de la Superintendencia de Economía Popular y Solidaria, en dicho cantón, las cooperativas se ubican de la siguiente forma: dos en el segmento uno; seis en el segmento tres; dos en el segmento cuatro y el resto en el segmento cinco; tómese en consideración que según la Ley de Economía Popular y Solidaria, "Las Cooperativas de ahorro y crédito serán ubicadas en segmentos, con el propósito de generar políticas y regulaciones de forma específica y diferenciada, atendiendo a sus características particulares" (Presidencia de la República de Ecuador, 2011).
El objetivo de la investigación es analizar el proceso de control interno de Las Cooperativas de ahorro y crédito del cantón La Maná, provincia de Cotopaxi.
Materiales y métodos
La investigación realizada fue de tipo descriptiva, a partir de una encuesta realizada a un directivo representante en las 14 Cooperativas de ahorro y crédito del cantón La Maná, con la cual se evaluaron los componentes de control interno de acuerdo con modelo COSO, previamente explicado (Tabla 1).
Componente de control interno (modelo COSO) | Número de preguntas |
---|---|
Ambiente de control | 10 |
Evaluación de riesgos | 6 |
Actividades de control | 6 |
Información y comunicación | 4 |
Supervisión y monitoreo | 3 |
Total | 29 |
Fuente: Elaboración propia a partir de INEGI (2014)
Las opciones de respuesta fueron 1 (sí cumple) y 0 (no cumple). Sobre la base de los resultados de la encuesta, se calcularon frecuencias absolutas y construyeron gráficos para el análisis y discusión, lo que permitió evidenciar el estado en cada uno de los componentes de las instituciones estudiadas.
Resultados y discusión
A continuación, se presentan los resultados de la aplicación de las encuestas en las instituciones analizadas, en relación con los cinco componentes de control del modelo COSO, con base a la propuesta de INEGI (2014).
Componente Ambiente de Control
El ambiente de control permite que las organizaciones tengan seguridad de llevar a cabo procesos que se encuentren exentos de fallas significativas, emplear normas, políticas y procedimientos necesarios para asegurar el cumplimiento de las actividades y evitar riesgos en las instituciones financieras.
Como se observa en la figura 1, en Las Cooperativas de ahorro y crédito del cantón La Maná, provincia de Cotopaxi, en lo relacionado al ambiente de control, existe un mayor cumplimiento en cuanto a la aplicación de metas y objetivos, códigos éticos, implementación del manual de funciones y desempeño de funciones. En menor medida, se cumple lo relacionado con la verificación de cumplimiento y definición de normativas y políticas.
En este componente, se evalúa un cumplimiento alto de los estándares del componente de ambiente de control, lo cual se considera un aspecto muy importante para las organizaciones analizadas, con base a lo planteado por López, Cañizares y Mayorga (2018, p. 82), quienes manifestan que este "constituye el fundamento de la pirámide de control interno, tributando disciplina a la estructura que servirá de base para los demás componentes".
Los resultados positivos observados de forma general en este componente, en Las Cooperativas de ahorro y crédito, son una muestra de que existe un clima organizacional de valores e integridad, que posibilita una actitud de compromiso con los objetivos organizacionales, con base a lo planteado por INEGI (2014). Este es un aspecto fundamental en cualquier organización y, especialmente, en las de carácter social como son las cooperativas donde el compromiso y la unidad en la gestión se consideran uno de los pilares básicos para el éxito empresarial (Fernández Lorenzo et al., 2016).
Componente Evaluación de Riesgos
La adecuada identificación de los riesgos se ha convertido en un elemento indispensable en la administración financiera, "mediante este componente las empresas pueden identificar, analizar, evaluar, jerarquizar, controlar, documentar y dar seguimiento a los diversos riesgos que pueden llegar a obstaculizar o impedir el cumplimiento de los objetivos y metas de la organización" (Serrano Carrión et al., 2018, p. 37).
Como se muestra en la figura 2, el cumplimiento en el componente Evaluación de riesgos es menor, oscila entre el 71% y el 86% en todos los items evaluados. El cumplimiento mayor se da en lo referente a la documentación de riesgos y los planes de contingencia y el menor cumplimiento, en los planes de recuperación de desastres. Este es un componente donde, de acuerdo con los resultados de la investigación, Las Cooperativas de ahorrro y crédito del cantón "La Maná" deben reforzar las acciones para identificar y gestionar los riesgos a los que se enfrentan en las diferentes áreas, lo cual es una de las funciones claves del control interno (López Jara, 2017). En este componente, se destaca el item de análisis de fraude, el cual es fundamental para las instituciones financieras y manifiesta un cumplimiento de 79%, lo que evidencia la necesidad de que se refuercen las actividades tendentes a disminuir el riesgo de sufrir de este tipo de delito económico, que afecta los intereses de los socios de las cooperativas y los intereses institucionales (Barrón Araoz & Ferreyros Morón, 2018).
La prevención del fraude, la corrupción y otros delitos económicos constituyen una de las actividades fundamentales que deben cumplir las entidades financieras del sector de la economía social y solidaria en Ecuador, a fin de lograr la equidad y transparencia promulgadas en la ley (Presidencia de la República de Ecuador, 2011).
Componente Actividades de Control
Las actividades de control evidencian los procedimientos y políticas que permiten dar cumplimiento a las directrices administrativas y las metas empresariales, de acuerdo con Quinaluisa, Ponce, Muñoz, Ortega y Pérez (2018). En la siguiente figura, se evidencia el cumplimiento de los aspectos evaluados en este componente, en Las Cooperativas de ahorro y crédito del cantón La Maná.
Como se observa, en este componente se logra el 100% de cumplimiento en cuatro de los items evaluados y un alto porcentaje en evaluación periódica y control de acceso a la información. Estos resultados son muy positivos para las cooperativas, toman en consideración que estas políticas y procedimientos permiten mitigar los riesgos que pueden afectar el cumplimiento de los objetivos, con énfasis en los procesos tecnológicos que pueden apoyar el desarrollo organizativo, lo que se va convirtiendo cada vez más en una tendencia gerencial (Barrón Araoz & Ferreyros Morón, 2018).
Componente Información y Comunicación
Acorde con López, Cañizares y Mayorga (2018, pp. 82-83), este componente "está constituido por los métodos para registrar, procesar, resumir e informar sobre las operaciones técnicas, administrativas y financieras de una entidad". Acorde a estas autoras, la comunicación debe ser efectiva y oportuna y la información que se comparta tener altos niveles de calidad que soporten un adecuado proceso de toma de decisiones.
En la figura 4, se evidencia que el componente de Información y Comunicación se encuentra entre los de menor cumplimento por parte de las instituciones financieras de economía popular y solidaria del cantón "La Maná", especialmente en los factores de líneas de comunicación e informacion, atención a requerimientos e información dentro de la información. La importancia de la comunicación y la información en las organizaciones es reconocida, especialmente en las cooperativas donde los diferentes grupos de interés deben manejar información útil para la toma de decisiones compartidas (Fernández Lorenzo et al., 2016).
Componente Supervisión y Monitoreo
La supervisión y monitoreo como parte del proceso de control interno son claves, en el sentido que permiten mantener una "evaluación continua o periódica de la calidad del desempeño del control interno, con el propósito de determinar qué controles están operando de acuerdo con lo planeado y la necesidad de su modificación, según los cambios de las condiciones" (Quinaluisa Morán et al., 2018).
En la siguiente figura, se muestra la evaluación del componente en las entidades estudiadas.
En este componente, se observa un alto cumplimiento de los estándares evaluados, evidenciando que las cooperativas comunican las deficiencias encontradas y prestan atención a las recomendaciones encontradas, evalúan y monitorean el proceso de control interno, con la finalidad de asegurar la eficacia y eficiencia de los controles que permitan mitigar el riesgo en la gestión (Manosalvas Gómez et al., 2019). Este componente es clave para evaluar la capacidad de las entidades financieras de realizar una correcta retroalimentación y mejora continua de sus procesos de control, además, demuestra que existe una correcta evaluación de cada una de sus partes integrantes.
De forma general, puede indicarse que Las Cooperativas de ahorro y crédito son entidades socioeconómicas con capacidad de satisfacer las necesidades económicas de sus socios y otras necesidades sociales, bajo principios y valores propios del movimiento cooperativo internacional, en un contexto donde priman las grandes instituciones financieras. El análisis del proceso de control interno de Las Cooperativas de ahorro y crédito del cantón "La Maná", a través del modelo COSO, permitió identificar un alto cumplimiento en los componentes de Ambiente de Control, Actividades de Control y Supervisión y Monitoreo, los cuales se relacionan con el clima organizacional y otros aspectos organizativos que permiten cumplir los objetivos organizacionales, aplicación de directrices administrativas y monitoreo de las actividades que permitan controlar los riesgos. En los componentes Evaluación de Riesgos e Información y Comunicación, se evidenció un cumplimiento más bajo en las cooperativas estudiadas, lo que demostró la necesidad de que refuercen las acciones tendentes a documentar mediante planes y procedimientos el manejo de riesgos y emplear, de mejor forma, la información como base de la comunicación entre los diferentes grupos de interés.