INTRODUCCIÓN
El granado (Punica granatumL.) es un arbusto leñoso, ramificado, perteneciente a la familia Lythraceae que tiene su centro de origen en los países de Irán y Afganistán (Rathwa et al., 2017) y en las áreas circundantes al Cercano Oriente, donde se incluye a Turkmenistán y el Norte de la India (Preece y Moersfelder, 2016). Sin embargo, de acuerdo con Melo et al. (2014), esta especie tiene su origen en el Mediterráneo, la cual fue domesticada y posteriormente diseminada por el hombre hacía los países de India, Estados Unidos, China, Japón, Rusia y Brasil. El granado se cultiva por todo el mundo en condiciones subtropicales y tropicales, llegándose a reportar en este último, hasta tres floraciones en el año (Singh, 2014).
Se estima que el cultivo de granado tiene una producción de 2 500 000 t en un área que supera las 300 000 ha, de las cuales, cerca del 50 % se concentra en India, China e Irán (Venkataramudu et al., 2018). No obstante, Turquía, Estados Unidos, España, Egipto e Israel, se posicionan como productores importantes de granado, siendo países líderes en exportación, comercialización e investigación de este cultivo (Quiroz, 2009).
Colombia no tiene documentada la superficie dedicada a este cultivo. A pesar de esto, se tiene el registro de plantas traspatio en diferentes regiones del país, promoviéndose durante los últimos años el cultivo en regiones como el municipio de Villa de Leyva en el departamento de Boyacá y el municipio de La Unión, ubicado en el departamento del Valle del Cauca. Además, existe un programa internacional liderado por la Agencia Presidencial de Colombia (APC Colombia) para promover la cooperación Sur - Sur con el gobierno de Azerbaiyán y fomentar así el establecimiento y comercialización de 10 ha de cultivo de granado a partir de recursos del sector privado en Colombia (MADR, 2018).
El creciente interés en promover el cultivo de granado en algunas regiones de este país genera la necesidad de avanzar en el desarrollo de metodologías y protocolos que proporcionen una producción intensiva de plántulas y material de propagación (Aguilera-Arango et al., 2020). El granado se puede propagar tanto de forma sexual por semilla, como vegetativamente a partir de esquejes. Según Silva et al. (2015) las semillas de granado presentan comportamiento recalcitrante, lo que dificulta su conservación y uso a largo plazo, además de generar alta variabilidad y baja producción comercial por su comportamiento alógamo (Karimi, 2011). La propagación a partir de esquejes, por el contrario, tiene la ventaja de producir plantas con las mismas características que la planta madre y, por lo tanto, mantiene los rasgos de productividad y calidad deseables (López-Corona et al., 2019).
El enraizamiento y adaptación de los esquejes de granado está determinado por factores como: cultivar utilizado, etapa de desarrollo, tipo de sustrato, reguladores de crecimiento, y condiciones ambientales (Pereira de Paiva et al., 2015). De acuerdo con Singh (2014) el uso de esquejes con longitudes que oscilan entre 15 y 30 cm es un método eficiente para la propagación de granado, el cual, integrado con el uso de reguladores de crecimiento, incentiva un desarrollo óptimo de las raíces en el material de plantación.
De acuerdo con Kahramanoğlu y Umar (2018), se han realizado muchos estudios sobre la propagación vegetativa de este cultivo en donde se indica el uso de esquejes con diámetros que oscilan entre 0,6 y 1,2 cm de grosor. Sin embargo, las investigaciones sobre la influencia que ejerce el grosor del diámetro de los esquejes en la capacidad de enraizamiento de granado son escasas. Por lo anterior, el objetivo del presente estudio fue evaluar el efecto del diámetro de esquejes basales de granado cv. Mina Shirin plantados en tres condiciones ambientales diferentes para establecer un sistema de propagación clonal preliminar de esta especie en condiciones de vivero.
MATERIALES Y MÉTODOS
Localización
La investigación se realizó en el vivero ubicado en las instalaciones de la Corporación Colombiana de Investigación Agropecuaria - AGROSAVIA, Centro de Investigación Palmira, departamento del Valle del Cauca, con coordenadas geográficas N 3°30´52.45´´, W76°18´56.94´´ a una altura media de 1001 msnm, temperatura media anual de 23,4 °C y precipitación anual de 1050 mm. El estudio se desarrolló entre octubre y diciembre de 2018, donde se registraron las siguientes variables climáticas: (i) temperatura (mínima: 18 °C; media: 24 °C y máxima: 33 °C) y (ii) humedad relativa (mínima: 25 %; media: 43 % y máxima: 66 %).
Material vegetal
El material vegetal fue colectado el 30 de octubre de 2018. Para este propósito, se seleccionaron esquejes basales a partir de plantas de granado cv. Mina Shirin (desarrollado en Azerbaiyán por la empresa Red Valley) en fase vegetativa y con seis meses de edad, las cuales hacen parte de un cultivo comercial establecido en las instalaciones de la Asociación de Agricultores del Occidente Colombiano (ADAGRO), ubicada en el municipio de La Unión, Valle del Cauca, con coordenadas geográficas N4°31´36.1´´, W76°05´43.4´´ y una altura media de 975 msnm, en terrenos de topografía plana.
La longitud de los esquejes seleccionados fluctuó entre 20 y 30 cm (Seiar, 2017) con diámetros entre 0,4 y 1,5 cm, los cuales tenían entre sus características, consistencia semileñosa y presencia de hojas a lo largo del esqueje. El material vegetal cosechado fue envuelto en papel humedecido con agua destilada y transportado al interior de una nevera de poliestireno para evitar su deshidratación. Los esquejes colectados se clasificaron según su diámetro en tres categorías: delgados (entre 0,4 y 0,7 cm); medianos (entre 0,8 y 1,1 cm) y gruesos (entre 1,2 y 1,5 cm).
Posteriormente, en las instalaciones de AGROSAVIA, los esquejes fueron adecuados mediante un corte transversal en la zona apical y cicatrizado a base de una solución compuesta por insecticida, fungicida y regulador de crecimiento vegetal (clorpirifos, oxicloruro de cobre y ácido alfa naftalenacético - ANA respectivamente) y un segundo corte en forma de bisel en la parte basal del esqueje, el cual fue impregnado con ANA en polvo al 0,4 % (Alikhani et al. 2011) para estimular la formación de raíces.
Establecimiento del ensayo
Los esquejes se plantaron en propagadores de cemento que contenían arena de granulometría fina de acuerdo con lo reportado por Alikhani et al. (2011), con distancias de plantación de 15 cm entre hileras, 10 cm entre esquejes y cada esqueje fue plantado a 10 cm a partir de la base. Los tres ambientes evaluados fueron 1. Propagador con exposición solar al 100 %; 2. Propagador con exposición solar al 50 % y 3. Propagador al interior de una cámara húmeda con exposición solar al 10 %. La cámara húmeda consistió en una estructura que consta de una cubierta de plástico trasparente de alta resistencia calibre 6, sostenida con arcos en PVC o metálicos, semicircular tipo túnel, de altura de 80 cm, con instalación de aspersores tipo nebulizador en línea cada 1,0 m. La temperatura al interior de la cámara húmeda osciló entre 5 a 10 °C por encima de la temperatura externa y la humedad relativa fluctuó entre el 85 y el 95 %. Por otra parte, para obtener el ambiente 2 se construyó una polisombra con densidad del 50 %, elevada a 70 cm de la superficie del propagador. Para los ambientes con exposición solar al 50 y 100 % el riego se hizo día de por medio, verificando que el sustrato quedara totalmente húmedo, pero evitando encharcamientos.
Diseño experimental
Se estableció un diseño estadístico en bloques completos al azar (BCA), con tres repeticiones. El modelo establecido fue bifactorial, donde los factores estudiados fueron el diámetro de los esquejes, al cual se le asignaron tres niveles: delgados, medianos y gruesos; y el ambiente, representado en tres niveles: exposición solar al 100 %, exposición solar al 50 % y cámara húmeda con exposición solar al 10 %. La unidad experimental estuvo representada por cada esqueje, de esta manera se utilizaron 15 esquejes por tratamiento por repetición, para un total de 405 esquejes distribuidos en nueve tratamientos.
Variable de respuesta
Cada tratamiento se dejó en condiciones semicontroladas a una temperatura promedio de 24 ± 2 °C de acuerdo con los ambientes, por un período de dos meses. La variable de respuesta evaluada corresponde al porcentaje de sobrevivencia obtenido a partir de la relación entre el número de esquejes enraizados con formación de brotes y el número total de esquejes establecidos por tratamiento (Hussain et al., 2012), estimado mediante la siguiente fórmula:
Análisis estadístico
Se realizó un análisis de varianza (ANOVA) para cada uno de los factores y las medias se compararon mediante la prueba de Tukey, con un nivel de significancia de 0,05. El análisis estadístico se realizó con el uso del software econométrico Advanced Analytics Software (SAS) versión 9.4 (SAS Institute, 2018).
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Transcurridos 60 días después de plantados los esquejes se observó que el porcentaje de sobrevivencia para las variables evaluadas fluctuó entre 11,11 y 62,22 % (Tabla 1).
Ambiente | Tipo de esqueje | ||
---|---|---|---|
Gruesos | Medianos | Delgados | |
Exposición solar 100 % | 53,33 b | 28,89 c | 15,56 d |
Exposición solar 50 % | 62,22 a | 20,00 d | 11,11 e |
Cámara húmeda | 55,56 ab | 31,11 c | 35,56 c |
Letras distintas en la misma columna indican diferencias significativas, según prueba de Tukey (p ≤ 0,05)
El porcentaje máximo de sobrevivencia se encontró en el tratamiento de los esquejes gruesos plantados en propagador con intensidad lumínica del 50 % (62,2 %), seguido por el tratamiento de los esquejes gruesos plantados en cámara húmeda (55,6 %). También se observa que el menor porcentaje de sobrevivencia corresponde a los esquejes delgados plantados en el propagador con intensidad lumínica del 50 % (11,1 %).
De acuerdo con el análisis de varianza, se observaron diferencias significativas en la interacción del diámetro de los esquejes y los ambientes en términos de porcentaje de sobrevivencia (Tabla 2).
Fuente | Suma de cuadrados | Grados de libertad | Cuadrado de la media | F-valor | Pr> F |
---|---|---|---|---|---|
Diámetro | 8187,48 | 2 | 4093,74 | 96,62 | <0,0001 |
Ambiente | 1230,67 | 2 | 615,34 | 14,52 | 0,0003 |
Interacción diámetro*ambiente | 1549,66 | 4 | 387,42 | 9,14 | 0,0005 |
Si (Pr> F) ≤ 0,05 existe diferencias significativas
Existen diferencias significativas respecto al diámetro de los esquejes (Pr>F = <0,0001), lo que infiere que al menos uno de los promedios difiere de la probabilidad del 5 %. De acuerdo con lo anterior, se procedió a realizar la prueba de Tukey, donde se comprobó que existen diferencias significativas entre los esquejes gruesos con los demás tipos de esquejes evaluados. Así mismo, se observó que el porcentaje de sobrevivencia entre los esquejes medianos y delgados son estadísticamente similares entre sí (Figura 1).
Lo anterior indica que, si se utilizan esquejes con diámetros superiores a 1,2 cm existe mayor probabilidad de que sobrevivan, en comparación con los esquejes de diámetros iguales o inferiores a 1,1 cm. Estos resultados concuerdan con lo descrito por Hussain et al. (2012) quienes afirman que los esquejes de granado con mayor grosor tienen un impacto positivo en la capacidad de enraizamiento y brotación de yemas.
La edad ontogenética en los esquejes es un factor fundamental en el enraizamiento, ya que el grosor de los esquejes y la madurez de la madera juegan un papel importante en la propagación de granado (Melgarejo et al., 2008). Además, de acuerdo a lo expresado por Chandra y Babu (2010), los esquejes gruesos y maduros tienen una relación alta de Carbono - Nitrógeno, elementos esenciales para la formación de carbohidratos de reserva, los cuales a su vez son indispensables para promover la formación de raíces en los esquejes, permitiendo el aumento en el porcentaje de sobrevivencia.
Por otra parte, existen diferencias significativas entre las medias con respecto a los ambientes evaluados (Pr>F=0,0003), lo que se puede interpretar que al menos uno de los ambientes evaluados difiere de la probabilidad del 5 % (Tabla 2). Procediendo con el agrupamiento de Tukey, se encontró que el ambiente de la cámara húmeda presenta diferencias significativas respecto a los otros ambientes, los cuales a su vez son estadísticamente similares entre sí (Figura 2).
Lo anterior coincide con lo descrito por Hussain et al. (2012) quienes en su investigación encontraron diferencias significativas entre los ambientes evaluados, siendo el mejor de ellos el túnel plástico (estructuralmente similar a la cámara húmeda usada en este estudio) lo que sugiere que es probable obtener un mayor porcentaje de sobrevivencia de los esquejes plantados en dicho ambiente. De acuerdo a lo expresado por Singh (2017), lo anterior probablemente sucede, debido a que la cámara húmeda proporciona una condición ambiental favorable al reducir la temperatura de las hojas, disminuir la respiración y aumentar la humedad relativa alrededor de la superficie de los esquejes, lo cual favorece el proceso de enraizamiento y brotación.
El presente trabajo ofrece un acercamiento de una metodología preliminar de propagación vegetativa de granado en condiciones de vivero. Sin embargo, deben considerarse otros factores como los tipos de sustrato y los reguladores de crecimiento, con la finalidad de optimizar los procesos y estandarizar una metodología de escalamiento de material de plantación, una necesidad inherente para el sector viverista y productivo de granado en Colombia.
CONCLUSIONES
La multiplicación de material vegetal por esquejes es una estrategia que permite aumentar la producción masiva de plántulas con estándares de calidad, a la vez que minimiza costos y procesos para su obtención, lo que hace del sistema de propagación vegetativa de granado a través de esquejes basales una alternativa eficiente, si se piensa escalar a viveristas y agricultores de pequeña y mediana capacidad de producción.
Se evidenció que los esquejes basales con diámetros superiores a 1,2 cm mostraron mayor potencial para la propagación vegetativa de granado, mientras que la cámara húmeda proporcionó las mejores condiciones ambientales en términos de porcentaje de sobrevivencia de los esquejes. De esta manera se vislumbra una metodología para la implementación de un sistema de propagación vegetativa preliminar de granado con el fin de establecer huertos madres y posterior escalamiento a líneas comerciales.
Finalmente, cabe destacar que este es uno de los primeros estudios que se realiza en Colombia en torno al tema de propagación y escalamiento vegetativo de granado por esquejes, lo que permite sentar bases para futuros trabajos de investigaciones alrededor de este sistema productivo en este país