Introducción
El siglo xxi es testigo de la tendencia mundial a la disminución de la fecundidad y a la prolongación de la esperanza de vida, que ha dado al fenómeno del envejecimiento de la población con un relieve sin precedentes. En el 55.o Consejo Directivo de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), celebrado en septiembre del año 2016, en el que participaron los ministros y delegados de los 35 Estados miembros, la directora de la OPS, Carissa F. Etienne, dijo: “de cara al futuro, debemos preparar a nuestros gobiernos y pueblos para responder con eficacia al rápido envejecimiento y crecimiento de nuestra población”.1
En Cuba, en el año 2016, las personas mayores de 60 años constituían el 19,8 % de la población, y las provincias más envejecidas eran La Habana, Holguín y Santiago de Cuba, y se esperaba que ese índice creciera en los años siguientes.2 Lo que se ha evidenciado en el indicador obtenido en el 2018 que fue de un 20,4 %.3
Para responder al llamado de la OPS es preciso tener en cuenta los criterios de los sujetos involucrados y de la propia sociedad en la que viven. La vida y la vejez no solo tienen que tener “sentido”, sino también deben tener “significado”. Esto quiere decir, que no solo tienen que ser valiosas para quienes las disfrutan, sino también la sociedad tiene que expresar de forma objetiva, en medidas económicas, sociales y políticas concretas, el valor que tiene para ella la vida de los seres humanos que conforman ese grupo poblacional, que tanto ha aportado al desarrollo de la sociedad a la que pertenecen.4,5
Antecedentes del estudio
En la primera década del siglo xxi se realizó un estudio sobre el nivel económico de adultos mayores (AM) con jubilaciones precarias, que apenas alcanzaban para la subsistencia. Esta investigación se realizó cuando se iniciaba en Cuba una respuesta a la crisis de la economía por la que transitaba, que provocó afectaciones severas de la canasta básica, con un mercado paralelo en moneda nacional con precios inalcanzables. Además de la existencia de un mercado en divisas totalmente inaccesible para ellos, que determinó la puesta en marcha de algunas medidas que contribuyeran a paliar la situación existente . 6
El documento contentivo de la “Conceptualización del modelo económico y social cubano de desarrollo socialista”, aprobado en el VII Congreso del Partido Comunista de Cuba (PCC), en su Capítulo 4 “La Política social”, el número 295 señala que:
El envejecimiento de la población se aborda integralmente en todas las esferas incluidas, entre otras, la adecuación del entorno urbanístico, los servicios especializados de salud, de cuidados a la tercera edad, la satisfacción de sus necesidades y el fomento de su participación activa en la vida social y económica, estimulándose el empleo de todas las personas aptas para trabajar.7
Lo anterior confirma que el enfrentamiento al envejecimiento poblacional no es solo una tarea del sector salud, sino que, en esto, como en todas las grandes tareas de la salud pública, el enfrentamiento exitoso de ellas solo puede hacerse con una fuerte voluntad política del Estado y un enfoque intersectorial. Un ejemplo de ello lo constituye el alto índice de caídas provocadas por el deplorable estado de las aceras, que originan el 43 % de las defunciones por “accidentes”, que resulta ser la tasa de mortalidad más elevada de ese grupo.8
Por otra parte, el mayor porcentaje de personas mayores en la actualidad lo conforman los nacidos antes de la Revolución, que en su mayoría no accedieron a salarios elevados en su vida laboral y por tanto la pensión que reciben por concepto de jubilación, no es elevada, aspecto a considerar en los gastos en que incurren. A ello se añade que estas personas, que lograron acceso a la educación, la cultura, el trabajo y otros beneficios que reportó el proceso social cubano, poseen necesidades materiales y espirituales diferentes de las de sus abuelos.
Situación problemática
Hasta muy recientemente, la mayoría de las personas adultas mayores percibían la vejez solo como “sinónimo de pérdidas” y la mayoría de los jóvenes caracterizan a este periodo de la vida como “sinónimo de necesidades de atención individual, familiar, social y médica, que entraña una carga familiar y social”.
En la capital cubana, y muy particularmente en la calle Zanja, residen pobladores que pertenecen a distintos grupos étnicos, con herencias y tradiciones culturales diversas: chinas, africanas, españolas, árabes, que aportan diferentes visiones acerca del sentido y significado de vejez. Su estudio particular no se había realizado hasta el momento y sus resultados podrían contribuir a trazar estrategias para mejorar la calidad de vida de los adultos mayores residentes en el lugar.
El objetivo del siguiente estudio es caracterizar el sentido de vejez de los adultos mayores y el significado de vejez de los niños, adolescentes, jóvenes y adultos medios, residentes en la calle Zanja.
Métodos
Se realizó un estudio exploratorio, a partir de una metodología mixta: cualitativa y cuantitativa. Se utilizó el método observacional y, en consecuencia, se decidió hacer uso de las técnicas de entrevista en profundidad, la observación no participante, con sus correspondientes guías, la técnica porcentual y la triangulación de datos.
Los sujetos de estudio fueron los adultos mayores, adultos medianos, jóvenes, adolescentes y niños residentes en la calle Zanja en el periodo de 2017-2018. El universo estuvo constituido por la totalidad de los sujetos de estudio (556 personas). La muestra fue seleccionada intencionalmente, por cuotas, conformada por no menos del 75 % de los adultos mayores y el 50 % de los miembros de sus respectivas familias que consintieron en participar (10 % niños, 10 % adolescentes, 10 % jóvenes y 20 % adultos medios) y que residían en las 24 cuadras que conforman la calle Zanja, agrupadas en 5 bloques (4 de 5 cuadras, cada uno de ellos y uno de 4 cuadras), en los que trabajaron 5 dúos de investigadores (Tabla 1).
De las 556 personas que constituían el universo, solo pudieron ser entrevistados 146 para un 26,2 % del total.
Procedimiento
El estudio comenzó con un recorrido que realizó la investigadora principal por toda la calle Zanja. Posteriormente se reunió con todos los coinvestigadores para explicarles que enviaría una carta al director municipal, para informarle del trabajo que se realizaría. Además, el resto del equipo de investigación debía solicitar a sus jefes inmediatos la autorización para disponer de un día a la semana para la realización de las labores investigativas. Una vez que fueran autorizados debían visitar al director del policlínico para informarle acerca de la investigación y que las visitas a los residentes de la calle Zanja se iniciaría en septiembre de ese año.
En la reunión con el equipo de investigación se unificaron criterios sobre el calendario de actividades, la aplicación de las técnicas de investigación seleccionadas y el formato que debía tener la información de los resultados. Las actividades de terreno se iniciaron en septiembre del año 2017; pero poco tiempo después tres miembros del equipo de investigación no pudieron continuar, por problemas familiares, por lo que se tuvo que buscar sustitutos y entrenarlos. Esto significó un atraso del calendario que se había programado con el propósito de terminar la investigación en julio 2018.
En resumen, de los 6 dúos previstos inicialmente, solo trabajaron y entregaron el informe final 5 dúos, que entrevistaron a los residentes de la calle Zanja desde la entrecalle G a Bazarrate y desde la calle San Nicolás hasta la calle Águila. En estas cuadras residían, en el momento del estudio, 116 adultos mayores y se pudieron entrevistar 87, para un 75 % del total.
Como variables de estudio se definieron dos: “sentido de vejez” y “significado de vejez”. Sus significados e indicadores se muestran en el siguiente cuadro.
Variables | Clasificación | Definición | Indicadores | Escala |
---|---|---|---|---|
Sentido de vejez | Cualitativa nominal | Autovaloración del AM | - Satisfacción de sus necesidades básicas, materiales y espirituales. - Sentirse útil. -Sentirse merecedor de ser reconocido por sus aportes. - Sentirse amado por su familia, amigos y antiguos compañeros de labor. - Sentir que su vida tiene calidad. - Tener expectativas. | Alta Media Baja |
Significado de vejez | Cualitativa nominal | Valoración del AM por los restantes grupos etarios | Respetar el derecho de los AM a ser respetados. - Reconocer el aporte de la experiencia de los AM. - Sentirse obligado a contribuir, en la medida de sus posibilidades, a la satisfacción delas necesidades básicas, materiales y espirituales de los AM de su entorno familiar y social. - Demostrar afecto a los AM, en su condición de familiar, amigo o antiguo compañero de labor. | Alta Media Baja |
Consideraciones éticas
Se advirtió a todo el equipo de investigación que a cada persona que se le solicitara realizar la entrevista, tanto a niños, adolescentes, jóvenes, adultos medios y adultos mayores se les debía explicar, de acuerdo a su edad, qué se pretendía estudiar, para qué y por qué se hacía y en qué consistiría su participación. A cada participante se le informó que su colaboración con el estudio era voluntaria y anónima, que la información obtenida sería confidencial, por lo que no conllevaba riesgo alguno y, por el contrario, podría resultar de gran beneficio el poder conocer la real situación de los adultos mayores. En el caso de los niños, adolescentes y jóvenes se solicitó autorización a los padres o tutores para realizar la entrevista y también se les pidió su aceptación para participar.
Resultados
Del total de adultos mayores (116) fueron entrevistados 87 (75 %), de cuyas características resalta que la mayoría están jubilados, poco más de la mitad son mujeres y la mitad se declara independiente (Tabla 2).
Necesidades básicas materiales: aunque el 30 % se declaró dependiente de los hijos y el 19 % de los nietos, el 51 % de los adultos mayores se declaró independiente. Entre las actividades que realizaban para mejorar sus ingresos económicos, eran coser, vender periódicos, hacer mandados y trabajar con cuentapropistas. Reconocieron como sus necesidades materiales más importantes la necesidad de que mejore el transporte, los precios de los alimentos y que aumente la jubilación.
Necesidades básicas espirituales: (lo que siente) el 50 % se sentía satisfecho y el 61 % refirió tener una regular salud; el 76 % refirió emplear su tiempo en otras actividades que no son los ejercicios físicos, la incorporación a la Universidad del Adulto Mayor o la asistencia a actividades culturales; el 80 % consideró que una persona de su edad significa experiencia; el 62 % declaró ser feliz y el 60 % consideró que ha valido la pena vivir hasta ahora, en tanto que el 39 % solo lo consideraba en parte.
Trato recibido: el 76 % se sentía respetado y el 41 % querido; el 43 % declaró recibir con frecuencia atención de sus amigos y el 51 % de sus antiguos compañeros de labor. Sin embargo, el 52 % de los jubilados declaró no recibir nunca atención de las organizaciones a las que pertenecían cuando trabajaban y el 48 % declaró no recibir nunca atención de las organizaciones sociales del barrio.
Expectativas: el 56 % tenía como expectativa pasear con los nietos y el 53 % visitar a los amigos. Con respecto al mayor tiempo para asistir a actividades científicas y culturales, el 29 % lo quería emplear en ir al cine y al teatro y el 28 % ir a conciertos y al ballet. De las tareas humanitarias en las que pudieran participar, el 48 % planteó visitar a los amigos enfermos.
Necesidades espirituales más importantes: unión familiar, ser respetado, tener salud, recibir solidaridad, ser querido, acompañamiento familiar y de los amigos.
El grupo etario más cercano a los AM son los adultos medios, por lo que su valoración de la vejez es importante. En esta investigación se entrevistó al 20 % de los adultos medios, cuyas características aparecen en la tabla 3.
Total de entrevistados | Sexo F (%) | Casados (%) | Técnico medio (%) | Dominio Inglés (%) | Ascendencia Africana (%) | Ubicación laboral en centros estatales (%) |
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30 | 50 | 37 | 40 | 30 | 37 | 77 |
Significado del adulto mayor para los adultos medios: el 87 % opinó que los adultos mayores son personas importantes y útiles y el 73 % que constituyen ayuda. Entre los beneficios que reciben de los adultos mayores, el 73 % refiere que la experiencia, el 67 % la ayuda y el 50 % que cuidan a los niños. Los principales problemas que genera el adulto mayor son la necesidad de cuidado y la intolerancia, referidos solo por el 15 % y el 17 % de los entrevistados, respectivamente.
La familia y el adulto mayor: el 65 % de los entrevistados declaró escuchar a los adultos mayores y consultarles alguna acción siempre, aunque solo en algunas ocasiones tienen en cuenta su opinión para tomar una decisión. El 81 % consideró que la familia los atiende como se merecen y el 62 % consideró que, en general, las familias atienden debidamente a los adultos mayores, fundamentalmente comprendiéndoles, aunque deben ofrecerles mayor acompañamiento.
Percepción del comportamiento de la sociedad, las organizaciones sociales y el gobierno con los adultos mayores: el 70 % de los entrevistados consideró que, aunque los adultos mayores reciben beneficios de la sociedad, todavía faltan por realizar acciones que les permita sentir el reconocimiento por su aporte. Respecto a las organizaciones sociales, aunque hacen poco, el 17 % consideró que entre las que más hacen está la Federación de Mujeres Cubanas (FMC).
Propósitos y expectativas: los adultos medios consideraron que se debía aumentar las pensiones de los adultos mayores y ser invitados a las actividades de sus antiguos centros de trabajo. El 40 % de los entrevistados, a veces ha pensado en el hecho de que está próximo a la tercera edad. En general, piensan que su vida a esa edad será normal, buena y que les gustaría disfrutar, pasear, ir a actividades con grupos de amistades y ayudar a su familia.
En esta investigación también se tuvo en cuenta el significado de la vejez para los niños, adolescentes y jóvenes entrevistados, la mayoría jóvenes y del sexo femenino (Tabla 4).
Total de entrevistados | Sexo F (%) | Niños (%) | Adolescentes (%) | Jóvenes (%) | Secundaria básica terminada (%) | Estudia inglés (%) | Ascendencia cubana (%) |
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29 | 59 | 21 | 31 | 48 | 38 | 45 | 62 |
Opinión acerca de los abuelos: de los niños, adolescentes y jóvenes entrevistados el 59 % reconoció que sus abuelos son cariñosos, el 41 % que son regañones y el 34 % que son simpáticos. El 41 % refirió que sus abuelos les hacen la comida que les gusta y el 31 % que les arreglan la ropa. El 62 % planteó que tienen sabiduría y experiencia y les aclaran dudas; el 55 % dijeron que siempre pueden contar con ellos y el 45 % expresaron que sus abuelos los quieren.
Significado de la vejez para los niños, adolescentes y jóvenes: los entrevistados refirieron que sus abuelos tienen sabiduría y experiencia, son cariñosos, los cuidan, los ayudan, siempre pueden contar con ellos, aunque son regañones, pelean y se enferman. El 41 % declaró que no ha pensado en ser viejo y que le gustaría que esa edad fuera buena, alegre y que se dedicaría a pasear.
Observación del ambiente físico y social
El porte personal (higiene, vestuario y calzado) de los adultos mayores y las formas de comunicación (expresión del rostro y lenguaje verbal y extra verbal) se calificaron como buenos por los observadores.
Entre las actividades realizadas por los adultos mayores solo se encontró algunos que limpiaban calles, cuidadores de parques o vendedores de periódicos en el tramo de la calle Zanja, desde H. Upman hasta calle Espada.
En cuanto al estado de las aceras se calificaron de “regular” desde la calle G hasta la calle Bazarrate, desde H Upman hasta la calle Espada y de calle San Nicolás hasta calle Águila y de “malas” desde la calle Hospital hasta calle Oquendo y desde la calle Lucena hasta la calle Gervasio.
Respecto a los comedores de familia, la higiene, iluminación y música la calificaron de “regular” en el tramo de la calle Zanja desde H Upman hasta la calle Espada y “con ruidos”, en el tramo de la calle Lucena hasta la calle Gervasio y “no existen” en los tramos desde la calle G hasta la calle Bazarrate, desde la calle Hospital hasta la calle Oquendo y desde la calle San Nicolás hasta la calle Águila.
Centros culturales y de recreación: en el momento del estudio, existían 10 centros de este tipo: 2 en el tramo de calle G hasta calle Bazarrate, 2 de H Upman hasta calle Espada y 6 desde calle San Nicolás hasta calle Águila; pero ninguno tenía las condiciones especiales para adultos mayores.
Centros de educación: existían, hasta el momento del estudio 5 centros de educación: 3 en el tramo de calle G hasta calle Bazarrate y 2 en el tramo de H Upman hasta calle Espada.
Centros laborales estatales: se confirmaron, hasta el momento del estudio, la existencia de 27 centros laborales estatales, casi la mitad se encontraban ubicados en el tramo de la calle Hospital hasta la calle Oquendo.
Centros de cuentapropistas: 18 en total, la mayor parte en los tramos desde la calle Hospital hasta la calle Oquendo y desde la calle San Nicolás hasta la calle Águila.
También se identificó la existencia de otras cuatro instituciones: una sala de baloncesto, un consultorio de médico y enfermera de familia, un joven club de computación y una iglesia, cada una de estas instituciones en diferentes tramos.
Discusión
Aunque en la revisión bibliográfica realizada solo se encontró dos artículos sobre el tema, ambos de dos países del Cono Sur de Nuestra América,4,5 en el caso de Cuba no se encontró estudios similares de años recientes para poder confrontar los resultados. Solo se halló un estudio de caso, realizado en la capital del país, La Habana, por el “Proyecto de Salud, Bienestar y Envejecimiento (SABE)”, en el año 2000. Como parte de este proyecto se realizaron encuestas, en las que se evaluó un conjunto de indicadores importantes y entre sus principales resultados estuvo la identificación de que: el 20 % de los adultos mayores del país residen en la capital, tal y como se evidenció en el presente trabajo, que en el 42 % de las viviendas visitadas se encontró, al menos, un adulto mayor. Además, que el 34 % vivía con hijos, el 10,7 % vivía solo; el 44 % con nivel de escolaridad medio o universitario; el 20 % trabajaba en el momento de la encuesta, de ellos, el 47 % tenía entre 60 y 64 años.9,10
En el presente estudio, el 30 % se declara ser dependiente de los hijos, resultado similar al del Proyecto SABE. Sin embargo, los adultos mayores que viven solos son mayoritarios, para un 47 %. En cuanto a la ocupación, esta investigación arrojó que el 91 % estaba jubilado, de ellos, el 14 % son ya octogenarios.
En el análisis exploratorio realizado en el municipio Plaza de la Revolución en el 2008, la mayoría de los adultos mayores señalaron que presentaban dificultades para el transporte y demandaban un acceso más económico a este y a los espectáculos culturales o deportivos, mayor cantidad de agromercados baratos, entre otros.11)
En cuanto a las necesidades materiales, vinculadas a los estilos de vida, las condiciones del ambiente y la libertad para trasladarse, se encontraron similitudes entre el estudio realizado en el 2008 y el presente, porque, aunque en ambos se reconoce el esfuerzo y la voluntad política del Estado cubano, traducidos en algunas medidas, como son los comedores de familias para los adultos mayores que viven solos, en este estudio, la higiene, iluminación y música se califican de regular, al igual que la posibilidad de que los jubilados se vuelvan a contratar para incrementar sus ingresos, la ayuda de la Seguridad Social, entre otras. Con las declaraciones actuales de la necesidad de que mejore el transporte, su precio y el de los alimentos y el aumento de las pensiones, así como el deterioro físico de las aceras, cuyo estado está calificado de “regular y mal”, se pone de manifiesto que aún son insuficientes las medidas. A lo anterior se suma los pocos espacios públicos para la recreación, especialmente diseñados para ellos (solo cuatro en el momento del estudio).
Varios de estos aspectos ya habían sido tratados por diversos autores, relacionando el bienestar y la calidad de vida de los adultos mayores con la necesidad de emprender soluciones con acciones intersectoriales, pues el envejecimiento poblacional no es un problema solo del sector salud, sino de diversos sectores de la sociedad.12,13,14 Lo que se corresponde con el reclamo de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la OPS de mejorar el entorno urbano, pues las zonas de paseo favorecen un envejecimiento saludable.15) De ahí que se necesiten políticas sociales para enfrentar positivamente el envejecimiento poblacional.16)
Por otra parte, tal y como expresan las juristas cubanas, Teresa Delgado Vergara y Joanna Pereira Pérez:
El Derecho, en una sociedad que impulse y practique valores de solidaridad y de genuina y plena igualdad, tiene la misión esencial de brindar una respuesta normativa a los fenómenos que la realidad le impone con el contenido axiológico que le es inherente a todo hecho de la vida social. En todo caso, se requiere creatividad y flexibilidad de los legisladores y de los operadores jurídicos, perfeccionamiento y eficiencia en el funcionamiento de los mecanismos existentes y reconocimiento de aquellos nuevos que puedan contribuir a la seria ejecución de la protección ya establecida, a fin de que la utopía humanista que impregna el Derecho sea ciertamente una utopía realizable.17
Consideraciones finales
Sobre el sentido de vejez de los adultos mayores: se puede destacar la independencia de poco más de la mitad de los entrevistados, así como su satisfacción de las necesidades materiales y espirituales. Aunque el 50 % de los jubilados declaró no recibir nunca atención de las organizaciones a las que pertenecían cuando trabajaban.
Sobre el significado de vejez de los adultos medios: la mayoría de los encuestados opina que los adultos mayores son personas importantes y útiles, tienen experiencia y constituyen ayuda. Consideran que, aunque la familia los atiende como se merecen, debe ofrecerles mayor acompañamiento y que, si bien reciben beneficios de la sociedad, todavía faltan acciones para que sientan el reconocimiento a sus aportes.
En cuanto al significado de vejez de niños, adolescentes y jóvenes: más del 50 % reconoce que sus abuelos son cariñosos, los quieren, tienen sabiduría y experiencia, les aclaran dudas y siempre pueden contar con ellos, aunque la tercera parte de los encuestados plantea que son regañones.
De la observación del ambiente físico y social, realizado por los investigadores: destacan como aspectos negativos o insuficientes el estado de las aceras, calificado de regular y mal; la higiene, iluminación y música de los “comedores de familia”, calificadas de regular e inexistentes en algunas cuadras. En cuanto a los centros culturales y de recreación se encontraron 10 en total; pero ninguno reúne condiciones especiales para los adultos mayores.
Se concluye que, si los adultos mayores son importantes para las familias, comunidad y sociedad, es preciso mejorar las condiciones materiales de su existencia y del entorno y que se sientan reconocidos por sus aportes.
Recomendaciones
Si bien no se tuvo como propósito generalizar los resultados, dadas las características particulares de los sujetos de estudio y que no se hizo un uso riguroso de técnicas estadísticas para precisar la magnitud del problema, los nuevos conocimientos aportados por este estudio, acerca de las necesidades materiales y espirituales y la real calidad de vida de los adultos mayores, así como del respeto, consideración y agradecimiento de los adultos medios, niños, adolescentes y jóvenes residentes en la calle Zanja, pueden contribuir a:
Diseñar nuevas investigaciones en los municipios más envejecidos del país
Que los principales sectores de la economía diseñen acciones para mejorar la situación actual
Que las organizaciones sociales presten mayor atención a las personas, cuando por su edad se jubilan o enferman y necesitan no solo ayuda material, sino también espiritual: respeto, reconocimiento, afecto, acompañamiento y solidaridad.
Si se considera que los adultos mayores son realmente importantes para las familias, la comunidad y la sociedad en general, entonces es preciso:
aumentar el pago por jubilación;
mejorar el estado de las aceras, para evitar caídas, que pueden producir fracturas y conducir a la muerte antes de tiempo;
mejorar la higiene, iluminación y música de los Comedores de Familia, pues constituyen una gran ayuda para aquellos que viven solos;
establecer precios diferenciados en el mercado agropecuario y el transporte;
incrementar los centros culturales y de recreación a nivel comunitario, con precios diferenciados;
que los centros donde laboraron les inviten a las actividades culturales y recreativas organizadas por el Sindicato, para que se sientan reconocidos, estimados y recordados.