INTRODUCCIÓN
La Medicina Natural y Tradicional (MNT) es una especialidad médica que utiliza métodos de promoción de salud, prevención de las enfermedades, diagnóstico, tratamiento y rehabilitación. Emplea modalidades terapéuticas como la acupuntura, fitoterapia, apiterapia, ozonoterapia, homeopatía, terapia floral, helio-talasoterapia, hidrología médica, ejercicios terapéuticos tradicionales y orientación nutricional naturalista.1) Es por ello que en los últimos años ha cobrado particular importancia.
La Organización Mundial de la Salud emitió en el año 1978, en Ginebra, Suiza, la Declaración de Alma Atá. En ella realizó un llamado internacional para incorporar las medicinas alternativas y terapias tradicionales. Esta organización dirigió sus objetivos para el período 2014-2023 al desarrollo de la base de conocimientos para la gestión activa de esta medicina, su promoción, calidad y seguridad en la atención del bienestar de los pacientes. Estas terapias se emplean en integración con los sistemas nacionales de salud en países como Viet Nam, Corea, México, China, Colombia, Italia, EE UU, Guatemala, Venezuela y España, con resultados positivos.1,2
En Cuba, el auge de la MNT comienza a partir de 1990. En este año el Ministerio de Salud Pública la incorpora en los programas de estudios en la formación de posgrado, y en 1992 en la de pregrado. En su comienzo como un programa director y en lo posterior como estrategia curricular.
El primer programa para la generalización de la especialidad de la MNT en el subsistema de salud comienza en el año 1995. En el 2010, para la formación de dicha especialidad en las provincias orientales, se acredita como institución autorizada el Hospital General “Dr. Juan Bruno Zayas Alfonso” de Santiago de Cuba. Las universidades médicas cubanas a partir del curso 2016-2017, mantienen la MNT como estrategia curricular de las diferentes carreras en el plan de estudio D como cursos propios. Actualmente como asignatura forma parte del Plan E.3,4
Desde el posgrado, al lograr perfeccionar los conocimientos de los residentes con la Medicina Natural y Tradicional, se consigue un alto grado de desarrollo profesional y una atención médica al paciente, de carácter holístico.5) En la actualidad es necesaria la formación de profesionales de la salud que posean las capacidades y habilidades requeridas para desempeñar una correcta práctica profesional y brindar servicios asistenciales de calidad, en correspondencia con los desafíos que enfrenta el país.6
La Pediatría, encargada del estudio de las afecciones del niño y el adolescente, es una de las especialidades más beneficiadas con la MNT. Su interacción permite el tratamiento de diferentes afecciones de salud de manera segura en este grupo vulnerable, al fortalecer el sistema inmunológico y estimular la capacidad de curación del cuerpo. Además, al analizar al individuo como un todo, permite la actuación sobre aspectos mentales y emocionales que influyen en la salud. En el programa de estudio de la residencia de Pediatría se contemplan contenidos referentes a la MNT, sin embargo, aún existen limitaciones que dificultan su empleo en la práctica diaria. Es por ello que esta investigación tiene el objetivo de: caracterizar el nivel de conocimientos sobre Medicina Natural y Tradicional por los residentes de Pediatría según modalidades y afecciones.
MÉTODOS
Se efectuó un estudio observacional, descriptivo y transversal en los centros docente-asistenciales Hospital Infantil Norte “Juan de la Cruz Martínez Maceira” y Hospital Infantil Sur “Antonio María Béguez César” de Santiago de Cuba, en el primer trimestre de 2023. El universo estuvo conformado por 18 residentes de Pediatría de estas instituciones. La muestra la constituyeron 8 residentes que expresaron la voluntad de participar en la investigación a través de la firma del consentimiento informado. De los cuales 2 (25,0 %) estaban cursando el segundo año y 6 (75,0 %) el tercer año de la especialidad de Pediatría.
Se utilizaron métodos teóricos:
Análisis-síntesis: para la obtención y el procesamiento de los resultados de la variable compleja nivel de conocimientos existentes sobre la Medicina Natural y Tradicional por los residentes de Pediatría.
Inductivo-deductivo: posibilitó la elaboración de los principales resultados del estudio, y la reflexión final relacionada con el objeto de la investigación, estableciendo la relación entre lo particular y lo general.
Métodos empíricos utilizados:
Revisión documental: de los expedientes laborales para constatar datos generales de los residentes, así como especialidad anterior y años de experiencia.
Cuestionario a los residentes de Pediatría: para caracterizar el nivel de conocimientos sobre la Medicina Natural y Tradicional según modalidades y afecciones.
Se identificó como única variable compleja del estudio: autopercepción de los residentes de Pediatría sobre su nivel de conocimientos sobre la MNT. Para su medición se consideró su valoración personal, la modalidad terapéutica más empleada por ellos y las principales afecciones en las que prescriben la MNT.
El cuestionario aplicado ya había sido validado y adaptado del elaborado por Olivares Paizan et al.,7 previa revisión y aprobación por los especialistas en la temática. Dicho instrumento estuvo conformado por cuatro preguntas; tres preguntas cerradas y una abierta.
La medición de los ítems se realizó según los criterios siguientes:
Pregunta 1: referente a la autopercepción de los residentes sobre sus conocimientos de MNT en: alto medio y bajo.
Pregunta 2: de selección entre las modalidades propuestas (fitoterapia, homeopatía, terapia floral, acupuntura, ejercicios terapéuticos tradicionales, ozonoterapia, hidrología, apiterapia y ninguna).
Pregunta 3: de selección entre las afecciones propuestas (digestivas, renales, respiratorias, osteomiarticulares; neurológicas, cardiovasculares, otras afecciones).
Pregunta 4: referida a la inclusión, por los residentes de Pediatría, de otros aspectos sobre la temática.
Se comunicó a los centros docente-asistenciales las características y los beneficios de la investigación. Se reunió a los residentes, se les explicaron todos los detalles del estudio, y se obtuvo su aprobación.
Para el procesamiento de la información se creó una base de datos en el sistema Microsoft Excel y los resultados se mostraron en tablas. El número absoluto y el porcentaje fueron las medidas de resumen utilizadas.
Los principios éticos fueron respetados en todas las etapas de la investigación. Se obtuvo el consentimiento informado de cada uno de los residentes y su confirmación voluntaria de participar en la investigación.
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Como resultado de la revisión documental se constató que el promedio de edad de los residentes implicados en la investigación fue de 29 años, predominó el sexo femenino 8 (100 %). De ellas cinco sin especialidad anterior, con más de un año de experiencia laboral, tres poseen una especialidad anterior -Medicina General Integral (MGI)-, y más de 10 años de experiencia.
En la Tabla 1 se muestra la valoración personal sobre el nivel de preparación de las residentes sobre MNT: 2 (25,0 %) consideraron tener un alto conocimiento; y 6 (75,0 %) nivel medio. Ninguna estimó tener nivel bajo.
Se pudo constatar que el mayor porciento de las residentes 6 (75,0 %) consideró su nivel de preparación referente al empleo de la MNT como medio. Ninguna estimó tener nivel bajo.
Estos resultados no coinciden con los obtenidos por González-Rodríguez et al.,8 en una muestra de residentes de MGI; el 39,3 % de los 28 participantes evaluaron sus conocimientos sobre esta especialidad como excelentes. Esta diferencia de resultados, en opinión de los autores, puede responder a que la especialidad de Medicina General Integral atiende una población más diversa donde la utilización de la MNT posee menos restricciones, lo cual obliga a los médicos a estar mejor capacitados para su prescripción.
González-Díaz et al.,9 en una caracterización realizada sobre la satisfacción de los médicos generales con la preparación recibida en MNT durante la carrera, el porcentaje superior de satisfacción correspondió a la disciplina de MGI; sin embargo, la Pediatría se encontraba entre las de mayores insatisfacciones. Estos autores abogan por un cambio en la enseñanza de estos contenidos, donde se destaque la práctica de las modalidades como forma de consolidación de los conocimientos.
Independientemente de los esfuerzos realizados por el Estado cubano y su Ministerio de Salud Pública por fomentar el empleo de la MNT y su incorporación a la formación académica, -con mayor énfasis en la década de 1990-, aún existen irregularidades tanto en el proceso formativo del pregrado como en el posgrado;10) lo cual requiere mayores esfuerzos. Aunque la MNT forma parte del plan de estudio de la especialidad de Pediatría, el tiempo dedicado a ella aún resulta insuficiente para la incorporación de habilidades y competencias que permitan al futuro especialista disponer de las herramientas necesarias para brindar una atención integral al niño.
En la Tabla 2 se constata que la modalidad terapéutica más empleada fue la homeopatía; 7 (87,5 %); en el resto: 2 (25,0 %) terapia floral y 1 (12,0 %) acupuntura y fitoterapia. Ninguna residente señaló otra modalidad no incluida en el instrumento.
En un estudio de Gutiérrez-López et al., 11 sobre la aplicación de la MNT por profesionales de la salud en el nivel primario de atención; la fitoterapia constituyó la modalidad terapéutica más empleada (86,8 %), seguida de la apiterapia (73,7 %); mientras que la terapia floral de Bach fue la menos empleada (10,2 %). Asimismo, en la investigación realizada por Álvarez-Alonso et al.,12 se destacaron la fitoterapia, la moxibustión y la ozonoterapia, en ese orden.
Los autores consideran, como García-Milián et al.,13 que, dentro de esta práctica, la prescripción, consumo, seguridad e investigaciones preclínicas y fármaco-epidemiológicas sobre fitofármacos, es una de las modalidades de la MNT más utilizadas en el país y con mayor integración al sistema. Esto pudiera deberse a la costumbre o la tradición oral de la población sobre su uso ancestral, pues las plantas constituyen el recurso más utilizado por la humanidad para comer, vestirse y curar sus enfermedades. En las últimas décadas se ha manifestado un creciente interés de la utilización de productos sobre la base de hierbas, también como cosméticos naturales. Otra razón a tener en cuenta podría ser su disponibilidad y accesibilidad.
En cuanto a la homeopatía particularmente, según la bibliografía consultada,14,15 se puede aseverar que cuenta con amplia aceptación en diferentes países latinoamericanos, fundamentada en vastas investigaciones que cada vez reducen más la incertidumbre sobre su trascendencia clínica. En este sentido, a juicio de los autores, influyen las corrientes naturalistas modernas que ponderan la supremacía de estos productos antes que los fármacos convencionales. Por su parte, otras investigaciones destacan la importancia de la superación continua de los profesionales médicos como garante de su correcta prescripción.
Estas terapéuticas resultan unas de las más cómodas de usar, seguras y bien toleradas por niños y familiares lo que facilita su generalización por las características propias del grupo etario que atienden los pediatras.
Por otra parte, los resultados positivos socializados por Ramos-Fernández et al.,16 en el 2022 son evidencia de lo efectivo de los medicamentos homeopáticos. Esta vez se comprobó su utilidad en diferentes afecciones agudas de la cavidad bucal con múltiples ventajas y beneficios en niños. Los autores de esta investigación opinan que, sin lugar a dudas, la utilización de la MNT ha alcanzado un incremento notable en estos últimos años, en particular en edades pediátricas por las características particulares de esta alternativa terapéutica.
Por otra parte, las afecciones en las que más prescriben las diversas modalidades de la MNT se observan en la Tabla 3.
Las modalidades de la MNT fueron más utilizadas en las afecciones respiratorias (100,0 %), seguidas de las osteomiarticulares y digestivas (ambas con 37,5 %). A diferencia de la investigación realizada por Gutiérrez-López et al.,11 donde las afecciones respiratorias fueron las de menor cuantía (19,7 %). Tal vez debido la población de estudio y la especialidad.
Los autores de esta investigación comparten el criterio de que el uso la MNT es muy abarcador, pues permite tratar a pacientes con variadas dolencias, a saber: hipertensión arterial, asma bronquial, emergencias médicas y enfermedades dolorosas, que incluyen litiasis renal, hombro congelado, fibromialgia, gota y ciática, entre otras. En el estudio realizado por estos investigadores obtuvieron como afecciones más frecuentes tratadas con MNT: las respiratorias, cardiovasculares, digestivas, urinarias, nerviosas, osteomiarticulares. En el caso que ocupa, las afecciones: digestivas, respiratorias y osteomiarticulares son coincidentes. La diferencia puede estar dada por la población particular a la que atienden los residentes en Pediatría.
No obstante, las afecciones respiratorias, en particular, en la crisis moderada de asma, fue tratada también por Pestana-Pérez et al.17. Estos autores demostraron lo beneficioso que puede ser su tratamiento con el uso de la MNT en pacientes pediátricos mayores de cinco años. Los resultados obtenidos: evolución clínica favorable, disminución de la estadía hospitalaria y los pocos eventos adversos muestran la utilidad de las modalidades alternativa que los autores de este artículo están significando.
En los niños, las enfermedades respiratorias son motivo frecuente de consulta, en especial en los últimos años tras la ocurrencia de la pandemia por COVID-19. Estos y otros problemas básicos que se presentan en los infantes, a consecuencia de los cambios originados durante el proceso científico-tecnológico y las enfermedades infecciosas remergentes del nuevo milenio determinan la necesidad de que estos profesionales refuercen su formación con las modalidades de la MNT. De esta manera se consigue, no solo un alto grado de desarrollo profesional, sino que además permite brindar una atención integral y de calidad al paciente.18,19
Los resultados del presente estudio coinciden con la investigación de Álvarez-Delgado et al., en el 202120 Una vez más las principales indicaciones correspondieron a los pacientes con enfermedades respiratorias agudas y trastornos circulatorios. Se pone de manifiesto que la diferencia puede estar dada por la población (infantil) a la que atienden los residentes en Pediatría.
En este contexto el Ministerio de Salud Pública de Cuba cuenta con un formulario de MNT y un cuadro básico de medicamentos naturales. Los profesionales disponen de un conjunto terapéutico amplio para la atención al paciente con enfermedades crónicas o agudas. Es importante entonces que sea de dominio de los residentes como guía de práctica clínica para la atención secundaria, incluyendo la de Pediatría.
La ausencia de respuesta a la pregunta cuatro referida a la inclusión de otros aspectos sobre la temática abordada, evidencia la afectación que existe en la variable compleja objeto de esta investigación, y evidencia la necesidad de una intervención al respecto. Lo expuesto cobra importancia cuando se valora la poca diversidad en la aplicación de las modalidades de este tipo de medicina en el nivel secundario de atención, a pesar de que representa una alternativa económica, atractiva y de fácil obtención.
Si bien es cierto que se reconocen las bondades de las modalidades de la MNT como tratamiento alternativo por parte de los residentes, se requiere de mayor sistematicidad en su preparación académica.
Aporte científico
La investigación aporta un discernimiento alternativo acerca del nivel de conocimientos de la MNT por los residentes de Pediatría según modalidades y afecciones. Muestra la necesidad del desarrollo de estrategias para la capacitación de los profesionales de la salud, específicamente en la especialidad investigada.
CONCLUSIONES
La preparación de los residentes de Pediatría de dos centros docente-asistenciales de la provincia Santiago de Cuba referente al uso de la MNT según modalidades y afecciones, es aún insuficiente. Aunque emplean algunas de sus modalidades en frecuentes afecciones de salud requieren la adquisición de habilidades y conocimientos que permitan aprovechar la amplia gama de beneficios que esta disciplina aporta para la promoción, prevención, diagnóstico, tratamiento, rehabilitación y decisión tecnológica de las enfermedades pediátricas.