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Revista Cubana de Información en Ciencias de la Salud

versión On-line ISSN 2307-2113

Rev. cuba. inf. cienc. salud vol.35  La Habana  2024  Epub 20-Mayo-2024

 

Artículo original

Actitudes, uso, barreras y conocimientos sobre la medicina basada en la evidencia según el nivel de atención

Attitudes, Use, Barriers and Knowledge About Evidence-Based Medicine According to The Level of Care

0000-0003-4075-9049Víctor Juan Vera Ponce1  *  , 0000-0002-7199-8475Jenny Raquel Torres Malca2  , 0000-0002-0267-2105Jesús Enrique Talavera2  , 0000-0002-2354-273XFiorella Elvira Zuzunaga Montoya2  , 0000-0002-5592-0504Jhony Alberto De La Cruz Vargas2 

1Universidad Tecnológica del Perú. Lima, Perú.

2Universidad Ricardo Palma, Instituto de Investigaciones en Ciencias Biomédicas. Lima, Perú.

RESUMEN

Introducción:

A pesar de la importancia de la medicina basada en la evidencia, es necesario una mejor comprensión de la situación para el desarrollo de esfuerzos educativos y prácticos en función de implementar la medicina basada en la evidencia en el sistema de salud.

Objetivo:

Determinar la actitud, el uso, las barreras y los conocimientos de la medicina basada en la evidencia en los médicos peruanos según el nivel de atención.

Métodos:

Se realizó un estudio analítico transversal a través de una encuesta que se aplicó a los médicos peruanos que trabajan en diferentes niveles de atención en salud.

Resultados:

Se encuestó un total de 1396 médicos. El 64,35 % señaló una actitud positiva hacia la aplicación de la medicina basada en la evidencia. En el caso de las barreras, el 51,01 % no tenía suficiente evidencia relevante; el 49,35 % no contaba con tiempo; el 47,20 % no poseía suficientes habilidades para encontrarla; mientras que el 44,40 % no podía hacer lectura crítica de estas. En cuanto a los accesos de información, casi el 80 % de los participantes reportó que no tiene acceso a ninguna base de datos de las mencionadas. Teniendo en cuenta la comprensión de los términos estadísticos, más de dos tercios de los participantes tenían un alto nivel de comprensión.

Conclusiones:

Aunque la mayoría de los médicos encuestados tienen un buen conocimiento y una actitud positiva hacia la medicina basada en la evidencia, aún existen barreras y uso de la información que se deben mejorar.

Palabras-clave: medicina basada en la evidencia; médicos; conocimiento; actitud

ABSTRACT

Introduction:

Despite the importance of evidence-based medicine, a better understanding of the situation is necessary for developing educational and practical efforts to implement evidence-based medicine in the health system.

Objective:

To determine the attitude, use, barriers and knowledge of evidence-based medicine in Peruvian doctors according to the level of care.

Methods:

A cross-sectional analytical study was carried out through a survey that was applied to Peruvian doctors who work at different levels of health care.

Results:

A total of 1396 physicians were surveyed. 64.35% indicated positive attitude towards the application of evidence-based medicine. In the case of barriers, 51.01% did not have enough relevant evidence; 49.35% did not have time; 47.20% did not have sufficient skills to find it; while 44.40% could not critically read them. Regarding information access, almost 80% of the participants reported that they do not have access to any of the aforementioned databases. Taking into account the understanding of statistical terms, more than two-thirds of the participants had high level of understanding.

Conclusions:

Although the majority of physicians surveyed have good knowledge and positive attitude towards evidence-based medicine, there are still barriers and use of information that need to be improved.

Key words: evidence-based medicine; doctors; knowledge; attitude

Introducción

La medicina basada en la evidencia (MBE) se puede considerar la base de la práctica médica diaria, donde las decisiones médicas se basan en la integración de la evidencia actual, la experiencia clínica y la información que brindan los pacientes.1 Para poder aplicar la MEB a los pacientes se tendría que convertir un problema clínico en una pregunta que se pueda responder, buscar sistemáticamente la mejor evidencia relevante para dicha pregunta, realizar la evaluación crítica y tomar en cuenta esa respuesta en las decisiones clínicas para dar la mejor solución posible al problema.2

Si bien algunos estudios indican actitudes positivas de los médicos hacia la MBE y están de acuerdo en que practicar la MBE mejora la atención al paciente, se encontraron, a su vez, desafíos con respecto a la práctica de la MBE, debido a la falta de tiempo y habilidades.3,4,5) En una revisión sistémica se evidenció que diversos médicos tenían conocimientos y habilidades deficientes en la MBE.6 En otra revisión se encontró que la baja motivación, la actitud negativa hacia la MBE, la falta de confianza en la información encontrada en la búsqueda bibliográfica y la resistencia al cambio constituyen barreras para el desarrollo de la MBE.7 Por lo que, poder acortar esa brecha entre las mejores prácticas y la atención estándar y reducir los tratamientos peligrosos e ineficaces, acercándose más a la práctica de la MBE, mejoraría la calidad de la atención médica.8

En el Perú se ha reportado que la mayoría de los médicos no recibe una formación adecuada en la MBE.9 Debido a lo anterior, el objetivo del estudio fue determinar la actitud, uso, barreras y conocimientos de la medicina basada en la evidencia en los médicos peruanos según el nivel de atención. Ello posibilitaría tener una mejor comprensión de la situación para el desarrollo de esfuerzos educativos y prácticos, en función de implementar la MBE en el sistema de salud.

Métodos

Diseño del estudio

Se realizó un estudio analítico-transversal a través de una encuesta que se aplicó a los médicos peruanos que trabajan en diferentes niveles de atención en salud en el período de marzo a junio de 2022.

Los niveles de atención son tres: el primer nivel, donde se soluciona la mayoría de las demandas o problemas de salud y no cuenta con especialistas. Es ahí donde se tienen a los establecimientos como: consultorios particulares, policlínicos y centros de salud. En el segundo nivel se atienden del 12 al 22 % de la demanda; las necesidades de salud son de complejidad intermedia, se cuenta con especialistas. En este nivel se encuentran algunos hospitales y clínicas. Finalmente, en el tercer nivel es de alta complejidad, en el que se encuentran algunos hospitales e institutos y se atiende el 5 y 10 % de la demanda.

Población, muestra y criterios de elegibilidad

Se incluyeron todos los médicos que se encuentren laborando actualmente en los niveles de atención antes mencionados. Se excluyeron a quienes llenaron incorrectamente el cuestionario, los que no atendían pacientes o si lo hacían era de forma poco rutinaria. Se utilizó un método de muestreo de conveniencia; se emplearon los medios virtuales para contactar a los médicos conocidos por los investigadores y a los conocidos de esos médicos que quisieran participar en el estudio.

Tamaño de la muestra

El tamaño de la muestra se calculó usando el programa EPIDAT 4,2. De acuerdo con la literatura revisada,10 se consideró un aproximado de 27 611 médicos peruanos; se asumió un 30 % de proporción esperada, un 3 % de precisión y un intervalo de confianza del 95 %. De esa forma se calculó un tamaño de muestra mínimo de 896 médicos.

Definición de las variables

El cuestionario que se utilizó fue el elaborado por Danijel Nejašmić y otros4 para la versión en español, con un conjunto adicional de preguntas sobre datos sociodemográficos, profesionales y de práctica adaptados al sistema de atención de la salud peruano. Antes de ser ejecutado en su totalidad, el cuestionario se probó entre 20 médicos e investigadores para verificar el contenido, el criterio relacionado y la validez de constructo del cuestionario.

El cuestionario constó de cinco secciones de preguntas. La primera parte: incluyó siete preguntas para evaluar datos sociodemográficos de los médicos participantes, las cuales fueron: edad (en años), sexo (masculino o femenino), nivel de atención (nivel I, II o III), campo clínico actual (clínico o quirúrgico), tiempo desde que se graduó de la carrera médica (hace 4 años, hace 5 a 10 años o hace más de 10 años), grado de especialización (médico general, residente, especialista o subespecialista) y grado académico (médico, maestro o doctor).

La segunda parte incluía 12 preguntas para valorar la actitud hacia la MBE. La tercera incluía cuatro preguntas sobre el acceso de información a las fuentes de evidencia. La siguiente sección contenía nueve preguntas sobre el uso de la información. La quinta parte tenía 11 preguntas acorde con las barreras para el uso de la MBE. Finalmente, la quinta parte tenía una sección de preguntas acerca de términos estadísticos (10 preguntas) y epidemiológicos (8 preguntas). Las respuestas se encontraban en la escala Likert que abarcaban desde extremadamente negativo a extremadamente positivo; totalmente útil a extremadamente inútil; muy en desacuerdo a totalmente de acuerdo y de siempre a nunca.

Recolección de datos y procedimiento

Para adquirir las respuestas de los participantes se distribuyó un cuestionario en línea a través del formulario de Google en línea durante el período antes mencionado. Se distribuyó a través de redes sociales como Facebook y WhatsApp y Telegram. El tiempo de realización fue de 5 minutos en promedio.

Análisis estadístico

Se utilizó el programa STATA versión 17. Las variables numéricas se presentaron como mediana y rango intercuartílico (RIQ), debido a la distribución no normal de los datos. Mientras que las variables categóricas se presentaron como frecuencias absolutas y relativas. Se realizaron gráficas de barras para la sección de acceso a la información y de términos. Para el análisis bivariado, se comparó cada respuesta de forma individual según el nivel de atención, a través de la prueba ji al cuadrado de independencia. Los valores p < 0,05 se consideraron estadísticamente significativos.

Aspectos éticos

Antes del cuestionario se presentaba un consentimiento informado. Los participantes dieron su consentimiento para colaborar en la investigación. La información solo fue usada con fines de la investigación.

Resultados

Se encuestó un total de 1396 médicos. El 51,29 % era del sexo femenino. La mediana de la edad fue 29 (RIQ 28 a 36). El 22,38 % trabajaba en el tercer nivel de atención. Solo el 27,26 % pertenecía a la rama quirúrgica. El 6,24 % tenía subespecialidad, mientras que el 10,96 % tenía el grado de doctor.

De forma general, el 64,35 % de los médicos señalaron una actitud positiva hacia la aplicación de la MBE. No obstante, solo el 42,83 % señaló que sus colegas practicaban una adecuada evidencia. Existieron diferencias estadísticamente significativas entre cada pregunta en relación con los diferentes niveles de atención (p < 0,001) (tabla 1).

Tabla 1 Características sociodemográficas de la muestra 

Características n (%)
Sexo
Femenino 679 (48,71)
Masculino 715 (51,29)
Edad (años)* 29 (28 - 36)
Nivel de atención
Nivel I 837 (60,04)
Nivel II 245 (17,58)
Nivel III 312 (22,38)
Campo clínico actual
Clínico 1014 (72,74)
Quirúrgico 380 (27,26)
Residencia actual
Desde hace 4 años 777 (55,74)
Desde hace 5 a 10 años 356 (25,54)
Desde hace más de 10 años 261 (18,72)
Grado de especialización
Médico general 463 (33,21)
Residente 451 (32,35)
Especialista 393 (28.19)
Subespecialista 87 (6,24)
Grado académico
Médico 722 (51,79)
Maestro (MSc.) 523 (37,52)
Doctor (PhD.) 149 (10,69)

Leyenda: *mediana y rango intercuartílico.

Fuente: Elaboración propia.

En lo que respecta a la información sobre las fuentes de evidencia, un poco más de la mitad (55,38 %) utilizaba diversas fuentes. A su vez, existió una brecha muy corta entre los que consideraban útil y a veces útil el uso de manuscritos en las revistas de alto impacto (38,24 % vs. 40,96 %), revisiones sistemáticas (44,26 % vs. 43,47 %) y fuentes en línea (43,97 % vs. 59,95 %); mientras más de la mitad señalaron que era útil el uso de guías (51,22 %) y bases de datos (62,27 %). Hubo diferencias estadísticamente significativas entre cada una de estas preguntas con los diferentes niveles de atención (p < 0,001) (tabla 2).

Tabla 2 Diferencias entre los niveles de atención con respecto a la actitud hacia la MBE 

Preguntas   Nivel de atención p*
Total I II III
n (%) n (%) n (%) n (%)
¿Cómo describiría su actitud hacia la promoción actual de la medicina basada en la evidencia? < 0,001
Extremadamente positiva/positiva 897 (64,35) 635 (70,79) 82 (9,14) 180 (20,07)
Ni negativa ni positiva 388 (27,83) 154 (39,69) 115 (29,64) 119 (30,67)
Extremadamente negativa/negativa 109 (7,82) 48 (44,04) 48 (44,04) 13 (11,93)
¿Cómo describiría la actitud de la mayoría de sus colegas médicos generales hacia la medicina basada en la evidencia? < 0,001
Extremadamente positiva/positiva 597 (42,83) 415 (69,51) 39 (6,53) 143 (23,95)
Ni negativa ni positiva 605 (43,40) 295 (48,76) 165 (27,27) 145 (23,97)
Extremadamente negativa/negativa 192 (13,77) 127 (66,15) 41 (21,35) 24 (12,50)
¿Qué tan útiles son los hallazgos de la investigación en su manejo diario de los pacientes? < 0,001
Totalmente útil/útil 1072 (76,90) 690 (64,37) 186 (17,35) 196 (18,28)
A veces útil, a veces inútil 257 (18,44) 121 (47,08) 46 (17,90) 90 (35,02)
Totalmente inútil/inútil 65 (4,66) 26 (40) 13 (20) 26 (40)
Practicar la medicina basada en la evidencia mejora la atención al paciente < 0,001
Muy de acuerdo/de acuerdo 1558 (83,07) 737 (63,64) 206 (17,79) 215 (18,57)
Ni en acuerdo ni en desacuerdo 154 (11,05) 73 (47,40) 21 (13,64) 60 (38,96)
Muy en desacuerdo/en desacuerdo 82 (5,88) 27 (32,93) 18 (21,95) 37 (45,12)
La medicina basada en la evidencia tiene un valor limitado en la práctica general porque gran parte de la atención primaria carece de una base científica < 0,001
Muy de acuerdo/de acuerdo 843 (60,47) 482 (57,52) 148 (17,56) 213 (25,27)
Ni en acuerdo, ni en desacuerdo 226 (16,21) 130 (57,52) 71 (31,42) 25 (11,06)
Muy en desacuerdo/ en desacuerdo 325 (23,31) 225 (69,23) 26 (8) 74 (22,77)
La adopción de MBE, aunque valga la pena como ideal, impone otra demanda a los médicos de cabecera ya sobrecargados < 0,001
Muy de acuerdo/de acuerdo 477 (34,22) 315 (66,04) 66 (13,84) 96 (20,13)
Ni en acuerdo ni en desacuerdo 597 (42,83) 370 (61,98) 106 (17,76) 121 (20,27)
Muy en desacuerdo/en desacuerdo 320 (22,96) 152 (47,50) 73 (22,81) 95 (26,69)
¿Cuántas preguntas clínicas usted realiza diariamente?
Una o ninguna 237 (17,00) 118 (49,79) 47 (19,83) 72 (30,38) < 0,001
Dos 341 (24,46) 148 (43,40) 99 (29,03) 94 (27,57)
Tres 200 (14,35) 102 (51) 50 (25) 48 (24)
Cuatro o más preguntas 616 (44,19) 469 (76,14) 49 (7,95) 98 (15,91)
¿Usted se basa en la evidencia publicada para tomar decisiones sobre tus pacientes? < 0,001
Siempre/cada siempre 709 (65,06) 573 (63,18) 127 (14) 207 (22,82)
A veces 344 (24,68) 193 (56,10) 91 (26,45) 60 (17,44)
Pocas veces/nunca 143 (10,26) 71 (49,65) 27 (18,88) 45 (31,47)
¿Usted usa la experiencia clínica para tomar decisiones sobre sus pacientes? < 0,001
Siempre/cada siempre 709 (50,86) 415 (58,53) 172 (24,26) 122 (17,21)
A veces 393 (28,19) 298 (75,83) 48 (12,21) 47 (11,96)
Pocas veces/nunca 292 (20,95) 124 (42,47) 25 (8,56) 143 (48,97)
¿Usted toma en cuenta la opinión de su paciente para tomar una decisión clínica sobre él? < 0,001
Siempre/cada siempre 729 (52,30) 426 (58,44) 172 (23,59) 131 (17,97)
A veces 367 (26,33) 272 (74,11) 45 (12,26) 50 (13,62)
Pocas veces/nunca 298 (21,38) 139 (46,64) 28 (9,40) 131 (43,96)  

Leyenda: *Realizado con la prueba ji al cuadrado de independencia.

Fuente: Elaboración propia.

Con respecto a la información sobre las fuentes de evidencia, solo el 38 % respondió que era totalmente útil basarse en artículos originales publicados en revistas de alto impacto; donde el 73 % de médicos que pertenecían al primer nivel de atención respondieron igual, los médicos del segundo nivel solo un 5 % respondió así. Pero fueron también la mayoría de médicos del primer nivel de atención un 78,47 % que consideraron totalmente útiles a los artículos publicados en revistas que no son de alto impacto. Las demás preguntas sobre la información sobre las fuentes de evidencia se encuentran en la tabla 3.

Tabla 3 Diferencias entre los niveles de atención con respecto a información sobre las fuentes de evidencia 

Preguntas Nivel de atención p*
Total I II III
n (%) n (%) n (%) n (%)
¿Utiliza fuentes de información médica en línea disponibles a través de revistas y guías en línea elaboradas por asociaciones médicas de interés? < 0,001
Siempre/casi siempre 772 (55,38) 540 (69,95) 97 (12,56) 135 (17,49)
A veces 555 (39,81) 290 (52,25) 120 (21,62) 145 (26,13)
Pocas veces/nunca 67 (4,81) 7 (10,45) 28 (41,79) 32 (47,76)
En los últimos tres meses, ¿cuántas veces ha utilizado una investigación original de una revista médica para resolver un problema en su práctica clínica? < 0,001
Ni una sola vez 179 (12,84) 86 (43,88) 42 (21,43) 68 (34,69)
Una vez 196 (14,06) 113 (63,13) 32 (17,88) 34 (34,69)
Dos a tres veces 455 (32,64) 442 (78,37) 43 (7,62) 79 (14,01)
Cuatro veces a más 564 (40,46) 196 (43,08) 128 (28,13) 131 (28,79)
Artículos originales publicados en revistas de alto impacto
Totalmente útil/útil 533 (38,24) 389 (72,98) 25 (4,96) 119 (22,33) < 0,001
A veces útil, a veces inútil 517 (40,96) 352 (61,65) 124 (21,72) 95 (16,64)
Totalmente inútil/inútil 290 (20,80) 96 (33,10) 96 (33,10) 98 (33,79)
Artículos originales publicados en revistas que no son de alto impacto
Totalmente útil/útil 339 (24,32) 266 (78,47) 49 (14,45) 24 (7,08) < 0,001
A veces útil, a veces inútil 453 (32,50) 255 (56,29) 123 (27,15) 75 (16,56)
Totalmente inútil/inútil 602 (43,19) 316 (52,49) 73 (12,13) 213 (35,38)
Fuentes en línea que brindan resúmenes de investigaciones importantes que son relevantes para su campo (Por ej. UpToDate, Tripdatabase, Dynamed, etc.) <0,001
Totalmente útil/útil 613 (43,97) 469 (76,51) 73 (11,91) 71 (11,58)
A veces útil, a veces inútil 543 (38,95) 248 (45,67) 148 (27,26) 247 (27,07)
Totalmente inútil/inútil 238 (17,07) 120 (50,42) 24 (10,08) 94 (39,50)
Revisiones sistemáticas o metaanálisis
Totalmente útil/útil 617 (44,26) 416 (67,42) 59 (9,56) 142 (23,01) < 0,001
A veces útil, a veces inútil 606 (43,47) 347 (57,26) 137 (22,61) 122 (20,13)
Totalmente inútil/inútil 171 (12,27) 74 (43,27) 49 (28,65) 48 (28,07)
Guías clínicas que se fundamentan en la MBE
Totalmente útil/útil 714 (51,22) 525 (73,53) 106 (14,85) 83 (11,62) < 0,001
A veces útil, a veces inútil 552 (39,60) 264 (47,83) 103 (18,66) 185 (33,61)
Totalmente inútil/inútil 128 (9,18) 48 (37,50) 36 (28,13) 44 (34,38)
Acceso a bases de datos como PubMed/Medline, Biblioteca Cochrane, Scopus, Web of Science o EMBASE
Totalmente útil/útil 868 (62,27) 606 (69,82) 130 (14,98) 132 (15,21) < 0,001
A veces útil, a veces inútil 442 (31,71) 200 (45,25) 88 (19,91) 154 (34,84)
Totalmente inútil/inútil 84 (6,03) 31 (36,90) 27 (32,14) 26 (30,95)
Seminarios y talleres para médicos sobre búsqueda bibliográfica y valoración crítica de la evidencia
Totalmente útil/útil 379 (27,21) 168 (44,33) 69 (18,21) 142 (37,47) < 0,001
A veces útil, a veces inútil 717 (51,47) 469 (65,41) 89 (12,41) 159 (22,18)
Totalmente inútil/inútil 297 (21,32) 200 (67,34) 86 (28,96) 11 (3,70)

Leyenda: *Realizado con la prueba ji al cuadrado de independencia.

Fuente: Elaboración propia.

En el caso de las barreras hacia la MBE, casi la mitad señaló que, a veces, no tenía suficiente evidencia relevante (51,01 %), no tenía tiempo (49,35 %), no tenía suficientes habilidades para encontrarla (47,20 %) o hacer lectura crítica de estas (44,40 %). Estos resultados fueron estadísticamente diferentes por cada nivel de atención (p < 0,001) (tabla 4).

Tabla 4 Diferencias entre los niveles de atención con respecto a las barreras del uso de la medicina basada en evidencias 

Preguntas Nivel de atención p*
Total I II III
n (%) n (%) n (%) n (%)
No hay suficiente evidencia relevante para la mi práctica médica < 0,001
Siempre/casi siempre 412 (29,60) 289 (70,15) 48 (11,65) 75 (18,20)
A veces 710 (51,01) 373 (52,54) 169 (23,80) 168 (23,66)
Pocas veces/nunca 270 (19,40) 175 (64,81) 26 (9,63) 69 (25,56)
Los pacientes solicitan tratamientos que no tienen eficacia médica comprobada < 0,001
Siempre/casi siempre 248 (19,40) 173 (69,76) 51 (20,56) 24 (9,68)
A veces 534 (17,79) 221 (41,39) 143 (26,78) 170 (31,84)
Pocas veces/nunca 612 (43,90) 443 (72,39) 51 (8,33) 118 (19,28)
No tengo suficientes habilidades para encontrar evidencia < 0,001
Siempre/casi siempre 272 (19,51) 198 (72,79) 50 (18,38) 24 (8,82)
A veces 658 (47,20) 369 (56,08) 96 (14,59) 193 (29,33)
Pocas veces/nunca 464 (33,29) 270 (58,19) 99 (21,34) 95 (20,47)
No tengo suficiente tiempo para encontrar evidencia < 0,001
Siempre/casi siempre 215 (15,45) 143 (66,51) 48 (22,33) 24 (11,16)
A veces 687 (49,35) 374 (54,44) 120 (17,47) 193 (28,09)
Pocas veces/nunca 490 (35,20) 320 (65,31) 75 (15,31) 95 (19,39)
No tengo suficientes habilidades para la evaluación crítica de la evidencia < 0,001
Siempre/casi siempre 229 (16,43) 125 (54,59) 52 (22,71) 52 (22,71)
A veces 619 (44,40) 408 (65,91) 91 (14,70) 120 (19,39)
Pocas veces/nunca 546 (39,17) 304 (55,68) 102 (18,68) 140 (25,64)
No dispongo de tiempo suficiente para la lectura crítica y la utilidad clínica de los resultados < 0,001
Siempre/casi siempre 316 (22,67) 220 (69,62) 24 (7,59) 72 (22,78)
A veces 541 (38,81) 297 (54,90) 122 (22,55) 122 (22,55)
Pocas veces/nunca 537 (38.52) 320 (59,59) 99 (18,44) 118 (21,97)
No tengo suficientes habilidades para presentar resultados de investigaciones relevantes a mis pacientes < 0,001
Siempre/casi siempre 273 (19,58) 196 (71,79) 28 (10,26) 49 (17,95)
A veces 535 (38,38) 323 (60,37) 67 (12,52) 149 (27,10)
Pocas veces/nunca 586 (42,04) 318 (54,27) 150 (25,60) 118 (20,14)
No tengo suficiente tiempo para discutir los resultados de la investigación con mis pacientes durante su cita programada conmigo < 0,001
Siempre/casi siempre 391 (28,05) 245 (62,66) 50 (12,79) 96 (24,55)
A veces 544 (39,02) 303 (55,70) 72 (13,24) 169 (31,07)
Pocas veces/nunca 459 (32,93) 289 (62,96) 123 (26,80) 47 (10,24)
El uso de MBE limita aún más el número de pacientes que puedo examinar en mi consultorio médico
Siempre/casi siempre 360 (25,82) 241 (66,94) 48 (13,33) 71 (19,72) < 0,001
A veces 622 (44,62) 356 (57,23) 99 (15,92) 167 (26,85)
Pocas veces/nunca 412 (29,56) 240 (58,25) 98 (23,79) 74 (17,96)
A pesar de los resultados de estudios relevantes, los pacientes tienen expectativas poco realistas que influyen mi elección de tratamiento < 0,001
Siempre/casi siempre 1031 (73,96) 611 (59,26) 148 (14,35) 272 (26,38)
A veces 307 (22,02) 212 (69,06) 73 (23,78) 22 (7,17)
Pocas veces/nunca 56 (4,02) 14 (25) 24 (42,86) 18 (32,14)
Me preocupan los aspectos financieros de mi práctica porque el acceso a fuentes de MBE es costoso < 0,001
Siempre/casi siempre 1018 (73,03) 627 (61,59) 124 (12,18) 267 (26,23)
A veces 310 (22,24) 191 (61,61) 97 (31,29) 22 (7,10)
Pocas veces/nunca 66 (4,73) 19 (28,79) 24 (36,36) 23 (34,85)

Leyenda: *Realizado con la prueba ji al cuadrado de independencia.

Fuente: Elaboración propia

En cuanto a los accesos de información, casi el 80 % no tenía acceso a ninguna base de datos mencionada. Scopus fue la base con mayor acceso (17,62 %) (fig. 1).

Fuente: Elaboración propia.

Fig. 1 Acceso a las fuentes de evidencia. 

Teniendo en cuenta la comprensión de los términos estadísticos, más de dos tercios de los participantes tenían un alto nivel de comprensión. Los niveles más bajos de comprensión fueron: el concepto de potencial estadística (17,72 %), seguido de los errores tipo I y II (15,93 %); mientras que el más alto fue para el valor p (64,71 %) (fig. 2).

Fuente: Elaboración propia.

Fig. 2 Comprensión de los términos estadísticos. 

En relación con la comprensión de los términos epidemiológicos, más de la mitad de las participantes tenían un alto nivel de comprensión. Los niveles más bajos de comprensión fueron para el concepto de modificador de efecto (19,73 %); mientras el más alto fue para la sensibilidad y especificidad de la prueba (69,94 %) (fig. 3).

Fuente: Elaboración propia.

Fig. 3 Comprensión de los términos epidemiológicos. 

Discusión

Según la revisión bibliográfica, este es el primer estudio que compara estos aspectos, según el nivel de atención en el Perú, los cuales tienen una estructura organizativa similar de atención primaria de salud en Latinoamérica.

Las comparaciones directas no son posibles, porque los cuestionarios utilizados son muy diferentes; sin embargo, los resultados de la mayoría de las encuestas son similares a los estos y globalmente coincidentes. Más de la mitad mostró una actitud positiva hacia la MBE, aunque ello fue más significativo para el primer nivel de atención y no tanto para el segundo y tercero. Ello se asemeja a trabajos como los realizados por Nejašmić,3 Novak,11 Baig,12 Kareem13 y la revisión sistemática de Swennen,14 en los cuales se encontró que los médicos en Croacia tenían actitudes muy positivas hacia el uso de la MBE y estaban de acuerdo en que mejora la atención al paciente. Sin embargo, alrededor del 40 % señaló que sus colegas tenían una actitud positiva o neutra; lo cual es muy parecido a lo que se encontró en un estudio en médicos en Malasia.4

La mayoría de los médicos hacen más de cuatro preguntas al día. En la revisión sistemática de Delfoil y otros,15 que abarcó a varios grupos, incluidos los médicos, indicó que el 34 % de las preguntas se referían al tratamiento farmacológico y el 24 % a las posibles causas de un síntoma, los hallazgos físicos o los resultados de las pruebas diagnósticas. A su vez, Davies mostró que las principales necesidades de información de los médicos eran el tratamiento o la terapia, el diagnóstico y la terapia/información farmacológica.16

Con respecto a la aplicabilidad, solo la mitad toma en cuenta la opinión del paciente y considera usar la experiencia. Estos resultados coindicen con lo encontrado por Mohd.4 Es importante señalar que dentro de la MBE las habilidades que los médicos adquieren durante años de práctica y experiencia clínicas constituyen una parte necesaria e indispensable de lo que hace a un buen médico, junto con la toma de decisiones.2

Además, se encontró que los médicos a veces encontraban evidencia para su práctica clínica, sobre todo en el primer nivel de atención. Frente a esta problemática, en el Perú ya se está comenzando a implementar el uso de las guías de práctica clínica y la toma de decisiones basadas en la evidencia.17

En cuanto a las barreras más importantes, en este estudio se encontraron las habilidades para aplicar una adecuada evidencia; ello sumado a que consideraban que limitaba el número de pacientes que atendían y que aprender estos temas era un gasto adicional de dinero. Esto se asemeja a un estudio francés, en el que participaron 397 profesionales de la salud, y los autores encontraron que la falta de habilidades para la evaluación crítica de los estudios se percibía como una barrera en la MBE entre el 21,7 % de los encuestados.18 Algo similar ocurre en el trabajo de Getenet y otros,19 en el que el 60,2 % informó tener poca confianza en su capacidad para juzgar la calidad de la investigación y la mitad expresó que no pudo encontrar recursos para implementarla.

Otra limitación que se reportó fue el tiempo. Con respecto a este, la sobrecarga de pacientes ha sido reportada como una barrera en la práctica de la MBE en diferentes regiones del mundo. El 60 y 80 % de los participantes en un estudio egipcio declararon que la sobrecarga de pacientes constituye una barrera para la MBE.13 Un estudio realizado en Francia también lo respalda: el 26,1 % de los participantes percibieron la falta de tiempo como un obstáculo en la práctica de la MBE.18 En Wuhan, China, el 32,5 % de los médicos investigados percibieron la falta de tiempo como una barrera para implementar la práctica de la MBE.20

Estas preocupaciones que tienen los médicos podrían verse solucionadas con la implementación de programas basados en la evidencia en sus centros de trabajo.21,22,23,24 A su vez, muchos expertos han abogado por generalizar el uso de síntesis de evidencia y resúmenes como la única forma de hacer que la evidencia sea accesible para los médicos ocupados que no tienen el tiempo o las habilidades para llevar a cabo los pasos de la MBE tradicional.25

Si bien se considera que PubMed es la fuente más utilizada para la búsqueda de información, muchas veces no es suficiente para encontrar toda la información relevante.16 A su vez, se encontró que los médicos no tenían acceso a base de datos como Cochrane, EMBASE, Scopus o la Web Of Science. Esto se debe a que para acceder a estas fuentes de evidencia se necesitan suscripciones de pago, a las que no todos pueden tener fácil acceso.26 A su vez, se debe considerar el limitado conocimiento de su uso, como se muestra en el trabajo de Lafuente-Lafuente,18 donde solo el 21,3 % utilizaba la biblioteca Cochrane y el 6,4 % otras bases de datos médicas. Incluso, es preocupante que tengan conocimientos limitados en el uso de estas.27

Se sabe que los términos estadísticos en MBE causan dificultades en la aplicación de la práctica basada en la evidencia en este estudio. Un hallazgo similar se encontró entre la atención primaria en Selangor.5 Estos hallazgos también fueron respaldados por un estudio en Melaka, que encontró que más de la mitad de los encuestados no entendían los términos utilizados, por ejemplo, el número necesario a tratar, los meta-análisis, la razón de probabilidades y el intervalo de confianza. En comparación con el estudio de Chan GC, más de la mitad de los encuestados tienen alguna comprensión de términos como riesgo relativo y riesgo absoluto.28 Sin embargo, los estudios de otros países tienen resultados diferentes. Por ejemplo, en Sri Lanka, menos del 38 % de los médicos entendieron algunos términos como revisión sistémica y meta-análisis.29 Por otro lado, un estudio encontró que solo un tercio de ellos podía entender los términos estadísticos y explicar a otros el significado de los términos estadísticos.30

Hubo varias limitaciones durante el desarrollo de la investigación: los médicos tienen una alta carga de trabajo de pacientes; por lo tanto, tenían un tiempo limitado para responder los cuestionarios. Este se basó en la autoevaluación de conocimientos y creencias, por lo que se necesitan de preguntas dirigidas a evaluar de manera objetiva temas como el conocimiento acerca de la MBE.

Conclusiones

Los resultados encontrados en este estudio pueden servir como datos de referencia para diseñar intervenciones efectivas, en función de mejorar el conocimiento, la actitud y la práctica de los médicos hacia la MBE. Esto incluye darles más acceso a los recursos de evidencia y aumentar la conciencia sobre la importancia de incorporar la capacitación en habilidades de MBE en la educación médica continua y mejorar los planes de estudio actuales de las escuelas de medicina.

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Recibido: 12 de Octubre de 2023; Aprobado: 27 de Noviembre de 2023

*Autor para la correspondencia: goodliferesearchgroup@gmail.com

Los autores declaran que no tienen conflicto de intereses.

Conceptualización: Víctor Vera Ponce, Jenny Raquel Torres-Malca.

Curación de datos: Jesús Talavera, Jenny Torres Malca.

Análisis formal: Víctor Vera Ponce, Jesús Talavera.

Investigación: Jenny Torres Malca, Fiorella Zuzunaga Montoya.

Metodología: Víctor Vera Ponce, Jenny Torres Malca.

Administración del proyecto: Víctor Vera Ponce.

Supervisión: Víctor Vera Ponce, Jhony De La Cruz Vargas.

Visualización: Jesús Talavera, Jenny Torres Malca, Fiorella Zuzunaga Montoya.

Redacción - borrador original: Jesús Talavera, Jenny Torres Malca, Fiorella Zuzunaga Montoya.

Redacción - revisión y edición: Víctor Vera, Jesús Talavera, Jenny Torres Malca, Fiorella Zuzunaga Montoya, Jhony De La Cruz Vargas.

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