INTRODUCCIÓN
La familia es un sistema de convivencia, con o sin lazos de consanguinidad, en el que los miembros del hogar participan y colaboran en diversas funciones que permiten el sostenimiento de la familia, satisfacen sus necesidades psicosociales y pueden desarrollar sus potencialidades.1 El sistema familiar puede actuar como generador o protector y puede influir en el bienestar físico, psicológico y en la salud mental de sus integrantes.2
Según la forma en que interactúan los individuos en su familia, puede saberse si esta es funcional o disfuncional. La familia funcional está caracterizada por la presencia de armonía, roles, reglas y límites, que permiten satisfacer las necesidades de los miembros del hogar.
La disfuncionalidad, por su parte, corresponde a la falta de cumplimiento y respeto a las normas, roles, responsabilidades y jerarquías del sistema familiar; por consiguiente, no se cubren las necesidades primordiales de los integrantes.3 Además, puede presentarse ante cambios o situaciones donde se dificulte mantener la congruencia y estabilidad, lo que puede generar enfermedad en sus integrantes.4
Para algunos estudiosos, en el funcionamiento familiar están presentes tres variables: las afectivas o emocionales, las relacionadas con la capacidad de ejercer la autoridad, y las inherentes a la comunicación entre los miembros del hogar.5
En Ecuador, las investigaciones sobre funcionamiento familiar y bienestar psicológico son limitadas. Sin embargo, estos estudios han tenido mayor relevancia a través de la oficialización del Plan Nacional del Buen Vivir 2013-2017 y del Plan Nacional de Desarrollo Toda Una Vida 2017-2021.6 Con estos proyectos el Estado ecuatoriano ha hecho visible la importancia de la función que cumple la familia, y ha promovido la investigación a través de la vinculación con las universidades. Igualmente, contribuye a cumplir lo indicado por la Organización de las Naciones Unidas, que estipula como objetivos principales favorecer una mayor integración de las políticas y programas en beneficio de las familias.
En referencia al bienestar, se conceptualiza como vida en plenitud, de acuerdo a la cosmovisión ancestral del sumak kawsay o “buen vivir”. A través del mismo, el gobierno ecuatoriano busca conseguir la plenitud de la vida como parte de una política de Estado.6 El bienestar psicológico, de acuerdo al concepto que emitió la Organización Mundial de la Salud en 2001, hace referencia a que además de existir la ausencia de enfermedad en la persona, también hay un estado de bienestar físico, mental y social. El bienestar psicológico es un indicador de la calidad de vida y está relacionado con un modo de funcionar positivo.7
Desde el punto de vista psicológico, el bienestar está relacionado con el placer, la felicidad o el hedonismo, y con la capacidad de desarrollo personal o eudaimónico.8
Conforme a la unificación de las formulaciones sobre el bienestar psicológico, en un estudio se plantea un modelo multidimensional de este, basado en seis componentes que son: autoaceptación, relaciones positivas con otros, autonomía, dominio del entorno, propósito en la vida y crecimiento personal.9
Teniendo en cuenta este enfoque multidimensional, se define el bienestar psicológico como una construcción personal que descansa en el desarrollo psicológico del individuo y en su capacidad para interactuar de manera armoniosa con las circunstancias de la vida, mediando el grado en que se le proporciona significado a la vida, en que las funciones y actividades se evalúan positivamente y se comprende de manera significativa el entorno.9
Posterior a un proceso de investigaciones preliminares u observaciones no sistematizadas en padres de familia, por parte de los tutores de niños, niñas y adolescentes que pertenecen al proyecto del Ministerio de Compasión Internacional (MCI), de las iglesias del Nazareno del Ecuador, se identifica la presencia de dificultades en la comunicación e interrelación de los miembros del hogar. Problemas para asumir el rol que les compete, así como para el establecimiento de normas, reglas y límites en la familia, falta de confianza, ausencia de demostraciones de afecto y distanciamiento emocional; características asociadas a un nivel de funcionamiento familiar. A su vez, en esta misma población se observan dificultades para la autoevaluación de forma positiva, en el pasado y en el presente; problemas para tomar decisiones y llevarlas a cabo, falta de sentido de crecimiento personal, dificultad para encontrar el propósito en la vida, así como para establecer y mantener relaciones de amistad, aspectos relacionados con el bienestar psicológico.
A partir de lo revisado, se plantea como hipótesis la existencia de la influencia del funcionamiento familiar en el bienestar psicológico y la relación entre las dos variables de estudio.
En función de la evidencia empírica disponible, se diseña este estudio con el objetivo de determinar la influencia de la percepción del funcionamiento familiar en el bienestar psicológico en padres de familia ecuatorianos.
MATERIALES Y MÉTODOS
De acuerdo al tipo de investigación se detalla lo siguiente:
Según la intervención del investigador, fue observacional, porque no existió intrusión de parte de los investigadores, sino que se limitaron a observar y medir las variables. Solamente se recogieron los datos y se ejecutó el estudio, enfocado en determinar la influencia del funcionamiento familiar y bienestar psicológico en los padres investigados.
De acuerdo a la planificación de la toma de datos, fue prospectiva: surgieron del fruto de la investigación, a través de la recolección de información por medio del test de Funcionamiento Familiar (FF SIL) y el cuestionario de Bienestar Psicológico de Carol Ryff, que midieron las variables objeto de estudio.
Fue un estudio transversal. Las mediciones se realizaron en un único período de tiempo, de agosto a octubre de 2020. Con un carácter cuantitativo se hizo el análisis estadístico bivariado, cuantificando las dos variables y su dependencia probabilística a través del coeficiente de correlación de Spearman.
Según el número de variables de interés, fue una investigación analítica. Se estableció la relación entre dos factores, aprobando la hipótesis de esta investigación que es: la percepción del funcionamiento familiar influye en el bienestar psicológico de los padres de familia.
La población de estudio estuvo constituida por 405 padres pertenecientes al proyecto del MCI, de las iglesias del Nazareno de las ciudades de Riobamba, Guaranda, Puyo y Montalvo, que cumplieron con los requisitos de selección.
Criterios de selección: ser padre o madre de familia, utilizar medios telemáticos, tener un hijo matriculado y asistiendo al MCI, y pertenecer a las ciudades antes mencionadas, previo consentimiento informado para participar en el estudio.
Para el levantamiento de la información, se contó con la autorización del superintendente regional Sierra-Centro de la Iglesia del Nazareno en Riobamba. Mediante Google Forms y a través de WhatsApp, se envió un link con los respectivos cuestionarios a los números de contacto recibidos anteriormente.
Para la variable de caracterización se consideraron aspectos sociodemográficos, como edad, sexo, estado civil y tipo de familia.
En cuanto a la variable de supervisión, se utilizó la prueba de Percepción del Funcionamiento Familiar, creada y validada en Cuba en 1994 por Isabel Louro Bernal.10 Consta de 14 ítems y mide cohesión, armonía, comunicación, permeabilidad, afectividad, roles y adaptabilidad -a través de la escala de Likert. Se escogieron cinco posibles respuestas y se diagnosticó a la familia como: funcional, moderadamente funcional, disfuncional, o severamente disfuncional.9
Respecto a la variable asociada, se empleó el cuestionario de Bienestar Psicológico de Carol Ryff, en la adaptación y versión española,7 en el que mediante un análisis se redujo el instrumento a 29 ítems. En el cuestionario se seleccionó entre 1 (totalmente en desacuerdo) y 6 (totalmente de acuerdo).
Luego de registradas las respuestas, se procedió a la depuración de las mismas y se realizó la tabulación de datos en Microsoft Excel 2016. Para el análisis estadístico se empleó el paquete estadístico IBM de SPSS en su versión 25; para el análisis de correlación se usó el coeficiente de correlación de Spearman, y para el proceso de análisis se utilizó la estadística descriptiva y medidas de tendencia central.
RESULTADOS
La tabla 1 refleja los resultados que se obtuvieron de la aplicación de la ficha sociodemográfica y la distribución según el sexo, la edad, el estado civil y el tipo de familia. Predominó el grupo de entre 21 y 40 años, el sexo femenino, el estado civil casado y la familia nuclear.
Factores | Frecuencia | Porcentaje | ||
---|---|---|---|---|
Sexo | Hombres | 328 | 81,0 | |
Mujeres | 77 | 19,0 | ||
Edad | 18-20 | 13 | 3,2 | |
21-30 | 143 | 35,3 | ||
31-40 | 170 | 42,0 | ||
41-50 | 67 | 16,5 | ||
51-60 | 7 | 1,7 | ||
Más de 61 | 5 | 1,2 | ||
Estado Civil | Soltero | 113 | 27,9 | |
Casado | 181 | 44,7 | ||
Viudo | 3 | 7 | ||
Separado | 31 | 7,7 | ||
Unión libre | 77 | 19,0 | ||
Tipo fe familia | Nuclear | 265 | 65,4 | |
Monoparental | 109 | 26,9 | ||
Extendida | 21 | 5,2 | ||
Reconstruida | 10 | 2,5 | ||
Homoparental | - | - |
La tabla 2 muestra la distribución de frecuencias del resultado integral del test de Percepción del Funcionamiento Familiar. Los resultados indican el predominio de las familias moderadamente funcionales.
Factores | Frecuencia | Porcentaje | |
---|---|---|---|
NFF | Familias severamente disfuncional | 2 | 0,5 |
Familias disfuncional | 56 | 13,8 | |
Familias moderadamente disfuncional | 206 | 50,9 | |
Familia funcional | 141 | 34,8 | |
Total | 405 | 100 |
La tabla 3 presenta la distribución de frecuencias del resultado general del cuestionario sobre bienestar psicológico. Los resultados evidenciaron el predominio del bienestar psicológico bajo.
Factores | Frecuencia | Porcentaje | |
---|---|---|---|
NBP | Bienestar psicológico bajo | 249 | 61,5 |
Bienestar psicológico moderado | 150 | 37,0 | |
Bienestar psicológico alto | 6 | 1,5 | |
Total | 405 | 100 |
En el gráfico 1 se observa la relación del funcionamiento familiar percibido por los padres frente al tipo de familia. Prevalecieron las familias moderadamente funcionales.
En el gráfico 2 se observa la relación existente entre los niveles de bienestar psicológico y el tipo de familia. Se destacó en la familia moderadamente funcional la prevalencia del bienestar psicológico bajo.
La tabla 4 muestra el resultado de la prueba U de Mann-Whitney, que permitió encontrar diferencias significativas entre las variables de estudio y el género de los elementos de la muestra.
La tabla 5 refleja el resultado de la prueba Kruskal-Wallis, con la que se buscó diferencias significativas entre las variables de estudio, edad y el tipo de familia de los elementos de la muestra. Se evidenció que el valor de prueba fue mayor al nivel de significancia (5 %) en los cuatro cálculos.
Variables | Edad | Tipo de familia |
---|---|---|
Funcionamiento familiar | 0,950 | 0,788 |
Bienestar psicológico | 0,350 | 0,848 |
La tabla 6 presenta el análisis de correlación entre el funcionamiento familiar (puntaje total) y el bienestar psicológico (puntaje total), en los que se evidenció una correlación directa débil.
DISCUSIÓN
En la presente investigación se continuó, en primera instancia, analizando las características demográficas del objeto de estudio, teniendo en cuenta que estos factores pueden influir en las variables de la investigación.
La muestra estuvo compuesta principalmente por mujeres con edades que fluctuaban, en su mayoría, entre los 21 y 40 años. La mitad de esta muestra eran personas casadas, y una tercera parte solteras. Las familias del objeto de estudio fueron predominantemente nucleares, formadas únicamente por los padres y sus hijos. En porcentaje importante (26,9 %) eran familias monoparentales.
Según Gallegos et al.11 existen diferencias de género en variables del funcionamiento familiar, tales como flexibilidad, cohesión, satisfacción y comunicación familiar.
Los datos de García-Alandete,12 revelan la existencia de diferencias significativas en el bienestar psicológico, asociadas a la edad. Asume que podrían vincularse a los cambios de las motivaciones personales que ocurren durante el ciclo de vida. También obtiene diferencias en el bienestar psicológico del género, que podrían explicarse por orientaciones axiológicas distintas entre hombres y mujeres.
Ante esta evidencia, se comprobaron estos enunciados en el grupo de estudio. Para ello, se realizaron pruebas de hipótesis mediante la comparación de grupos con la prueba U de Mann-Whitney para el género, y la de Kruskal-Wallis para la edad. Los resultados obtenidos comprobaron la nulidad de estas hipótesis, por lo que el análisis de correlación de las variables se realizó considerando que la edad y el género no inciden en el funcionamiento familiar ni en el bienestar psicológico.
Respecto a los tipos de familia, Maguiña y Karec13 afirman que no existe correlación entre estos y la funcionalidad familiar. Esta afirmación se realiza con los resultados de un estudio en un grupo de niños de una institución educativa escogida por los autores, aunque por razones de contexto debe comprobarse.
Al igual que con la edad y el género, se realizó la comparación de grupos con la prueba de Kruskal-Wallis, comprobando nuevamente la nulidad de la hipótesis. No se encontró información relevante acerca de la relación entre el tipo de familia y el bienestar psicológico. No obstante, se volvió a aplicar la prueba de hipótesis, resultando nula una vez más. En todos los tipos de familia predominó el funcionamiento moderadamente funcional: no mostraron diferencias significativas entre los grupos.
Se enfatiza que el bienestar psicológico fue mayoritariamente bajo en todos los tipos de funcionamiento familiar. El bienestar psicológico moderado también tiene un peso importante, pero en menor escala, mientras que el bienestar psicológico alto prácticamente no existió. Esto influye de forma importante en la correlación de las variables, aunque el cálculo del rho de Spearman evidencia que existe correlación con una significancia importante del 1 %; la fuerza es débil. Una mejora en el funcionamiento familiar mejoraría muy poco el bienestar psicológico, desde la perspectiva de una correlación; pero al verificar la asociación de las variables mediante una prueba chi cuadrado se aceptó la hipótesis nula.
Álvarez Vargas y Salazar Rizo,14 no encuentran relación entre el funcionamiento familiar y el bienestar psicológico, en un estudio con adolescentes de 11 a 20 años. La similitud entre este estudio y la presente investigación, puede deberse a la influencia de factores externos no controlados en ambas investigaciones, ya que en ningún caso se analizan aspectos como: características de liderazgo, claridad en funciones, relaciones sociales en el trabajo y violencia -factores que se incluyen en las variables, tal como lo expresan Saldaña Orozco et al.15 Esto afecta la validez interna de la investigación: al no tomar en cuenta variables relevantes que intervienen, no hay la evidencia estadística necesaria para poder rechazar la hipótesis nula.
Otra limitación de significancia es la falta de comparación con otros estudios. Además, haber trabajado con una población muy homogénea es una debilidad; con una población más diversa se podría incrementar la magnitud de la correlación. En futuras investigaciones se debe considerar el trabajo con una población más amplia, no ligada a una sola institución, que habite en diferentes contextos sociales, culturales, demográficos y donde se evalúen a todos los integrantes del hogar.
La percepción del funcionamiento familiar y el bienestar psicológico tienen correlación con bajo nivel de significación en padres de familia del proyecto del Ministerio de Compasión Internacional, de las iglesias del Nazareno de Riobamba, Guaranda, Puyo y Montalvo, del Ecuador.
Se recomienda establecer estrategias de intervención psicológica en la población estudiada, con vistas a mejorar el funcionamiento familiar y el bienestar psicológico. Se debe procurar mejorar la comunicación, cohesión, armonía, relaciones positivas y crecimiento personal, mediante actividades sensibilizadoras y técnicas psicológicas. Asimismo, ampliar este estudio a otras instituciones y ciudades en el exterior, a fin de enriquecer los vacíos presentes en investigaciones donde se correlaciona el funcionamiento familiar y el bienestar psicológico en padres y demás miembros del hogar.