Tiene media vida de historia, esfuerzos y primeras veces detrás, y el Doctor en Ciencias Rogelio Creagh lo sabe: de alguna manera, su nombre, su obra de médico, investigador y profesor siempre han estado ligados a la Revista Información Científica (RIC) que, desde el pasado enero 2021, preside.
Le corresponde, empero, mirar hacia el futuro, a fin de cuentas, nada menos se espera de esa publicación que nació hace 30 años solo para la comunidad médica guantanamera y con el tiempo se ha convertido en una revista científica moderna desde Guantánamo, Cuba y para el mundo.
¿Cómo valora el trabajo desarrollado por RIC hasta ahora?
“Llego con confianza, con la mejor impresión de los editores y las personas que, a lo largo de estos años, dirigieron la revista, comenzando por Lérida de la Torre, Pucha, quien inició todo.
Aprecio, también, el prestigio de los trabajos publicados y que, invariablemente, aportan al desarrollo de la ciencia y son, por tanto, referencias para todos los profesionales de la salud….
En todos estos años, hemos tenido la suerte de ser una revista para todos, siempre que se respete el rigor científico. Hemos tenido autores que son investigadores, médicos prestigiosos incluso más allá de nuestras fronteras…, pero también hemos sido la puerta de entrada para muchos que comienzan en la investigación, y son también el futuro.
¿Cuál sería su proyección, entonces, en lo adelante?
Uno siempre debe aspirar a ampliarse, y con la RIC es así. La idea es lograr mayor visualización tanto en los espacios nacionales como internacionales, incrementar nuestro prestigio.
¿Hablamos de cambios?
Pensamos que es importante que el editor no se limite a hacer críticas de los trabajos, y haga sugerencias en el proceso de revisión, siempre respetando las opiniones y la labor investigativa del autor.
El proceso de edición, creo, también debe ser público en todas sus etapas. El autor siempre aparece, pero el editor también debe mostrarse, porque además su trabajo define mucho: es un aspecto que además le aportaría transparencia al proceso y más compromiso con lo que se dice y se hace.
También es necesario incrementar las técnicas de procesamiento de datos estadísticos, una mejor metodología… Nos llegan muchas investigaciones con méritos, pero que serían mejores si profundizaran más, con un sentido causal más allá de lo descriptivo.
Son metas bien ambiciosas…
Pero posibles. Tenemos, dentro de la RIC, un equipo de editores y de profesionales en general consagrados con la publicación y el rigor científico; y una comunidad médica activa en la producción de nuevas publicaciones cada vez más profundas, más a tono con las necesidades y urgencias de la realidad.