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En la práctica médica el análisis de diferentes enfermedades ha avanzado en los últimos años, los antecedentes del paciente, anamnesis y un prudente examen físico son la piedra angular para un diagnóstico acertado; sin embargo, uno de los grandes cambios en la medicina ha sido el apoyo de los diferentes métodos diagnósticos en los que han tenido grandes avances tecnológicos, los cuales tienen un desarrollo importante y acelerado, cambiando sin precedentes, los diferentes desenlaces ya sea en cuanto a morbilidad, mortalidad o costo-efectividad. (1 El abordaje para el estudio de las diferentes enfermedades pleuropulmonares se realiza por la imagen del tórax basado en la radiografía simple posteroanterior; sin embargo, esta presenta grandes limitaciones en la precisión diagnóstica de estas enfermedades. La introducción de estudios imaginológicos especiales como la tomografía axial computarizada resolvió en gran medida este problema, con el inconveniente de las dosis de radiación y del inevitable traslado del paciente, 2 no obstante el ultrasonido diagnóstico ha ido ganando terreno en los diferentes escenarios, teniendo un impacto en diferentes áreas de la salud como un instrumento que no solo diagnostica sino que también mantiene una monitorización continua en el manejo de los pacientes, a pesar de todo, no se utiliza lo suficiente para la definición y seguimiento de las enfermedades pleuropulmonares. 1
A nivel torácico la ecografía se utiliza desde la década de los 60 del siglo XX, esta a partir de ese momento ha constituido un procedimiento complementario de los otros métodos imaginológicos empleados, como radiografías simples, tomografía axial computarizada, resonancia magnética nuclear y gammagrafía; 3 las indicaciones para su uso incluyen enfermedades de tipo pleural, pulmonar periférico, mediastinal, diafragmático y de la pared torácica. 4
El USD actualmente presenta una serie de ventajas sobre el resto de técnicas imaginológicas, (5 entre ellas destacan la ausencia de radiaciones ionizantes, la posibilidad de realizar la exploración en la cabecera del paciente, su valoración en tiempo real y la accesibilidad de los equipos al poderse repetir las veces que el paciente lo necesite durante el día, sin que esto implique un incremento en los riesgos para los enfermos ni para quien lo realice. Estas características son de especial utilidad en las personas más susceptibles a los efectos adversos de la radiación, como los niños y las embarazadas, o en pacientes de difícil movilización como los ingresados en unidades de cuidados intensivos. El ultrasonido diagnóstico permite además observar el pulmón tanto de manera aislada, como en combinación con sus órganos afines, principalmente en este caso, el corazón y el diafragma. 6,7
La ecografía ha tenido un papel secundario en las enfermedades torácicas porque en la observación del tórax con ultrasonidos, se hace difícil la exploración del parénquima pulmonar por artefactos que son resultantes de la interacción del ultrasonido con la materia gaseosa por la que está -mayoritariamente- compuesto el pulmón. Evidentemente, el estudio del pulmón necesita sin lugar a dudas el aprendizaje de un lenguaje muy especial, por lo que su utilidad es relevante debido a todos los beneficios que ofrece. 6
En los últimos años los avances técnicos, como la utilización del ultrasonido Doppler, permiten identificar la naturaleza vascular de lesiones pleuropulmonares y en el diagnóstico y manejo de pacientes en múltiples subespecialidades, como la radiología de la mama y del aparato locomotor. 8,9
También está la ultrasonografía intervencionista, (10 la cual adquiere una relevancia trascendental en el estudio de las masas torácicas, (11 constituye una herramienta disponible en todos los servicios de Imaginología, de fácil traslado, lo que hace que se indiquen para procedimientos en pacientes situados en unidades intensivas o en el quirófano, es útil para guiar procedimientos cuando la lesión es visible mediante esta técnica, además no utiliza radiaciones ionizantes, lo que es importante en procedimientos que pueden ser de larga duración, también permite realizar maniobras en tiempo real con un control continuo de la posición de la aguja. El tiempo requerido para las diferentes técnicas guiado por ecografía es siempre muy inferior al requerido usando otros medios diagnósticos, pudiéndose realizar la mayor parte de los procedimientos en pocos minutos. Es una herramienta versátil, que permite seleccionar múltiples rutas de acceso a la lesión, no está limitada a un plano como otras técnicas seccionales debido a su alta incidencia, esto lo convierte en un instrumento necesario hoy en día para arribar a un correcto diagnóstico etiológico y en consecuencia brindar un adecuado tratamiento y certero pronóstico de la enfermedad, la guía ecográfica puede realizarse usando dispositivos adaptados a las sondas o mediante la técnica de manos libres (sosteniendo la aguja con una mano y la sonda con la otra). 12
En opinión del autor el ultrasonido torácico es una técnica aparentemente compleja e infrautilizada en el diagnóstico y seguimiento de enfermedades y otros procedimientos intervencionistas. A pesar de algunas limitaciones, ofrece una serie de ventajas en la relación médico-paciente como accesibilidad, dinamismo, rapidez, no utilización de radiaciones ionizantes, requiere menos tiempo que otros estudios, lo que justifica su eficacia. Con el entrenamiento y aprendizaje de los diferentes patrones ecográficos constituye una herramienta valiosa para el estudio de las enfermedades torácicas. Está en manos de los especialistas avanzar en el conocimiento de esta práctica e integrarla de forma progresiva a la actividad médica diaria, por lo que el conocimiento de estas posibilidades deberían ser parte del acervo competencial de todos.
