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INTRODUCCIÓN
En el marco de los 40 años de la docencia médica en Cienfuegos un pequeño, pero sincero, homenaje para los fundadores. El profesor de profesores, Dr.C. Alfredo Espinosa Brito, pidió que se escribiera la historia de lo que fuera el embrión de la Docencia Médica en Cienfuegos. Tal vez, se podrá saldar esa deuda en estas cuartillas, o será necesario el aporte y valiosa contribución de otros.
La primera experiencia de educación médica universitaria en Cienfuegos, según Espinosa-Brito,1 ocurrió en el año 1969, cuando esta ciudad acogió a un grupo de diez estudiantes de medicina de cuarto año de la Universidad de La Habana, que por espacio de unos dos meses convivieron con los trabajadores del Hospital Regional Héroes de Playa Girón, en una rotación inolvidable para los que la vivieron, de lo que hoy calificaríamos como “educación en el trabajo”, en el Servicio de Medicina Interna de ese, para muchos, querido centro hospitalario.
El 23 de marzo de 1979 se inauguró por Fidel el Hospital Provincial Clínico Quirúrgico Dr. Gustavo Aldereguía Lima. Nuestro Comandante terminó su visita con un discurso antológico para todos los trabajadores de la salud del país y que, además, trazó claramente la ruta de esta moderna institución para que fuera siempre “símbolo de la salud, la vida y la felicidad de los cienfuegueros”.
En septiembre de 1979, se recibieron los primeros internos rotatorios y en septiembre de 1980 los primeros alumnos de tercer año de Medicina (por ello, en el curso 1980-1981, funcionó la Unidad Docente de Ciencias Médicas en el Hospital). Sucesivamente, se completó la docencia de cuarto, quinto y sexto años; finalmente, las ciencias básicas, con el primer contingente del destacamento Carlos J. Finlay. Por otra parte, en enero de 1980 comenzaron las residencias de las especialidades básicas. Posteriormente, aunque no menos importantes, se incorporaron la docencia superior en Enfermería y en Estomatología. 2
“Honrar, honra”, como dijera el maestro José Martí; sirvan estas líneas para homenajear a todos los alumnos, profesores, personal docente y no docente, los que están y los que ya no están físicamente entre nosotros, que iniciaron la docencia médica en el año 1980.
DESARROLLO
Llegada de alumnos de tercer año de medicina:
El primer grupo de alumnos de 3er año de la carrera de Medicina, llegó en septiembre de 1980 al Hospital Dr. Gustavo Aldereguía Lima (HGAL), de Cienfuegos, dirigido por el director fundador, Dr. José Ignacio Goicochea Bofill, quien brindó todo su apoyo, esfuerzo y conocimientos, ya que participaba siempre, haciendo un extra en su labor directiva, para conseguir el tiempo e incorporarse en los pase de visita docentes de una a dos veces por semana, en salas diferentes. Trató y educó para que los alumnos respetaran a los trabajadores y los trabajadores a los alumnos. Enseñó que los alumnos no se trataban como extras sino como protagonistas, integrados a la labor docente/asistencial de un hospital.
Una anécdota útil para ser relatada es la siguiente: llegó el Dr. Goicochea, por los días próximos al 3 de diciembre a la sala 9ª y le preguntó a los estudiantes, -“ ¿ya los invitaron a la fiesta del día de la Medicina Latinoamericana?”; los alumnos respondieron que no. Rápidamente, se dirigió hacia la representante del sindicato, que era de esa sala, y le preguntó -“¿por qué no están invitados los educandos?”. La compañera respondió-“porque ellos no son médicos”. El doctor, certeramente, le contestó,-“pero son mis invitados, porque ellos están contribuyendo con su trabajo a que este hospital desarrolle sus actividades”. Así era el profesor- director fundador.
Cuando se hacían las jornadas científicas del hospital, siempre participaban los alumnos, sus invitados, sus ahijados, para con quienes tenía atención diferenciada, particular y personalizada. Después de participar en todas las actividades científicas, en las mesas aquellas largas que se ponían unidas de extremo a extremo del comedor de los trabajadores, en el primer piso, aunque por breve tiempo, se sentaba, compartía unos minutos de tú a tú, al lado de los jóvenes educandos. Al respecto, decía:-“!cómo a mí me gusta pasar para verlos como disfrutan la comida, no dejan ni las galletas fritas!. En aquellas cestas- señalaba a los profesores- no comen nada, lo dejan todo, tráiganlo para acá”. Esas cosas pasaron con los alumnos que iniciaron el curso académico 1980-1981.
Primeros trabajadores:
En la Unidad Docente, que radicó en el HGAL, donde se encuentra hoy la oficina del Consejo Científico, laboraban: la Dra. Elena de la Nuez, como directora o jefa (de inicio no tenía el rango de decana); Alexis Brito, como secretaria docente; Lina, como económica; Eneida Moya (EPD); Trinidad García Gunaga (Trina) (EPD); Bárbara Prado, como secretaria; Maricela Acevedo, como bedel; como administrador, Avilés (EPD) y Felipe Rodríguez (EPD), chofer de la guagua.
Ese conjunto de trabajadores formaba una unidad, se preocupaban por todos los estudiantes, hasta el más mínimo detalle, educándolos, apoyándolos, guiándolos. Reconocían, estimulaban, motivaban, trataban a los alumnos como a sus hijos.
Alumnos y profesores por salas:
La distribución de alumnos por salas era la siguiente (listados por orden alfabético de los apellidos):
Sala 10A, con el profesor Chao Cantero (EPD), de residente el Dr. Bolaños (EPD), estaban los alumnos: Inés María Acea Rodríguez (Cusita), Pablo David Alfonso Vera, Juan Ángel Álvarez Cabrera (Juanelo) (EPD), Hugo Almeida Leiva, Juan Carlos Artíz Vázquez, Alina Arias Cabeza, Pedro Juan Barrios Fuentes y Ciro Delgado Cantero.
Sala 11A, jefa de sala Dra. María Luisa (Perla) Quintana Galende, residente Dr. Juan de Dios Rivero Berovides (EPD). Alumnos: Enio Castiñeiras (EPD), Raúl Castellanos Hernández (EPD), Miguel Ángel Días Mesa, Luís Estévez Cobo, Jesús Fleites Wong, Aurelio González López, Olga Lidia Gutiérrez Chongo, Carmen Guerra Chinea, Zoraida Montero.
Sala 12A, jefe EL MAESTRO, Dr. José Bermúdez López, residentes: Dr. Julio Romero Cabrera y Dra. Margarita Romero. Alumnos: Vilma Digna López, Lucilo Morejón Bolaños, Hipólito Herrera Pires, Osilda Fernández, Bernardo Lorites (EPD), Jorge Luís Irizar.
Sala 10B, jefes Dr. Alfredo Espinosa Brito y Dr. René Zamora, residente: Dr. Francisco Olascoaga (Pakin) (EPD). Alumnos: Bárbara Naranjo Figueredo, Juan José Navarro López, Raúl Nieto Cabrera, María Antonia Ocaña Gil, Margarita Quintana Cuesta (primera presidenta de la FEU), Enrique Pérez Rosado.
Sala 12B, jefe Dr. Román Correa (EPD), residente: Dr. Manuel Bonilla Castro. Alumnos: Bárbara Ríos Araujo, Jorge Luís Rey Vidal, Luis Enrique Santana, Iris Rodríguez Sánchez, Omar Rangel, José Antonio Redondas Bermúdez,
Sala 9A, jefes: Dres. Pedro Nieto Prendes, Germinal Álvarez (EPD), residente: Dra. Gloria Lara (EPD). Alumnos: Luis Manuel Roque Aragón, Luís M. Toyos Lasa (EPD), Josefina de La Rosa, Roberto Travieso Peña, Pedro González Mollinedo, Teresita Sabatés Llerandi.
Apoyaban la docencia profesores del Servicio de Infecciosos (que no tenían alumnos de tercer año), el Dr. Álvaro Azconegui; en Terapia Intensiva, el Dr. Juan Francisco Rocha y en Nefrología el profesor Dr. Alfredo Valdivia.
Se impartían, por primera vez en la historia de la Medicina en Cienfuegos, las asignaturas del 3er año de la carrera: Propedéutica Clínica, Radiología, Laboratorio Clínico, Anatomía Patológica, Psicología de la Salud, Higiene y Epidemiología, Filosofía.
Por temor a omitir un nombre, lo que sería imperdonable, no se listaron; pero están en los corazones, todos los médicos y técnicos, tanto del hospital como del Politécnico de la Salud, que impartían y/o apoyaban la docencia. Reciban el agradecimiento eterno por el ejemplo, la formación, el amor y la entrega para con los alumnos. Las aulas para las clases estaban en el quinto piso del hospital, pero las actividades prácticas se realizaban en el Politécnico de la Salud. No se suspendió ni se dejó de dar alguna.
Para ilustrar cuántos esfuerzos se realizaron para impartir los conocimientos, por un claustro de profesores noveles, con entrega, comprometidos grandemente para lograr la mayor calidad posible en la educación y formación integral, se citarán algunos ejemplos: una actividad práctica en el terreno de la asignatura Higiene, fue en la planta de tratamiento del agua en Paso Bonito, Cumanayagua, se dieron otras de Higiene de los alimentos en restaurantes, hoteles, se visitaron fábricas como la de Tabaco y de Hielo.
Se enseñó Medicina, pero también a ser médico, que no son cosas iguales. Sirva esta anécdota para ilustrarlo: un día un paciente sufrió un paro cardiorrespiratorio en la sala 10B y el Dr. René Zamora le dijo a un alumno “ vaya rápido y traiga lo que se necesita en este momento junto al paciente”. El alumno se fue casi corriendo. Cuando terminó todo, lo llamó a solas y con esa voz cándida y educada le reprochó-“ ¿por qué corriste?, en una sala no se corre, genera indisciplina y ansiedad a los enfermos”; el alumno le dice -“usted dijo que fuera rápido”; él respondió -“ rápido no es correr, solo que no se entretiene, no se habla, se va directo a lo que se necesita y regresa”. Así se educaba en la época de los inicios.
Al profesor Espinosa no le gustaba que se usara camisa o pulóver debajo de las batas, de hacerlo, había que tener los botones cerrados, eso de las batas abiertas “como banderas”, como se dice en buen cubano le provocaba la mencionada expresión del argot popular: “lo subían y bajaban”. Las parejas no podían tomarse ni de la mano dentro del hospital, esas cosas eran reprendidas por los profesores. Todos esos pequeños detalles que en el lenguaje actual serían valores y aspectos éticos, se enseñaban, había que respetarlos.
En julio de 1981, en la primera epidemia de dengue en Cienfuegos, ese grupo de alumnos de tercer año, se incorporó mano a mano con los internos, residentes y especialistas, para garantizar la asistencia con calidad a todos los hospitalizados en el propio hospital o las salas habilitadas en el Politécnico de la Salud; apoyaron y reforzaron las guardias médicas, en la asistencia en cuerpo de guardia, confeccionaban las historias clínicas, evoluciones, egresos, también apoyaron las labores en las cuatro áreas de salud que existían entonces en la ciudad, en la tarea de pesquisa de focos de mosquito.
Segundo curso en Cienfuegos:
En el curso 1981-1982, los estudiantes fundadores, pasaron con excelentes resultados entonces a inaugurar el 4to año de la carrera, con las asignaturas de Medicina Interna, Farmacología, Psiquiatría, Dermatología, Filosofía, Administración de Salud. En este curso escolar los alumnos del grupo básico de trabajo de la sala 10B, pasan para la sala 8A, con el profesor Dr. Roberto Pérez como jefe. Se imparte por primera vez en la Perla del Sur el quinto año de la carrera de Medicina. El currículo estaba compuesto por las asignaturas de Pediatría, Ginecoobstetricia, Cirugía, Ortopedia, Oftalmología, Otorrinolaringología y Medicina Legal.
El edificio del malecón, donde radicó la Escuela de Enfermería, hoy emisora Radio Ciudad del Mar, sirvió de sede para las actividades docentes del curso escolar 1981-1982, donde se incorpora un nuevo grupo de tercer año, uno de quinto y los internos. Se imparten por primera vez el cuarto y quinto año de la carrera. Ya estaban, en Cienfuegos, completas las áreas clínicas de la Carrera de Medicina, desde 3ro al 6to año.
En el curso 1983-1984, se inicia el internado, el 6to año de la carrera, para el grupo de estudiantes que iniciaron las Ciencias Clínicas en la Perla del Sur. El otorgamiento de las plazas incluyó: 15 internos rotatorios rurales; segundo contingente Manuel Pity Fajardo: 5 en Nicaragua, 5 en el Hospital de Aguada de Pasajeros, 3 en el Hospital de San Blas, 2 en el de Crucecitas, en 5 especialidades, por estar deficitarias o anémicas. Como se les llamó en ese momento, se otorgaron internados verticales: Anatomía Patológica, Ginecología, Anestesiología, Ciencias Básicas y Ortopedia, los estudiantes que eran alumnos ayudantes en especialidades quirúrgicas, hicieron su internado vertical en las mismas: Ortopedia, Oftalmología, Cirugía General, el resto de los estudiantes internado rotatorio. La graduación fue el día 12 de julio de 1984.
Travesuras:
Se produce el primer problema de indisciplina grupal serio, que motivó análisis sin medidas disciplinarias con repercusión. Se incorporó al alumnado un personaje que deambulaba por la ciudad, el cual ocupó un asiento en la primera fila, como un educando más, de la clase de Farmacología, con el único profesor de aquel entonces, el Dr. Senén Rodríguez, endocrinólogo, el cual mostró todo su enojo y fue la primera actividad suspendida por tal indisciplina. Nada, cosas de adolescentes inmaduros, que lo entendieron al pasar del tiempo. Todavía permanece en el anonimato él o los nombres del autor o autores de los hechos, sucedió como en Fuenteovejuna.
Primeros albergues:
Primer albergue curso 1980-1981, alumnos de tercer y sexto año, los estudiantes de los municipios dormían dentro del mismo hospital, en el cuarto piso, las salas 7A y 7B eran los alojamientos de varones y hembras respectivamente. Después se abrió en la sala 7B el servicio de Psiquiatría y se trasladaron las muchachas para la sala 8B, los médicos que vinieron de La Habana, del Plan Cinco Años, dormían en la sala 8A. El desayuno se subía a la sala, se almorzaba y comía en el comedor para los trabajadores del primer piso.
Por la mencionada epidemia de dengue de 1981, a finales del mes de junio de ese año, se trasladó el albergue de los estudiantes becados para el edificio de malecón. Allí había dos cocineras, Fé y Teresa, ¡qué decir!, casi trataban como a su familia a todos los estudiantes, profesores y trabajadores, traían de su casa condimentos y detalles culinarios para mejorar la calidad de los platos; si había algún alumno enfermo le hacían dieta diferenciada.
Se inicia el curso 1982-1983 en la misma sede, pero otro cambio de dormitorio, por remodelación capital del Hospital Pediátrico de Cienfuegos, se necesita el local para trasladar la cocina y algunas salas de dicho centro para este recinto, entonces se “inaugura”, el primer albergue de la Escuela de Medicina, que fue el que tiene la carpeta en el primer piso actualmente, ahí también radicaban las oficinas.
Fórum Científico Estudiantil:
Se realizó el I Fórum Científico Estudiantil, el 16 de mayo de 1981, se presentaron trabajos por salas, con temas como asma bronquial, hipertensión arterial, meningoencefalitis. Fueron premiaron dos trabajos: premio y mención. El profesor Espinosa y su equipo de alumnos, realizaron tres trabajos sobre asma bronquial, titulados: “Pacientes egresados por asma bronquial. Deficiencias encontradas”, fue el premio. La mención fue para el trabajo de meningoencefalitis de la sala 9A, con el Dr. Pedro Nieto y cols. Otros trabajos fueron: “Pacientes egresados por asma bronquial. Estudio epidemiológico”, “Pacientes egresados por asma bronquial y biorritmo”, “Hipertensión arterial: incidencia en pacientes egresados de julio a diciembre de 1980”, entre otros.
Las reuniones para revisar las historias clínicas, con el profesor Espinosa físicamente entre los estudiantes, vigilando que se hiciera todo con el mayor rigor y veracidad posible, eran después de las 12:00 am, en la madrugada, en el albergue de las hembras, que estaba en la sala 8B, casi que hasta la salida de los primeros rayos del sol, que le indicaban al investigador jefe, que estaba amaneciendo. Este tiene la capacidad de no ver las horas pasar, no sentir el cansancio, mucho menos el sueño, de ahí para el aula. En una ocasión, cuando casi estaba acabando el trabajo de recogida de datos, le traen al doctor una calculadora de regalo que sacaba el biorritmo: ¿qué pasó?, se le ocurrió brillantemente, estrenar su “juguetico”, haciendo otro trabajo con el mismo grupo de asmáticos, ¡más madrugadas en vela! No fueron en balde, el trabajo titulado “Egresados por asma bronquial, deficiencias más frecuentes encontradas en su estadía”, alcanzó el primer premio otorgado en un Fórum Científico Estudiantil en Cienfuegos.
Pero valió la pena el esfuerzo realizado, el profesor Espinosa preparó un cartel con los tres trabajos de los asmáticos, que presentó en el III Congreso Nacional de Medicina Interna y Primera Jornada Nacional de Cuidados Intensivos, en La Habana, el 27 de noviembre de 1981.
El II Fórum Científico Estudiantil se desarrolló los días 28/29 de mayo de 1982. Se presentó mayor número de trabajos, ya de todos los años de las áreas clínicas de la carrera. Uno de los trabajos que obtuvo premio se tituló “Estudio comparativo de las audiometrías en trabajadores expuestos al ruido” de los autores Bárbara T. Ríos Araujo y Juan José Navarro López, la tutora fue la Dra. Sara Hernández Malpica. Se expusieron tres trabajos sobre la historia de la medicina en Cienfuegos, uno de la época precolombina, otro en el período hasta 1958 y el tercero titulado “Historia de la medina en la provincia de Cienfuegos. Período revolucionario 1959-1982”. Otro trabajo “Seguimiento por consulta a pacientes egresados por dengue”.
El III Fórum Científico Estudiantil se desarrolló en junio1983, el día 10 de junio, por los alumnos del 5to año, presentaron una mesa redonda, que debió ser la primera de un fórum estudiantil, titulada “Las prostaglandinas”.
El IV Fórum Científico Estudiantil, se efectuó en mayo de 1984, los trabajos premiados en este evento científico, se presentaron en el VII Fórum Nacional de Estudiantes de Ciencias Médicas y Cultura Física, celebrado en la Ciudad de Camagüey, los días 12, 13, 14 de diciembre de 1984. Uno de los trabajos premiados participó como tema libre, titulado “Morbilidad en el niño menor de un año en el área rural de San Blas”.
Movimiento de alumnos ayudantes:
Se otorgaron las primeras ayudantías en todas las asignaturas que se impartían, desde el curso 1981-1982. Se les exigía a todos los alumnos ayudantes que debían presentar trabajos relacionados con la asignatura en el fórum científico.
Actividades extracurriculares:
La primera actividad por el día de la mujer, se celebró un fin de semana, en el que se iniciaba como campismo, que estaba en construcción, en Playa Girón, los días 7/8/9 de marzo de 1981, de viernes a domingo, pero el sábado estaba allá con los alumnos de tercero y sexto año de la carrera, la Dra. Elena de la Nuez, con su esposo y familia.
Con Felipe, en “su guagua”, que no dejaba que nadie la manejara, participaron como espectadores en un encuentro de béisbol en el estadio Augusto César Sandino, en Santa Clara. Parecía que llevaba a niños de círculos infantiles, por la preocupación y cuidados, así funcionaba aquel núcleo fundacional de la docencia médica en Cienfuegos.
La primera celebración por el día del Educador se realizó en el año 1980, en el Club Rubén Martínez Villena, en el hotel San Carlos. En diciembre de 1981 se celebró la segunda.
El primer chequeo de emulación de los tres centros de educación superior de la provincia, se realizó en la sede del Pedagógico. Un grupo de estudiantes, llegó en ambulancia y vestidos de verde, el profesor Espinosa repartió silbatos (de aquellos de lata) y ¡ a mandarlos a callar!.
La cultura:
Se realizó el primer festival cultural en 1981, se montó la obra de teatro ‘El velorio de Nino”, una adaptación o versión libre de Margarita Quintana y Bárbara Ríos sobre la obra de Onelio Jorge Cardoso, y se presentó no solo en el hospital sino también en la Casa de la Cultura de Cienfuegos y en la Universidad Carlos Rafael Rodríguez.
En la presentación de la Casa de la Cultura, un actor que no tenía vicio de fumar se puso tan nervioso, que se fumó durante la actuación un tabaco entero y terminó con mareos y vómitos, con lo cual casi termina de paciente. La experiencia fue suficiente, en siguientes presentaciones no encendió más el producto de la aromática hoja.
Para el segundo Festival Cultural, se contó con el asesoramiento de profesores de teatro, danza, música y se montó la segunda obra de teatro: “Entre socios”. Además de las presentaciones en Cienfuegos, se participó los días 15, 17 y 18 de marzo de 1982, en el teatro La Caridad, de Santa Clara, en el Festival Cultural del Instituto Superior de Ciencias Médicas de Villa Clara (ISCMVC), junto con un grupo de Danza y el dúo de Luis Manuel y Mayra, cantando la canción Yolanda, de Pablo Milanés.
CONCLUSIONES:
Con este artículo se pretende homenajear a los profesores, trabajadores y alumnos que iniciaron las Ciencias Clínicas de la Carrera de Medicina, en Cienfuegos, haciendo un recuento de cómo se desarrollaron las primeras actividades curriculares y extracurriculares, en lo que se llamó la Unidad Docente de Cienfuegos.
Si se sienten motivados por el recuerdo, si les llega y perciben la gratitud de los alumnos que siempre los recuerdan como a sus eternos profesores y paradigmas, se cumplió el objetivo. Muchas gracias a todos los que nos formaron como médicos cienfuegueros y cubanos.
