Introducción
Un elemento decisivo para desarrollar activamente el proceso pedagógico es la utilización de los medios audiovisuales. Es por ello, que es necesario a partir de su análisis, determinar qué contenidos permiten su empleo y por otra parte la eficiencia y efectividad con su utilización. De ahí que la evaluación sea un elemento esencial, ya sea en el debate didáctico o en las preocupaciones de la vida escolar. La educación es una práctica social y la evaluación uno de sus principales episodios.
Evaluar es valorar y su connotación pedagógica tiene peso en el comportamiento de todos los que participan. Desde el punto de vista técnico, es necesario repensar y recrear instrumentos idóneos y confiables para enriquecer el proceso pedagógico.
Es necesario hacer referencia a que la evaluación educativa no debe confundirse con la evaluación escolar, la primera se dirige a valorar la marcha del sistema educativo y la segunda a los resultados de la formación integral e individual de los estudiantes. Por otra parte, también la evaluación del aprendizaje como un campo de la evaluación educativa, permite considerar aspectos teóricos y metodológicos, que por su nivel de esencia son comunes y válidos para cualquier caso u objeto dentro de dicho campo. De ahí las reiteradas referencias que se harán en este trabajo, a la evaluación educativa en general al tratar la del aprendizaje, sin ignorar la especificidad de esta.
Al adentrarse en la evaluación escolar se puede definir, como aquella que se materializa en la escuela y se dirige a la formación integral de los escolares a partir de la relación que se establece entre el propio proceso y los resultados de dicha formación, lo que con conlleva de manera integral al desempeño escolar y que se manifiesta en lo cognitivo, afectivo, volitivo y actitudinal, así como se caracteriza por ser interdisciplinar, desarrolladora que diagnostica y estimula las potencialidades.
La evaluación escolar no debe ser un complemento del proceso pedagógico, sino que es parte del mismo como proceso continuo formativo. A través de la evaluación del proceso y los resultados, se puede determinar el grado de cercanía y el progreso tanto de la enseñanza como el aprendizaje. Sus resultados no deben ser utilizados para realizar comparaciones de territorios, escuelas y estudiantes, sino para el análisis pedagógico de los objetivos y contenidos curriculares y educativos más afectados, posibles causas y las recomendaciones necesarias.
En el análisis de la evaluación del aprendizaje de los estudiantes, dentro de la evaluación escolar, al centrarse en la primera década del siglo XXI, y tomando como punto de partida lo abordado con anterioridad, se sigue el criterio de que:
“Hoy, es necesario unir la Pedagogía y la Didáctica en un mismo corpus teórico, lo que representa el reto de enfrentar el desarrollo histórico de ambas desde una perspectiva diferente a la actual”. (Chávez, 2007, p.1)
Por otra parte, como se está abordando el aprendizaje se hace referencia a que “un lugar común entre los autores que estudian e investigan el tema de la evaluación del aprendizaje es que pocas veces se detienen a definir el concepto de aprendizaje del que parten, dando por sentado que el lector intuirá la concepción de aprendizaje que subyace en su postura. Pero esto no es un asunto menor, sobre todo si se considera que el aprendizaje es, precisamente, la materia prima de la evaluación, toda vez que los profesores, cuando evalúan a sus alumnos, no lo hacen en el vacío, sino que justo lo que valoran es su aprendizaje”. (Moreno, 2016, p. 38)
Las tecnologías de la información y las comunicaciones contribuyen a transformar el tratamiento de los contenidos en la escuela. Concebirla como una aplicación sistemática de los conocimientos científico-técnico, en el proceso pedagógico, responde al propósito más profundo a partir de una concepción diferente en dicho proceso, por lo que deben constituir un medio facilitador del aprendizaje y no el centro del proceso, pero a la vez con su empleo resulta imprescindible la evaluación del aprendizaje.
Los medios audiovisuales brindan al hombre la oportunidad de actividades totalmente nuevas. Ahora: ¿Cómo enfrentar estos desafíos en la escuela?, ¿Cómo utilizarlos para mejorar el proceso pedagógico. ¿Cómo evaluar el aprendizaje escolar con su utilización?
La respuesta está en la innovación, explotando su potencial para abrir nuevas perspectivas tanto para docentes como para estudiantes pero constituye una herramienta fundamental cuya influencia debe ser evaluada. Es el propósito de este trabajo ofrecer elementos teóricos y metodológicos en esta dirección desde los estudios sistemáticos y la experiencia pedagógica.
Desarrollo
Se considera que la evaluación del aprendizaje es un proceso sistemático y determina el desempeño, rendimiento o logro del estudiante pero a la vez y la eficiencia de los recursos que emplea el docente (enseñanza), a partir de los objetivos de formación que se esperan alcanzar. Todo esto permite tomar decisiones que acomoden los aprendizajes y perfeccionen el trabajo del docente.
La evaluación del aprendizaje de los alumnos tiene una función primordial dentro del proceso pedagógico, pues por medio de ella se retroalimenta el mismo. Conjuntamente con los conocimientos, las habilidades y los hábitos es necesario evaluar el nivel de desarrollo integral de la persona lidad que alcanza el estudiante. Ello no significa viciar la valoración y calificación del rendimiento con crite rios supuestamente educativos referidos, por ejemplo: a la asistencia, a la disciplina, entre otros, pero que nada tienen que ver con el desarrollo de las habilidades alcanzadas entre ellas, por citar algunas: explicar un hecho, o argumentar la solución de un problema.
La evaluación tiene la función de motor que impulsa el aprendizaje pues sin evaluar y regular los aciertos y errores, no habría progreso en el aprendizaje de los alumnos, ni acción efectiva de los docentes.
Ralph W. Tyler murió el 18 de febrero de 1994, tras siete décadas de aportaciones y servicios a la evaluación, a la investigación y a la educación en general. Unos meses antes, en abril de 1993, Pamela Perfumo, una estudiante graduada de la Universidad de Stanford, entrevistó a Tyler con el propósito de conocer su pensamiento acerca del desarrollo de la evaluación en aquel momento. Esta entrevista, destaca el pensamiento de Tyler al final de sus días donde manifestó lo siguiente:
“El propósito más importante en la evaluación de los alumnos es guiar su aprendizaje, esto es, ayudarles a que aprendan. Para ello es necesaria una evaluación comprensiva de todos los aspectos significativos de su rendimiento; no basta con asegurarse que hacen regularmente el trabajo diario”. (Escudero, 2003, p. 6)
En resumen, evaluar cuando lo evaluado es el aprendizaje escolar, depende en gran medida del sujeto del mismo, de la relación evaluado-evaluador, así como de la relación como estudiante-materia de enseñanza. Ahora, imaginar el proceso pedagógico sin evaluación, sería como transitar hacia un lugar determinado, pero sin preocuparse por analizar si se va por el camino adecuado.
Evaluar, no es más que aglutinar todas las evidencias posibles que se puedan encontrar a favor o en contra de cada una de las actividades que se están desarrollando dentro del proceso pedagógico.
Por otra parte, los medios audiovisuales son tan amplios que hacen difícil la elección de criterios para su clasificación, se puede tener en cuenta su esencia, el uso al que se destinan o los fines pedagógicos- didácticos que pretenden. No obstante, estos deben:
Despertar la atención y el interés del alumno.
Ayudar a la comprensión de un tema.
Motivar al alumno hacia nuevos contenidos.
Facilitar la apreciación de fenómenos, hechos, sucesos o procesos.
En la actualidad las instituciones educativas manifiestan permanentes transformaciones para llevar a niveles superiores los resultados de la labor educativa y en particular el aprendizaje. Estas abarcan cambios desde la concepción escolar, la instrumentación del trabajo metodológico, la superación del personal docente y por supuesto: el uso de los medios audiovisuales y la evaluación del aprendizaje.
Ahora, ¿cuáles son las funciones que se le atribuyen a los medios audiovisuales en el contexto del proceso pedagógico? Un breve análisis al respecto considera las siguientes
Función Informativa: Permite el estudio de la realidad a que se hace referencia y la describe lo más objetivamente posible.
Función Motivadora: Pretender suscitar emociones y afectos, estimular el estudio y la búsqueda de nuevos conocimientos.
Función Lúdica: Pretende el goce del aprendizaje mediante el juego, fundamentalmente en los primeros grados.
Función Investigadora: Contribuye a incentivar la necesidad de encontrar nuevas alternativas para el conocimiento científico.
Función Evaluativa: Posibilita utilizarlos para el control de los aprendizajes logrados por los estudiantes durante todo el proceso educativo.
Para elevar la calidad del proceso pedagógico hoy se cuenta con los medios audiovisuales: tele clases, vídeo clases, películas, animaciones, multimedia, entre otros, donde los estudiantes reciben información del contenido que se les imparte y el profesor dirige y conduce en el aula la actividad docente con su implementación. Estos constituyen un componente importante en la introducción y sistematización de los contenidos, pero un factor determinante a considerar es el diseño de la evaluación del aprendizaje que considere su empleo.
Por último, para referirse al futuro de la evaluación es importante señalar en este apartado lo siguiente:
“Es posible considerar dos futuros posibles: uno que prolongaría los aspectos negativos actualmente presentes en el uso de pruebas estandarizadas, y otro que, además de aprovechar el potencial de la tecnología, en particular de la informática, enriquecería la visión de los alcances y límites de las evaluaciones en gran escala, viéndolas no como sustituto del maestro, sino como complemento de la tarea de unos docentes profesionales, cuyo trabajo es irremplazable tanto para promover el desarrollo cognitivo e integral de los alumnos como para evaluar de manera integral también su desempeño, en especial con un enfoque formativo”. (Martínez Rizo, 2013, p. 4)
Propuesta de metodología de evaluación del aprendizaje en el proceso pedagógico, con el empleo de medios audiovisuales
Su fundamentación parte de la relación entre las diferentes áreas del conocimiento, que se materializan a través de las asignaturas del currículum (¿Qué evaluar?), y además en su articulación también se toman como referencia ejes transversales que penetran en las mismas. Estos últimos, constituyen temáticas que completan o perfeccionan los programas y que pueden encontrarse en una gran variedad de medios audiovisuales. Estos ejes son: educación ambiental, educación nutricional, educación energética, educación sexual, entre otros. Obsérvese en el siguiente esquema su relación:
Por citar un ejemplo, el estudio de las Disciplinas que conforman las Ciencias Naturales (Biología, Química, Geografía), en el bachillerato, vincula los conocimientos que son objeto de estudio de cada una con aspectos básicos del desarrollo socioeconómico, industrial, de la salud, del medio ambiente, entre otros y van desde estudios a nivel internacional como en lo particular del país, por lo que es muy recomendable para ilustra todo esto, utilizar, videos como medios de enseñanza audiovisual pero tomando en consideración potencialidades e indicadores que permitan evaluar el proceso y los resultados de aprendizaje.
Por otra parte, la Metodología de evaluación tiene sus etapas con las acciones correspondientes (¿Cómo evaluar?). Las mismas se reflejan a continuación:
PRIMERA ETAPA. Preparación y base orientadora.
SEGUNDA ETAPA. Implementación de los medios audiovisuales.
TERCERA ETAPA. Control y evaluación.
Los indicadores a evaluar en cada una de las etapas se reflejan a continuación:
Una breve explicación de los componentes de la metodología de evaluación del aprendizaje se desarrolla a continuación:
Etapas y acciones (¿Qué se debe hacer?): Conforma la secuencia lógica de actuación para el docente y el alumno considerando la nueva concepción de la clase y la dinámica de evaluación del aprendizaje con el empleo de medios audiovisuales en el alumno durante el proceso de aprendizaje.
Indicadores de aprendizaje (¿Qué evaluar?): Son aquellos que posibilitan niveles de información en el acto de aprendizaje tanto para el docente como para el alumno.
Procedimientos evaluativos (¿Cómo evaluar?): Constituyen las vías que permiten la obtención de la información para emitir criterios valorativos.
Escalas valorativas (¿Cómo determinar criterios evaluativos?): Determinan niveles de calidad que permite ubicar el acto y los resultados de aprendizaje.
Aseguramiento (¿Bajo qué condiciones?): Factores objetivos y subjetivos a tener en cuenta en la evaluación del aprendizaje.
Obsérvese a continuación en el siguiente cuadro la relación de todos los componentes de la metodología que se presenta:
Todo lo anteriormente expuesto reflejan la obtención de información, desde el punto de vista cuantitativo y cualitativo, sobre la generalidad y la individualidad de los alumnos y acerca del cumplimiento de los objetivos, para así determinar si es necesario introducir correcciones en el sistema de clases, variar el método, profundizar en las explicaciones, plantear nuevas tareas o ejercicios de consolidación, estructurar pequeños grupos para el trabajo correctivo o de atención individual a algunos alumnos.
Conclusiones
Al evaluar el aprendizaje de los estudiantes con el empleo de medios audiovisuales en el proceso pedagógico, donde se realizan transformaciones curriculares de envergadura, se necesita de juicios valorativos permanentes del proceso y en particular de los resultados que se obtienen.
La metodología propuesta permite evaluar el aprendizaje de los estudiantes a partir del empleo de medios audiovisuales, lo que fortalece el análisis conjunto de la utilización de esto medios con el acto de aprender y los resultados alcanzados.