Introducción
En la naturaleza, las arañas reclusas marrones viven en exteriores, debajo de piedras, troncos, montones de leña, y escombros. La araña también es adaptada a vivir con los humanos.1
La araña de rincón, araña de los rincones o araña violinista (Loxosceles laeta) es una especie de araña araneomorfa de la familia Sicariidae (antes de la familia Loxoscelidae) que suele esconderse en grietas y rincones de difícil acceso, de ahí viene su nombre. Nativa de América del Sur, es común en Chile y se distribuye también en Perú, Ecuador, Argentina, Uruguay, y el sur y este de Brasil. Es considerada como la más peligrosa de las arañas del género Loxosceles ya que su mordedura produce frecuentemente reacciones sistémicas severas e incluso la muerte.
La picadura inicial no causa nada dolor. Muchas veces la víctima es inconsciente de la picadura hasta 3 u 8 horas más tarde cuando el sitio de la picadura se pone rojo, hinchado y doloroso. La mayor cantidad de picaduras de reclusas marrones quedan localizadas, cicatrizando en tres semanas sin complicaciones serias o intervención médica.1,2
En otros casos, la víctima puede desarrollar una lesión necrótica, que aparece como un parche azulado y hundido con bordes irregulares, un centro palo con enrojecimiento alrededor del perímetro. Es común una ampolla central. Como el veneno destruye los tejidos, la herida puede ensanchar varios centímetros sobre un período de días o semanas. La llaga necrótica puede durar por varios meses, dejando una cicatriz profunda.3
Las picaduras en las fases tempranas raramente pueden producir una reacción sistemática, acompañada por fiebre, resfriados, mareo, erupciones y vómitos. Reacciones severas al veneno son más comunes en los niños, adultos mayores y pacientes con antecedentes de salud deteriorada.4
El cuadro anafiláctico producido por la toxina de la picadura se llama loxoscelismo.
Loxoscelismo cutáneo: La evolución es a una úlcera necrótica o edematosa, que se define en las primeras 24 horas del cuadro y tiene una escasa repercusión sistémica, con fiebre y compromiso del estado general. Al fijarse en la úlcera, el signo evolutivo de lesión de color rojo-blanco-azul es típica del loxoscelismo.5
El objetivo de este artículo, es informar el caso por la poca información que se tiene de este cuadro y además hacer una revisión de su frecuencia y sus características.
Presentación del caso
Paciente de 19 años de edad con gestación de 32.4 semanas que acude a la unidad básica de salud refiriendo que hace más o menos 3 días estaba acostada en una hamaca y de manera súbita comenzó a sentir escalofríos con escozor y dolor fuerte en la cara interna del muslo derecho, pasadas unas 4 horas comenzó a presentar dolor intenso con hinchazón y endurecimiento en dicha región (Figura 1), automedicándose con remedios naturales y antinflamatorios. Dicha lesión con el transcurso de los días se convirtió en una úlcera dolorosa por lo que la misma decide acudir a este centro de salud.
La paciente niega haber visto algún tipo de insecto o animal que le pudo haber ocasionado la lesión, así como haber tenido contacto con otras sustancias o plantas que existen en el área que tienen propiedades tóxicas.
Examen físico:
Mucosas: normocoloreadas y húmedas.
Aparato respiratorio: murmullo vesicular normal, no estertores FR 16.
ACV: ruidos cardíacos rítmicos, no soplos FC 88 TA 110-70.
Examen físico: abdomen obstétrico que se corresponde con gestación de 32.4 semanas
Piel: a nivel de la cara lateral interna del muslo derecho lesión en parche azulado y hundido con bordes irregulares y un centro pardo con enrojecimiento alrededor del perímetro con una ampolla central
No realizamos complementarios al no disponer de ese servicio
Se inicia antibioticoterapia con azitromicina de 500 mg 1 tableta diaria por 6 días, antinflamatorios nimesulida tab 100 mg 1 tableta cada 12 horas, antihistamínicos dexclorferinamina tableta de 4 mg 1 tableta cada 8 horas y tratamiento local con fomentos fríos, se indicó ingreso domiciliario.
Al tercer día de tratamiento visitamos a la gestante y encontramos que sus parámetros vitales estaban dentro de límites normales FR 20 Fc 78 Ta 11-80, pero al examen físico de la piel se encontró que la lesión se había convertido en una úlcera necrótica de bordes sucios de aproximadamente 20 cm, el estado general de la paciente era bueno se encontraba afebril, pero tratándose de una gestante se decide regular su ingreso para el hospital regional el cual fue denegado por no existir cama para estos tipos de casos.
Al día 5 siguiente la gestante regresa a consulta refiriendo que su hermana menor comenzó a presentar un cuadro similar por lo que se decidió visitar el domicilio con los agentes de endemia del municipio encontrándose una colonia de araña marrón (Figura 2) en el interior del baño de la casa, también se encontró la existencia de exoesqueletos, dejados por la muda de la araña detrás de un cuadro.
Se decide suspender la antibioticoterapia, se continua con el antihistamínico, cuidados locales de la úlcera recomendando lavado con agua y jabón y dejar evolucionar la misma, no se administra antídoto por haber pasado más de 6 horas de la lesión se decide seguimiento semanal de la gestante y luego de tres semanas se desprendió quedando una úlcera limpia (Figura 3), de más o menos 25 cm de diámetro, para luego terminar en una cicatriz deprimida. La paciente no presentó complicación alguna.
Discusión del caso
La araña de rincón es principalmente nocturna, viéndose incrementada su actividad en noches veraniegas calurosas y con luna. Si bien es activa durante todo el año, su vitalidad disminuye con la llegada del frío. Por ello sus lugares predilectos durante el día son los rincones oscuros, de los que sale para cazar. Esta especie de araña se esconde en lugares polvorientos y poco aseados como por ejemplo, bajo los tanques de gas, detrás de cuadros, cornisas, librerías o en los armarios, especialmente con ropa.6
Una forma de detectar su presencia es gracias a la existencia de exoesqueletos, dejados por la muda de la araña en estos sitios. Usualmente, la picadura inicial no causa nada dolor. Muchas veces la víctima es inconsciente de la picadura hasta 3 u 8 horas más tarde cuando el sitio de la picadura se pone rojo, hinchado y doloroso. La mayoridad de picaduras de reclusas marrones queda localizada, cicatrizando en 3 semanas sin complicaciones serias o intervención medical.7
Personas que sufren de una picadura de la reclusa marrón deben aplicar hielo al herido, elevar el área afectado y pedir la atención medical inmediatamente.8
Los síntomas pueden incluir: escalofríos, picazón, sensación general de malestar o molestia, fiebre, náuseas, coloración rojiza o púrpura en un círculo alrededor de la picadura, sudoración, una llaga grande (úlcera) en la zona de la picadura.
La evolución es a una úlcera necrótica o edematosa, que se define en las primeras 24 horas del cuadro y tiene una escasa repercusión sistémica, con fiebre y compromiso del estado general. Al fijarse en la úlcera, el signo evolutivo de lesión de color rojo-blanco-azul es típica del loxoscelismo.9
La complicación más seria del loxoscelismo es el shock anafiláctico, con un 25 % de mortalidad, se da entre el 15 y el 30 % de los casos, se presenta hematuria, fiebre, anemia hemolítica, leucocitosis, un recuento de plaquetas variable y alteración de la función renal, con hipercalemia y creatinina plasmática elevadas.5
Pronóstico: En la mayoría de los casos es bueno. El tiempo necesario para la cicatrización de la úlcera por segunda intención está relacionado con la pérdida de tejidos, pudiendo demorar meses para la cicatrización completa en los casos de lesiones extensas y profundas.7
Prevención
La mejor prevención es el aseo riguroso y profundo de aquellas zonas en que regularmente no se consideren como rutina de aseamiento, es recomendable el uso de guantes livianos y de aspiradoras de buena potencia. Poner especial atención detrás de los cuadros, esquinas superiores, elementos de pared, aquellas camas con cajonera y zócalo al suelo, esquinas de armarios y especialmente en los muebles de cocina en el entrezócalo o en la parte superior fuera de la vista. Si su vivienda además cuenta con enredaderas al muro, bambúes, cúmulos de objetos o leña acumulada desde tiempo es altamente probable la existencia de individuos.2
En especial, se recomienda la inspección de la ropa colgada por algún tiempo, revisar principalmente las bastas y bolsillos. Sacudir enérgicamente la ropa a colocarse es una buena medida.
La forma más clásica de eliminar a estas arañas es simplemente aplastarla con el calzado. La forma más segura es utilizar algún insecticida potente para eliminar a estos arácnidos.6
Consideraciones finales
Las picaduras serias forman una úlcera necrotizante que destruye el tejido suave y puede llevar meses y con muy poca frecuencia años en sanarse, dejando cicatrices profundas. Los mordiscos pueden llevar hasta siete horas para causar daño visible; los efectos sistémicos más serios pueden encontrarse antes de este momento, como el veneno de cualquier tipo se extiende por todas partes del cuerpo en minutos.