Introducción
En las dos últimas décadas se ha incrementado la incidencia de infecciones causadas por enterobacterias multirresistentes. Los factores de riesgo de adquisición de estas infecciones se han detallado en la literatura, y el factor clave es la administración de antimicrobianos, sobre todo, de amplio espectro, entre los que destacan los carbapenémicos.1,2
Los miembros de la familia Enterobacteriaceae principalmente Klebsiella pneumoniae, Escherichia coli y Enterobacter spp. son agentes etiológicos de procesos infecciosos comunitarios e intrahospitalarios graves, entre los que se pueden mencionar bacteriemias, infección del tracto urinario, del sitio quirúrgico, intraabdominales, neumonías y de catéteres vasculares, entre otros.3,4,5
Las enterobacterias representan un desafío para las ciencias médicas, por su rápida adquisición y difusión de resistencia a los antimicrobianos. El mecanismo de resistencia más común a este grupo bacteriano es la síntesis de β-lactamasas de tipo AmpC, de espectro extendido (BLEE) y carbapenemasas.5,6
A nivel mundial, las enterobacterias son responsables del 50 % de las infecciones en los hospitales.7 Las bacterias multirresistentes causan cerca del 60 % de todas las infecciones asociadas a la asistencia sanitaria en los Estados Unidos de América.8 En Europa y China se incrementó en 71 % y 23 %, respectivamente, la presencia de BLEE en aislados clínicos de E. coli.1,9 En Perú, las enterobacterias productoras de BLEE causaron el 50,6 % de las bacteriemias. El 55,8 % corresponde a E. coli y el 32,6 % a K. pneumoniae.10
En Cuba, estudios realizados en hospitales clínico-quirúrgicos según el mapa microbiano, las enterobacterias prevalecen entre los microorganismos hospitalarios.11,12 En estudios de vigilancia nacional (2014-2016) y (2017-2018) en aislados bacterianos de E. coli extraintestinal se detectó la presencia de BLEE en el 57 % y 43,7 %, respectivamente.13,14 En otra investigación en el Hospital Salvador Allende de La Habana la prevalencia de BLEE en K. pneumoniae y E. coli fue del 50 % y 46 %, respectivamente.15
Por lo anteriormente expuesto, resulta imprescindible la vigilancia a nivel institucional de los perfiles de resistencia en enterobacterias. Por ello, el objetivo del presente estudio fue describir la variación de la susceptibilidad a antimicrobianos en aislados de K. pneumoniae y E. coli obtenidos de muestras clínicas de pacientes hospitalizados en Cuba entre 2018 y 2021 e identificar la frecuencia de aislamientos multirresistentes.
Métodos
Se realizó un estudio observacional, descriptivo, retrospectivo y de corte longitudinal realizado entre el 1 de enero de 2018 y el 31 de diciembre de 2021.
Se estudiaron 220 aislados de enterobacterias (111 de K. pneumoniae y 109 de E. coli) obtenidos a partir de muestras clínicas (sangre, catéteres vasculares, lesiones de piel, secreciones traqueobronquiales y de herida quirúrgica) de pacientes adultos, mayores de 18 años de edad, hospitalizados durante el periodo de estudio en diferentes servicios (atención al grave, Nefrología, Cirugía, Angiología y Medicina Interna y Ortopedia) del Hospital Clínico-Quirúrgico Docente Aleida Fernández Chardiet, ubicado en el municipio de Güines, provincia Mayabeque, Cuba.
La recolección de las muestras, la obtención de los aislados e identificación de las bacterias (género y especie) se realizaron siguiendo métodos convencionales, según las normas y procedimientos para el diagnóstico microbiológico.16
Método de determinación de sensibilidad a los antimicrobianos probados por difusión
La sensibilidad a los antimicrobianos se determinó mediante el método de Bauer-Kirby, siguiendo las sugerencias del Clinical Laboratory Standards Institute (CLSI, por sus siglas en inglés).17 La lectura e interpretación de los halo de inhibición se realizó según los criterios definidos por el CLSI.
Los antimicrobianos incluidos en el estudio fueron amoxicilina/ácido clavulánico (AUG) 20/10 μg, ampicilina/sulbactam (AMS) 10/10 μg, cefotaxima (CTX) 30 μg, ceftazidima (CAZ) 30 μg, ceftriaxona (CRO) 30 μg, cefepima (FEP) 30 μg, aztreonam (ATM) 30 μg, amikacina (AK) 30 μg, cloranfenicol (C) y meropenem (MRP) 10 μg.
Categorías de interpretación de las pruebas de sensibilidad a los antimicrobianos: los aislados se clasificaron en dos categorías de interpretación: sensible y resistente. En tanto, la multirresistencia se definió como resistencia a, al menos, uno de tres o más familias o grupos de antimicrobianos.18
Los datos obtenidos se ingresaron en una base de datos creada en Microsoft Excel 2010. Se trabajó con valores absolutos. Se calculó el porcentaje para mostrar el peso de la sensibilidad y de la resistencia a los antimicrobianos en cada año. A la variable resistencia se le calculó la tendencia en el tiempo para mostrar si esta resistencia se incrementaba o disminuía con el transcurso de los años, y el porciento diferencial se utilizó para cuantificar la diferencia, en forma de porcentaje, entre los años 2018 y 2021, que indicó en qué porciento ocurrió la variación de la resistencia de los antibióticos en el año 2021 en relación con el 2018. Se aplicó la prueba de significación de ji al cuadrado (para variables cualitativas) con un 95 % de confianza (significación cuando p ≥ 0,005) para los años 2018 y 2021. Como la muestra era pequeña, siempre que estuvo disponible se utilizó la significación de la prueba exacta de Fisher.
Para calcular la tendencia en el tiempo se utilizó la pendiente de la recta de mejor ajuste. El cálculo de la pendiente, en este caso, tiene como objetivo identificar si los datos tienden a crecer o decrecer en el tiempo, tengan o no esos datos un comportamiento lineal.
La diferencia porcentual se calculó teniendo en cuenta la diferencia entre el valor del último (V2) y el primero (V1), dividido por el valor del primer año (V1) y multiplicado por cien.
Se contó con la autorización del Comité de Investigación y Ética del Hospital Clínico-Quirúrgico Docente Aleida Fernández Chardiet. Se siguió en todo momento los principios éticos para las investigaciones médicas en seres humanos establecidos por la Declaración de Helsinki,19 protegiendo el anonimato de los datos de los participantes. No se requirió consentimiento informado debido a que solo se analizaron aislados.
Resultados
De los 220 aislados analizados durante el periodo de estudio, 111 eran de K. pneumoniae (50,45 %) y 109 de E. coli (49,55 %).
En lo que respecta a los aislados de K. pneumoniae, durante los 4 años de estudio, la resistencia mostró tendencia a crecer en el tiempo, para todos los antimicrobianos probados excepto para amoxicilina/ácido clavulánico que mostró una tendencia a decrecer de -3,34. La diferencia porcentual de la resistencia entre el año 2021 en relación con el 2018 fue mayor para meropenem, cloranfenicol y amikacina. Aun así, los datos aportaron evidencias que mostraron significación estadística para los antibióticos cefepima, aztreonam y meropenem (p ≤ 0,05) (Tabla 1).
ATB |
2018 N = 35 |
2019 N = 30 |
2020 N = 28 |
2021 N = 18 |
Tendencia* | % Diferencial** | Significación*** | |||||
---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|
Sensible n (%) |
Resistente n (%) |
Sensible n (%) |
Resistente n (%) |
Sensible n (%) |
Resistente n (%) |
Sensible n (%) |
Resistente n (%) |
x2 (1 g/) | ||||
CRO | 11 (31,4) | 24 (68,6) | 3 (10,0) | 27 (90,0) | 2 (7,1) | 26 (92,9) | 2 (11,1) | 16 (88,9) | 6,38 | 29,6 | 2,6506 | 0,1771 |
CTX | 13 (37,1) | 22 (62,9) | 4 (13,3) | 26 (86,7) | 1 (3,6) | 27 (96,4) | 2 (11,1) | 16 (88,9) | 8,77 | 41,3 | 3,9696 | 0,0585 |
CAZ | 13 (37,1) | 22 (62,9) | 6 (20,0) | 24 (80,0) | 1 (3,6) | 27 (96,4) | 2 (11,1) | 16 (88,9) | 9,44 | 41,3 | 3,9696 | 0,0585 |
FEP | 16 (45,7) | 19 (54,3) | 3 (10,0) | 27 (90,0) | 2 (7,1) | 26 (92,9) | 2 (11,1) | 16 (88,9) | 10,67 | 63,7 | 6,3461 | |
ATM | 16 (45,7) | 19 (54,3) | 9 (30,0) | 21 (70,0) | 1 (3,6) | 27 (96,4) | 2 (11,1) | 16 (88,9) | 13,02 | 63,7 | 6,3461 | |
MRP | 21 (60,0) | 14 (40,0) | 16 (53,3) | 14 (46,7) | 5 (17,9) | 23 (82,1) | 3 (16,7) | 15 (83,3) | 16,53 | 108,3 | 9,0085 | |
AMS | 4 (11,4) | 31 (88,6) | 2 (6,7) | 28 (93,3) | 2 (7,1) | 26 (92,9) | 2 (11,1) | 16 (88,9) | 0,05 | 0,3 | 0,0012 | 1,0000 |
AUG | 2 (5,7) | 33 (94,3) | 2 (6,7) | 28 (93,3) | 2 (7,1) | 26 (92,9) | 3 (16,7) | 15 (83,3) | - 3,34 | -11,7 | 1,6689 | 1,0000 |
C | 19 (54,3) | 16 (45,7) | 15 (50,0) | 15 (50,0) | 4 (14,3) | 24 (85,7) | 4 (22,2) | 14 (77,8) | 13,20 | 70,2 | 1,6689 | 0,3226 |
AK | 19 (54,3) | 16 (45,7) | 19 (63,3) | 11 (36,7) | 1 (3,6) | 27 (96,4) | 4 (22,2) | 14 (77,8) | 15,60 | 70,2 | 1,6689 | 0,3226 |
Nota: *Tendencia: pendiente de la recta de mejor ajuste para los cuatro puntos. Se estimó para la resistencia en todos los años.
**El porciento diferencial se calculó para la resistencia entre los años 2021 y 2018.
***La estimación de la significación (x2) se hizo para los años 2018 y 2021.
****Prueba exacta de Fisher.
Leyenda: ATB: antimicrobianos; CRO: ceftriaxona; CTX: cefotaxima; CAZ: ceftazidima; FEP: cefepima; ATM: aztreonam; MRP: meropenem; AMS: ampicilina/sulbactam; AUG: amoxicilina/ácido clavulánico; C: cloranfenicol; AK: amikacina.
Fuente: Libro de trabajo, Laboratorio de Microbiología.
En cuanto a los aislados de E. coli, la resistencia mostró tendencia a decrecer en el transcurso de los cuatro años del estudio en ocho de los antimicrobianos investigados; el cloranfenicol y la amikacina evidenciaron una tendencia al incremento de 3,65 y 4,83, respectivamente. La diferencia porcentual entre los años extremos del estudio en 9 antimicrobianos mostró valores inferiores al 50,0 %. Los datos aportan elementos para plantear la presencia de significación estadística (p ≤ 0,05) para cefotaxima y ampicilina/sulbactam (Tabla 2).
ATB |
2018 N = 36 |
2019 N = 27 |
2020 N = 20 |
2021 N = 26 |
Tendencia* | % Diferencial** | Significación *** | |||||
---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|
Sensible n (%) |
Resistente n (%) |
Sensible n (%) |
Resistente n (%) |
Sensible n (%) |
Resistente n (%) |
Sensible n (%) |
Resistente n (%) |
x2 (1 g/) | ||||
CRO | 10 (27,8) | 26 (72,2) | 4 (14,8) | 23 (85,2) | 9 (45,0) | 11 (55,0) | 13 (50,0) | 13 (50,0) | -9,69 | -30,8 | 3,1480 | 0,0643 |
CTX | 8 (22,2) | 28 (77,8) | 7 (25,9) | 20 (74,1) | 8 (40,0) | 12 (60,0) | 13 (50,0) | 13 (50,0) | -9,74 | -35,7 | 5,2007 | 0 ,0224 |
CAZ | 8 (22,2) | 28 (77,8) | 4 (14,8) | 23 (85,2) | 10 (50,0) | 10 (50,0) | 11 (42,3) | 15 (57,7) | -9,54 | -25,8 | 2,8656 | 0,0791 |
FEP | 14 (38,9) | 22 (61,1) | 4 (14,8) | 23 (85,2) | 10 (50,0) | 10 (50,0) | 14 (53,8) | 12 (46,2) | -8,01 | -24,5 | 1,3686 | 0,3046 |
ATM | 13 (36,1) | 23 (63,9) | 7 (25,9) | 20 (74,1) | 10 (50,0) | 10 (50,0) | 13 (50,0) | 13 (50,0) | -6,57 | -21,7 | 1,1960 | 0,2024 |
MRP | 25 (69,4) | 11 (30,6) | 18 (66,7) | 9 (33,3) | 18 (90,0) | 2 (10,0) | 22(84,6) | 4 (15,4) | -6,88 | -49,7 | 1,8945 | 0,1407 |
AMS | 5 (13,9) | 31 (86,1) | 0 (0,0) | 27 (100) | 10 (50,0) | 10 (50,0) | 13 (50,0) | 13 (50,0) | -15,83 | -41,9 | 9,5549 | |
AUG | 11 (30,6) | 25 (69,4) | 3 (11,1) | 24 (88,9) | 7 (35,0) | 13 (65,0) | 7 (26,9) | 19 (73,1) | -1,30 | 5,20 | 0,0967 | 0,4917 |
C | 29 (80,6) | 7 (19,4) | 20 (74,1) | 7 (25,9) | 12 (60,0) | 8 (40,0) | 19 (73,1) | 7 (26,9) | 38,5 | 0,4830 | 0,3469 | |
AK | 29 (80,6) | 7 (19,4) | 21 (77,8) | 6 (22,2) | 15(75,0) | 5 (25,0) | 17 (65,4) | 9 (34,6) | 78,0 | 1,8147 | 0,1463 |
Nota: *Tendencia: pendiente de la recta de mejor ajuste para los cuatro puntos. Se estimó para la resistencia en todos los años.
**El porciento diferencial se calculó para la resistencia entre los años 2021 y 2018.
***La estimación de la significación (x2) se hizo los años 2018 y 2021.
****Prueba exacta de Fisher.
Leyenda: ATB: antibióticos; CRO: ceftriaxona; CTX: cefotaxima; CAZ: ceftazidima; FEP: cefepima; ATM: aztreonam; MRP: meropenem; AMS: ampicilina/sulbactam; AUG: amoxicilina/ácido clavulánico; C: cloranfenicol; AK: amikacina.
Fuente: Libro de trabajo. Laboratorio de Microbiología.
Además, también se observó que la multirresistencia fue predominante en ambos tipos de bacterias: 84,60 % aislados de K. pneumoniae y 74,30 % de E. coli fueron multirresistentes (Tabla 3).
Años | ||||
---|---|---|---|---|
Aislados no MR Frecuencia (%) |
Aislados MR Frecuencia (%) |
Aislados no MR Frecuencia (%) |
Aislados MR Frecuencia (%) |
|
2018 | 9 (8,10) | 26 (23,43) | 6 (5,50) | 30 (27,63) |
2019 | 5 (4,50) | 25 (22,53) | 4 (3,66) | 23 (21,11) |
2020 | 1 (0,90) | 27 (24,33) | 6 (5,50) | 14 (12,83) |
2021 | 2 (1,80) | 16 (14,41) | 12 (11,00) | 14 (12,83) |
Total | 17 (15,30) | 94 (84,60) | 28 (25,60) | 81 (74,30) |
Leyenda: No MR: no multirresistentes; MR: multirresistentes.
Fuente: Libro de trabajo, Laboratorio de Microbiología.
Discusión
Debido al uso constante de los antimicrobianos, es frecuente encontrar en los hospitales microorganismos multirresistentes. Esta problemática mundial tiene mayor connotación en hospitales clínico-quirúrgicos, y aún más en las unidades de atención al grave, donde es frecuente la estadía prolongada, la realización de procedimientos invasivos y el uso de antimicrobianos de amplio espectro; otros factores que inciden son los relacionados con el huésped, como la inmunosupresión y la presencia de comorbilidades y no se puede dejar de mencionar a nivel bacteriano la transferencia horizontal de genes de resistencias.1,3,4,5) Para abordar este fenómeno se necesita un enfoque multidisciplinario y el cumplimiento de los Programas de Optimización de uso de Antimicrobianos (PROA).10,11,12,13,14
En el presente estudio, la resistencia de los aislados de K. pneumoniae a las cefalosporinas, mostró una tendencia a crecer en los cuatro año de la investigación, valores que, aunque ligeramente inferiores, son similares a la prevalencia de resistencia a la ceftriaxona, cefotaxima, ceftazidima y cefepima reportada por Azim y otros,20) en un análisis de 23 aislados de K. pneumoniae obtenidos de muestras clínicas de pacientes hospitalizados en Arabia Saudita (100 %), y por Tekeli y otros21 en 10 aislados de pacientes hospitalizados en Turquía (100 %). Otros estudios de caracterización de aislados intrahospitalarios de K. pneumoniae realizados en Cuba han revelado altos porcentajes de resistencia a las cefalosporinas (100 %),15 (48,00-52,23 %)22 y (38,56-58,87 %),23 respectivamente. Una de las posibles causas de los altos niveles de resistencia a las cefalosporinas en estos aislados puede ser el empleo extensivo de cefalosporinas en los hospitales, en especial las de tercera generación, lo cual genera una presión selectiva que favorece la aparición de mutantes productoras de β-lactamasas que actúan sobre todo en los antibióticos β-lactámicos, lo que representa un problema terapéutico por el perfil de multirresistencia que expresan.
Otro hallazgo importante es el considerable aumento en el número de aislados de K. pneumoniae resistentes a amikacina entre 2018 y 2021. Este hallazgo difiere de lo reportado por varios autores en Cuba, Arabia Saudita y México, quienes han documentado bajos niveles de resistencia (21,00 %),22 (8,70 %)20 y (20,00 %), respectivamente.24 La alta prevalencia de aislados de K. pneumoniae resistentes a amikacina encontrada en el presente estudio pudiera estar relacionada con que este antimicrobiano se usa en el tratamiento de primera línea de varios procesos infecciosos (respiratorios, urinarios e intraabdominales) en el hospital en que fue realizado.
Además, la proporción de aislados de K. pneumoniae resistentes al meropenem también aumentó considerablemente entre 2018 y 2021; de hecho, la alta tasa encontrada en 2020 y 2021 concuerda parcialmente con las tasas de resistencia al meropenem descritas en Turquía por Tekeli y otros (100 %)21 y en Egipto por Khairy y otros (57 %)25 en un estudio de 250 aislados de esta bacteria obtenidos de muestras de infecciones intrahospitalarias. No obstante, las altas tasas de resistencia a este antimicrobiano observadas en el periodo de estudio, en particular en el 2020 y 2021, difieren de lo reportado por varios estudios realizados en Cuba y México (1,00 % y 20 %, respectivamente).15,22,23,24) Los aislados de K. pneumoniae resistentes al meropenem limitan las opciones terapéuticas en pacientes con sepsis graves por este microorganismo.
La alta frecuencia de aislados de K. pneumoniae resistentes a varios antimicrobianos evidenciada en los cuatro años analizados es un fenómeno preocupante, que justifica intervenciones urgentes para su control, pues dicha resistencia limita la eficacia de la terapia empírica. De igual forma, estos datos hacen evidente la variación del patrón de la resistencia de esta bacteria a antimicrobianos de uso institucional en Cuba, y subraya la necesidad de realizar una vigilancia clínica, epidemiológica y microbiológica permanente en las instituciones hospitalarias del país.
La multirresistencia a los antimicrobianos es un asunto de interés en salud pública.26,27,28 En este sentido, el 84,60 % de los aislados de K. pneumoniae fueron multirresistentes, una prevalencia que se encuentra entre el 74,00-92,10 % reportado por Espinoza-Chávez y otros28 en un estudio realizado en Quito en 279 muestras (82 de K. pneumoniae) y por Suárez-Trueba y otros23 en un estudio de 76 aislados de K. pneumoniae obtenidos en pacientes de un hospital clínico-quirúrgico de Cuba, respectivamente. En la práctica clínica, las infecciones por bacterias multirresistentes se asocian con estadías hospitalarias más largas, mayor uso de antimicrobianos, recursos sanitarios, peor pronóstico y mayor mortalidad.7
La resistencia de E. coli a las cefalosporinas mostró tendencia a decrecer en el transcurso de los cuatro años del estudio, hallazgo similar al de Castro-Jara y otros,26 quienes, en un estudio de 285 aislados de E. coli de pacientes atendidos en dos hospitales de Brasil, reportaron que el 75,78 % era resistente a las cefalosporinas, y al del estudio de Zhong y otros,29 realizado en China, en donde se encontró que el 50 % de los 144 aislados obtenidos de hemocultivos eran resistentes a este antimicrobiano. Otros estudios en Cuba13,14,15,31 que datan de 2017 y 2018 han descrito tasas de resistencia a las cefalosporinas en aislados de E. coli iguales al 41 % o superiores.
En lo que respecta a la amikacina, la frecuencia de aislados de E. coli resistentes tiende a disminuir en los cuatro años del estudio, lo cual es similar al 20 % reportado por Miranda-Novales y otros,24 en su estudio de 4382 aislados de E. coli de hemocultivos y al 14,00 % descrito por Quiñones y otros,13 en 204 aislados de E. coli de pacientes de hospitales cubanos entre los años 2014 y 2016. Sin embargo, las tasas de resistencia a amikacina encontradas para estas bacterias en cada uno de los 4 años son mucho más altas que el 5 % encontrado en Dhaka, Bangladesh por Mazumder y otros,32 en 128 aislados de infecciones extraintestinales o el 0 % descrito por Zhong y otros29 en China.
En lo que respecta al meropenem, en los asilados de E. coli que datan entre 2018 y 2021 se evidenció una reducción considerable (10 %); esta baja proporción es similar a lo reportado por varios estudios que se llevaron a cabo en Cuba, Bangladesh y la India en los que se han descrito tasas de resistencia a este antimicrobiano en aislados de E. coli menores del 9 %.13,14,15,32,33
Teniendo en cuenta lo anterior, y con base en los datos obtenidos en el presente estudio, es posible decir que el meropenem pudiera ser un antimicrobiano de elección para el tratamiento de pacientes con infecciones por E. coli en el ámbito hospitalario local.
El aumento en las tasas de multirresistencia a los antimicrobianos constituye uno de los principales problemas en el tratamiento de pacientes con infecciones bacterianas.2,4,5 La alta frecuencia de aislados de E. coli multirresistentes evidenciada en el presente estudio (74,30 %) es similar a la mostrada en Irán, Ecuador y Egipto,30,28,25 donde se han reportado 85,70 %; 69 % y 54 % de aislados multirresistentes, respectivamente.
Las principales limitaciones del estudio son su naturaleza observacional, retrospectiva, unicéntrica. Tampoco se realizó la detección fenotípica de β-lactamasas (BLEE y carbapenemasas) en los aislados analizados. Por tal razón, el laboratorio de microbiología desempeña un papel determinante en la confirmación molecular de los fenotipos de resistencia. Sería interesante realizar futuras investigaciones que incluyan una muestra más amplia, otras especies de enterobacterias y determinar la presencia de carbapenemasas en enterobacterias.
Conclusiones
De acuerdo con los resultados, es posible determinar que sí hubo variación en la susceptibilidad de los aislados de K. pneumoniae y E. coli a los antimicrobianos investigadas durante los cuatro años del estudio; además, se observó una alta prevalencia de aislados multirresistentes. Por tanto, es necesario establecer políticas y estrategias dirigidas a evitar el uso excesivo de antimicrobianos en el hospital.