INTRODUCCIÓN
La autopercepción, definida como el proceso mediante el cual una persona se autoconceptualiza, es considerada una necesidad humana profunda y poderosa, esencial para un estilo de vida saludable, el buen funcionamiento y la autorrealización; es decir, este concepto está relacionado con el bienestar general. El autoconcepto físico, por otro lado, se refiere a la valoración que una persona tiene sobre su propio cuerpo (Posso et al., 2022).
A medida que el estudio del autoconcepto físico se entiende desde una perspectiva jerárquica y multidimensional, para Fox y Corbin (1989), es crucial suponer que los supuestos teóricos del modelo general del autoconcepto también son válidos para explicar la estructura interna de cada uno de los dominios relacionados con el sistema interno de autoconcepto físico:
Multidimensionalidad: el autoconcepto no puede entenderse si se ignora su naturaleza multidimensional, y esta es la primera suposición, incluso si la estructura del autoconcepto físico tiene dos significados: por un lado, sirve para referirse a los dominios para el autoconcepto y, por otro lado, también se usa con referencia a las dimensiones de cada uno de estos dominios.
Estructura jerárquica: la autoevaluación física tiene una función que media entre las dimensiones percibidas del autoconcepto y la autoestima global. El autoconcepto físico general media entre dimensiones específicas de la habilidad deportiva, la condición física, el atractivo y la fuerza; en el otro extremo está el autoconcepto general.
Estos son los subdominios que forman el modelo de autoconcepto físico: habilidad física, condición física, atractivo físico y fuerza, el modelo de cuatro dominios está estructurados jerárquicamente de la siguiente manera: en el ápice superior está la autoestima; debajo de esto, la autoevaluación física: autoconcepto físico; y en la base, cuatro subdominios diferentes: deporte / competición deportiva, condición física, atractivo físico y fuerza. El nivel intermedio actúa como mediador entre diferentes subdominios y autoestima global.
Como se puede ver hay una pequeña modificación del modelo propuesto, se reemplaza la competencia física deportiva por la habilidad física; sin embargo, existe un mayor número de dimensiones, a saber: fuerza, actividad física, obesidad, competencia habilidad deportiva, resistencia, coordinación, salud, apariencia y flexibilidad.
Por otra parte, el Cuestionario de autoconcepto físico (CAF) se construye asumiendo el modelo de Fox y Corbin (1989) con variaciones en la delimitación conceptual de las cuatro dimensiones y en el reemplazo de la denominación de competencia deportiva por capacidad física.
En esta línea, se considera que el autoconcepto tiene un papel crucial en el desarrollo de la personalidad, lo que afecta el funcionamiento personal y social. Por lo tanto, la incertidumbre generada por un bajo autoconcepto se verá afectada al participar en tareas socialmente evaluadas. Además, y específicamente, aquellas personas que no perciben su realidad en el aspecto físico como suficiente, tendrán un sentido de incompetencia que puede generar un impacto significativo en la motivación para realizar actividades físicas.
Por otro lado, para García-Moya y Castillo (2019), mantener un estilo de vida saludable es un factor clave para desarrollar un autoconcepto físico positivo. Este estilo de vida saludable incluye los siguientes hábitos: alimentación equilibrada y nutritiva, actividad física regular, descanso adecuado, reducción del estrés, prevención de enfermedades y formación de hábitos de relajación. De esta manera, el individuo desarrolla una autoestima positiva y una imagen corporal positiva, lo que permite una mayor satisfacción personal y la búsqueda de una vida plena. Los hábitos de vida saludable y el autoconcepto físico tienen un efecto significativo en el bienestar general de una persona (Palomino & Cárdenas, 2020; Posso et al., 2022; Palacios et al., 2022), como parte de los hábitos de vida saludables, una buena alimentación y un autoconcepto físico positivo, pueden mejorar significativamente la calidad de vida, fortaleciendo el bienestar emocional y físico.
Un estilo de vida saludable es una forma de vida en la que se mantienen y mejora la salud; por otra parte, Aranda y Quintal (2021) manifiestan que se consideran hábitos saludables todos los comportamientos de la vida diaria de un individuo que inciden positivamente en el bienestar físico, psíquico y social de las personas y cuando se modifican, determinan la presencia de factores de riesgo y/o protectores del bienestar, además es importante una dieta saludable, actividad física regular, control de peso, descanso adecuado, dejar de fumar y prevenir enfermedades infecciosas, que indica que los hábitos de vida saludables son fundamentales para mantener un sistema inmunológico fuerte contra enfermedades como la COVID-19.
En relación a los hábitos de vida saludables y la actividad física, el ejercicio puede ayudar a reducir algunos de los efectos del estrés y la ansiedad asociados con el COVID-19; se recomienda a los adultos realizar un mínimo de 150 minutos de actividad física de moderada a intensa por semana. El ejercicio no sólo ayuda a mantener una buena salud física, sino que también puede ayudar a mejorar el estado de ánimo, reducir el estrés y la ansiedad, y mejorar el sueño; realizar ejercicio físico también es importante para la salud mental al reducir el estrés y la ansiedad.
Cabe considerar que en la pandemia del COVID 19, en Ecuador como en muchas partes del mundo, se limitó al confinamiento y los gimnasios de taekwondo quedaron vacíos, pero no por esto se dejó de lado la práctica del mismo, como alternativa principal se desarrollaron las clases en línea, llevado a nuevas estrategias en la enseñanza y práctica, a lo que lleva a la población de estudio de esta investigación.
Según un estudio de Baek & Park (2017), el taekwondo es una excelente manera de mejorar el autoconcepto físico. Los resultados mostraron que los ejercicios de taekwondo mejoraron la percepción de la capacidad física y la imagen corporal de los participantes. En el estudio, los investigadores encontraron que los participantes que practicaban taekwondo experimentaron mejoras significativas en su autoestima física. Estos hallazgos sugieren que el taekwondo es una actividad beneficiosa para mejorar el autoconcepto físico.
Se descubrió que los participantes de taekwondo experimentaron una mejora significativa en su percepción de sí mismos. El compromiso con el deporte ayudó a desarrollar un mejor sentido de la autoestima, así como la autoconfianza y la autoevaluación (Lim y Kim, 2012). Los resultados del estudio, proporcionan la evidencia de que el taekwondo contribuye a una mejor percepción de sí mismo en términos de autoconcepto físico.
Se demostró que el taekwondo puede mejorar positivamente el autoconcepto físico y los hábitos de vida saludables de los niños (Caglar et al., 2016), se analizaron los beneficios del taekwondo en la formación del autoconcepto físico y hábitos saludables, así como los efectos positivos sobre la salud, el bienestar y el desarrollo personal, lo que da como resultado que existe una fuerte correlación entre el autoconcepto físico, los hábitos de vida saludables y el taekwondo (TKD).
En este artículo, se abordó cómo el taekwondo contribuyó a mejorar el autoconcepto físico, los hábitos de vida saludable y cómo esta disciplina pudo ayudar a los practicantes a afrontar la pandemia de Covid-19; tiene un marcado carácter prospectivo, que fundamenta el objetivo de esta investigación traducido en: identificar la relación entre las respuestas al CAF (Cuestionario de autoconcepto físico) y hábitos de vida saludables (sexo, práctica de taekwondo, índice de masa corporal)
MATERIALES Y MÉTODOS
El estudio fue de tipo descriptivo-correlacional de orientación exploratoria, que es una técnica utilizada para explorar la relación entre variables. Esta técnica buscó describir y correlacionar los datos recopilados para encontrar relaciones y tendencias entre el autoconcepto físico y los hábitos de vida saludables. Se utilizó un muestreo no probabilístico discrecional, participaron un total de 423 practicantes de taekwondo a nivel nacional, con edades comprendidas entre los 12 a 58 años; se dividió en función de género 153 mujeres con una edad media de 19,25 años (σ = 10,50) y de 270 hombres cuya edad media era de 26,49 años (σ = 14,37).
La administración de los cuestionarios fue de un tiempo aproximado de 20 minutos. Se utilizó la aplicación Google Forms, que ayudó aplicarlo en línea por el distanciamiento social de la pandemia de COVID 19. Se obtuvo el consentimiento informado para los menores de edad por parte de sus representantes y otro para mayores de edad, en el cual se indicó los objetivos, procedimiento, beneficios, riesgos y contactos de esta investigación; cabe destacar que a todos los encuestados se les aseguró el anonimato, con el fin de poder reducir al máximo la probabilidad del efecto de deseabilidad social.
El instrumento utilizado es el Cuestionario de autoconcepto físico (CAF), esta reúne propiedades psicométricas y que confirma la solidez del modelo hipotetizado; en cuanto a la estructura interna (dimensiones) del autoconcepto físico; formado por 36 ítems (6 ítems para cada escala), redactados en términos enunciativos, destinados a medir las siguientes dimensiones del autoconcepto físico:
Habilidad física. Percepción de las cualidades y habilidades para la práctica de los deportes; capacidad de aprender deportes; seguridad personal y predisposición ante los deportes.
Condición física. Forma física; resistencia y energía; confianza en el estado físico.
Atractivo físico. Percepción de la apariencia física propia: seguridad y satisfacción por la imagen propia.
Fuerza. Verse y/o sentirse fuerte, con capacidad para levantar peso, con seguridad ante ejercicios que exigen fuerza y con predisposición a realizar dichos ejercicios.
Autoconcepto físico general. Opinión y sensaciones positivas (felicidad, satisfacción, orgullo y confianza) en lo físico.
Autoconcepto general. Satisfacción con uno/a mismo/a y con la vida en general.
Como alternativa de respuesta a cada ítem se ofrecieron cinco opciones en una escala tipo Likert, donde 1- Muy en desacuerdo/ 2- En desacuerdo / 3- Indiferente/ 4- De acuerdo/ 5- Muy de acuerdo, de tal modo que a mayor puntuación correspondería un mayor autoconcepto físico.
Los coeficientes de confiabilidad (alfa de Cronbach) de cada una de sus escalas son los siguientes: Habilidad física α=0.8052; Condición física α=0.8684; Atractivo físico α=0.8872; Fuerza á=0.8486; Autoconcepto físico general α=0.8591; y Autoconcepto general α=0.7843. Para evaluar los hábitos de vida saludables, se redactó un cuestionario de siete preguntas, desde el sexo, peso, talla, percepción de sus hábitos saludables, la práctica taekwondo. Se comprobó los coeficientes de fiabilidad (alfa de Cronbach), con un resultado de á=0.8052.
Para analizar los datos, se utilizó el sistema informático SPSS, versión 25, se realizaron comparaciones de medias independientes, mediante la prueba T-test (tablas de la I a la III), así como un análisis de la varianza (ANOVA) para la variable "Índice de masa corporal" (Tabla 4).
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
La tabla 1 divide a los participantes en esta investigación en dos grandes grupos:
Mujeres (N=153; 36 %) y Hombres (N=270; 64 %). Las puntuaciones en las subescalas del CAF condición, atractivo, fuerza, autoconcepto físico general, autoconcepto general en relación al sexo indican que la medias son iguales, no hay diferencias significativas en las medias, excepto en habilidad que se puede decir que existen diferencias significativas entre hombres y mujeres en relación a la significancia bilateral.
Estos resultados concuerdan con el estudio de Aravena et al. (2021) donde los autores demostraron que hay diferencias significativas entre los hombres y las mujeres en relación a la habilidad en taekwondo (Tabla 1).
En la tabla 2, se encontró que (N=162; 38 %) deportistas respondieron que no tienen hábitos de vida saludables y (N=261; 62 %) tienen hábitos de vida saludables. El análisis de las medias indica que el p valor es menor a 0,05, existen diferencias significativas entre el autoconcepto físico con sus hábitos de vida saludable, en todas las escalas del CAF tanto en las respuestas NO y SI, respaldando la investigación en cuanto el autoconcepto físico, los hábitos de vida saludable y el taekwondo son tres conceptos que se relacionan entre sí y que pueden ayudar a mejorar la salud y el bienestar de una persona (González, 2017) (Tabla 2).
La tabla 3 muestra dos grupos, uno de quienes practican taekwondo (N=393; 8 %) y otro de quienes no lo practican (N=30; 92 %), se observa un p valor menor a 0,05, lo que indica que existen diferencias significativas en las respuestas NO y SI, con alta significancia de 0,000 en todas las escalas, que indica la clara relación de la percepción de su autoconcepto físico al practicar taekwondo, en las escalas de atractivo físico y fuerza, se presenta una significancia bordeando con un p valor de 0,040 y 0,030 casi al límite, los resultados reflejan la importancia de la práctica de taekwondo y la percepción del autoconcepto físico. Esta información está acorde con el estudio de Díaz et al. (2019), quienes realizaron un análisis de la literatura, donde definen la influencia que tiene la práctica de taekwondo en el buen autoconcepto físico (Tabla 3).
En la tabla 4, se cruzan los datos de respuesta al CAF con el índice de masa corporal, la pregunta ofrecía seis opciones, Obesidad III con 2 personas (0,47 %), Obesidad II con siete personas (1,65 %), Obesidad I con 24 personas (5,67 %), Sobrepeso con 121 personas (28,60 %), Normal 177 personas (41,8 %), Bajo peso 92 personas (22,28 %). La comparación de las medias de los resultados concuerdan con los hábitos de vida saludable, donde se manifiesta que el estudio es importante al presentar una alta significancia bilateral, en todas las escalas del CAF, que indican la importancia en relacionar el autoconcepto con el índice de masa corporal para este estudio, respaldando los resultados con la investigación de Méndez-Urresta et al. (2023), los resultados de su investigación apuntan a la necesidad de promover hábitos saludables con el taekwondo para contribuir al bienestar general de los adolescentes (Tabla 4).
Escalas del CAF | IMC | N | Media | σ | F | Sig |
---|---|---|---|---|---|---|
Habilidad | Obesidad III | 2 | 16,5 | 0,707 | 3,006 | 0,011 |
Obesidad II | 7 | 18,71 | 2,928 | |||
Obesidad I | 24 | 16,58 | 2,717 | |||
Sobrepeso | 121 | 17,81 | 2,905 | |||
Normal | 177 | 16,89 | 3,566 | |||
Bajo peso | 92 | 18,23 | 3,19 | |||
Total | 423 | 17,45 | 3,286 | |||
Condición | Obesidad III | 2 | 21 | 0 | 6,597 | 0,000 |
Obesidad II | 7 | 18,43 | 2,507 | |||
Obesidad I | 24 | 18,83 | 1,949 | |||
Sobrepeso | 121 | 18,7 | 2,897 | |||
Normal | 177 | 17,98 | 3,777 | |||
Bajo peso | 92 | 20,32 | 2,701 | |||
Total | 423 | 18,77 | 3,319 | |||
Atractivo | Obesidad III | 2 | 22 | 0 | 9,151 | 0,000 |
Obesidad II | 7 | 23,14 | 1,952 | |||
Obesidad I | 24 | 18,96 | 2,528 | |||
Sobrepeso | 121 | 19,5 | 2,781 | |||
Normal | 177 | 18,59 | 4,243 | |||
Bajo peso | 92 | 21,33 | 3,085 | |||
Total | 423 | 19,56 | 3,674 | |||
Fuerza | Obesidad III | 2 | 18,5 | 0,707 | 4,823 | 0,000 |
Obesidad II | 7 | 22,71 | 0,488 | |||
Obesidad I | 24 | 19,92 | 1,666 | |||
Sobrepeso | 121 | 19,94 | 3,147 | |||
Normal | 177 | 19,02 | 4,167 | |||
Bajo peso | 92 | 21,05 | 3,581 | |||
Total | 423 | 19,84 | 3,705 | |||
Auto.fis.gen | Obesidad III | 2 | 18 | 0 | 4,051 | 0,001 |
Obesidad II | 7 | 19,71 | 2,928 | |||
Obesidad I | 24 | 17,13 | 3,083 | |||
Sobrepeso | 121 | 18,21 | 2,63 | |||
Normal | 177 | 16,9 | 3,44 | |||
Bajo peso | 92 | 17,92 | 2,288 | |||
Total | 423 | 17,56 | 3,015 | |||
Autocon.gen | Obesidad III | 2 | 14 | 0 | 2,572 | 0,026 |
Obesidad II | 7 | 20,57 | 4,392 | |||
Obesidad I | 24 | 17,58 | 2,685 | |||
Sobrepeso | 121 | 16,74 | 3,098 | |||
Normal | 177 | 16,41 | 4,046 | |||
Bajo peso | 92 | 16,16 | 3,769 | |||
Total | 423 | 16,57 | 3,701 |
CONCLUSIONES
Los resultados indican que existen diferencias significativas entre hombres y mujeres en su autoconcepto físico, lo que no ocurre en la escala de habilidad, la variable de hábitos de vida saludables, la práctica del taekwondo, y el IMC, muestran un alto impacto en la percepción del auto concepto físico de los participantes, entendiendo que este estudio indica que durante la pandemia de Covid-19, la práctica de taekwondo cobra un sentido más profundo.
Esta disciplina de artes marciales permite a sus practicantes elevar el autoconcepto físico y mejorar su calidad de vida, al ayudarlos para que afronten la situación de confinamiento, la incertidumbre y el aislamiento. Los entrenamientos vía streaming son una alternativa para la práctica de ejercicios con el mismo nivel de energía y el mismo número de sesiones.
Esta investigación demostró que la práctica de taekwondo, durante la pandemia del COVID 19, tuvo una influencia positiva en un autoconcepto físico saludable y puede resultar clave para el desarrollo socioemocional del sujeto, sin embargo, la pandemia complicó la interacción y la libertad de movimiento, que son parte de una práctica eficaz de las artes marciales como el taekwondo.