INTRODUCCIÓN
Las arbovirosis son enfermedades víricas transmitidas por mosquitos hembras principalmente de la especie Aedes aegypti, y en menor grado por el Aedes albopictus. Se han propagado rápidamente en todas las regiones en los últimos años. Están muy extendidas en los trópicos, con variaciones locales en el riesgo que dependen en gran medida de las precipitaciones, la temperatura y la urbanización rápida sin planificar.1) Otra característica de estas enfermedades son sus modalidades epidemiológicas, en particular la hiperendemicidad de los múltiples serotipos del virus del dengue en muchos países y la alarmante repercusión en la salud humana y en las economías nacionales y mundiales. Suelen ser transportadas de un lugar a otro por viajeros infectados.2
En la actualidad son las enfermedades de transmisión vectorial más importantes en la región de las Américas y la Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que el número de afectados por las arbovirosis se encuentra entre los 50 millones y los 100 millones de personas cada año, de ellos medio millón necesitan atención hospitalaria por presentar una forma severa de la enfermedad, con una mortalidad del 2,5 %. Son enfermedades de aviso epidemiológico.3 La intersectorialidad puede actuar como un elemento principal para modificar esta situación de salud.
Cuba es considerada como de los pocos países que han evitado que estas enfermedades se conviertan en endémicas.4) Casi anualmente se reportan brotes de dengue como principal enfermedad en todas las provincias del país, algunas han alcanzado carácter epidémico en determinados territorios y períodos, de ahí la importancia de incorporar el análisis entomológico, epidemiológico estratificado y la preparación al personal de la salud, no solo durante las epidemias, sino antes que se produzcan.5
La participación de los sectores sociales y económicos ha estado en todo momento inducida a formar parte en la solución de los problemas descritos, según el grado de competencia, magnitud, trascendencia y vulnerabilidad del problema; pero todo este proceso es liderado por el sector de la salud, de ahí la importancia de que los miembros del sistema responsabilizados con la pesquisa, el diagnóstico y tratamiento de los enfermos deban tener una adecuada capacitación y competencia profesional para el éxito en la tarea; preparación que se debe iniciar precozmente y en profundidad desde la docencia impartida.5,6
En las guías emitidas durante el año 2011 por el Ministerio de Salud Pública para la asistencia integral a pacientes con dengue se expone el papel del médico de la familia y su actuación en la comunidad ante esta entidad.7
En Abreus, municipio situado en el centro sur de la provincia de Cienfuegos, eminentemente agrícola, la situación epidemiológica existente respecto a las arbovirosis es complicada, por lo que los autores se han propuesto como objetivo: identificar el nivel de conocimiento de los residentes de Medicina General Integral sobre la prevención y control de las arbovirosis.
MÉTODOS
Se realizó un estudio observacional, descriptivo y de corte transversal, en la Dirección Municipal de Salud Pública del municipio Abreus, Cienfuegos, Cuba, durante el mes de octubre de 2021. La población de estudio incluyó a la totalidad de los residentes de Medicina General Integral (46) matriculados y activos en el posgrado, quienes firmaron el consentimiento informado, después de haberles explicado el objetivo de la investigación.
Se utilizaron métodos del nivel teórico:
Análisis-síntesis e inducción-deducción: fueron aplicados para la obtención, procesamiento, análisis de la información y para los referentes teóricos del tema, la interpretación de la revisión documental, el estudio de la bibliografía actualizada, la conformación del informe investigativo y arribar a conclusiones; en todos los casos transitando de lo abstracto a lo concreto.
Histórico- lógico: se utilizó en el análisis referente a una aproximación histórica del tema, su evolución en el tiempo, así como en la búsqueda de antecedentes sobre las arbovirosis siguiendo la lógica de su desarrollo.
Sistémico-estructural: permitió un estudio detallado del fenómeno y el establecimiento de relaciones entre la información teórica y los datos empíricos.
Empíricos: análisis de artículos científicos sobre las arbovirosis para ampliar la preparación sobre este contenido y la realización de un cuestionario, el cual fue avalado por un comité de expertos antes de ser aplicado, para explorar los conocimientos de los residentes sobre el tema.
El cuestionario indagó sobre las actividades docentes en las diferentes modalidades para el posgrado en las que se abordó el tema de las arbovirosis, incluyendo los módulos, la experiencia de los residentes con enfermos, o participación en la pesquisa activa en la comunidad. Fue aplicado por los autores de esta investigación y contiene cuatro preguntas con varios ítems, en los que se evalúan conocimientos sobre la prevención y control de las arbovirosis, además de otros aspectos relacionados con su preparación y los escenarios donde se tratan temas de estas entidades. Se mantuvo la confidencialidad de los resultados individuales, pero los residentes conocieron posteriormente las respuestas correctas para el conocimiento de sus dificultades, lo que implica un valor agregado al estudio efectuado.
A la pregunta 4 sobre conocimientos se le otorgó un valor de 100 puntos (25 por cada ítem), con la siguiente escala:
Mal (M): menos de 60 puntos
Regular (R): entre 60 y 69 puntos
Bien (B): entre 70 y 79 puntos
Muy bien (MB): entre 80 y 89 puntos
Excelente (E): entre 90 y 100 puntos
Se consideraron con dificultades los residentes que obtuvieran calificación de Mal y Regular; y sin dificultades: los que obtuvieran Bien, Muy bien y Excelente.
Métodos estadísticos (estadística descriptiva): se procedió al llenado de la base de datos correspondiente en el programa SPSS versión 15. Los resultados se presentaron en tablas de distribución de frecuencias.
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Según el análisis de los datos, el 90,8 % de los residentes manifestaron haber tenido preparación sobre la prevención y control de las arbovirosis. Al indagar sobre las actividades docentes en que ha recibido el tema, refirieron la educación en el trabajo (91,3 %), las conferencias de actualización (87 %), los talleres de actualización (69,6 %), discusiones generales (67,4 %) y seminarios integradores (65,2 %).
La Tabla 1 permite apreciar que los residentes tuvieron experiencias previas relacionadas con el tema, tanto en la pesquisa activa (100 %), como en la atención a pacientes enfermos (78,3 %).
A pesar de ello, el 56,5 % presentó dificultades en la identificación de sus formas clínicas y cuadro clínico, y hubo un discreto conocimiento en cuanto a las medidas de prevención (78,3 %), etiología (73,9 %) y diagnóstico y tratamiento (60,9 %) como se observa en la Tabla 2.
El desempeño del médico general integral se asocia con los conocimientos, habilidades y valores que alcance respecto a su actuación médica integral ante los principales problemas de salud que afectan a la población, en este caso las arbovirosis, donde ocupan un lugar especial sus destrezas para identificar la población en riesgo y efectuar acciones de promoción de salud y prevención de enfermedades.
Los estudios de conocimiento, prácticas y actitudes son una herramienta de análisis de comportamientos. Se utiliza tanto en la fase de diagnóstico como en la de planificación de un proyecto. La utilidad radica, según opinan Delcid Morazán et al.8) en que puede promover su desarrollo en las comunidades y generar un cambio expresado a nivel de prácticas, incremento de conocimientos o en el desarrollo de actitudes favorables al cambio.
Coincidiendo con Betancourt Pulsan et al.9 en el caso de estas enfermedades, los médicos en la comunidad deben ser capaces de cumplir con todas las medidas epidemiológicas necesarias para controlar su propagación, lograr la curación de sus enfermos y promover actividades en función de la salud, que posibiliten la disminución y/o eliminación de la infestación por el mosquito Aedes aegypti, su agente causal.
Todo esto reafirma la necesidad del conocimiento sobre las arbovirosis, confirman García Torres et al.:10 el cuadro clínico, las complicaciones, el tratamiento específico y puntualmente su prevención y control. Ellos consideran que resulta insuficiente el proceso de formación posgraduada, en este caso, en la especialización, porque es en el contexto comunitario donde se realizan su prevención y control.
Este proceso es liderado por el sector de la salud; de ahí la importancia de que los miembros del sistema responsabilizados con la pesquisa, el diagnóstico y el tratamiento de los enfermos deban tener una adecuada capacitación y competencia profesional para el éxito en la tarea. Los autores de esta investigación opinan que esta preparación se debe iniciar precozmente y en profundidad desde la formación de pregrado. Se deben coordinar actividades en los servicios y fundamentalmente en la Atención Primaria de Salud (APS).
La enseñanza médica debe prestar especial atención a la adquisición de habilidades clínicas, lo que les permitirá enfrentar con éxitos desafíos y situaciones que la vida les presenta. Entre ellas, recuerdan González et al.,11 las relacionadas con el interrogatorio, el examen físico y el razonamiento clínico o habilidad de diagnóstico. Aunque es válido señalar que el método clínico abarca todas estas habilidades, su deterioro se hace más evidente en las habilidades de razonamiento clínico en el momento de emitir los juicios diagnósticos.
Existen contradicciones formativas en el proceso enseñanza aprendizaje de las arbovirosis. Ponzo, de Uruguay,12 considera que más allá de una crisis del método clínico, lo que existe realmente es una crisis de las habilidades de pensamiento, como producto de un proceso enseñanza aprendizaje basado fundamentalmente en el método de enseñanza tradicional, con la consiguiente sobrecarga de la actividad reproductiva.
El control del principal vector, el mosquito Aedes aegypti, es el único método disponible de prevención. El enfoque integrado a través de la coordinación intersectorial, ambiental, la gestión y educación para la salud, así como la participación comunitaria, son elementos claves para el éxito.
La formación de los residentes en la prevención y control de estas enfermedades trasmisibles constituye la fortaleza principal de este proceso; se revela la necesidad de que el residente de Medicina General Integral egrese con una eficiente formación profesional, a través de la aplicación de metodologías adecuadas para el desarrollo de la educación en el trabajo a fin de formar correctos modos de actuación profesional, según expresan otros estudiosos.11,13
Las insuficiencias existentes en el proceso de formación del residente en la atención al paciente con arbovirosis tienen su base en la actual dinámica de este proceso, por lo que se necesita profundizar en nuevas relaciones didácticas que favorezcan el desarrollo de una lógica en la educación con fines preventivos.
Aporte Científico
La presente investigación sirve como base para varias otras investigaciones, tanto locales como provinciales y además para mejorar la preparación de los futuros especialistas de Medicina General Integral en el tema referente a arbovirosis.
CONCLUSIONES
Se identificaron dificultades el nivel de conocimientos alcanzados por los residentes de Medicina General Integral del municipio Abreus, sobre la prevención y control de las arbovirosis. Resulta imperioso abordar las potencialidades que ofrece el trabajo metodológico en la búsqueda de mejores vías para el desarrollo de la educación en el trabajo y en consecuencia formar correctos modos de actuación profesional en la prevención y control de las arbovirosis.