Hemos estudiado con gran interés el artículo «La COVID-19 y los desafíos para el profesional de salud en Cuba», publicado en la Revista Cubana de Investigaciones Biomédicas, volumen 39, número 3 (julio-septiembre).1 Este muestra los principales desafíos de los profesionales de la salud cubana en el contexto de la pandemia de la COVID-19.
Este trabajo es interesante. Los autores muestran que el bloqueo económico de EE. UU. contra Cuba adiciona complejidad al enfrentamiento de la pandemia. A lo largo de la historia, el bloqueo económico contra la Isla ha favorecido el desarrollo de la comunidad científica cubana. Es por esa razón que sería provechoso que apareciesen en este trabajo, algunos ejemplos de los medicamentos que se encuentran en uso o en desarrollo para disminuir la morbimortalidad por COVID-19.
Este artículo evidencia el importante papel que ha jugado el «ejército de batas blancas» en el enfrentamiento a la COVID-19, no solo en la Mayor de las Antillas, sino también en el mundo.2 Otro aspecto importante es que menciona la participación de la atención primaria de salud (APS) como eslabón esencial en el enfrentamiento a la pandemia. Sería notable resaltar que la actuación de los médicos en la APS ha sido de gran importancia en la pesquisa de casos nuevos, así como en el seguimiento de los casos positivos una vez dados de alta del hospital.
Felicitamos a los autores, pues, en nuestra opinión, este artículo constituye un reconocimiento al trabajo sistemático de nuestro sistema de salud, que pone en función del pueblo, no solo los recursos materiales necesarios, sino también todos sus recursos humanos. Exhibe, además, que tanto la APS, como la atención secundaria, trabajan y se complementan en el enfrentamiento a la COVID-19.