INTRODUCCIÓN
La enseñanza es una práctica humana que responde a necesidades o determinaciones de las sociedades y que, pese a cualquier época o lugar, se entiende a la enseñanza como un proceso de instrucción y una actividad intencional diseñada para dar lugar al aprendizaje de los alumnos. (Urrutia y Guevara).1
Los requerimientos actuales de la aldea global del siglo XXI en la enseñanza superior impactan al contenido de los estudios en las carreras, los métodos de enseñanza-aprendizaje y métodos de evaluación y, a su vez, demandan que los docentes cuenten con competencias tanto académicas como administrativas y humano-sociales que les permitan satisfacer dichas exigencias. (Aldape).2
Atendiendo al proceso de enseñanza y de aprendizaje, Collado y colaboradores,3) expresan que en el proyecto “Tunning” sobre la convergencia Europea de Educación Superior se propone un listado de competencias transversales que sería de interés adquirir en las titulaciones de Ciencias de la Salud, como capacidad de análisis y síntesis, organización y planificación, comunicación oral y escrita, habilidades de gestión de la información, resolución de problemas, toma de decisiones, capacidad crítica, trabajo en equipo, compromiso ético, adaptación a nuevas situaciones, liderazgo, entre otras competencias.
Así mismo Tobón refiere que,4 “Formar personas éticas y con competencias para asumir los retos del mundo actual y futuro requiere entonces que los diferentes actores que intervienen en el proceso educativo asuman plenamente sus responsabilidades, con el mayor compromiso posible” (p. 45).
El proceso de cambio en la educación centrada en la enseñanza ante la pedagogía centrada en el aprendizaje demanda nuevos conocimientos, destrezas, actitudes y valores de los docentes quienes son los responsables de guiar al estudiante en esta trayectoria escolar que participa en su formación integral para que responda éticamente a las situaciones y necesidades sociales.
En el proceso de enseñanza y aprendizaje de la unidad de aprendizaje de Psicología Médica de la Facultad de Medicina los alumnos muestran mayor contacto hacia un entorno social y menor contacto consigo mismos, las relaciones se dan por redes sociales virtuales y disminuye el encuentro cara a cara, las categorías de amistad, confianza, escucha, han cambiado en comparación de otras épocas, el acceso a la información ubica al alumno en un saber ilimitado y en un limitado conocimiento, donde el procesamiento de la información se facilita en ordenadores, mientras que el análisis y pensamiento crítico son poco atendidos por el alumno.
De igual manera, el alumno muestra atención dispersa; por un lado se encuentra físicamente en la clase, mientras que su atención está en socializar al estar conectado a redes sociales virtuales en su teléfono, esto aunado a los múltiples intereses y situaciones en que el estudiante se encuentra mientras vive su trayectoria escolar, sin embargo algunos alumnos no han desarrollado la habilidad de atender varias situaciones y actividades en un mismo tiempo, lo que genera vacíos en su comprensión, así como en su participación en las actividades del tema abordado en clase.
Así mismo, se pudo observar poca participación individual, por lo regular son los mismos estudiantes lo que lo hacen, se percibió baja motivación en algunos estudiantes, algunos se mantienen muy inquietos durante las clases (constantemente están platicando), a pesar de que se les pide de favor que guarden silencio.
Por otra parte, se observa inasistencias y retardos, constantemente se presentan sin lecturas previas o sin la actividad extra clase, algunos estudiantes muestran dificultad para relacionarse con sus compañeros, muestran diálogo obsceno.
Además, se hace mención por algunos estudiantes que la unidad de aprendizaje de Psicología Médica deja de ser prioritaria en relación con otras unidades de aprendizaje en el III semestre de la licenciatura.
Para atender las debilidades antes mencionadas es necesario que el docente utilice estrategias didácticas donde el estudiante participe activamente en la construcción de aprendizaje, desarrollo y formación de competencias, encaminado esto a la formación integral del estudiante para que en su desempeño profesional participe en atender las necesidades y problemas sociales en la salud, desde el compromiso y la ética.
Tobón(4) argumenta que la socioformación es, precisamente, un enfoque que se está desarrollando y fortaleciendo en Latinoamérica (con contribuciones de investigadores europeos) y su meta es orientar las transformaciones de la educación para asegurar la formación integral de las personas con un sólido proyecto ético de vida, que es tanto personal como colectivo y en relación con el entorno ecológico, además, el autor refiere que este enfoque educativo se centra en generar las acciones para hacer posible el cambio de las prácticas educativas fuertemente arraigadas en contenidos cognitivos y memorísticos, buscando que las personas aprendan a actuar ante los problemas, movilizando los diferentes saberes.
En relación a la práctica docente, Serna y colaboradores (5 enuncian que “una metodología activa es el proceso que indica que, para realizar un aprendizaje significativo, el alumno debe ser el protagonista de su propio aprendizaje, mientras el docente asume el rol de facilitador de este proceso” (p.22). Los autores antes citados aluden que se pasa de la enseñanza centrada en el profesor a la enseñanza centrada en el estudiante.
Por su parte, Pimienta6 indica que “Los estudios de caso constituyen una metodología que describe un suceso real o simulado complejo que permite al profesionista aplicar sus conocimientos y habilidades para resolver un problema” (p. 137).
Mientras que para Tobón,4) la simulación “permite comprender cómo se aplican las competencias, posibilita formar el saber ser, el saber conocer y el saber hacer en situaciones parecidas a las reales” (p. 267).
Por lo antes planteado surge la siguiente pregunta:
¿De qué manera influyen el estudio de caso y simulación en la formación integral de los estudiantes en psicología médica?
El objetivo de esta investigación es realizar una revisión documental del estudio de caso y simulación para la formación integral de los estudiantes en psicología médica.
La hipótesis que guía este estudio es: El estudio de caso y la simulación promueven la formación integral de los estudiantes.
MÉTODOS
Se utilizó el método cualitativo, exploratorio y se realizó una revisión documental en bases de datos y buscadores como Conrycit, ScienceDirect, CIDUI, PUBMED, Elsevier, Infomed, Scielo, Redalyc, Acceda, repositorio institucional UMNG, RUC, Repositorio Pontifica Universidad de Ecuador, Bdigital Repositorio institucional UN, Repositorio Abierto de la Universidad de Cantabria, revistas Bolivianas, revista pertinencia académica, INTERNET LATENT CORPUS JOURNAL y google académico, referentes al tema estudio de caso y simulación en psicología médica, la muestra se constituyó de 30 investigaciones en ciencias de la salud, el método de inclusión atendía artículos o tesis del año 2012 al 2018. Para el análisis de los datos se utilizó Excel.
RESULTADOS
Mediante el registro de los resultados de cada investigación en una hoja Excel, se realizaron categorías para llegar a unificar respuestas de los autores.
En relación al estudio de caso (anexo) los resultados mostraron que esta metodología activa permite que los estudiantes estudien la situación, definan los problemas, lleguen a sus propias conclusiones sobre las acciones que habría que emprender y contrasten ideas, las defiendan y las reelaboren con nuevas aportaciones y logran competencias tales como la autonomía, la independencia y el liderazgo, curiosidad por el emprendimiento y la toma de decisiones, parte esencial de una formación académica integral.
Además, desarrollan importantes cambios en la forma de aprender, transformándose en protagonistas activos que toman sus propias decisiones y que construyen aprendizajes significativos. Los alumnos refirieron también que logran integrar los contenidos con otras asignaturas.
Por otra parte, los resultados señalaron que el uso de la simulación en la enseñanza clínica (anexo), además de la dimensión técnica, es una iniciativa supone una experiencia de aprendizaje holístico, donde se integran aspectos éticos, morales, emocionales, e interpersonales, beneficia en la satisfacción, autoconfianza, conocimiento, empatía, realismo, disminución del nivel de ansiedad, comunicación, motivación, capacidad de reflexión y de pensamiento crítico, así como trabajo en equipo. Adquieren destrezas, antes de enfrentarse a situaciones reales, la metodología es valorada por el estudiante como extremadamente eficaz.
DISCUSIÓN
La hipótesis que guía este estudio es: El estudio de caso y la simulación promueven la formación integral de los estudiantes, en los resultados se puede identificar la comprobación de la misma al encontrar que tanto el estudio de caso como la simulación como metodologías activas en la enseñanza centrada en el aprendizaje promueven la formación integral de los estudiantes al desarrollar y aprender conocimientos, destrezas, habilidades y actitudes para su desempeño como profesional de la salud.
González y colaboradores, expresan que,16) los alumnos hacen una valoración muy positiva del trabajo en grupo para la solución de problemas a través de casos clínicos como una estrategia que les permite la adquisición de habilidades exploratorias en el seno del grupo y el desarrollo del razonamiento acumulativo. Por su parte, Rueda y colaboradores refieren que,11 la simulación promete jugar un rol revolucionario en la educación médica. En palabras de Pachón,28) la simulación Clínica permite un aprendizaje más tranquilo, con mayor autonomía, menor temor a equivocarse, protege la integralidad del paciente y disminuye los eventos adversos.
CONSIDERACIONES FINALES
Las metodologías activas como el estudio de caso y la simulación promueven la formación integral en el estudiante del área de la salud, ya que permiten la participación del estudiante para que construya su aprendizaje en grupo, lo que promueve el desarrollo de competencias para actuar en situaciones reales.
Implementar estas metodologías en psicología médica implica entender la simulación con pacientes estandarizados, o juego de roles, donde se propicie el actuar del alumno en situaciones simuladas que lo acerquen al paciente real.