Introducción
Una de las etapas de gran trascendencia para la vida humana es la adolescencia, la cual se caracteriza, como el período de transición entre la niñez y la edad adulta. Se evidencia que la adolescencia no ocurre de inmediato, ni está determinada sólo por los cambios de la pubertad, sino que constituye un lento proceso de aprendizaje que lleva implícito diversas transformaciones.
El perfeccionamiento y madurez de las características psicosociales se desplazan, en el adolescente, a edades más avanzadas de la vida, a diferencia de la precoz madurez biológica imperante en esta etapa. Todo esto unido a la desinformación y la falta de educación en el orden sexual, posibilita que las adolescentes se crean aptas para concebir un embarazo, por lo que se considera este período como importante grupo de riesgo en la salud reproductiva, que pudieran dar lugar a una maternidad precoz. (1,2
Resulta alarmante saber que casi la tercera parte de unos 175 millones de embarazos que se producen anualmente no son deseados, y que gran parte de estos son de adolescentes. Entre los índices que integran las prioridades sociales, el embarazo en la adolescencia actualmente se ubica entre los seis primeros criterios (dimensión sociodemográficas); índice que permite la focalización prioritaria de recursos en los diferentes territorios. (3
En los Estados Unidos de Norteamérica esto ocurre en el 8% de la población adolescente. Hathaway, afirma que cada año se embarazan en Estados Unidos 1.2 millones de adolescentes, lo que representa el 20% de nacimientos. Un 25% de estas niñas embarazadas tienen apenas 14 años de edad, y una de cada siete están decididas a abortar. 4
En América Latina los países con mayor tasa de maternidad en adolescentes se encuentran en las regiones de: Nicaragua, Honduras, El Salvador, Venezuela, representando entre un 15 - 25% de las adolescentes. En Jamaica y Guadalupe, notifican tasas superiores a 100 por 1000 mujeres adolescentes, mientras que en Puerto Rico, Uruguay y Chile, oscilan entre 60 y 70. (5
En Cuba existen estadísticas que muestran que hasta 2017 más de 2000 adolescentes interrumpieron sus estudios por embarazos en la adolescencia, abortos y matrimonios precoces, que la mayoría terminaron en divorcio con la secuela de traumas psicológicos, tanto para la pareja como para sus hijos, todos estos en consecuencia de relaciones sexuales no protegidas y a edades tempranas.
La provincia de Granma ha venido reflejando un incremento del número de embarazo en adolescentes de 15 a 19 años, reportándose desde el año 2014 al 2017 un 19.2%, 21.6%, 19.7%, y 19.8% respectivamente del total de embarazadas captadas. Preocupa al Sistema Provincial de Salud y, específicamente, al Programa Materno Infantil, el incremento del embarazo en las adolescentes menores de 15 años, pues se reporta que en los tres últimos años estas menores de 15 representan más del 7% de las adolescentes embarazadas.
En el municipio de Niquero durante el año 2014 la prevalencia fue de un 5.9%, triplicándose casi la cifra en el 2015 a un 15.4%, 16.1% en el 2015 y 17.2 % en el 2016; en el año 2017 hubo 72 casos de nacimientos de madres adolescentes, con todas las consecuencias biológicas, psicológicas y sociales negativas para la madre y el niño que estos acarrean.
Por la importancia que implica la prevención del embarazo en la adolescencia en la salud materna infantil, nos ha motivado a elegir este tema con el objetivo de elevar el nivel de conocimientos en las adolescentes con la implementación de una intervención educativa sobre embarazo en la adolescencia
Método
Se realizó un estudio cuasiexperiemental (intervención educativa) con el objetivo principal de elevar el nivel de conocimiento sobre embarazo en la adolescencia en las adolescentes pertenecientes al Consultorio Médico de Familia 37 del municipio Niquero, desde noviembre del 2016 a mayo del 2018, con la implementación de un programa educativo. El universo de estudio quedó conformado por 105 adolescentes del sexo femenino y la muestra quedó conformada por 32 adolescentes, seleccionándose a través de un muestreo no probabilístico y la aceptación del consentimiento informado por el padre o tutor.
Distribución y clasificación de las variables objeto de estudio
Edad: según los años de vida. Adolescencia temprana o pre-adolescencia (10-14), Adolescencia tardía (15-19).
Nivel de conocimiento sobre: edad adecuada para tener el primer hijo. Se evaluó según el cuestionario diseñado por las autoras.
Nivel de conocimiento sobre: métodos anticonceptivos. Se evaluó según el cuestionario diseñado por las autoras.
Nivel de conocimiento sobre: consecuencias del embarazo para las adolescentes y el futuro bebé. Se evaluó según el cuestionario diseñado por las autoras.
Procedimientos
Por ser un estudio de intervención constó de 4 etapas: Diagnóstica, elaboración de la intervención educativa, ejecución y evaluación. Se trabajó en un grupo, donde se aplicaron las diferentes técnicas educativas para lograr la efectividad del programa con los temas relacionados con el embarazo en la adolescencia en el sexo femenino. La estrategia de intervención contó con 7 sesiones de trabajo, una sesión de inicio, 4 sesiones temáticas y una sesión de cierre.
Se utilizaron además los siguientes métodos: Métodos teóricos: el análisis y la síntesis, inductivo -deductivo, modelación. Métodos empíricos: la encuesta.Método estadístico: Estadística descriptiva: (números absolutos y porciento) Estadististica inferencial: (como la prueba de los signos)
Obtención de la información
Primarias: Encuestas.
Procesamiento de la Información y obtención de los resultados
Para el procesamiento de la información se confeccionó una planilla, donde se expresó toda la información obtenida en las encuestas y se incorporó a una base de datos. El estadígrafo de comparación que se utilizó fue el por ciento. Para el análisis de los cambios que se operó en el nivel de conocimientos en relación a las variables seleccionadas y descritas con anterioridad, es decir, antes y después de implementada la estrategia, se utilizó la estadística inferencial por medio del test no paramétrico de la Prueba de los Signos, de gran sencillez y confiabilidad.
Resultados
En cuanto a la edad prevalece el grupo etáreo de 15 a 19 años con 22 pacientes para un 68.75% lo que indica que la mayor cantidad de adolescentes que participaron en el estudio pertenecen a la adolescencia tardía. (tabla 1)
Se relaciona la opinión de los adolescentes en cuanto a la edad adecuada para tener el primer hijo ,antes de la intervención solo 8 adolescentes respondieron adecuadamente para un 25% y después de aplicado el programa educativo se revierte pues 31 responden positivamente para un 96.87%. (tabla 2)
Evaluación del nivel de conocimiento | Antes | Después | |||
No. | % | No. | % | ||
Adecuado | 8 | 25 | 31 | 96.87 | |
No adecuado | 24 | 75 | 1 | 3.12 |
Fuente. Encuesta
Ro < rt se rechaza Ho. Ro < rt se rechaza Ho.
Se refleja que antes de la intervención solo 15 adolescentes respondieron adecuadamente sobre los métodos anticonceptivos que conocían para un 46.87% y después de aplicado el programa educativo se revierte pues 30 responden positivamente para un 93.75%. (tabla 3)
Evaluación del nivel de conocimiento | Antes | Después | ||
No. | % | No. | % | |
Adecuado | 15 | 46.87 | 30 | 93.75 |
No adecuado | 17 | 53.12 | 2 | 6.25 |
Fuente. Encuesta
Ro < rt se rechaza Ho.
Al explorar el nivel de conocimientos (tabla 4) sobre las consecuencias del embarazo para la madre y el futuro bebé se refleja que antes de la intervención 26 adolescentes respondieron de forma inadecuada al no tener los conocimientos sobre la temática luego de aplicada la intervención las 32 adolescentes responden adecuadamente lo que representa un 100% y se demuestra una vez más la efectividad del programa educativo.
Discusión
La etapa de la adolescencia es muy compleja por sus características, hay un patrón de comportamiento impredecible lo que la convierte en un grupo muy vulnerable a riesgos de salud sexual y sus consecuencias sociales como es el caso de la gravidez, donde a la adolescente se le ha dado socialmente la mayor responsabilidad.6
La elevada incidencia del embarazo en estas etapas de la vida ,por la inexperiencia ,la influencia del grupo y la falta de responsabilidad y percepciòn del riesgo,por lo que se requiere una buena orientaciòn en estas etapas de la vida sobre este tema,por lo que resulta importante que haya prevalicido este grupo etàreo.
Con relación al conocimiento sobre la edad adecuada para tener el primer hijo se encontraron resultados similares a un estudio comunitario realizado a 89 adolescentes por Ravelo García reflejaron que el 75% de los adolescentes conocían la edad adecuada para tener el primer hijo reflejando algunos de las características físicas, psicológicas y biológicas propias en esta edad.3
Es considerado de riesgo el embarazo a las mujeres muy jóvenes debido a que sus organismos no han madurado aún y generalmente no tienen una independencia económica, ni han alcanzado la madurez psicológica, ni concluido sus estudio .
Existe un aumento en la frecuencia del embarazo y la maternidad en las adolescentes, especialmente en las edades inferiores a los 15 años. El 25% de las adolescentes con experiencia sexual se embarazan y ocurre el 60% de estas gestaciones en los primeros 6 meses posteriores al inicio de las relaciones sexuales. (7,8
La anticoncepción desde la antigüedad, nos demuestra que la sociedad, ha comprendido la necesidad de utilizar estas técnicas y que debido a su evolución, estuvieron más influenciadas por las costumbres y las creencias religiosas.
Los resultados sobre métodos anticonceptivos coinciden con los encontrados por otros autores que plantean que existen conocimientos, pero inadecuados y con un alto nivel de fallas y no de uso. Todo esto independientemente del sexo y el tipo de escuela considerada. Además la mayoría de los adolescentes no reciben la información de personal capacitado. (7
Se considera que es frecuente el no uso de métodos anticonceptivos en muchos casos, así como en la repetición de juicios y criterios trasmitidos desde las generaciones adultas .hay un comportamiento peculiar en relación con el uso del condón, entre muchas muchachas el condón tiene un significado más vinculado con la protección de enfermedades de transmisión sexual que con la protección ente un embarazo y a medida que avanza en la relación lo dejan de usar, pues refieren seguridad y confianza entre ambos ,o porque se les olvida además de no pensar en el embarazo como consecuencia. 9
Cortés Alfaro coincide en que los métodos anticonceptivos no son usados regularmente en la adolescencia por falta de desconocimiento y falta de percepción de riesgo. Este autor en su universo de estudio encontró que solo 49.2% de los adolescentes usaron algún método anticonceptivos y de ellos solo 24.9% lo hacían de forma regular siendo el condón el más referido por su fácil manejo. (9
El preservativo o condón es el mejor durante la adolescencia porque no tiene contraindicaciones, no provoca daños, es muy eficaz cuando se usa adecuadamente y en todas las relaciones sexuales, es fácil de poner y quitar además se puede comprar con facilidad en cualquier farmacia.
Los métodos anticonceptivos no son los más usados y aceptados por los adolescentes, a veces dado por su poca experiencia o porque pese a tener concomimientos sobre el sexo protegido, deciden correr la aventura por complacer al varón, lo que provoca la llegada de un embarazo para lo cual no tienen preparación.
En relación a las consecuencias del embarazo en los adolescentes para algunos autores como Cúrvelo Fajardo en el año 2005, expone que en un estudio realizado a un grupo de 86 adolescentes en encuestas realizadas encontraron que el 95% de estos desconocían las consecuencias del embarazo en esta etapa de la vida.8
Otros autores refieren que los hijos de madres adolescentes son más proclives a nacer con bajo peso, a la prematuridad, traumas obstétricos y presentan un riesgo elevado de muerte prenatal en el transcurso del primer año de vida y de sufrir abuso físico, negligencia en sus cuidados, desnutrición y retardo del desarrollo físico y emocional con dificultades en su vida de adultos. (6
El embarazo en adolescentes puede tener consecuencias adversas para la salud tanto a corto plazo como a largo plazo, obteniendo resultados en ambos casos muy desfavorables. Se considera que el embarazo en adolescentes incluso aquel que es deseado, lleva implícito un incremento en los riesgos tanto para la madre como para el feto y futuro recién nacido. Muchas tienen bajo peso o baja talla, lo que contribuye a que aparezcan complicaciones.
Ha sido demostrado que los hijos de la madres adolescentes son más proclives a nacer con bajo peso, a la prematuridad, a traumas obstétricos y presentan un riesgo elevado de muertes prenatal en el transcurso del primer año de vida y de sufrir abuso físico, negligencia en sus cuidados, desnutrición y retardo del desarrollo físico y emocional con dificultades en su vida de adulto. (9
Los adolescentes en esta etapa de la vida tienden a ser impulsivos, no medir sus actos, ni percibir el riesgo a pesar de la educación en salud que puedan recibir sobre embarazo en los diferentes contextos, por lo que pueden tener algún conocimiento pero no lo ponen en práctica debido a las características psicológicas presente en esta etapa de la vida.