Introducción
Las Universidades de Ciencias Médicas en Cuba, con el desarrollo socioeconómico y las exigencias contemporáneas, propio del desarrollo científico técnico, se han visto obligadas a modificar sus objetivos para lograr una mejor identificación y solución de los problemas de salud de la comunidad y poder cumplir el compromiso institucional que tiene ante la sociedad.
El uso de las nuevas tecnologías de la información y las comunicaciones (TIC) dentro del sector salud, llegó como respuesta a la necesidad de cambio que tienen que asumir los educandos y los educadores en el desarrollo del proceso enseñanza- aprendizaje; para lograr un estudiante capaz de autogestionar su conocimiento y autoevaluar la adquisición de ese conocimiento, con el fin de convertirse en un futuro graduado que responda adecuadamente a las necesidades del mundo contemporáneo.
Cada uno de los retos y nuevas exigencias que enfrenta la educación médica superior cubana en la actualidad, tiene que estar incluida en el contenido del trabajo metodológico de sus diferentes niveles, desde las experiencias concretas de la formación a través de la instrucción, hasta la introducción creativa y coherente de los novedosos recursos que las TIC ponen al alcance de todos.1
El uso de las TIC transforma la obtención, procesamiento, socialización y conservación de la información, así como el modo de comunicación entre los sujetos. Las mismas han venido ocupando un lugar preponderante en los actuales procesos formativos universitarios, lo que ha sido planteado desde diferentes perspectivas por autores como Rivero,2 y Vialart.3
El profesor como actor principal en la conducción del proceso pedagógico debe, a través de sus clases, motivar al estudiante al correcto uso de las TIC.4
Esta transformación no puede ser posible si no existe un claustro con una actitud positiva y los conocimientos necesarios para hacer un uso justo y racional de todos los medios que ofrecen las TIC.
Sí estas condiciones no existen se hace necesario la capacitación y preparación de todos los profesores para cumplir estas exigencias. Es preciso diagnosticar y conocer la realidad concreta, en cuanto a motivos, conocimientos y perspectivas que tiene los profesores sobre las TIC y su utilidad en el proceso pedagógico.5
Los autores de esta investigación tienen como objetivo valorar la preparación de los profesores para fortalecer el uso de las TIC en función del proceso de enseñanza-aprendizaje del pregrado. Las insuficiencias encontradas revelan, que son escasas las investigaciones que valoran el nivel de conocimiento y uso que hacen de las TIC los profesores de pregrado en la Universidad de Ciencias Médicas de Matanzas.
Materiales y métodos
Se realizó un estudio cuantitativo en la Universidad de Ciencias Médicas de Matanzas, en el período de enero-mayo del 2019, para valorar la actitud, el nivel de conocimiento y uso que realizan de las TIC los profesores del área básica.
El universo de estudio estuvo constituido por los 74 profesores pertenecientes al claustro de área básica (1ro y 2do año) de la carrera de Medicina.
Se aplicó un cuestionario tipo escala Likert, compuestos por 31 ítems, que ofrecen la opción de responder empleando cinco categorías:
El cuestionario concibió tres dimensiones:
Se trabajó con las variables conocimiento y uso donde se utilizaron las categorías siguientes:
Con la variable actitud se establecieron las categorías:
Esta investigación respetó los postulados de la ética de la investigación. Su objetivo tuvo un fin científico, sin afectaciones del medio ambiente, ni riesgos predecibles. Para realizar la encuesta, se le informó al entrevistado de los objetivos perseguidos con la investigación y se le solicitó su consentimiento. La información obtenida no se empleó para otros fines fuera del marco de la investigación. Los datos primarios se manejaron con discreción para la investigación.
Resultados
Resultados cuantitativos de la aplicación del instrumento evaluativo
En la tabla 1 se realizó la distribución general según sexo y grupos de edades, la mayor cantidad estuvo en el rango de edad entre los 40 -59 años, con un 82,4 %. El resto estuvo entre 20-39, un 12,2 % y entre 60-80 un 5,4 %. Predominó el sexo femenino con un 82,4 % y el masculinos con 17,6 %. Prevalecieron las mujeres de 40-9 años de edad con un 64,9 %.
Grupos de edades | Sexo | Total | ||||
---|---|---|---|---|---|---|
Femenino | Masculino | |||||
No. | % | No. | % | No. | % | |
De 20 a 39 | 9 | 12,2 | 0 | 0,0 | 9 | 12,2 |
De 40 a 59 | 48 | 64,9 | 13 | 17,6 | 61 | 82,4 |
De 60 a 80 | 4 | 5,4 | 0 | 0,0 | 4 | 5,4 |
Total | 61 | 82,4 | 13 | 17,6 | 74 | 100,0 |
La tabla 2 muestra las competencias que declararon, en dependencia del conocimiento y el uso que realizan de las TIC. El 74,3 % mostraron escaso conocimiento, solamente un 25,7 % poseen conocimiento medio y no hubo con nivel alto, los resultados fueron muy dispersos y desfavorables. En cuanto al uso, el 71,6 % de los profesores declararon que hacen poco uso de las mismas, solamente el 2,7 % marcaron la categoría de alto. El 74,3 % tenían un conocimiento bajo sobre el variado uso que pueden hacer de las TIC, lo que coincidió con un 71,6 % que solo la usan. El 2,7 % declararon un alto uso lo que no coincidió con el conocimiento.
Competencias | Categorías | |||||
---|---|---|---|---|---|---|
Bajo | Medio | Alto | ||||
No. | % | No. | % | No. | % | |
Conocimiento | 55 | 74,3 | 19 | 25,7 | 0 | 0,0 |
Uso | 53 | 71,6 | 19 | 25,7 | 2 | 2,7 |
La tabla 3 presenta la distribución de los docentes según el nivel de conocimiento y uso que declaran realizar de las TIC. Más del 50 % de los profesores declararon un bajo conocimiento y a su vez, realizan un bajo uso de ellas. Existe el 6,8 % afirmó bajo conocimiento, sin embargo, realizan un uso medio de ellas. Existe un 4,1 % que tienen conocimiento medio y una utilización baja. Un 2,7 % declararon poseer un conocimiento medio, pero con un alto uso.
Uso de las TIC | Nivel de conocimiento | Total | ||||
---|---|---|---|---|---|---|
Bajo | Medio | |||||
No. | % | No. | % | No. | % | |
Bajo | 50 | 67,6 | 3 | 4,1 | 53 | 71,6 |
Medio | 5 | 6,8 | 14 | 18,9 | 19 | 25,7 |
Alto | 0 | 0,0 | 2 | 2,7 | 2 | 2,7 |
Total | 55 | 74,3 | 19 | 25,7 | 74 | 100,0 |
En la tabla 4 aparecen los niveles de actitud. El 58,1 % de los profesores pertenecientes al área básica de la carrera de Medicina expresaron tener una actitud excelente ante el uso de las TIC en la docencia. El 35,1 % mostraron niveles aceptables y el 6,8 % manifestaron una mala actitud. La tabla muestra que los profesores en sentido creciente, están a favor del uso de las TIC con más del 50 % en todos los ítems.
Discusión
Cuba se encuentra en un proceso de perfeccionamiento de su modelo económico en todos los sectores, en el que se reconoce el papel de la informatización de la sociedad como motor impulsor para su propio desarrollo. En este contexto, la Dirección Nacional de Informática y Comunicaciones del MINSAP, trabaja en la actualización de la base legal y el plan de desarrollo y uso de las TIC hasta el 2030.6-10
En correspondencia con las exigencias del MINSAP y del desarrollo de la informatización de la sociedad cubana la tecnología ocupa un papel preponderante dentro los procesos de enseñanza-aprendizaje en las aulas universitarias y en todos los niveles de enseñanza del país. Es necesario que los profesores, que no son nativos digitales, adopten actitudes a favor de un pensamiento transformador que les permita desarrollar habilidades para poder lidiar mejor con las tecnologías de la información y las comunicaciones en función de una didáctica desarrolladora, aprovechando los elementos de la teoría de Vigotsky y cumpliendo con el rol de ser buenos guías en el aprendizaje de los estudiantes, especialmente mediado por tecnologías.11
Las TIC llegaron para acompañar los espacios que ocupan las libretas, los libros impresos, las tizas y el pizarrón, pues se suman al grupo de herramientas de que hoy se dispone para aprender, no son ni mejores ni peores, son otras que ofrecen muchas ventajas sin sustituirlas, para lograr modificar los ambientes educativos existentes. La responsabilidad está en cómo es capaz el profesor universitario de transformarse a la par de sus estudiantes y ser un ente activo en un mundo tecnológico cada vez más desarrollado.12,13
Como aspecto positivo en el estudio se aprecia de manera ascendente una mejor actitud de los profesores hacia el uso de las TIC para emplearlas en el proceso de enseñanza-aprendizaje, inclusive algunos las consideran imprescindibles. Aunque existe todavía los que mantienen una actitud indiferente ante el uso de las mismas y niegan lo novedoso de su utilización.
En el área básica de la Universidad de Ciencias Médicas de Matanzas, laboran 74 profesores que imparten docencia en la carrera de Medicina, en su mayoría mujeres con un rango de edad entre los 40 y 59 años. Todos con un alto nivel profesional y declararon poseer un conocimiento bajo respecto a las TIC, a pesar de todas las posibilidades que brindan en el proceso docente educativo, lo que se corresponde con el insuficiente uso que realizan de las mismas.
Lo limitado del estudio es que se utilizó como muestra a los profesores de la carrera de Medicina pertenecientes al área básica, pero se pudiera hacer extensivo no solo al área clínica sino a todas las carreras de las ciencias médicas dentro de la universidad tanto del pregrado como del postgrado. Esto permitiría obtener una información más completa sobre el problema a resolver dentro de la universidad, realizar acciones que respondan a las necesidades objetivas declaradas por los profesores para potencializar su conocimiento y de esta forma elevar el uso que se realiza de estas tecnologías.
Los autores de esta investigación coinciden con otras investigaciones donde se plantea que: “en el contexto, de una sociedad que avanza en la informatización; de un aumento en los niveles de acceso y las formas de conexión tecnológica, sobre todo entre los más jóvenes y de proyecciones que apuntan al incremento de las opciones de conectividad a internet en la sociedad, la educación tiene el imperativo de convertirse en la «punta de lanza» en materia de formar conductas responsables ante el uso de las tecnologías de la información y las comunicaciones, y de generar capacidades para aplicarlas de forma coherente en el proceso de enseñanza aprendizaje”.14-17
Se considera que el proceso de enseñanza aprendizaje debe convertirse en un quehacer tecnocientífico, donde la ciencia y la tecnología se imbrique en el proceso cognoscitivo, donde sujeto y objeto de la educación constituyen elementos conscientes y activos. El docente es un moderador que orienta, controla y evalúa la actividad de estudio, la capacidad de aplicación de la realidad estudiada y el desarrollo de capacidades, habilidades y destrezas en la aplicación de los conocimientos. Sí no se prepara para ello le será difícil incorporar a la sociedad un profesional más capaz y apto para utilizar la tecnología moderna y los procesos tecnocientífico de punta, sustentados en un conocimiento verdadero.18
Sin dudas, las TIC proporcionan medios para la mejora de los procesos de enseñanza aprendizaje, pero su utilización a favor o en contra de una sociedad más desarrollada, dependerá en gran medida de la educación, de los conocimientos y de la capacidad crítica de sus usuarios y entre ellos se encuentran los jóvenes que se están formando.19
El mundo nuevo requiere la escuela nueva, dijo José Martí. Ganar la batalla política-cultural que se libra hoy en el terreno de la comunicación, pasa por formar un alumnado más consciente y responsable sobre el papel de las TIC. La educación es la clave para lograrlo y el profesor su guía principal.
Los autores consideran que deben prepararse en aquellos temas de tecnologías que después puedan ser utilizados en función del proceso enseñanza-aprendizaje en el pregrado para fortalecer el desarrollo y la creatividad del proceso, y lograr un profesional más preparado e independiente.