EDITORIAL

Palabras del Prof. Dr. Jorge González Pérez, Rector de la Universidad de Ciencias Médicas de La Habana y Director de la Revista Habanera de Ciencias Médicas, en la caracterización de la graduación del curso 2008-09, efectuada en el Teatro Astral de Ciudad de La Habana.

22 de julio de 2009

Dr. José Ramón Balaguer Cabrera, Miembro del Buró Político y Ministro de Salud Pública,

Compañeros de la Presidencia,

Profesores,

Graduados,

Invitados

 

 

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En el año del 50 Aniversario del Triunfo de la Revolución cubana, y a pocas horas del 56 Aniversario de la heroica gesta del Moncada, la Universidad de Ciencias Médicas de La Habana desarrolla el acto de graduación del curso escolar 2008-2009, egresando un total de 2 763 profesionales de la salud, formados en escenarios docentes de la Ciudad de La Habana, de los cuales, 2 436 son estudiantes cubanos y 327 estudiantes de otros países, 311 integrantes de la quinta graduación de la Escuela Latinoamericana de Medicina, idea de Fidel, y expresión de solidaridad permanente de nuestro pueblo con otros pueblos hermanos del mundo y como parte de la contribución de Cuba a la elevación del nivel de salud en diferentes partes del mundo, junto a la labor de las Brigadas Médicas Cubanas que laboran allí.

En este curso escolar, reciben sus títulos en Ciudad de La Habana, 692 graduados de la carrera de Medicina, 123 de Estomatología, 124 de Enfermería, 1 786 de Tecnología de la Salud y 38 de Psicología.

Este curso se desarrolló de forma exitosa, con la participación activa de estudiantes, profesores y trabajadores en las actividades curriculares y extracurriculares, entre las que se destacan las labores de promoción y prevención de salud, sobre todo, en los programas de sostenibilidad de la campaña de lucha antivectorial, la aplicación progresiva de la Medicina Natural y Tradicional, el programa de detección precoz de enfermedades renales y la atención de los pacientes dispensarizados con la aplicación correcta del método clínico y epidemiológico. Todas estas actividades se desarrollaron en estrecho vínculo con el desarrollo del proceso docente educativo, apoyado cada día en una mayor cantidad de horas dedicadas a la educación en el trabajo en la comunidad, sin precedentes en cursos anteriores.

En nuestra ciudad, la municipalización de la Educación Médica Superior ha continuado desarrollándose de forma vertiginosa en el curso que concluye, con un importante aumento territorial del número de sedes universitarias y crecimiento del claustro; desarrollándose actividades académicas de alguna de las cinco carreras de Ciencias Médicas en los policlínicos de la Ciudad de La Habana, los consultorios del médico y la enfermera de la familia, en instituciones hospitalarias e institutos de investigación, entre otros lugares, destacándose la incorporación sistemática y creciente de nuevas unidades al Proyecto Policlínico Universitario, lo que eleva a 78% los lugares donde se desarrolla la carrera de Medicina desde el primer año en la Atención Primaria de Salud de los 15 municipios de la Capital.

Durante este curso, continuó el desarrollo exitoso del Internado profesionalizante para los 365 estudiantes cubanos, con un loable desempeño y participación de ellos en la reorganización de los servicios asistenciales de la Atención Primaria de Salud en nuestra Capital, garantizando con su labor la apertura de igual número de consultorios para la atención de la población. Al mismo tiempo, se mantuvo el Internado rotatorio para los 327 Internos procedentes de otros países, partiendo un grupo de ellos para Guatemala y Venezuela para la culminación de su carrera, los que se incorporaron a las Brigadas Médicas Cubanas que laboran en los lugares más inhóspitos y necesitados de esos hermanos pueblos.

Los 123 estudiantes de Estomatología que se gradúan en este curso han laborado durante su cuarto y quinto año de la carrera en 36 clínicas y servicios estomatológicos de todos los municipios de la Capital, logrando con ello un paso de avance en la descentralización de la formación de esta carrera, que ya inició este curso también el 1er. año en tres municipios nuevos.

De forma significativa, hay que resaltar, la culminación de estudios de 1 786 Licenciados en Tecnología de la Salud por el Nuevo Modelo Pedagógico, que forma parte de los programas de la Revolución dentro de la Batalla de Ideas en la Salud, en los 21 perfiles con que cuenta esta carrera. Estos continúan desplegando un papel decisivo e importante en la apertura y puesta en marcha de los nuevos servicios con que se han dotado los policlínicos y hospitales de la Capital, contribuyendo de forma significativa a aumentar la calidad de la Atención Primaria y el mejoramiento de la salud de nuestro pueblo. Se gradúan además 124 estudiantes de Licenciatura en Enfermería, quienes se encontraban, desde su formación básica y técnica, insertados en los diferentes servicios de salud en nuestra ciudad y que elevan con ello el nivel científico de esta abnegada profesión.

Por primera vez, en nuestra Universidad, se produce la graduación de 38 profesionales de la carrera de Psicología, presentes en este teatro, formados desde nuestros servicios y con nuestros profesores, los que han demostrado durante su carrera estar preparados para interactuar en todas las áreas y esferas importantes de la vida humana, para contribuir con sus conocimientos y experiencia a elevar la calidad de vida y la salud de nuestro pueblo, lo que merece una consideración especial y un gran reconocimiento.

Aunque podríamos estar muy felices por el momento en que vivimos hoy, resulta necesario comentar que en el mes de mayo se realizó en el país un examen diagnóstico de caligrafía, ortografía, redacción e interpretación. Ello permitió tener una valoración general sobre el conocimiento y empleo de nuestra lengua materna por los futuros profesionales. Esto determinó la no graduación en esta fecha de casi la tercera parte de nuestros estudiantes, con mayor afectación en las carreras de Enfermería y Tecnología de la Salud, lo que es una importante alerta de cuánto debemos trabajar en la formación integral de cada uno de nuestros profesionales, lo que no se circunscribe sólo al conocimiento específico de la carrera que estudia, sino también a otras áreas del saber, entre las que tiene que ocupar un lugar importante el conocimiento y empleo correcto de la lengua materna.

No obstante la reducción que ha provocado en las cifras históricas de graduación de nuestra Universidad el resultado de este examen diagnóstico de español, debemos tener bien claro que ello es un indicador de calidad, pues se es universitario en el concepto integral de la palabra, no en la parcialidad de un conocimiento específico, en el caso nuestro de salud.

Aún así con esta afectación estadística, hoy, sólo en Ciudad de La Habana, se gradúan tantos médicos como los que graduó toda Cuba en 1959, el doble de los estomatólogos que egresaron en esa misma fecha, y no se puede comparar con el resto de los licenciados, pues esas carreras no existían dentro de las Ciencias Médicas en ese entonces.

En momentos como este, en que Uds. reciben sus títulos, tienen que pensar y preguntarse si esto hubiera sido posible en otro contexto social; tienen que pensar y preguntarse si esto hubiera sido posible sin esta Revolución. Pero debemos también pensar que si tenemos Revolución es por la lucha del pueblo cubano y otros pueblos hermanos, pero si tenemos Revolución es por la guía y conducción permanente de nuestro Partido Comunista de Cuba, si tenemos Revolución y Partido, si tenemos Sistema de Salud y Universidad, eso tiene un nombre, Fidel Castro Ruz, por su liderazgo y dedicación al pueblo, cuya continuidad tiene hoy el querido Raúl, por eso concluimos diciendo, desde el fondo de nuestros corazones:

Viva el pueblo de Cuba y la Solidaridad, Viva la Revolución, Viva el Partido Comunista de Cuba, Vivan Fidel y Raúl.