INTRODUCCIÓN
El Policlínico Docente Universitario “XX Aniversario” fue inaugurado en el año 1979, en saludo al vigésimo aniversario del triunfo de la Revolución; en sus inicios solo constaba con tres servicios básicos: Pediatría, Medicina y Ginecobstetricia, y con los departamentos de Psicología, Estomatología, Fisioterapia, Laboratorio Clínico, Trabajo Social y Rayos X, además de los administrativos. En 1984 se constituyó el primer comité de base de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC); en ese año se le otorga la categoría de Policlínico Docente Comunitario a la unidad, se creó el Programa del Médico y la Enfermera de la Familia con 16 consultorios, y fue el encargado de ejecutarlo por primera vez en Villa Clara.
Es en este contexto que se rediseña el modelo pedagógico de educación médica inspirado en las ideas formuladas por el Comandante en Jefe en el discurso de clausura del IV Congreso de educación médica superior.1
La universalización de la enseñanza superior formó parte de los planes priorizados que se comenzaron a implementar en las condiciones de la III revolución educacional que desarrolla Cuba. Por su contenido, este programa exige un espacio mayor de aprendizaje de los estudiantes en relación con el proyecto curricular. La propuesta buscaba centrar de manera particular la actividad formativa en la atención primaria de salud como principal escenario docente para los estudiantes de Medicina, al tiempo de dar a la Medicina General Integral (MGI) el verdadero papel de columna vertebral o asignatura rectora del proceso formativo del médico en Cuba. A partir de esta idea, se otorgó mayor prioridad a la conversión de los policlínicos comunitarios en sedes universitarias donde se gestaran la docencia y la investigación, integradas a la asistencia médica; ello partiendo de una concepción estructural y organizativa que disponía de aulas multipropósitos, además de utilizar todos los recursos tecnológicos incorporados a la docencia para una asistencia médica de calidad.2,3
Entre 2004 y 2005, el policlínico comunitario se convirtió en policlínico docente universitario, escenario principal para el aprendizaje en la carrera de Medicina. Para el desarrollo de la docencia se contó con la participación de los médicos graduados, trabajadores de esos policlínicos, y se comenzó el proceso de categorización docente como condición para asumirla. Entre 2005 y 2011 se continuó perfeccionando la universalización y se incrementó notablemente el número de matrículas para estudiar la carrera, con una sólida concepción teórica y metodológica en el plan de estudio; la reingeniería de la MGI la declara como disciplina rectora de la profesión. Este proceso formativo prosiguió desarrollándose, siempre en aras de su perfeccionamiento continuo, se intencionaron el protagonismo estudiantil, la actividad independiente y la práctica participativa (profesional) frente a la contemplativa, de manera que la principal forma de enseñanza fue la educación en el trabajo. Se constituyeron comisiones para llevar adelante la labor educativa y político-ideológica. Por otra parte, se produjeron cambios en el plan de estudios, si bien el más sustancial se basó en integrar cinco asignaturas (Embriología, Anatomía, Bioquímica, Histología y Fisiología) en la disciplina Morfofisiología.4,5
La incorporación progresiva de los policlínicos como escenarios idóneos para la formación de los recursos humanos que necesita el sistema y la transformación de los policlínicos docentes en policlínicos facultad, reforzaron el paradigma del enfoque biopsicosocial de la medicina cubana, y garantizaron una formación más pertinente, lo que propició, además, un ambiente universitario en dichas instituciones que requirió de la actividad científico-técnica tanto en el pregrado como en el posgrado.3,4
Esta investigación tiene como objetivo: describir el impacto del proceso de universalización de la enseñanza del ciclo de área básica en el Policlínico Docente Universitario “XX Aniversario” durante 10 años de su desempeño.
MÉTODOS
Se realizó una investigación documental con enfoque cuanticualitativo en el Policlínico Docente Universitario “XX Aniversario” de Santa Clara, Villa Clara, cuyo objeto de estudio fue el decursar histórico de la institución relacionado con el proceso de universalización de la enseñanza desde el curso 2005-2006 hasta 2014-2015, en la formación del área básica de la carrera de Medicina.
Se utilizaron métodos teóricos:
Análisis-síntesis e inducción-deducción: para los fundamentos teóricos del tema, valorar la información empírica obtenida y determinar los aspectos que conforman la caracterización de la docencia en el ciclo de área básica en el periodo estudiado.
Histórico-lógico: para valorar la progresión del proceso de universalización en el ciclo área básica a partir de la revisión documental.
Empíricos:
Análisis documental de:
Los registros de asistencia y evaluación: para conocer la matrícula de estudiantes del ciclo de área básica por cada curso escolar, así como las cifras de retención escolar.
Actas de exámenes: para conocer los resultados de promoción final en cada curso escolar.
Informes relacionados con entrevistas individuales a los estudiantes en la semana de familiarización de primer año en cada grupo y curso escolar, para indagar sobre su motivación por la ubicación en el policlínico universitario.
Informes sobre los proyectos de trabajo educativo de cada período escolar: para conocer aspectos fundamentales relacionados con la integralidad (participación en actividades políticas, culturales, deportivas y científicas; y otros aspectos de interés).
Informes de los colectivos de año de docentes, la evaluación profesoral y controles a clases: con el objetivo de averiguar sobre la preparación pedagógica, político-ideológica y la calidad de la impartición de la docencia.
Datos generales para conocer los años de experiencia, grado científico, años trabajando en la docencia de las asignaturas del ciclo, así como las dificultades para tener una mejor superación pedagógica, entre los docentes.
Del nivel matemático: para el análisis de la información en valores absolutos y relativos expresados en las tablas.
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Los cursos de mayor matrícula fueron 2007-2008 y 2008-2009, y los de menor número de estudiantes fueron 2006-2007 y 2010-2011, como se observa en la Tabla 1. La matrícula inicial fue pequeña, con solo 12 estudiantes. Hubo predominio del sexo femenino sobre el masculino en todos los cursos analizados.
Con respecto a la retención escolar, al finalizar los 10 años hubo un total de 9 bajas: 4 por problemas personales y 5 por dificultades docentes, lo cual representó el 3,3 % del total de la matrícula.
La mayoría de los estudiantes promovieron en todos los cursos escolares, como se observa en la Tabla 2. En el curso 2005-2006 resultó ser el de más bajo porciento de promoción. Ya en el siguiente promovieron casi la totalidad (algunos después de realizar segundos extraordinarios). Se destaca que al final del periodo analizado la promoción total fue de 96,94 %, lo que se considera un excelente indicador de eficiencia.
En los informes relacionados con los resultados de las entrevistas a estudiantes se constató que el 63 % comenzó con escasa motivación por su ubicación en el policlínico, situación que fue revertida en el transcurso de primer año de la carrera en que asumieron su presencia en el proceso de universalización con responsabilidad y sentido de pertenencia. En todos los cursos, las cifras relacionadas con la motivación estuvieron por encima de la de los desmotivados, como expresa la Tabla 3.
Fuente: Informes relacionados con las entrevistas realizadas a los estudiantes. Departamento docente.
En la Tabla 4 se plasma la participación en actividades relacionadas con la integralidad estudiantil: políticas, culturales, deportivas y científicas. Es de destacar que se realizaron todas las planificadas en los proyectos educativos de cada curso escolar.
Fuente: Informes relacionados con el cumplimiento de los proyecto de trabajo educativo de cada curso escolar. Departamento docente. Policlínico Docente Universitario “XX Aniversario”.
La participación en actividades políticas fue la de mayores porcientos acumulados (91,7). Se respetaron los turnos de debate y reflexión en los que se programaron temas interesantes, con buena asistencia. La mayoría de ellos estuvieron en actos políticos, marchas y otras convocatorias.
En cuanto a los eventos culturales, siempre se realizó el Festival de Aficionados de la Federación Estudiantil Universitaria (FEU) en cada curso, sin embargo, la participación de las brigadas no siempre fue la mejor, generalmente iban como espectadores, pocos fueron localizados como talentos artísticos los cuales se presentaron en las diferentes manifestaciones. Se destaca el curso 2011-2012 como el de mayor representatividad con un 72 %.
Se obtuvieron resultados positivos en los eventos deportivos: los juegos escolares Behíques interpoliclínicos universitarios se efectuaron y los estudiantes obtuvieron lugares en ajedrez, fútbol, baloncesto y voleibol; de manera masiva participaron en la maratón inicial. Se confeccionó una bandera con una pantera negra para identificar la institución. Los resultados se correspondieron con el nivel de participación y el mayor índice fue el del curso 2007-2008, con un 93,5 %.
En cuanto a los eventos científicos, el forum estudiantil de base fue realizado en cada curso escolar para dar cumplimiento a su fundamental objetivo: iniciar la trayectoria investigativa de los estudiantes desde los primeros años de la carrera. El promedio de trabajos presentados en estos años fue de 34,6 %, cifra considerada aceptable si se tiene en cuenta que se trata de alumnos del área básica.
Entre otros aspectos de interés que expresan la formación integral del estudiante a través de la universalización, se mencionan:
Cátedras honoríficas y multidisciplinarias: la incorporación de los alumnos a ellas se intencionó desde el inicio; sin embargo, en la mayoría de los cursos académicos analizados solamente un 15 % participaron en ellas.
Guardia estudiantil: se cumplió en cada curso. Estuvo basada en un enfoque docente asistencial, sirvió de motivación masiva a los estudiantes por las oportunidades de estar en contacto con los pacientes y realizar procederes de enfermería y toma de signos vitales.
Actividades de trabajo comunitario: participaron en proyectos, campañas preventivas de enfermedades transmisibles: dengue y cólera, para su control y erradicación; realizaron en cada convocatoria una meritoria labor.
Fortalecimiento de valores: este aspecto tan importante se intencionó desde cada colectivo de año hacia lo curricular y al resto de las actividades; se fortalecieron de diversas maneras valores indispensables para el futuro egresado de las ciencias médicas, díganse honestidad, incondicionalidad, sacrificio, voluntad para ayudar a las personas necesitadas, valentía, disciplina, cumplimiento del deber, solidaridad, humanismo, internacionalismo, etc.
Incorporación al Movimiento “Mario Muñoz Monroy”: se destacan los primeros años en que se incorporaron un mayor número de alumnos; en los últimos cursos solamente un pequeño porciento de cada grupo optó por dicha condición; alegaron mucha materia por estudiar y esto incidió en no reunir todos los requisitos.
Alumnos ayudantes: este aspecto tuvo gran acogida por parte del estudiantado y cada año tuvimos el mayor número posible según las condiciones del alumno y las plazas ofertadas, el mayor número optó por ayudantías aunque en los resultados no sobrepasaron el 40 % en cuanto al otorgamiento.
Educación en el trabajo en el consultorio médico de la familia: este elemento estuvo afectado por la presión asistencial existente, sobre todo en tiempos de epidemia en que aumentaba el trabajo de los médicos. En los últimos tres cursos académicos se asumieron nuevas estrategias en la que los docentes médicos se trasladaron a la comunidad de conjunto con sus estudiantes e impartieron allí los contenidos, lo que posibilitó el proceso enseñanza aprendizaje desde la educación en el trabajo. Esto mejoró notablemente el desarrollo de las habilidades previstas en los programas.
Exámenes de premio: la participación de estudiantes sobresalientes en exámenes de premio no fue elevada, tomando en cuenta todas las asignaturas por año.
Olimpiadas de integralidad: se realizaron en cada curso escolar y las brigadas participaron; aunque no siempre sus resultados fueron como ganadores sí reconocieron haber aprendido al asistir a las ellas.
Preparar a los estudiantes de Medicina para su papel de médico en la sociedad no es lo mismo que formarlo en un proceso continuo y perfeccionado, demostrar o decir cómo se hace una acción, no es igual que educarlo para que la aprenda. Esta diferencia esencial, si no se resuelve en los servicios médicos de las unidades asistenciales, no posibilitará un egresado cada vez más integral como ciudadanos, un profesional con competitividad, ética, sentido humano, responsabilidad, cumplimiento del deber, empatía, espíritu científico, sentido económico de la profesión mayor comprometimiento con la obra de la revolución.5,6
La labor de los profesores ha sido igualmente meritoria y ha influido en estos resultados estudiantiles.
En la impartición de la docencia de estos diez años analizados, participaron 42 docentes de manera estable. Sobre su preparación pedagógica, todos poseían categoría docente: 24 (58,5 %) eran instructores, 14 (34,1%) asistentes, y 3 (7,3%) profesores auxiliares. El 100 % recibió el curso básico de Pedagogía, y 11 (26,8 %) cursaron diplomados pedagógicos.
Con respecto a la experiencia docente se consideró un claustro bien preparado: 5 tenían 2 y 5 años (11,9 %); 29, de 6 a 10 años (70, 7 %); 4, de 11 a 15 años (9,7 %); y 3, más de 15 años (7,3 %); hubo algunas insuficiencias en cuanto a la producción científica, entre ellas pocas publicaciones por la carencia de medios computarizados y dificultades en la conexión para facilitar las búsquedas bibliográficas necesarias para ese empeño, además de escasez de tiempo para dedicarse a ello. El 29,2 % de los docentes realizaron actividades investigativas, y ese mismo porciento tuvo al menos dos publicaciones de artículos en revistas médicas reconocidas.
En los controles a clases realizados resaltó la buena calidad del proceso enseñanza aprendizaje y un dominio acertado de los contenidos impartidos; todos los profesores transitaron por los cursos políticos y por las actividades metodológicas programadas.
En los colectivos de año se constató que el 14, 6 % no utilizaba sistemáticamente las estrategias curriculares. Otra carencia estuvo relacionada con que no todos podían acompañar a sus estudiantes en las actividades de la FEU por estar involucrados en labores asistenciales u otras necesidades del centro.
Según opiniones declaradas por los estudiantes, los especialistas en MGI que asumieron el rol de profesores a tiempo completo o parcial fueron verdaderos ejemplos a imitar por su humanismo, sentido de la responsabilidad social y laboriosidad.
Es válido resaltar que para el logro de buenos resultados en la universalización de la enseñanza se precisó una mayor autopreparación de los docentes desde el punto de vista pedagógico, esta depende potencialmente del grado de exigencia que tengan los docentes consigo mismos, en coincidencia con el pensamiento de Castro Ruz7 “La autopreparación tendrá calidad si existe el espíritu de superación, si se es exigente consigo mismo, si se está inconforme con los conocimientos que poseen (…). En la medida en que un educador esté mejor preparado, en la medida en que demuestre su saber, su dominio de la materia, la solidez de sus cocimientos, así será respetado por sus alumnos y despertará en ellos el interés por el estudio, por la profundización de los conocimientos”.
Los autores de la presente investigación coinciden con otros8,9,10) en que el profesor universitario es el eje fundamental en el trabajo formativo, sin embargo, su preparación teórico-metodológica para poder llevar a cabo con éxito el proceso de formación en valores de los estudiantes es aún insuficiente y requiere de actualización a partir de la superación permanente. La sistematización teórica e integración constituyen los fundamentos de la concepción pedagógica de contenido humanista del profesor de MGI, cuyo desempeño exitoso se revierte en un futuro egresado fortalecido en valores, independientemente de sus escenarios de formación.
CONCLUSIONES
El análisis realizado sobre los diez años de experiencia de la universalización de la enseñanza en el Policlínico Docente Universitario “XX Aniversario” , de Santa Clara, provincia de Villa Clara, permitió expresar la satisfacción por los resultados alcanzados en cuanto a la buena calidad del proceso enseñanza aprendizaje y la realización de las actividades educativo-formativas y otras, las cuales contribuyeron a la formación integral de los estudiantes como una muestra elocuente de los efectos positivos del proceso de universalización de la enseñanza en Cuba en general, y de la educación médica en particular.