Introducción
Las personas, en el proceso de desarrollo, requieren alcanzar habilidades específicas para satisfacer las necesidades cotidianas, de tal manera que puedan vincularse a los distintos roles sociales de acuerdo con la etapa del proceso vital humano en el cual se encuentren. Sin embargo, diferentes situaciones de la vida, como la primera infancia, las enfermedades crónicas, los problemas de salud discapacitantes y, en algunas, el envejecimiento, impiden que la misma persona pueda proporcionarse el cuidado para satisfacer sus necesidades, ya sea en forma transitoria o permanente. (1) En estas situaciones requiere del acompañamiento de otra que lo apoye o le realice las actividades que le permitan lograr su bienestar y máxima funcionalidad. Según sea el compromiso en la situación de salud de cada persona, o debido a aspectos culturales, sociales o económicos, entre otros, el cuidado podrá ser realizado en instituciones especializadas, en centros geriátricos o bien en el hogar. El cuidado en este último se ha denominado como informal o también como cuidado familiar cuando es ejecutado por una persona que no percibe un salario por ello. (2
El cuidado familiar conforma casi en su totalidad el sistema informal de cuidados; frente a este sistema, Bello LM, León GA, Covena MI, (3 expresa; también señalan que el sistema informal no es normativo, pues está constituido por una experiencia del diario vivir, contiene una fuente de afecto y reciprocidad a largo plazo y está abierto a todos los conocimientos de las personas y de los contextos. (4,5
Existe evidencia en la literatura de trabajos de enfermería acerca del cuidado al paciente con síndrome demencial. En nuestro medio, hay insuficientes investigaciones que apliquen una teoría o modelo conceptual de enfermería. Sin embargo, existen teorías y modelos conceptuales que pueden ser aplicados para guiar las intervenciones de enfermería, por ejemplo, el modelo conceptual de Dorotea E. Orem. El modelo de Dorotea E. Orem, permite definir el campo de actuación de enfermería en la atención que las enfermeras ofrecen tanto a los adultos mayores como a sus cuidadores para la satisfacción de sus demandas de auto cuidado. Los cuidadores deben incorporar a su vida diaria auto cuidado que les permitan prevenir complicaciones, debido a las horas sin descanso que le dedican al cuidado de su familiar demente. (6,7
En Cuba se está aplicando actualmente una metodología de trabajo para la preparación de los cuidadores de pacientes con dicha enfermedad en la modalidad de atención primaria de salud. (8) En la provincia existe un gran número de pacientes que padecen de esta enfermedad y se registran algunas experiencias realizadas de modo ocasional referentes al tema. En el municipio no se conoce de haber desarrollado una intervención educativa o un programa de preparación a los cuidadores y familias responsables de estos enfermos, En esta investigación nos proponemos como objetivo identificar el nivel de conocimientos y las habilidades de los cuidadores sobre las necesidades básicas para la atención a pacientes con síndrome demencial en la zona rural del Policlínico “Jimmy Hirzel” del municipio Bayamo; en el periodo comprendido de enero de 2018 a Marzo 2019.
Métodos
Se realizó un estudio cuasi experimental a través de una intervención capacitante, con la finalidad de Identificar el nivel de conocimientos y las habilidades de los cuidadores sobre las necesidades básicas para la atención a pacientes con síndrome demencial, El universo de estudio estuvo conformado por 22 cuidadores de adultos mayores con síndrome demencial, pertenecientes al área rural del grupo básico de trabajo No.1 (GBT) del Policlínico Jimmy Hirzel de Bayamo.
En el estudio se trabajó con el universo, por lo que no implica sesgo de selección, solo se tuvo en cuenta:
Criterios de exclusión:
Los cuidadores que luego de seleccionados se ausenten de las sesiones preparatorias por más de una semana, los que por alguna causa no deseen continuar y los que pierdan el rol de cuidador.
Clasificación y Operacionalización de variables:
Edad: variable cuantitativa continúa, conceptualizada en los grupos siguientes: 40 - 49 años de edad, 50 - 69 años de edad, 70 y más años de edad.
Estado civil: variable cualitativa nominal, fue conceptualizada en: Casado, Soltero, Viudo.
Sexo: variable cualitativa nominal, conceptualizada en: M (masculino) y F (femenino).
Ocupación: variable cualitativa nominal, conceptualizada en: trabajador estatal, trabajador no estatal, pensionado, ama de casa, desvinculado.
Nivel Cultural: variable cualitativa ordinal, conceptualizada en primario terminado, secundaria terminada, preuniversitario terminado y universitario.
Habilidades que poseen los cuidadores
Las habilidades se escogieron en esta primera etapa a partir del diagnóstico realizado, donde se tuvo en cuenta las 5 habilidades de mayores dificultades, y las que con mayor frecuencia se realizan por el grupo de estudio: comunicación; alimentación del paciente incapacitado; tendido de cama; vestir y desvestir al paciente.
Se conceptualizaron en B (bien), R (regular), y M (mal).
Características generales de la investigación
La misma se dividió en cinco etapas:
Primera etapa: de diagnóstico.
Segunda etapa: etapa de intervención.
Tercera etapa: etapa de evaluación.
Cuarta Etapa: de evaluación del Impacto.
Quinta etapa: comparar los resultados obtenidos de los cuidadores de la zona urbana (ya se tienen los resultados) y la zona rural.
En cada una de las etapas previstas en el estudio se tuvo en cuenta aspectos éticos y bioéticos.
Obtención de la información
Para la ejecución del estudio en su primera etapa, una vez obtenido el consentimiento de los cuidadores de enfermos de síndrome demencial seleccionados se diseñó una planilla de vaciamiento de datos generales para cada uno de estos.
En el primer contacto con los cuidadores se identificaron las habilidades con mayores dificultades, aplicando una encuesta y a partir de la cual se confeccionó el diagnóstico. Se aplicó el instrumento diseñado al total de cuidadores, y se comprobó el nivel de conocimientos que poseen, teniendo en cuenta temática abordada.
Resultados
La tabla 1, muestra la caracterización de los cuidadores de adultos mayores con síndrome demencial según edad y sexo que la mayoría de los cuidadores están comprendidos en entre los 40 y 59 años de edad, (72.7%) de ellos; 14 pertenecen al sexo femenino (63.63%).
Grupos de edades | Sexo | Total | ||||
---|---|---|---|---|---|---|
M | % | F | % | No. | % | |
40 - 59 | 2 | 9.09 | 14 | 63.63 | 16 | 72.7 |
60 - 69 | 0 | 0.0 | 2 | 9.09 | 2 | 9.09 |
70 y más | 2 | 9.09 | 2 | 9.09 | 4 | 18.18 |
Total | 4 | 18.1 | 18 | 81.81 | 22 | 100 |
Fuente: Planilla de vaciamiento.
Se observa el 54,5 % son cuidadores casados, seguido de 5 viudos del sexo femenino que representa el 23,0%, con respecto a la ocupación se destaca 10 cuidadores en el grupo de los trabajadores estatales (45.5%). (Tabla 2)
Con respecto al nivel educacional de los cuidadores se observa que predominó el de Preuniversitario terminado con 10 (45,4%), seguido de la secundaria terminada con 7 cuidadores (32.0%). (Tabla 3)
Como se puede observar en la tabla 4, se pudo comprobar que entre los cuidadores los de mayor participación al cuido de los enfermos son los hijos(a) 16 (73,0%), seguido de las esposas (o) 3 (13,6%).
Muestran los resultados del diagnóstico inicial y final de forma comparativa aplicado a los cuidadores, relacionados con las habilidades, para comprobar el nivel de conocimientos que poseen; observándose en la etapa inicial que no hubo ninguna habilidad evaluada de bien, observando las mayores dificultades en las habilidades de la realización del baño y el tendido de cama con el 100 % de evaluación de mal, seguido de las habilidades de la comunicación, alimentación y el vestir y desvestir al enfermo con el 90.9% evaluados de mal. (Tabla 5)
Discusión
Estos resultados están determinados fundamentalmente, por factores culturales que le han asignado a la mujer, ya que desde edades tempranas esta se ha dedicado al cuidado de los hijos. Sin embargo, en nuestros días con la incorporación de la mujer al trabajo y a la vida social en general, ha traído consigo que muchos hombres se hayan incorporado a brindar cuidados informales a los adultos mayores con síndrome demencial, esto guarda relación con estudios realizados por Cancino M, Rehbein Y, y Madrigal DY. 4,5
En nuestro trabajo se pudo observar que la mayor cantidad de los cuidadores son casados, esto pudiera estar relacionado que ya tienen edad suficiente para haber formado su propia familia con toda la responsabilidad que esto entraña y que alrededor de la mitad mantienen vínculo laboral,8 esta situación amplía la diversidad de tareas y el esfuerzo que deben realizar los miembros de una familia, esto concuerda también con los estudios realizados por López MJ, Orueta R, Gómez S, Losada, Andrea Reyes JM.9,10,12
En nuestra investigación respecto a este tópico se han obtenido resultados diferentes a estudios internacionales como los de Zarit, Colieri y La Cuesta, donde se encuentra que predomina el nivel primario. Esta diferencia pudiera estar relacionada por el alto índice educacional que existe hoy en Cuba, considerando esto como un factor protector para la salud de los cuidadores debido a que tienen más recursos cognitivos para enfrentar el cuidado y mayor acceso a la información necesaria para asumir esta labor.
Podemos observar que el parentesco de los cuidadores en el presente estudio no coincide con las encontradas en otros trabajos, 5,6,7 como es el ser cuidador formal. Se conoció que son razones familiares, sentimentales y de responsabilidad las que impulsan a ofrecer los cuidados a pesar de no contar con una experiencia previa en este rol y de presentar afectaciones múltiples relacionadas con la salud física y mental, así como en el orden social y económico, por lo que se hace inminente la búsqueda de alternativas de apoyo a estos cuidadores, aunque poseen un nivel de enseñanza preuniversitaria terminada y universitaria en su mayoría.
Lo anteriormente expuesto se explica teniendo en cuenta que los mismos no habían recibido antes una preparación previa para desarrollar esta tarea, aunque pudiéramos señalar que la mayoría de estos cuidadores poseen un nivel escolar preuniversitario y universitario, esto de alguna manera guarda relación con la literatura consultada, aunque los estudios revisados se enmarcan en otras habilidades y especialmente la parte psicológica de los cuidadores, como por ejemplo Espín Andrade y Cigarán M. (11,12
Conclusiones
Se logró modificar el nivel de conocimientos y las habilidades de los cuidadores sobre las necesidades básicas para la atención a pacientes con síndrome demencial en la zona rural del GBT No.1 del Policlínico Docente Jimmy Hirzel del municipio Bayamo y se aplicó el programa diseñado de intervención capacitante para cuidadores de enfermo con síndrome demencial, realizado por la autora en el estudio de los cuidadores de la zona urbana.