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Revista Cubana de Farmacia
versión On-line ISSN 1561-2988
Rev Cubana Farm v.42 n.3 Ciudad de la Habana sep.-dic. 2008
ARTÍCULOS ORIGINALES
Análisis de las fuentes de información sobre medicamentos de carácter personal en la red de farmacias del municipio Santa Clara
Analysis of personal sources of information on drugs present in the network of pharmacies of Santa Clara municipality
Manuel Osvaldo Machado RiveroI; Yoysy Díaz CataláII
IEspecialista en Información. Master en Ciencias. Asistente. Centro de Documentación e Información Científico Técnica, Universidad Central "Marta Abreu" de Las Villas. Santa Clara, Villa Clara, Cuba.
IILicenciada en Ciencias Farmacéuticas. Centro de Documentación e Información Científico Técnica, Universidad Central "Marta Abreu" de Las Villas. Santa Clara, Villa Clara, Cuba.
RESUMEN
Se realizó un análisis de las fuentes de información sobre medicamentos no documentales (personales), disponibles en la red de farmacias del municipio Santa Clara. Este estudio tuvo como objetivo la evaluación de las fuentes de información no documentales de carácter personal con que cuenta dicha red. Se incluyeron en esta investigación 26 unidades de farmacias comunitarias. Se diseñó un modelo de recogida de datos para recopilar información sobre el tipo de fuente sujeto de análisis en el presente trabajo. Se encuestaron 7 licenciados en Ciencias Farmacéuticas, profesionales responsables del servicio de información en las distintas unidades de la red de farmacias comunitarias. Paralelamente se estudió la posible función que podían tener los técnicos de Farmacia en dicho servicio, para lo cual se encuestaron a 47 personas que se desempeñan en esa profesión. Los resultados permitieron determinar que existen dificultades con la accesibilidad de la población a estas fuentes; los profesionales de nivel superior no ejercen de manera diaria su función como fuentes de información; se debe profundizar en la superación de técnicos y licenciados, así como en la participación en eventos y la publicación de artículos. No existieron diferencias significativas entre la cantidad de encuestados que refieren emplear la forma personal, responder a consultas telefónicas, o aquellos que combinan ambas formas cotidianamente para brindar información sobre medicamentos.
Palabras clave: Información sobre medicamentos, fuentes de información.
ABSTRACT
The objective of this study was the evaluation of non-documentary (personal) sources of information available in the pharmacy network of Santa Clara municipality. To this end, twenty six community-based pharmacies were included. A data collection model to gather information on the type of source under analysis in this paper was designed. Seven Bachelors of Pharmaceutical Sciences, who are the professionals in charge of the information service in the network of community-based pharmacies, were surveyed. Pararell to this, the probable function that pharmaceutical technicians may perform in this service was assessed, for which 47 persons were also interviewed. The results revealed that it is difficult for the population to accede to these sources, that higher level professionals do not perform their function as sources of information on a daily basis, and that upgrading of knowledge of technicians and bachelors should be extended along with their greater participation in events and in article publication. There were no significant differences between the number of surveyed people that stated resorting to personal sources of information or responding to consultations by phone and those who daily combine both methods to provide information on drugs.
Key words: Drug information, sources of information.
INTRODUCCIÓN
A partir de los cambios ocurridos tras la segunda guerra mundial, el volumen de información que se difunde anualmente, ha crecido exponencialmente. En el sector sanitario este crecimiento es de los más altos a nivel mundial, miles de resultados son publicados en revistas y otras fuentes, lo que obliga a los profesionales de la salud a actualizarse constantemente.
La información nace de una fuente, siempre existirá un emisor que provea esta y un receptor que la tome y emplee según sus necesidades. Mientras más confiables, completas y actualizadas sean las fuentes de información disponibles, estas aportarán datos de mayor relevancia, lo que contribuirá a la obtención de resultados positivos en la labor que se desarrolla.
La información sobre medicamentos es aceptada como una de las tareas principales de todos los farmacéuticos. Tiene gran importancia durante la dispensación, ya que el paciente además del medicamento, recibe toda una serie de informaciones que contribuyen a que este pueda hacer un uso más seguro y efectivo de los productos que ha adquirido. El farmacéutico, desempeña además, una función primordial a la hora de difundir novedades científicas o metodológicas entre el resto del equipo sanitario, lo que contribuye a la superación continua del personal sanitario.
Como fuentes de información no documentales de tipo personal, se entiende aquellos sujetos que en su actividad práctico-social generan, contienen, suministran o transfieren información a otras.1,2 Dentro de la red de farmacias se puede plantear que los licenciados en Ciencias Farmacéuticas y técnicos medios de nivel superior en farmacia, son fuentes del tipo antes mencionado, por ser estos los capacitados, dada su formación académica, para asumir la responsabilidad de la dispensación, la que implica brindar información al paciente sobre los medicamentos prescriptos.
Este trabajo pretende analizar la situación de las fuentes de información sobre medicamentos no documentales, de carácter personal, que existen dentro de la red municipal de farmacias en la ciudad de Santa Clara.
MÉTODOS
El universo estuvo conformado por todas las farmacias que integran la red del municipio Santa Clara (34 unidades), de las cuales se seleccionó una muestra representativa de cada una de las clasificaciones de farmacias existentes en este municipio.
Fueron incluidas en la muestra todas las unidades de la red de farmacias clasificadas en las categorías de: farmacia principal municipal (FPM), farmacias comunitarias especiales de área de salud (FCEAS), farmacias comunitarias de servicios extrahospitalarios (FextH), farmacia homeopática (FH) y una selección de las farmacias comunitarias normales (FCN), para un total de 26 unidades.
En el caso de las FCN, de un total de 21 unidades, se decidió incluir al 60 % del total (13 farmacias), las que se escogieron de forma aleatoria y al azar.
Como Fuentes no Documentales Personales dentro de la red de farmacias se consideraron los licenciados en Ciencias Farmacéuticas (LCF) y técnicos medios de nivel superior en Farmacia (TMF). El universo abarcó a 10 graduados de Ciencias Farmacéuticas y 76 técnicos. Como criterio de inclusión se tuvo en cuenta que estos laboraran dentro de las 26 unidades a las que se hace alusión en párrafos anteriores.
Se diseñó una encuesta para recopilar datos que aportaran información sobre determinados aspectos profesionales relacionados tanto con los licenciados como técnicos. Para la evaluación se hizo una adaptación de lo planteado en el texto Manual de Fuentes de Información,3 tomando como criterios de evaluación los siguientes aspectos:
· Distribución de licenciados dentro de la red de farmacias.
· Identificación del individuo como ente activo en el servicio de información sobre medicamentos.
· Frecuencia con la que estos brindan información sobre medicamentos en sus unidades.
· Vías por las que ofrecen información sobre medicamentos.
· Identificación por parte de estos profesionales de los usuarios potenciales de sus servicios de información.
· Años de experiencia profesional.
· Visualización de los resultados investigativos de estos profesionales a través de artículos publicados.
· Grados científicos alcanzados.
· Participación en cursos de posgrado u otras actividades de superación en los últimos 5 años.
La información recopilada fue introducida en una base de datos creada con el Microsof Excel del paquete Office para Windows 2005. De esta manera se ejecutaron acciones matemáticas y de selección de determinados datos con el auxilio de esta aplicación del paquete Office y un ordenador.
Para determinar las existencias de diferencias estadísticamente significativas entre los grupos de respuestas, se empleó la comparación de proporciones para muestras múltiples, con el empleo del paquete estadístico Statgraphics Plus versión 4.1.
RESULTADOS
La muestra quedó conformada finalmente por 7 LCF y 42 TMF, de un total de 10 y 76 respectivamente dentro del universo.
Se observa la no presencia de LCF en todas las unidades, solo en algunas de las FCEAS y la FPM. La situación observada con los técnicos es más favorable, al estar estos distribuidos en todas las unidades, aunque el 100 % de los trabajadores que realizan la venta directa de medicamentos a la población no poseen este nivel. La figura 1 muestra la distribución, tanto de técnicos como de licenciados, dentro de la red de farmacias del municipio Santa Clara.
La totalidad de los licenciados están sensibilizados con la función que pueden o deben ejercer en los servicios de información sobre medicamentos dentro de cada una de sus unidades. Por su parte el 97,62 % de los técnicos considera que pueden apoyar de alguna manera ese servicio.
En cuanto a la frecuencia con la que se ejercen estas actividades de información, existieron diferencias estadísticamente significativas entre las respuestas obtenidas (p < 0,005). La mayoría de los licenciados (85,71 %) asegura dar este servicio varias veces en la semana, solo 1 (14,29 %) afirma hacerlo diariamente (fig. 2).
Todos los LCF coinciden en que la información sobre medicamentos que ellos difunden, debe estar dirigida tanto a profesionales como pacientes. En el caso de los técnicos, la mayoría identifica al profesional sanitario (médico), como la persona a la que se le debe brindar con mayor énfasis este servicio (fig. 3).
Todos coinciden en que las vías más empleadas para brindar información en una unidad de farmacia son la personal (verbal) y la telefónica. No existieron diferencias significativas (p > 0,05) entre la cantidad de encuestados que refieren emplear la forma personal, responder a consultas telefónicas, o aquellos que combinan ambas formas cotidianamente.
En la red de farmacia coexisten graduados con varios años de experiencia y otros con menor tiempo en la profesión; no existen diferencias estadísticamente significativas (p > 0,05) entre los grupos que se conformaron teniendo en cuenta este factor (tabla 1).
Los encuestados manifestaron un marcado interés por participar en cursos de postgrado. En los últimos 5 años todos han matriculado en alguna actividad de superación (cursos, diplomados), dirigida al área de la farmacia clínica, uno de los perfiles de actuación de estos profesionales sanitarios. No existe ningún LCF que haya alcanzado un grado científico o esté cursando en estos momentos una maestría o doctorado. Solo un encuestado manifestó poseer artículos publicados en revistas.
El personal técnico que labora en las unidades en su mayoría cuenta con varios años de experiencia en el ejercicio de su profesión, teniendo la mayoría de estos más de 4 años de graduados (tabla 2). La totalidad de los encuestados manifestó no haber recibido ningún curso de posgrado durante los últimos 5 años.
DISCUSIÓN
La principal dificultad que existe con respecto a esta clase de fuente, es la no existencia de Licenciados en Ciencias Farmacéuticas en cada una de las unidades que componen la red, lo cual limita severamente el acceso de la población a esta fuente de información. La accesibilidad es una de las principales características que ha de reunir la información sobre medicamentos.4
Estudios recientes señalan que en la provincia de Villa Clara existen 5 169 habitantes por cada unidad de Farmacia, uno de los índices más altos de la zona central y oriental del país.5 Esto pudiera considerarse una desventaja para el funcionamiento óptimo del servicio de información sobre medicamentos en cada una de las unidades y dentro de la red en general.
El hecho de que no se brinde información con una frecuencia diaria por las fuentes personales, puede constituir un serio problema, teniendo en cuenta el impacto directo que puede tener sobre la salud este tipo de información.6 Está estipulado que el acto de la dispensación de un producto farmacéutico, implica brindarle a pacientes y familiares, toda una serie de informaciones que contribuyan a elevar la efectividad y eficiencia del tratamiento establecido.7,8 Otros estudios muestran resultados semejantes en este aspecto.6
Ha de trabajarse arduamente en la superación del personal, para elevar el grado de actualización de los conocimientos de estos. El ámbito comunitario es un lugar oportuno para la investigación y la solución de innumerables problemas de salud, ha de incentivarse a los profesionales para que desarrollen investigaciones cuyos resultados se publiquen y de esta forma compartir difundir sus resultados. La obtención de grados científicos, la participación en eventos y la publicación de artículos, debe ser un punto en el cual profundizar, ya que de esta forma cada profesional aumenta no solo sus experiencias, sino también su reconocimiento y autoridad para emitir criterios sobre determinados temas.2
Los principales usuarios de la información sobre medicamentos en una unidad de farmacia son los pacientes y familiares de estos, mientras que los profesionales sanitarios (médicos, enfermeros, etcétera) constituyen un grupo menor en cuanto a número, pero no por esto menos importante. A los primeros se les debe brindar información primordialmente de forma activa (cada vez que adquieran un producto), mientras que a los segundos combinando la información pasiva con la activa (cada vez que soliciten algún dato o mediante actividades de divulgación) y en un lenguaje diferente, a tenor con la familiarización que sobre el tema poseen estos.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
1. Cruz-Paz A, García-Suárez VM. Fuentes de información. Aspectos teóricos. La Habana: Universidad de La Habana; 1994.
2. Reyes L. Manual de fuentes de información. La Habana: Pablo de la Torriente; 2006.
3. Morales MM. Manual de fuentes de información. La Habana: IDICT; 2000. p. 25-36.
4. Castillo P. Promoción y publicidad de medicamentos: quo vadis? Medicina Clínica. 1992;(99):305-9.
5. Fernández Manzano Edita, Fernández Monagas Sol A, Faire Pérez Víctor, Milena Castillo Quiel Giselle, Iñiguez Rojas Luisa, Henriques Rodríguez Ruth D. Indicadores vinculados a las funciones asistenciales de los servicios farmacéuticos comunitarios en las regiones Central y Oriental de Cuba. Rev Cubana Farm [periódico en la Internet]. 2006 Abr [citado 2006 Sep 26] ; 40(1): . Disponible en: http://scielo.sld.cu/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0034-75152006000100009&lng=es&nrm=iso.
6. Argilagos CS, Ledea DF, Llopiz AH, López LM, Cisnero AS, Niebla MH. La información farmacoterapéutica al paciente ambulatorio, vía fundamental para garantizar el uso racional de medicamento en Atención Primaria de Salud. Acta Farmacéutica Bonaerense. 2005;24(4):585-9.
7. CDF. Programa Nacional de Medicamentos IV Versión. La Habana: Ministerio de Salud Pública; 2001. p. 18-23.
8. Martínez MM, Acosta OMN. El sistema de suministros en los servicios farmacéuticos. La Habana: Félix Varela; 2001.
Recibido: 25 de abril de 2008.
Aprobado: 2 de junio de 2008.
M. C. Manuel Osvaldo Machado Rivero. Universidad Central "Marta Abreu" de Las Villas, Villa Clara, Cuba. Correo electrónico: mosvaldo@uclv.edu.cu