Mi SciELO
Servicios Personalizados
Articulo
Indicadores
- Citado por SciELO
Links relacionados
- Similares en SciELO
Compartir
Revista Cubana de Medicina Militar
versión On-line ISSN 1561-3046
Rev Cub Med Mil v.34 n.2 Ciudad de la Habana abr.-jun. 2005
Hospital Universitario "General Calixto García"
Instituto Superior de Medicina Militar "Dr. Luis Díaz Soto"
Píloro doble
Dr. Rolando Martínez López,1 Dr. Osvaldo Díaz-Canel Fernández,2 Dr. Julián Ruiz Torres,1 Dra. Vivianne Anido Escobar,3 Lic. Yarileynis Martínez Lamela4 y Tte. Cor. Raúl Brizuela Quintanilla5
Resumen
El doble píloro constituye un hallazgo endoscópico, más frecuente en pacientes que han padecido enfermedad ulcerosa péptica. Es una comunicación anormal entre el antro gástrico y el bulbo duodenal, que puede llegar a necesitar tratamiento quirúrgico. Se reportan 2 pacientes a los que se les diagnosticó esta anomalía.
Palabras clave: Doble píloro, endoscopia.
El píloro doble constituye una forma de comunicación fistulosa entre el antro gástrico y el bulbo duodenal, de forma tal que la primera porción duodenal queda comunicada con el estómago a través de 2 aberturas separadas por un tabique o puente de grosor variable. Generalmente la comunicación ocurre a nivel de la curvatura menor del antro y la porción superior del bulbo.
Desde el punto de vista etiológico se invocan 2 causas fundamentales: adquirida o secundaria a enfermedad ulcero-péptica1,2 y se ha descrito también como anomalía congénita.3-5 Solo existen algo más de 100 casos reportados en la literatura médica mundial, la mayoría secundarios a enfermedad ulcerosa.
Un número de pacientes responden bien al tratamiento médico, independientemente de si la fístula se mantiene abierta o cierra, sin embargo, alrededor del 20 % necesita cirugía por la persistencia de los síntomas u otras complicaciones.1,2,6
No se ha caracterizado adecuadamente la asociación entre doble píloro y otras enfermedades sistémicas, así como la presencia de Helicobacter pylori, aunque no se descarta la relación.7,8
Presentación de los Casos
Caso 1: Se presenta un paciente de 56 años de edad, con antecedentes de úlcera péptica, quien refiere epigastralgia que se intensifica en períodos de ayuno y se alivia con la ingesta de alimentos, acidez y aerogastria, con respuesta al tratamiento médico sintomático. Se indica estudio endoscópico y durante la exploración del estómago se constata la presencia de un doble orificio que comunica el antro con el bulbo duodenal a través de los cuales se precisa un cráter de algo menos de 1 cm, situado en cara anterior del bulbo (fig.). Ambos orificios tienen diámetros similares y se encuentran separados por un puente de mucosa que no muestra cambios endoscópicos si se compara con el tejido vecino.
FIG. Se aprecia en la parte superior de la foto, el orificio fistuloso por encima de un tabique de tejido que lo separa del píloro.
Caso 2: Paciente del sexo masculino, de 60 años de edad, que acude a consulta por sangrado digestivo alto, con antecedentes de padecer enfermedad ulceropéptica. En exploración endoscópica se observa comunicación fistulosa de curvatura menor del antro con el bulbo duodenal, que permitía el paso del equipo a la primera porción duodenal, separado del píloro por un puente de 1,5 cm. Se observaron estigmas de sangrado reciente en erosiones planas situadas en la vertiente gástrica de las márgenes del orificio.
Comentarios
La prevalencia del píloro doble se encuentra entre 0,06 y 0,4 %, más frecuente en varones, en proporción 2:1.1,3 El diagnóstico se realiza por endoscopia que usualmente muestra orificio accesorio, de diámetro variable, con ausencia de peristaltismo. Los casos que se muestran, presentan orificio yuxtapilórico hacia la curvatura menor, fácilmente visibles durante la distensión del antro y en ambos casos el diámetro permitía la exploración endoscópica; esta es la localización más frecuente que se reporta en un estudio de Taiwan, publicado en la Gastrointestinal Endoscopy, con la mayor serie revisada.9 Aún en las series más largas, el doble píloro es un diagnóstico endoscópico raro y en la mayoría de los casos, posterior a enfermedad ulceropéptica. Es difícil de diagnosticar radiológicamente y en la endoscopia, el antro debe estar suficientemente distendido por aire para visualizar la fístula, que en ocasiones se enmascara por pliegues gástricos.1,4,10,11
En cuanto a su etiología, Rokitansky fue el primero en sugerir que esta comunicación era creada por 2 úlceras separadas, una en el estómago y otra en el duodeno, que profundizaban una hacia la otra.9 Sin embargo, la mayoría de los reportes han fallado para comprobar esto y por el contrario han demostrado que la penetración de una úlcera, tanto en el antro gástrico como en el bulbo duodenal, conduce a la formación de adherencias en la pared de estos órganos. Subsecuentemente la penetración a lo largo de la capa muscular resulta en un trayecto fistuloso.1,2,6,12
Se reporta que algunos pacientes experimentan alivio de los síntomas de su enfermedad ulcerosa, luego de formarse la fístula, otros mantienen los síntomas.9 Generalmente, la respuesta al tratamiento es tortuosa y tampoco está demostrado que el tratamiento medicamentoso logre cerrar el trayecto fistuloso en todos los pacientes. Se sugiere que pueden influenciar en esto, la intercurrencia de otras enfermedades, como diabetes, enfermedad pulmonar obstructiva crónica, insuficiencia renal, enfermedades reumáticas, lupus eritematoso, etc.1,7 Se ha encontrado coincidencia en algunos casos de doble píloro y Helcobacter pylori, con respuesta a la triple terapia.9
El tratamiento quirúrgico puede ser la opción definitiva para los pacientes que no responden o con mala respuesta al tratamiento antiulceroso.9,13
FIG. Obsérvese en la parte superior el orificio fistuloso por encima de un tabique de tejido que lo separa del píloro.
Summary
Double pylorus
Double pylorus is an endoscopic finding that is more common in patients who have suffered from peptic ulcerous disease. It is an abnormal communication between the gastric antrum and the duodenal bulbus that may need surgical treatment. Two patients who were diagnosed this abnormality are reported.
Key words: Doble pylorus, endoscopy.
Referencias Bibliográficas
1. Kothandaraman KR, Kutty KP, Haw Ken KA, Barrowman JA. Double pylorus-in evolution. J Aim Gastroenterolol 1983;5:335-8.
2. Rappopor AS. Gastroduodenal fistulae and double pyloric canal. Gastroinetsinal Radiol 1978;126:29-34.
3. Hegedus V, Poulsen PE, Reichardt J. The natural history of the double pylorus. Radiol 1978;126:29-34.
4. Engle RB. Tunnel ulcer with double pyloric canal. Radiology 1975;116:323-4.
5. Mylonas A, Papaziogas B, Paraskevas G, Fragos E. Congenital double pyloric ostium in the adult. Surg Endosc 2002;16(11):1639.
6. Einhom RI, Bank PA. The clinical significance and natural history of the double pylorus. Dig Dis Sci 1984;29:213-8.
7. Hu TH, Tui DL, Changchien CS, Chen TY, Chang WC. Double pylorus: report of a longitudinal follow-up in two refractory cases with underlaying diseases. Am J Gastroenterol 1995;90:815-8.
8. Minali G, Terruzzi V, Levi C. Acquired double pylorus or gastroduoenal fistula. Report of a case and review of the literature. Diges 1981;21:1-5.
9. Tsung-Hui H, Tung-Lung T, Chia-Chang H. Clinical characteritisc of double pylorus. Gastrointestinal Endosc 2001;54(4):464-70.
10. Lee BC, Jasmi AY. Double pylorus. Med J Malasia 2003;58(3):440-2.
11. Piscoya A, Quispe L, Paucar H, Bussalleau A. Double pylorus; case report and review of literature. Rev Gastroenterol Peru 1997;17(2):166-9.
12. Fernández Salazar LI, de la Calle Valverde F, del Olmo Martínez L. Triple pylorus or double antroduodenal fistula. Rev Esp Enf Dig 2002;94(8):501-2.
13. Chiu HH, Jao YT, Mo LR. Double pylorus. Gastrointestinal Endosc 2002;56(2):271.
Recibido: 13 de enero de 2005. Aprobado: 15 de febrero de 2005.
Dr. Rolando Martínez López. Instituto Superior de Medicina Militar "Dr. Luis Díaz Soto". Ave Monumental, Habana del Este, CP 11 700, Ciudad de La Habana, Cuba.
1Especialista de II Grado en Gastroenterología.
2Especialista de I Grado en Medicina General Integral.
3Especialista de I Grado en Gastroenterología.
4Licenciada en Enfermería.
5Doctor en Ciencias Médicas. Profesor Titular.