INTRODUCCIÓN
Las inteligencias múltiples son las diversas maneras de evidenciar las capacidades multivariadas. Antunes (2006) plantea que la inteligencia es la «capacidad cerebral por la cual conseguimos penetrar en la comprensión de las cosas eligiendo el mejor camino» (p. 9), donde se establecen dos funciones intelectuales del más alto nivel, como son la voluntad y la motivación intrínseca o extrínseca.
Para Gardner (2015) existen ocho inteligencias reconocidas, identificadas y no desarrolladas en el contexto estudiantil: intrapersonal, interpersonal, lingüístico-verbal, lógico-matemática, corporal-kinestésica, visual-espacial, musical, naturalista y espiritual. Con la fusión estimulante de los dos hemisferios cerebrales como lenguaje transversal desde el desarrollo integral u holístico de cada estudiante, es posible llegar a un nivel óptimo de rendimiento académico, aplicando contextualizadamente las inteligencias en la cotidianidad del ser.
Cada una de estas inteligencias tiene su propia ponderación, desarrollo y manifestación expresiva. Cada aprendiz, dentro de un entorno enriquecido, construirá y consolidará las inteligencias requeridas por su personalidad, vocación o circunstancias sugerentes a los deseos, posibilidades o adversidades experienciales.
Es necesario estimular las inteligencias múltiples en los infantes, para que puedan aprender y ser mejores personas, entes productivos y propositivos en una sociedad transformacional visionaria con solidaridad, altruismo, integralidad y creatividad (Antunes, 2014). Esto es posible a través de la motivación intrínseca de los docentes, quienes desarrollan las inteligencias en sus estudiantes y favorecen autoevaluación en el aprendizaje integral con experiencias combinadas de todas las inteligencias.
Con el fin de desarrollar estas inteligencias, el docente debe conocer las técnicas pertinentes para ayudar a sus estudiantes a minimizar sus problemas académicos, a aumentar su autoestima, a desarrollar la cooperación y el trabajo en equipo, a acrecentar el liderazgo positivo y el amor al conocimiento.
Una visión renovada de las inteligencias múltiples, con la aplicación directa en el plan curricular anual, se manifiesta en la presente sistematización de ideas, metodologías y técnicas que promueve mentes creadoras e innovadoras. Muchos docentes se plantean cuestionamientos metacognitivos de alto engranaje como: ¿Es posible formar desde la escuela infantil regular seres humanos de vanguardia aplicando las inteligencias múltiples?
Las instituciones educativas han dado la oportunidad a cientos de infantes a desarrollar los talentos creadores, las habilidades de abstracción y consolidación de contenidos curriculares que manejan los escolares de estos tiempos, con un plan metodológico contextualizado a cada centro escolar. La aplicación de técnicas inferenciales son las que garantizan que los conocimientos y temas del currículo sean desarrollados a cabalidad, con el valor agregado que brinda cada docente a su asignatura o grado, junto con los estudiantes sedientos de saber y conocer.
Sería ideal que en el proceso de enseñanza se pensara en una escuela diferente, una escuela única que enriquezca las potencialidades de los educandos y dé tratamiento a las necesidades educativas especiales y a que se desarrollen a un nivel superior. Para ponderarlas existen diferentes ejercicios que estimulan el desarrollo de los diferentes tipos de inteligencia.
El objetivo general de esta investigación hermenéutica plantea estimular las inteligencias múltiples en infantes de entre 9 y 12 años como posibilidad holística de enriquecimiento de su entorno educacional. Los objetivos específicos son experienciar las estrategias metodológicas interoceptivas y exteroceptivas de las inteligencias múltiples en el proceso de enseñanza-aprendizaje, según su propio estilo, y proponer una guía dialógica inferencial argumentativa de estas ocho inteligencias, como aporte académico a los docentes del contexto manabita, ecuatoriano y mundial.
Desde el enriquecimiento de las inteligencias múltiples a nivel metodológico en lo cognitivo, artístico, motriz, cooperativo y redaccional, con experiencias que irán siempre a favor del infante, como un agente transformador del mundo, se utiliza la técnica de observación directa, procurando conocer el nivel de adquisición de conocimiento, abstracción y aplicación de destrezas. De esta forma se concluye con un cambio paradigmático de la docencia y la posibilidad de potenciar en los estudiantes los dos hemisferios cerebrales.
Con la guía propuesta se garantiza una educación vanguardista, holística y espiritual desde el desarrollo de las inteligencias múltiples como un modelo pedagógico que plantea su aplicabilidad dentro del paradigma constructivista, con aciertos multifuncionales y con errores muy frecuentes, que propenden a su corrección sin tocar lo inmaculado del ser infantil.
A través de la experticia de algunos docentes manabitas con el proceso de enseñanza-aprendizaje se plantean los principios y actividades sugerentes para un grupo etáreo de 9 a 12 años, según estrategias aplicadas en el currículo vigente. Se plantea que algunas pautas de la guía propuesta que no pudieron implementarse en estas edades deben ser instauradas desde edades más tempranas a las descritas, incorporándolas a los planes pertinentes con la metodología de vanguardia asumida.
El desarrollo de las inteligencias múltiples abarca un manojo de sueños curriculares o extracurriculares muy fácilmente aplicables para potencializar holísticamente las capacidades de los infantes comprendidos en estas edades. Se investiga y sistematiza cada inteligencia, con el fin de un mayor acoplamiento de los dos hemisferios cerebrales en actuación práctico-operativa del aprendizaje significativo. Esta teoría plantea sus dos maneras diferenciadas de procesar la información: lógica-formal y creativa.
Para incrementar la agudeza de pensamiento por medio de actividades y reflexiones metacognitivas, desde la planificación institucional se plantean cambios que transmuten el aprendizaje actual hacia el futuro deseado, no solo epitelial, sino transformacional, en su extensión y profundidad (del Pozo et al., 2014). Esta tipología del cambio profundo pretende convertir a los estudiantes en la práctica de la diversidad, la valoración del pasado y su cultura y el liderazgo, donde se crea una escuela real desde la idealidad de construcción de la escuela. Como lo dijera Howard Gardner, citado por Pérez (2016): «El diseño de mi escuela ideal del futuro se basa en dos hipótesis: la primera es que no todo el mundo tiene los mismos intereses y capacidades; no todos aprendemos de la misma manera. La segunda hipótesis puede doler: es la de que en nuestros días nadie puede llegar a aprender todo lo que hay para aprender» (p. 11).
Las individualidades en capacidades e intereses nos permiten ser nosotros mismos, por tanto, el docente debe procurarlas y catapultarlas. La segunda idealidad consiste en dosificar los aprendizajes y el currículo porque es imposible el total cognoscere.
1. METODOLOGÍA
La presente investigación atiende a una descripción metodológica hermenéutica con un enfoque filosófico y lingüístico, que, como metodología, busca el camino de las estrategias y las técnicas de investigación mediante la lectura comprensiva y comentada de los datos extraídos y, como arte, establece parámetros creativos, innovadores y propositivos en la ponderación de estas inteligencias integralmente.
La hermenéutica desarrolla la interpretación para producir una comprensión didáctica de textos escritos desde una mirada profesional de la bibliografía. La investigación se determina desde los aspectos educativos, académicos, pedagógicos y filosófico, adaptada a la psicología infantil. Interpretar textos desde el enfoque sociológico, pedagógico, psicológico, biológico, epistemológico puede aclarar la terminología y los aportes científico-académicos de los tratados (Romero, 2015).
La investigación cualitativa-argumentativa-analítica-hermenéutica establece como principio cíclico la producción de textos escritos a partir de la interpretación inferencial de un autor con un criterio propositivo del investigador. Se ofrece a la comunidad académica docente un bagaje de actividades lúdicas mediante la guía dialógica inferencial argumentativa, que favorece el desarrollo de inteligencias interconectadas adaptadas a la madurez infantil.
2. DEFINICIÓN DE «INTELIGENCIA»
La definición de «inteligencia» demuestra su aplicabilidad en la cotidianidad. Es posible definirla como capacidad de resolución de problemas ante una situación. Esta capacidad es holística, multifuncional y diversa, según las emociones del momento. Por esta razón no se la puede definir en una sola dirección cognitiva, afectiva o somatotónica (reacción corporal).
Según González (2003), la inteligencia humana es una «potencialidad del desarrollo cognoscitivo del sujeto en función de la solución de nuevos problemas» (p. 39). La mayoría de los autores define a la inteligencia desde el aspecto cognoscitivo, porque a lo largo de la historia se ha pensado que solo permite aprender conocimientos, no desarrollar habilidades motrices y menos establecer relaciones afectivas o emocionales.
Este autor reconoce que la inteligencia permite al ser humano resolver problemas, situaciones y adversidades, con el fin de vivir significativamente, esencialmente en el grado de desarrollo de los procesos de análisis, síntesis y generalización. Aunque reconoce los determinantes hereditarios de la inteligencia, la concibe como un reflejo del medio sociohistórico que surge en virtud del papel activo y creador del sujeto en la asimilación de la cultura.
3. DEFINICIÓN PERSONAL DE INTELIGENCIA
La investigación hermenéutica permite definir el concepto «inteligencia» como una capacidad ilimitada de posibilidades hacia la resolución de situaciones adversas ponderadas en resiliencia, definida esta como la capacidad de afrontar la adversidad y salir fortalecido, sin daños a los afectos. Este es un acercamiento dialógico a la praxis de esta definición. Es preciso desglosar el término «inteligencia» como aquella facultad o posibilidad de resolver, entre varias alternativas, una solución viable o posible que no afecte al autor de estas decisiones.
En el aprendizaje, la inteligencia es fundamental para reconocer la influencia de las neurociencias aplicadas a la educación, las cuales constituyen el conjunto de saberes, ciencias y evidencias sobre la comprensión del cerebro humano y sus potenciales aplicaciones en el campo educativo. Con sus aportes sobre la ponderación de procesos sistemáticos de la mente y la adquisición de conocimientos, habilidades, actitudes, valores y emociones que permiten al cerebro humano aprender o saber, se indaga y promueve la calidad educativa de las instituciones donde se apliquen.
En el currículo no se describen como temas el desarrollo del pensamiento, las estrategias de mejoramiento de la atención ni la metacognición. Estos, junto a la motivación, la reflexión, la conceptualización, la aplicación y la retroalimentación, son procesos básicos irrenunciables para aprender, inferir y extrapolar una información recibida y transformarla en aprendizaje (Gardner, 2001).
4. DEFINICIÓN DE LAS OCHO INTELIGENCIAS
4.1. Inteligencia intrapersonal
La inteligencia intrapersonal es el conocimiento de sí mismo y la habilidad de adaptar la propia manera de actuar a partir de su interioridad. Implica autorreflexión, metacognición y correcta percepción de sí mismo. Incluye el propio conocimiento de sus habilidades y limitaciones, la conciencia de los estados de ánimo, las intenciones y motivaciones, los miedos y deseos, la capacidad de autodisciplina y autoestima, el conocimiento de su temperamento y carácter (del Pozo, 2013).
Las destrezas demostradas en esta inteligencia pueden ser la concentración, la apreciación de la propia experiencia, la capacidad de pensar sobre el ejercicio de su propio pensamiento, el razonamiento correcto y de nivel superior, al igual que el desarrollo de la conciencia de sus sentimientos, junto a la facilidad para expresarlos.
Para conseguir estas destrezas en los estudiantes de la investigación cualitativa se proponen actividades de desarrollo de la metacognición, el optimismo, la analogía personal, la autoevaluación, la explicación del propio punto de vista, el reconocimiento y la regulación de sentimientos. Se sugiere elogiar sus talentos para elevar su autoestima, que lleve un diario personal, que escriba su autobiografía, que reflexione sobre sus emociones en casos cotidianos del aula y su familia.
La inteligencia intrapersonal, reconocida también como espiritual, establece la oración y gratitud al Ser Supremo, denominado por los seres humanos como fe, en su opción por el «próximo», con una autoevaluación y autorreflexión. Desde su yo interior, todo lo aprendido le servirá para la vida de manera significativa y autónoma. Esta inteligencia es la más difícil de desarrollar a nivel escolar porque la escuela es una institución de sociabilidad.
4.2. Inteligencia interpersonal
La inteligencia interpersonal es la capacidad de comprender a los demás e interactuar eficazmente, incluyendo la capacidad para discernir, responder de manera adecuada a los estados de ánimo, los temperamentos, las motivaciones y los deseos de otras personas. Comprende la habilidad para formar y mantener relaciones cordiales y asumir papeles dentro del grupo (del Pozo, 2013).
Algunas de sus destrezas son la comunicación asertiva, tanto la verbal como la no verbal, y la capacidad de entender los estados de ánimo, los sentimientos y las motivaciones de los demás. Se puede interpretar como una buena capacidad para trabajar cooperativamente porque la persona escucha y aprecia la perspectiva de los otros, aun cuando difiera de la suya, empatiza con los demás, y crea y mantiene sinergia en el grupo.
Se propone trabajar programas de competencia social, aprendizaje cooperativo, solución de conflictos en equipos sobre justicia ciudadana, culturama (cartelera de eventos culturales), retratos en collage, puzzles en equipo, árbol navideño de chigualos o mensajes navideños, con una reflexión sobre el verdadero sentido del Nativitas como nacimiento del Hijo del Altísimo, con canciones y mensajes de Navidad.
4.3. Inteligencia lingüístico-verbal
La inteligencia lingüístico-verbal es la capacidad de formular el pensamiento en palabras y usar el lenguaje de manera eficaz. Incluye la sensibilidad para los sonidos, los significados y las funciones de las palabras. Permite recordar, analizar, resolver problemas, planificar y crear. Las bases de esta inteligencia se establecen en el periodo de gestación, por causa de la audición intrauterina.
Para desarrollar este tipo de inteligencia se propone hablar, leer y cantar en las etapas pre y neonatal. De esta forma se logran destrezas como el orden y el significado de las palabras, la posibilidad de enseñar, explicar y aprender junto a la buena disposición de entender el humor lingüístico o crearlo, el arte de convencer a otros (oratoria) y la facilidad de memorizar y recordar, teniendo la posibilidad de realizar un análisis metalingüístico, inferencia y análisis hermenéutico de textos.
Para lograr estos resultados en los estudiantes de 9 a 12 años, se deben ejercitar actividades de competencia lectora, escritura creativa, ensayos, descripciones, narraciones. Se debe trabajar en la biblioteca, hacer lecturas grupales y dramatizadas, debates, programas radiales y televisivos, noticieros, conferencias, exposiciones orales de trabajos realizados, entrevistas, guiones y presentaciones de géneros literarios, redacciones de carta al autor de un libro, composiciones de poesías y acrósticos, comics, reportajes y comparaciones de autores de textos literarios.
4.4. Inteligencia lógico-matemática
La inteligencia lógico-matemática es la capacidad de utilizar los números de manera efectiva, el cálculo y el razonamiento adecuado frente a situaciones numéricas. Implica la sensibilidad a los esquemas y organizadores gráficos, geometría, medidas, símbolos, tiempo, así como a las relaciones lógicas, conexiones, manejo de procedimientos científicos y un adecuado razonamiento inductivo-deductivo.
Esta inteligencia permite resolver con facilidad afirmaciones y proposiciones matemáticas, funciones, ecuaciones, derivadas, problemas de cálculos e inferencias, así como manejar las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) y sus lenguajes específicos, y programación informática (textual, icónico, visual, gráfico, sonoro).
Estos conocimientos permiten que los niños los apliquen en actividades como: causa-efecto; ejercicios de lógica con cantidad, tiempo, espacio; situaciones de objetos y su función; robótica escolar; síntesis de textos lógicos; modelos y relaciones entre elementos; clasificación; planteamiento de hipótesis y su comprobación; y aplicación estadística y sus argumentos. Los educandos pueden utilizar la tecnología para resolver problemas, presentar analogías y silogismos, objetos para contar, bloques lógicos, tangram, rompecabezas, dados, juegos de estrategias, ajedrez, medir o coleccionar objetos, resolución de problemas, predecir resultados lógicos y asumir la investigación bibliográfica y de campo.
4.5. Inteligencia visual-espacial
La inteligencia visual-espacial se visualiza en la capacidad de pensar en tres dimensiones. Es la habilidad para percibir el mundo visual y espacial de forma precisa y efectuar transformaciones a partir de estas percepciones. Es capaz de originar o decodificar información gráfica de la perspectiva. Incluye la sensibilidad al color, la línea, la forma y el espacio. Involucra la capacidad de visualizar y representar de manera gráfica las ideas.
Entre las destrezas específicas ocupan un lugar destacado la imaginación activa, la capacidad de formar imágenes mentales, la buena orientación espacial, la facilidad de llevar a efecto representaciones gráficas, el fácil reconocimiento de relaciones entre objetos situados en el espacio, la posibilidad de manipular imágenes mentalmente, la percepción exacta de una realidad desde perspectivas muy distintas.
Se recomienda ponderar actividades de imagenología de objetos del cuerpo humano, construcción de dípticos y trípticos, diagramación de revista informativa, collage, creación de murales, carteles, videos, cortometrajes, dioramas. Los niños pueden construir vestidos, móviles, maquetas, paneles didácticos, cartas didácticas, fotografías, imanógrafos, franelógrafos, tarjetas, líneas del tiempo, mapas, historias con marionetas, cine, teatro de sombras.
4.6. Inteligencia musical
La inteligencia musical es la capacidad de producir y apreciar el ritmo, el tono y el timbre de los sonidos, y de valorar las distintas formas de expresividad musical. Incluye la sensibilidad para percibir e identificar las formas musicales y transformarlas. Permite reconocer, crear y reproducir música con instrumentos y el cuerpo mediante expresiones musicales y onomatopeyas humanas, animales y de los objetos. Esta inteligencia desarrolla destrezas que son apreciadas en la estructura y el ritmo de la música, unida a la capacidad de desarrollar esquemas para la audición de la música y su ritmo, con una gran sensibilidad para el sonido que facilita reconocer, crear y reproducir el sonido melodioso, el ritmo y el tono, junto con la vibración y el volumen, creando armonía.
Se propone escuchar música folklórica manabita, construir instrumentos de percusión, crear canciones y melodías en parodia; realizar juego de ritmos, sonidos onomatopéyicos, trabajos grupales de otras asignaturas con música clásica, tararear canciones tradicionales. De esta manera se pueden crear efectos sonoros con las palabras, rimas, poemas con rimas consonantes y cantarlas con música adaptada.
4.7. Inteligencia kinestésica
La inteligencia kinestésica es la capacidad para usar todo el cuerpo para expresar ideas y sentimientos, realizar actividades o resolver problemas. Comienza con el control de los movimientos automáticos y voluntarios, hasta conseguir el dominio del cuerpo de manera altamente diferenciada y competente. Incluye la facilidad del uso de las propias manos para producir o transformar la materia en expresión de belleza.
Se manifiesta con las destrezas concretas de la conciencia corporal. Hay que poseer un buen control de los movimientos corporales, así como la posibilidad de programar y establecer conexión entre la mente y el cuerpo y desarrollar habilidades miméticas. Las personas que presentan este tipo de inteligencia expresan sentimientos a través del cuerpo, tienen habilidades corporales y motrices, movimientos especializado, fuerza, rapidez, flexibilidad y coordinación en las acciones de equilibrio. Está relacionada a las personas que aprenden destrezas físicas (López, Espinal, Macías y Moreira, 2019).
La estimulación de esta inteligencia consiste en la dramatización, danza contemporánea con temas curriculares, movimientos creativos, mimo, juegos dramáticos curriculares, sociodramas, psicodramas, búsqueda del tesoro, salidas culturales, senderismo, museística, creación de coreografías y danzas.
4.8. Inteligencia naturalista
La inteligencia naturalista es la capacidad que tienen las personas para distinguir, clasificar y utilizar elementos del ambiente (objetos, animales o plantas), en todos los entornos rurales o urbanos. Esta implica el entendimiento del mundo natural, la observación científica de la naturaleza, el estudio de sus procesos y la apreciación de la vida en todo su esplendor y manifestaciones. Cuenta con muchas destrezas, entre las cuales figuran la comunión con la naturaleza, la sensibilidad hacia la flora natural que lleva a la admiración, respeto y cuidado de los animales, la búsqueda de elementos naturales en la cotidianidad como vestimenta, bisutería, calzado, alimentación y relajación. Es la habilidad de cuidar e interactuar con los seres vivos, el reconocimiento y clasificación de las especies, el cultivo de las plantas, la capacidad de apreciar el impacto de la naturaleza. Blesa (2015) afirma que «la inteligencia naturalista también es sensibilidad, comprensión y respeto hacia el medio ambiente, descubrir el mundo que les rodea, a través de los cinco sentidos» (p. 10).
Se sugiere realizar con los niños senderismo, caminatas por parques y lugares naturales, excursiones al campo con lupa y clasificar y relacionar las especies. Se busca la experimentación y el contacto directo con la naturaleza, la selección y clasificación de semillas y de texturas naturales, el uso del microscopio, el análisis de las reacciones químicas, de los tejidos de la naturaleza, de los elementos naturales y sus componentes. Se recomienda la museística y los paseos diversos. En la Figura 1 se visualizan los tipos de inteligencias múltiples.
Desde el enfoque sistemático de la existencia de estas ocho inteligencias, se establece que deben fijarse múltiples formas de aprender y por consiguiente de enseñar. Esta última parte didáctica es competencia de los docentes, los cuales deben asumir el cambio de paradigma y el modelo educativo que se ajuste en mayor medida a los cambios y transformaciones que conlleven a sus estudiantes a vivir mejor este mundo cambiante.
Las escuelas vanguardistas generan aprendizajes para la vida. La teoría de Howard Gardner ha abierto horizontes dilatados que parten de un conocimiento más real de cada estudiante, lo que permite atender la diversidad y optimizar los aprendizajes con estilos propios. La teoría de las inteligencias múltiples posibilita a los docentes adaptar creativamente estos principios a cualquier contexto educacional (Gardner, 2015).
5. GUÍA DIALÓGICA INFERENCIAL ARGUMENTATIVA
Desde la experticia docente manabita se propone una guía dialógica inferencial argumentativa, es decir, un listado sugerente alternativo que no tiene carácter recetario ni mucho menos estructurado de las actividades. Consiste en planteamientos, sugerencias, ideas y vivencias contadas a partir de la aplicación del currículo ecuatoriano. Esto favorece el desarrollo de las inteligencias múltiples a partir de juegos o estrategias placenteras y lúdicas, y un diálogo igualitario entre los elementos del currículo programático y el humano. Los estudiantes interactúan con los docentes, a través de un diálogo socrático en el que se paren las ideas y preceptos, lo cual constituye un importante potencial de transformación social.
Esta guía es inferencial argumentativa porque crea nuevas ideas, innovadoras alternativas y estrategias didácticas a través de los proyectos integrados, sustentados por aquellos estudiantes que, luego de las lecturas exegéticas, han entrado en su mundo creador desde lo conocido hasta llegar al fantástico mundo por conocer.
La investigación permitió describir actividades pertinentes para desarrollar las inteligencias múltiples, que abarcan ideas y experiencias concatenadas a esta metodología integral, según los contenidos del currículo aplicados en la escuela. Se describen brevemente actividades lúdicas según los temas curriculares. En la Figura 2 se expone el contexto sociocultural educativo de niños, docentes, escuela, ciudad.
El contexto social, cultural, afectivo y educativo que acoge al infante desde su ambiente familiar y amistoso, a medida que va creciendo, garantiza y enriquece el desarrollo de todas las inteligencias.
En las diferentes investigaciones realizadas acerca de la neurociencia y las localizaciones cerebrales están los estudios sobre las inteligencias múltiples, que corroboran la experiencia en los estilos de aprendizaje como individualidades innatas y adquiridas de manera singular; que, en las cualidades específicas, en la manera de aprender, en la comprensión, no hay dos personas iguales. Somos seres únicos e irrepetibles, creación de un Ser Supremo, con características similares y especiales a la vez.
El principio defendido sobre la estimulación de las inteligencias múltiples sostiene que los estudiantes con varios estilos de aprendizaje puedan llegar a buen término por diferentes caminos, cumpliendo los mismos objetivos. Se plantea la personalización de la educación entregando información o provocando la generación de conocimiento desde pautas o consignas para inferir o «parir» las ideas mayéuticas.
6. LA ESCUELA PROPOSITIVA VANGUARDISTA
La escuela de vanguardia de los tiempos actuales propone el sistema de ponderación de las inteligencias múltiples mediante la neurobiología, donde se establecen zonas del cerebro que corresponden a determinados espacios de cognición, de procesamiento de la información, con la consecuente creación de «productos» válidos para una cultura. Son ocho puntos diferentes del cerebro donde se albergan cada una de las inteligencias.
Como lo indica López (2019), «el proceso de analizar, de entender y de evaluar forma parte del pensamiento crítico» (p. 88). Esto entra dentro de la inteligencia múltiple, donde la cognición está en el proceso de la información.
En muchos casos se hereda la capacidad de ser inteligente. Esto viene del código genético hasta la quinta generación, como genes dominantes o recesivos. La inteligencia se desarrolla por medio del entorno enriquecido. La familia, agente principal de la metacognición, toma conciencia de las habilidades de pensamiento de orden superior, del sujeto que aprende.
La ciencia, en general, vive momentos vertiginosos tan notables en química, biología molecular, robótica, cibernética, neurofisiología, matemática y electrónica, que afirma que la inteligencia mantiene la estructura genética dominante y, a la vez, es modificable con estímulos significativos y ponderaciones cruciales en el desarrollo humano.
Entre los estudios, adecuaciones y certezas en la aplicación de las inteligencias múltiples, se demuestra que cada ser humano reacciona individualmente ante los estímulos del contexto sociocultural afectivo, que se convierte en inteligencia ponderada, según sea el caso, y aumenta el peso del córtex cerebral, especialmente en las zonas del cerebro vinculadas a la percepción visual y se ponderan las áreas lingüísticas y motrices (Macías, Rodríguez y Avellán, 2019).
Aparece un proceso característico de la inteligencia interpersonal llamado metacognición, como proceso lógico del pensamiento inteligente humano que consiste en tomar conciencia de lo aprendido y expresarlo asertivamente. A la inteligencia interpersonal se le conoce y trabaja como inteligencia espiritual para dar valor agregado a los procesos de interiorización y trascendencia reflexiva sobre el conocimiento y los sentimientos de la fe y de Dios, en cualquier servicio, con un sentido de humanidad y fraternidad en libertad, con el reconocimiento de la inmortalidad del alma.
Si los infantes, junto con el aprendizaje de los contenidos programáticos, también resuelven preguntas internamente, es posible que aprendan mejor y que esto se consolide para aplicarlo a cualquier circunstancia de la vida o de otros aprendizajes cognitivos.
Al hablar de procesos de pensamientos, es posible la integración de los cuatro saberes: saber pensar, saber hacer, saber ser y saber convivir, como oportunidades de resolución de problemas cotidianos y el aprendizaje y la evaluación de los cuestionamientos de las interrogantes ético-existenciales a nivel metacognitivo (Delors, 1994). Son estos saberes el fundamento axiológico de cada ser humano, pilar fundamental de la vida.
Todos estos aprendizajes deben ser autónomos y apropiados por cada ser humano, que debe hacer suyo lo que sabe y aplicarlo en cualquier circunstancia de la cotidianidad (Suárez, Maiz y Meza, 2010), llegado el momento de conciencia humana en el que cada ser busca aprender, según sus intereses, necesidades y trascendencia.
La teoría de las inteligencias múltiples deja como legado a la comunidad académica la metacognición en el campo educativo. Su reconocimiento corrobora la consolidación de procesos enriquecidos con el entorno afectivo, la disciplina positiva, la resiliencia desde la familia y el reforzamiento de esta en la escuela innovadora y diferente.
A todos los docentes que deseen asumir el reto de una escuela nueva y renovada, sean convocados a participar y darle la justa prueba, la amalgama cognitiva y lúdica, involucrando a las familias cuyos hijos sean partícipes de un aprendizaje contextual e integral desde sus primeros años.
Para todos ellos se presenta la guía dialógica inferencial argumentativa que respalda el trabajo de estimulación pertinente de las inteligencias múltiples, de los dos hemisferios cerebrales en actuación práctica operativa del aprendizaje significativo. Con estas actividades se hace posible tener infantes más inteligentes, felices y espirituales. Son todos convocados al liderazgo real, consciente, creciente y comprometido con las demandas socioculturales hacia la solución de situaciones problemáticas de la humanidad.
La generación de una conciencia de estimulación o ponderación de las inteligencias múltiples en familia conlleva al crecimiento del ser individual y la mancomunidad como principios y heredad. A los docentes les favorece este aporte para acrecentar el espíritu investigativo, vanguardista e ir hacia un cambio profundo y trascendental de su papel y liderazgo participativo, centrado en sus estudiantes, con el desarrollo de una educación personalizada, reflexiva, con un aprendizaje continuo en el manejo de las tecnologías y la metacognición, como herramientas para el aprendizaje. No es posible omitir a la evaluación como proceso sistemático, sistémico, holístico, humanista y vanguardista, que prepara tanto al estudiante como al docente para ser lectores inferenciales de la sociedad y asumir su compromiso transformacional.
CONCLUSIONES
La estimulación de las inteligencias múltiples abarca la fundamentación, planificación, contextualización y sistematización curricular lúdico-afectivo-pedagógica. Se logra un ser humano más integral, solidario, académico, existencial, propositivo y productivo en la sociedad cambiante, diverso en donde se desenvuelva con una proyección universalista.
Se diseñó la guía dialógica en este perfeccionamiento holístico y duradero de las inteligencias múltiples, con la búsqueda de nuevas metodologías y estrategias desde la metacognición. Se aplicó en la planificación diferenciada y operativa, que permite extrapolar a una dimensión diferente y hacer que los niños disfruten de la realización de actividades propuestas en el currículo, amalgamándolas con la visión de convertirlos en representantes creativos, innovadores y justos en un aprendizaje significativo.