SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
vol.40 número2Lugar de la metodología de la investigación en la estructura curricular de la carrera Educación Inicial índice de autoresíndice de materiabúsqueda de artículos
Home Pagelista alfabética de revistas  

Servicios Personalizados

Articulo

Indicadores

  • No hay articulos citadosCitado por SciELO

Links relacionados

  • No hay articulos similaresSimilares en SciELO

Compartir


Revista Cubana de Educación Superior

versión On-line ISSN 0257-4314

Rev. Cubana Edu. Superior vol.40 no.2 La Habana mayo.-ago. 2021  Epub 01-Abr-2021

 

Artículo original

La formación integral del estudiante universitario desde un enfoque sociocultural

The Integral Formation of the University Student from a Socio-cultural Approach

0000-0001-9550-2182Aldo Raudel Martínez Moreno1  , 0000-0001-8966-8821Aymeé Alonso Gatell2  *  , 0000-0001-7858-6409Elio Pérez Ramírez2 

1 Universidad Autónoma de Nuevo León, México.

2 Universidad de Camagüey Ignacio Agramonte y Loynaz, Cuba.

RESUMEN

El progreso y las necesidades socioculturales que tienen lugar en la actualidad obligan a preparar a las futuras generaciones para orientarse y actuar en un mundo donde la formación cultural se ha convertido en un componente vital para la actividad humana. El presente artículo contribuye a la formación integral del estudiante universitario. Tiene como objetivo mostrar el impacto del enfoque sociocultural en este proceso. En este sentido, expone los principales resultados que ha alcanzado la Facultad de Ingeniería Mecánica y Eléctrica (FIME) de la Universidad Autónoma de Nuevo León, en México, en la socialización de buenas prácticas ya existentes en la institución, que contribuyen al desarrollo de la sociedad a partir de la formación profesional y humanística del estudiantado desde el enfoque sociocultural. Resulta revelador su significado en correspondencia con el cumplimiento de la misión institucional de la educación superior.

Palabras-clave: cultura; comunidad; extensión universitaria

ABSTRACT

The progress and socio-cultural needs that are taking place nowadays make it necessary to prepare future generations to orient themselves and act in a world where cultural training has become a vital component for human activity. This article contributes to the integral formation of the university student. It aims to show the impact of the sociocultural approach in this process. In this sense, it presents the main results achieved by the Faculty of Mechanical and Electrical Engineering (FIME) of the Autonomous University of Nuevo Leon, in Mexico, in the socialization of good practices already existing in the institution, which contribute to the development of society from the professional and humanistic training of students from the sociocultural approach. Its significance in correspondence with the fulfillment of the institutional mission of higher education is revealing.

Key words: culture; community; university extension

INTRODUCCIÓN

Para este artículo resulta oportuno reconocer la significación de la formación integral en el estudiante universitario como un proceso sostenido durante toda la vida. Las universidades deben desempeñar un papel trascendente en la transformación de la sociedad mundial en términos del desarrollo (Adomßent y Michelsen, 2006; Mochizuki y Fadeeva, 2010). La formación de los profesionales repercute en su capacidad de enfrentar situaciones reales que los lleve a la reflexión sobre las dimensiones afectivas, éticas y estéticas en las relaciones interpersonales, pero también en las relaciones con el medio natural y sociocultural de sus propios contextos. De esta forma se propicia un desarrollo humano y socialmente sustentable.

Desde un marcado acento social, Horruitiner (2011) enfatiza el significado de la formación como vía para preparar a los ciudadanos para la vida y, en consecuencia, para su desempeño en la sociedad. También lo concibe desde un sentido más personal, donde cada sujeto se apropia de herramientas propias para alcanzar su aprendizaje.

Para lograr fines notables a través de la educación se va consolidando la idea de asumir e instrumentar tendencias pedagógicas con acentuada función formativa, que logren un impacto más efectivo que la educación tradicional, entendida como instrucción del alumno, y que, en ocasiones, resulta ser una dimensión principalmente cognitiva y memorística (Ruiz, Álvarez y Pérez, 2008).

Al ser el desarrollo humano la base coyuntural donde se centra la educación y también una de las problemáticas a resolver, se significan los aportes de Zambrano et al. (2018), que enfatizan la necesidad de lograr el desarrollo humano, potencializado desde sus capacidades, su beneficio y el contexto donde se desenvuelve el estudiante universitario. Esta concepción armoniza con la intencionalidad marcada en la búsqueda de pautas para lograr la realización plena del sujeto como parte activa de la sociedad desde diferentes dimensiones del ser humano: ética, espiritual, cognitiva, afectiva, comunicativa, estética, corporal, sociopolítica, entre otras (Alonzo et al., 2016).

Desde la praxis se puede ponderar la esencia de la formación integral del ser humano, a partir de sus relaciones con una cultura general e integral enfocada al desarrollo técnico, científico, histórico, humanista, ambiental, estético, político, de convivencia social y otras manifestaciones que le permiten lograr una transformación tanto como ser social, como en la individualidad del estudiante. Esta valoración se acentúa en el estudio de Ruiz, Álvarez y Pérez (2008), quienes contribuyen desde la teoría a la formación sociohumanística del estudiante universitario. Resaltan la formación en diferentes escenarios y niveles de educación, en los cuales se ha actuado con una intencionalidad marcada para lograr nuevas cualidades en función de su integralidad.

El proceso de formación de profesionales tiene un carácter esencialmente social. Se desarrolla como un sistema y no puede quedar a la espontaneidad de quienes intervienen en él y mucho menos de quienes lo dirigen, por lo que exige ser asimilado para incidir en su perfeccionamiento de manera eficiente y eficaz. Referente al proceso formativo, se analizaron estudios de diferentes autores que hacen aportes significativos al tratamiento en la educación superior: Álvarez de Zayas (1996), Núñez (2004), Marín (2007), Valera (2010), Horruitiner (2011), Bermúdez y Pérez (2012), de la Herrán, Pérez y Torres (2012) y Alonso, Álvarez y Castillo (2017).

La educación no solo debe limitarse a los procesos de enseñanza-aprendizaje, también debe plantearse retos como aprender a conocer, aprender a convivir, aprender a hacer y aprender a ser. Sobre esta línea de análisis, se reconocen los arquetipos actuales de la educación superior, donde la extensión universitaria ocupa un lugar trascendental al tener una función totalizadora, presente en cada uno de los procesos sustanciales de la educación y en la proyección social de la universidad. Además, enriquece y perfecciona los mecanismos de interacción y transformación de las comunidades, vista desde la extensión intra y extrauniversitaria.

GENERALIDADES DEL ENFOQUE SOCIOCULTURAL EN LA EDUCACIÓN SUPERIOR

En el contexto de este estudio resulta oportuno significar la necesidad de que los futuros profesionales realicen acciones que se manifiesten desde la cultura en su formación y en un desempeño acertado en el ámbito socioprofesional. Los procesos de gestión sociocultural se sustentan en la construcción del conocimiento científico, donde la formación de los futuros profesionales está signada por los retos culturales de la contemporaneidad. En el ámbito de la educación superior se evidencian su viabilidad y su capacidad para transformar y propiciar el cambio y el progreso de la sociedad (Molina, Lavandero y Hernández, 2018).

En la actualidad, la universidad asume como uno de sus retos más importantes la responsabilidad social de la formación de los futuros profesionales. Por ello, ha de informar, motivar y encauzar objetivos para el aprovechamiento de la cultura, incorporada de forma acertada a la educación y al desempeño profesional. Asumir los desafíos en la formación de los futuros profesionales conduce a la interrelación de las tres funciones de la enseñanza: instructiva, educativa y desarrolladora, como expresión de las cualidades del proceso. Si se logra atender a su complejidad, se pueden integrar y materializar y, de esta forma, se estará preparando un profesional integral al servicio de la sociedad.

En este sentido, Balmaceda, Cáceres y Lecaros (2018) apuntan desde su obra una mirada a la objetividad con que la universidad defiende hoy las necesidades e inquietudes del hombre. Aun cuando no sea su misión ofrecer soluciones concretas e inmediatas, sí debe ser un ente perceptivo y receptivo a las certezas e incertidumbres de estos tiempos y reafirmar constantemente su capacidad de interactuar con el medio que la rodea. Estos autores ven, además, la extensión como proceso de difusión, que pone a disposición de un amplio público la cultura que genera o selecciona la universidad, y como respuesta social.

La extensión en su vinculación con el medio debiera ser parte de los esfuerzos que destina la institución universitaria a su crecimiento integral. Hasta ahora las universidades se han caracterizado por incrementar las acciones y programas de docencia e investigación, y, sin ser categóricos, los esfuerzos y los recursos materiales y humanos empleados para fomentar la extensión universitaria suelen ser menores.

En Latinoamérica se impulsa moderadamente el accionar extensionista en los últimos años. Se han asumido peculiaridades propias en cada país o región, donde el desarrollo logrado está determinado por la situación política, económica y social de cada nación. Como resultado de la revisión y análisis de este tema, se subrayan como las principales insuficiencias de la extensión universitaria: la limitación de este proceso a lo artístico, la carencia de financiamiento de los proyectos, la desvinculación con el resto de las funciones universitarias, la insuficiente preparación teórica y metodológica de los recursos humanos para su puesta en práctica, el deterioro de la infraestructura física-espacial, así como la falta de correspondencia entre la planificación, la acción y evaluación extensionista, lo que repercute de forma negativa en el desarrollo sociocultural del estudiante universitario.

La formación de valores y responsabilidades ciudadanas es uno de los principales objetivos encomiados en la actualidad, ya que resulta necesario que la escuela eduque y enseñe plenamente la formación de valores en todo su trabajo y actividades (Leyva, Leyva y Parrado, 2017). Esta concepción está dirigida a reconocer al estudiante como sujeto capaz de asumir un papel protagónico en el proceso formativo, tanto en el orden instructivo como educativo, pues la interacción y la metacognición desde esta óptica posibilitarán la realización de transformaciones que abarcarán también lo conductual y lo psíquico.

En correspondencia con la intencionalidad de esta obra, se destaca el papel de la educación superior. La universidad se puede nutrir del conocimiento y la cultura comunitaria, devolviendo a la sociedad los aportes científico-técnicos que esta pueda ofrecer para el progreso, el bienestar humano, el desarrollo social, sostenible e inclusivo de la comunidad. El proceso resultante debe ser de carácter continuo y permanente. Desde la academia se potencia un estudiante concebido como autotransformador de su personalidad y desarrollo, donde la educación en valores incluye el autoperfeccionamiento en una unidad de lo social y lo individual, a partir de la asunción consciente y responsable del educando en su papel de sujeto.

Para el entendimiento de estas consideraciones, se debe significar la labor extensionista no solamente como transformadora de la comunidad, sino que, a su vez, transforma a la propia comunidad universitaria por el vínculo bidireccional que se establece. La universidad tiene como objetivos esenciales preservar, desarrollar y promover la cultura. En ella se produce una dialéctica con la docencia, la investigación y la extensión que promueve la cultura de la sociedad en correspondencia con sus necesidades de desarrollo, en función de tributar a la elevación del nivel cultural de sus educandos. En calidad de docentes, defendemos esta hipótesis a partir de la experiencia práctica en las universidades de orígenes.

El futuro profesional debe desarrollar habilidades en su formación inicial desde las diversas formas organizativas del proceso docente-educativo, que le permita la participación en proyectos extensionistas de desarrollo con acciones sistemáticas, adecuadamente concebidas, articuladas, aptas para satisfacer las carencias, promover el trabajo en colectivo y lograr la necesaria preparación y formación cultural integral.

EL ESPACIO PÚBLICO COMO FACTOR DE IMPACTO EN LA FORMACIÓN SOCIOCULTURAL DEL ESTUDIANTE UNIVERSITARIO

El territorio es una expresión de las relaciones sociales que tienen lugar en él. En tal sentido, la comunidad que lo habita construye una identidad y cultura propias. Es por ello que el territorio tiene un significado especial, pues involucra procesos sociales en los que tienen lugar actividades culturales, productivas o de otra índole, determinado por lo natural, lo social y lo físico. Es así que se subraya lo esencial de la acción humana sobre el espacio (Borja, 2002).

Asimismo, Lefebvre (1978) coincide en distinguir al espacio como producto social, y de ello se deriva su diversidad. Este autor lo explica desde tres condiciones fundamentales: su naturaleza, su condición urbana y su condición social. En relación con la producción del espacio, sugiere forma, estructura y función como los atributos que pueden orientar el análisis.

De esta manera, la transformación de condiciones naturales da como resultado la esencia física, lo espacial, donde se desenvuelven las relaciones sociales; y en dicha transformación que lleva a cabo el hombre, se refleja el progreso tecnológico y el conocimiento alcanzado en una época y momento determinados. En igual sentido se orientan las ideas de Gómez (2007), dado el realce que le imprime a la connotación social y política del espacio, y que lo considera un elemento importante para la participación ciudadana.

En consecuencia, el espacio público es una creación de la sociedad para facilitar la interacción de los individuos, tal como se ejemplifica en los espacios públicos de las ciudades griegas, creados para servir de marco a actividades políticas, religiosas, artísticas y deportivas. Pero conviene analizarlo no solamente como producto o consecuencia de la acción humana. También puede ser enfocado desde otra dirección: el impacto que los atributos del espacio imprimen a las transformaciones en la comunidad. Esto quiere decir que quienes comparten en las actividades que tienen como marco las condiciones espaciales reciben impacto de dichos atributos en su proceso de uso. Esto puede manifestarse en aspectos como educación estética, identidad cultural, comportamiento ciudadano y otros.

En correspondencia con el contexto analizado, se puede afirmar que todo el sistema de espacios de una institución universitaria deviene un escenario que acoge a una comunidad con características y necesidades específicas. Dichos espacios pueden ser dotados de atributos que influyen en la educación estética, la cultura ciudadana de convivencia, la conciencia ambiental, el sentido de pertenencia, la identidad y otros propósitos formativos. Es así que se promueve su transformación por los decisores que tienen la responsabilidad de acondicionarlos, en base a la idea de que el entorno espacial puede tener un impacto favorable en la formación sociocultural del estudiante universitario.

EL ENFOQUE SOCIOCULTURAL EN LA FORMACIÓN INTEGRAL DEL ESTUDIANTE EN LA FACULTA DE INGENIERÍA MECÁNICA Y ELÉCTRICA (FIME)

La Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL) cuenta con más de 190 000 estudiantes y más de 300 programas educativos en los niveles medio superior, superior y de posgrado, que son impartidos por 6 000 docentes, aproximadamente.

El programa de extensión y difusión cultural y artística de la UANL es de gran relevancia a nivel nacional y local, con más de 1 736 eventos al año. En este sentido, se destaca el quehacer deportivo como una fortaleza para la formación integral de los estudiantes, quienes participan en certámenes competitivos a nivel nacional y mundial. También se destacan sus centros de investigación y, en general, el desarrollo científico, humanístico, cultural y tecnológico.

Desde la perspectiva de análisis de esta obra, se consideran trascendentes los aportes a la formación integral del estudiante desde el enfoque sociocultural en la FIME. En esta facultad se desarrollan once carreras de licenciatura, además de programas de posgrado y cursos de educación continua. Cuenta con una planta de 659 maestros, dentro de los cuales son decisivos los que poseen perfil en el Programa para el Desarrollo Profesional Docente (Prodep) o en el Sistema Nacional de Investigadores (SNI). Se destaca, además, la obtención de reconocimientos, premios y certificaciones. Por otra parte, son adecuados los procesos de gestión y desarrollo de la institución que involucran a maestros, estudiantes, directivos e investigadores como actores implicados. El perfeccionamiento de la gestión institucional también impacta en los resultados orientados a la formación integral de los estudiantes.

La misión de la Facultad está diseñada desde una perspectiva de formación integral, centrada en el aprendizaje y basada en competencias de ingenieros e investigadores capaces de desempeñarse eficientemente en la sociedad del conocimiento, que aplican principios y valores universitarios y se comprometen con el desarrollo sustentable, económico, científico, tecnológico y cultural. Este significado en su plataforma de trabajo conduce a la creación de un conjunto de valores que hacen de la formación integral del estudiante de ingeniería su centro de atención (Figura 1).

Figura 1 Esquema de desarrollo para la formación integral en FIME. 

En los logros alcanzados por la UANL, la FIME ha desempeñado un papel importante, donde se destaca el sentido de pertenencia de su comunidad estudiantil. En esta dirección se incluyen los aportes de García, Juárez y Salgado (2018), quienes ponderan la identidad como una categoría relevante en el proceso formativo, de cuyos resultados depende en gran medida que se identifiquen, por una parte, las actividades propias de la profesión y, por otra, las relativas al trabajo colaborativo y las interrelaciones de la comunidad académica con intención y dirección de los implicados en el proceso educativo, teniendo en cuenta, por supuesto, la identidad como baluarte en los resultados de la institución.

En adición a lo anterior, se evidencian otros resultados desarrollados en las zonas de la Facultad que benefician la formación integral de sus estudiantes. Es así que se han acondicionado áreas de uso común con fines sociales y de intercambio sociocultural para estudiantes, docentes y trabajadores de servicio. El sistema de espacios públicos de la Facultad constituye el objeto de análisis y se asume como premisa su influencia en la formación integral. El significado principal de estos sitios lo propician las características físicas que permiten el cumplimiento de las actividades de la comunidad universitaria. Es parte de la educación universitaria trasmitir las adecuadas formas de uso de las zonas diseñadas para promover valores inherentes al entorno y el desarrollo de una cultura universitaria.

En tal sentido, se han recuperado sitios de valor y se han incorporado nuevas funciones, previstas de forma paulatina a partir de cambios de uso en las áreas públicas. Todo ello facilita el uso de la infraestructura existente y, en consecuencia, se realzan las transformaciones en el sentido de identidad con estos. Desde una perspectiva estético-funcional, se puede aseverar que los espacios públicos de la FIME son un sistema interrelacionado, con diversidad utilitaria, atributos estéticos y formas de uso. Se resaltan, además, las vías de circulación tanto peatonal como vehicular que conectan las áreas más representativas de la Facultad. En su devenir en el tiempo, su trama presenta especificidades y características irregulares, con ordenanzas simples, y la presencia de edificios que se han insertado de manera acertada, en correspondencia con códigos de la arquitectura contemporánea.

Además de las áreas académicas predominantes, destinadas a aulas, talleres y laboratorios, se ha logrado funcionalidad de las nuevas zonas donde ocurre la interrelación de estudiantes y docentes en actividades culturales, sociales y deportivas. Estas posibilitan la participación social y no solamente de circulación. Promueven valores, fortalecen la identidad, la inclusión y, en general, tienen una connotación formativa sociocultural sobre la comunidad universitaria.

A modo de ilustración de estas ideas, se relacionan algunos ejemplos de espacios públicos de la Facultad, con determinadas especificidades en sus atributos y en su impacto formativo, como resultado del uso previsto para estos. Entre los espacios que refuerzan el sentido de pertenencia e identidad con la Facultad, se puede señalar el jardín de esculturas que representa personalidades reales relacionadas con la historia de la institución (Figura 2).

Figura 2 Jardín de esculturas. 

Por otra parte, es preciso resaltar edificios emblemáticos y jerarquizados por su función, en los cuales la composición volumétrica, los detalles simbólicos, escultóricos y de diseño gráfico aportan igualmente a la identidad e influyen favorablemente en la comunidad universitaria. Tal es el caso del edificio principal de la dirección de la Facultad (Figura 3).

Figura 3 Edifico de la dirección de la FIME. 

Otros espacios han recibido la influencia de intervenciones artísticas, lo que contribuye a una formación estético-visual. Estas se materializan en obras permanentes, como son los murales pictóricos (Figura 4), la ambientación de una fachada mediante tecnología de iluminación led que produce una experiencia sensorial de colores en horario nocturno (Figura 5), y otras con carácter más temporal o efímero como la instalación que simboliza un emblema de la FIME basado en el reciclaje de tapas plásticas de envases (Figura 6).

Figura 4 Mural pictórico de ambientación del espacio. 

Figura 5 Iluminación artística de edificio en la FIME. 

Figura 6 Instalación en espacio público de la FIME. 

En el conjunto de ejemplos referidos, se evidencia la participación diversa y comprometida de los actores del proceso enseñanza-aprendizaje, desde los directivos institucionales hasta los estudiantes. Otro ejemplo a referir resulta la adición de un elemento espacial en una zona de mucha actividad social: el módulo FIME-Book, fabricado mediante el reciclaje de contenedores de transporte. Esta pequeña intervención propicia la animación y mejora la ambientación del espacio público. Su función es coherente con la formación cultural integral, pues consiste en un espacio destinado a promover la lectura. Además, su dimensión educativa se refuerza porque estimula el intercambio solidario y responsable de los estudiantes, quienes pueden tomar libremente publicaciones para su lectura y, a su vez, se les convoca a realizar donaciones de otras (Figura 7).

Figura 7 Kiosco FIME-Book. 

En otras muestras se incluyen los espacios acondicionados para actividades especializadas, que reciben un tratamiento en su diseño acorde con la actividad que promueve. Tales son el espacio interactivo de la ciencia (Figura 8) y el espacio de cafetería y convivencia de los alumnos Hub-natura, con un enfoque ambiental (Figura 9).

Figura 8 Espacio interactivo de ciencias. 

Figura 9 Espacio de convivencia Hub-natura. 

CONCLUSIONES

El estudio de las teorías y los referentes que sustentan la formación integral del estudiante universitario permitió evidenciar que este proceso favorece su preparación para el ejercicio de sus funciones profesionales y, en paralelo, puede contribuir desde un enfoque sociocultural.

La concepción actual de la universidad combina la docencia, la investigación y la extensión, esta última con menos presencia aún, pero evaluadas todas como variables en los procesos de calidad y acreditación de entidades universitarias. El proceso extensionista es reclamado de manera creciente por la sociedad, por lo que ha ido adquiriendo un papel importante dentro de los procesos sustantivos de la universidad y tiene un efecto cultural sobre la comunidad universitaria que, aunque difícil de valorar, parece tener gran impacto.

La recuperación e inserción de nuevos espacios públicos en la FIME permite la animación de la zona en horario diurno y nocturno y la reafirmación de una identidad cultural en estudiantes y profesores. El entorno cualificado obtenido a partir de la recuperación del uso original de las edificaciones y áreas públicas constituye un factor relevante en la formación sociocultural del estudiante.

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

Adomßent, M., y Michelsen, G. (2006). German Academia Heading for Sustainability? Reflections on Policy and Practice in Teaching, Research and Institutional Innovations. Environmental Education Research. Taylor & Francis. Recuperado el 1 de octubre de 2020 de Recuperado el 1 de octubre de 2020 de https://www.researchgate.net/publication/238398004_German_Academia_heading_for_sustainability_Reflections_on_policy_and_practice_in_teaching_research_and_institutional_innovationsLinks ]

Alonso, A., Álvarez, N. T., y Castillo, J. A. (2017). Proceso formativo ambiental universitario: trascendencia en la carrera de arquitectura. CienciaUAT, 11(2), 54-63. Recuperado el 15 de septiembre de 2020 de Recuperado el 15 de septiembre de 2020 de http://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S2007-78582017000100054Links ]

Alonzo, D., Valencia, M., Vargas, J., Bolívar, N., y García, M. (2016). Los estilos de aprendizaje en la formación integral de los estudiantes. Revista Boletín Redipe, 5(4), 109-114. Recuperado el 1 de octubre de 2020 de Recuperado el 1 de octubre de 2020 de https://revista.redipe.org/index.php/1/article/view/105Links ]

Álvarez de Zayas, C. M. (1996). Hacia una escuela de excelencia: la concepción didáctica de la educación superior cubana. Revista Educación y Pedagogía. Recuperado el 1 de octubre de 2020 de Recuperado el 1 de octubre de 2020 de http://aprendeenlinea.udea.edu.co/revistas/index.php/revistaeyp/article/viewFile/23789/19515Links ]

Balmaceda, M. A., Cáceres, E., y Lecaros, M. J. (2018). Aporte cultural de la extensión universitaria y sus categorías. Perspectiva general, 133-145. Recuperado el 15 de septiembre de 2020 de Recuperado el 15 de septiembre de 2020 de https://www.researchgate.net/publication/267241131_Aporte_cultural_de_la_extension_universitaria_y_sus_categoriasLinks ]

Bermúdez, R. y Pérez, L. M. (2012). La orientación educativa en el contexto educativo cubano. Revista Enfoque Humanístico, (23). Recuperado el 1 de octubre de 2020 de Recuperado el 1 de octubre de 2020 de https://www.revistaenfoquehumanistico.com/lorenzo-y-bermudez-cubaLinks ]

Borja, J. (2002). La ciudad conquistada. Recuperado el 5 de octubre de 2020 de Recuperado el 5 de octubre de 2020 de http://www.barcelona2004.org/esp/banco_del_conocimiento/documentos/ficha.cfm?idDoc =2420Links ]

de la Herrán, A., Pérez, E., y Torres, A. (2012). Una metodología con implicación social para el desarrollo personal. Dialnet, (19), 211-228. Recuperado el 5 de octubre de 2020 de Recuperado el 5 de octubre de 2020 de https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=3939096Links ]

García, F. J., Juárez, S. C., y Salgado, L. (2018). Gestión escolar y calidad educativa. Revista Cubana Educación Superior, 37(2), 206-216. Recuperado el 10 de septiembre de 2020 de Recuperado el 10 de septiembre de 2020 de http://www.rces.uh.cu/index.php/RCES/article/view/223Links ]

Gómez, D. (2007). Ciudad y espacio público, perspectivas complementarias y nuevos desafíos. Desafíos, (16), 69-104. Recuperado el 5 de octubre de 2020 de Recuperado el 5 de octubre de 2020 de https://www.revistas.urosario.edu.co/index.php/desafios/article/view/623Links ]

Horruitiner, P. (2011). La universidad cubana. El modelo de formación. Editorial Universitaria. Recuperado el 9 de enero de 2021 de Recuperado el 9 de enero de 2021 de http://www.eduniv.reduniv.edu.cu/index.php?page=13&id=311&db=0Links ]

Leyva, C. J., Leyva, M. I., y Parrado, L. Y. (2017). La educación ambiental en la preparación de directores de escuela primaria. Didáctica y Educación, VIII(3), 33-52. Recuperado el 1 de octubre de 2020 de Recuperado el 1 de octubre de 2020 de https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=6662620Links ]

Lefebvre, H. (1978). El derecho a la ciudad. Península. Recuperado el 15 de septiembre de 2020 de Recuperado el 15 de septiembre de 2020 de https://www.comunicacionyrurbanidad.org/wp-content/uploads/2018/03/Lefebvre-El-derecho-a-la-ciudad3.pdfLinks ]

Marín, C. (2007). Estrategia educativa para la educación en valores del estudiante universitario desde la interacción tutor-estudiante en condiciones de universalización (Tesis doctoral). Universidad Ignacio Agramonte y Loynaz. [ Links ]

Mochizuki, Y., y Fadeeva, Z. (2010). Higher Education of Today and Tomorrow: Alternative University Appraisal for Diversity, Innovation and Change. Recuperado el 1 de octubre de 2020 de Recuperado el 1 de octubre de 2020 de http://www.ias.unu.edu/sub_page.aspx/Links ]

Molina, J. M., Lavandero, J., y Hernández, L. M. (2018). El modelo educativo como fundamento del accionar universitario. Experiencia de la Universidad Técnica de Manabí, Ecuador. Revista Cubana Educación Superior , 37 (2), 151-164. Recuperado el 5 de octubre de 2020 de Recuperado el 5 de octubre de 2020 de https://www.researchgate.net/publication/325177354_El_modelo_educativo_como_fundamento_del_accionar_universitario_Experiencia_de_la_Universidad_Tecnica_de_Manabi_EcuadorLinks ]

Núñez, M. (2004). Modelo pedagógico para educar en el valor responsabilidad ambiental a los estudiantes de la carrera de derecho (Tesis doctoral). Universidad Ignacio Agramonte y Loynaz. [ Links ]

Ruiz, J. C., Álvarez, N., y Pérez, E. (2008). La orientación socio-humanística, un aporte a la formación integral del estudiante. Tendencias Pedagógicas, (13), 175-191. Recuperado el 1 de octubre de 2020 de Recuperado el 1 de octubre de 2020 de https://www.revistas.uam.es/tendenciaspedagogicas/article/view/1897Links ]

Valera, R. (2010). El proceso de formación del profesional en la educación superior basado en competencias: el desafío de su calidad, en busca de una mayor integralidad de los egresados. Civilizar, 10 (8), 117-134. Recuperado el 5 de octubre de 2020 de Recuperado el 5 de octubre de 2020 de https://www.redalyc.org/articulo.oa?id=100220339010Links ]

Zambrano, T. M., Murillo, A., Molina, P., González, O., y Batista, A. (2018, julio-septiembre). Impacto de los proyectos de vinculación en la formación profesional y humanística de los estudiantes de la Universidad San Gregorio de ortoviejo. Revista San Gregorio, (24), 50-59. Recuperado el 4 de octubre de 2020 de Recuperado el 4 de octubre de 2020 de https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=6839727Links ]

Recebido: 13 de Abril de 2020; Aceito: 25 de Setembro de 2020

* Autor para la correspondencia: aymee.alonso@reduc.edu.cu

Los autores declaran que no existen conflictos de intereses.

Aldo Raudel Martínez Moreno: participó en el diseño metodológico. Aportó desde la praxis la disponibilidad de documentación y el accionar del quehacer de la Facultad de Ingeniería Eléctrica y Mecánica de la Universidad Autónoma de Nuevo León, México, en aras de fortalecer la formación sociocultural de los estudiantes universitarios.

Aymeé Alonso Gatell: participó en la aplicación de los métodos teóricos y empíricos utilizados en la investigación y en la búsqueda de bibliografía actualizada. Aportó desde la praxis el compendio y homologación de buenas prácticas formativas desde el enfoque sociocultural en el contexto de la enseñanza superior.

Elio Pérez Ramírez: realizó el compendio de la información gráfica y aportó en la discusión y el abordaje del proceso formativo de los estudiantes universitarios en las universidades de orígenes de los autores. Participó en la revisión y valoración de la bibliografía.

Creative Commons License