INTRODUCCIÓN
Disímiles autores coinciden en afirmar que la motivación determina la dirección, intensidad y el sentido del comportamiento humano.1,2,3 En la actividad deportiva, Thill y colaboradores,4 conciben a la motivación como la variable más importante que condiciona el rendimiento y el grado de eficacia del comportamiento de los deportistas, otros autores la consideran determinante en los altos logros competitivos.5,6,7,8 Como componente de la preparación psicológica debe implementarse durante todo el proceso de entrenamiento, junto al resto de las preparaciones (física, técnica, táctica y teórica) conformando y garantizando el éxito del mismo.4,9
Estas confirmaciones permiten comprender la importancia del trabajo con la motivación en los deportistas, pero en principio se impone conocer ¿cuál es la motivación de los atletas?; el diagnóstico de la misma constituirá el primer paso para organizar dentro del proceso de preparación psicológica el desarrollo de este componente. Este propósito requiere un análisis,10) por concreto que sea, de las principales técnicas que permiten determinarla, con el objetivo de tomar partido teniendo en cuenta el contexto en el que se esté interviniendo.
En dicho sentido, pudiera analizarse el modelo cognitivista, que a juzgar por el significativo número de investigaciones y hallazgos sobre motivación en las últimas décadas, se le confiere una posición de vanguardia en la ciencia psicológica en general,11 también en el ámbito deportivo de forma particular, considerándosele un modelo dominante en el estudio de la motivación.
A consideración de los autores, la tarea principal para la perspectiva cognitiva es estudiar el modo en el que los sujetos adquieren, representan y utilizan el conocimiento, creyendo que la variante conductual en el deporte y el ejercicio físico se recoge mejor con modelos que incluyan las cogniciones y creencias de las personas, por lo que subrayan el papel de la cognición en las respuestas de los sujetos o en las expectativas y valores que los individuos otorgan a las diferentes metas y actividades a realizar.
Cierto es que bajo este principio han enunciado sus teorías varios autores, entre las más significativas se destaca la teoría de las metas de logro12 y la teoría de la autodeterminación,13,14 de la motivación intrínseca extrínseca,13,14 la teoría atribucional de la motivación15 y la teoría de la autoeficacia.16
En el plano metodológico se han desarrollado diferentes técnicas para el estudio de la motivación, pudiendo mencionarse entre otras el Cuestionario de Percepción de Éxito (POSQ),17 el Cuestionario del Clima Motivacional Percibido en el Deporte-2 (PMCSQ-2),18 la Escala de Motivación Deportiva (SMS),19 el Cuestionario de Estudio de los Motivos hacia la Práctica de Actividades Físico-Deportivas (E.M.P.A.F.D),20 la Escala de Motivaciones en el Deporte (MT-D), la Escala de Expectativas de Éxito Deportivo (EE-0), el Cuestionario del Clima Motivacional Percibido en el Deporte-2 (PMCSQ-2), el Cuestionario del Flujo Disposicional (DFS), la Escala de Autoeficacia General (AEG),21,22 la Subescala de Habilidad Física Percibida (Perceived Physical Ability, PPA) perteneciente a la Escala de Autoeficacia Física (Physical Self-efficacy Scale, PSE), la “Physical Self-efficacy Scale (PSE)”, la Escala de Percepción de Habilidad Física (PAF) y la Escala de Autoeficacia Específica (EAE).
Estas técnicas metodológicas permiten diagnosticar la cualidad motivacional específica para la que han sido creadas, con probada validez y confiabilidad según los estudios, posibilitan además conocer y enriquecer importantes conductas que se dan en el medio deportivo, y como cualquier test facilitan la rápida información para la toma de decisiones, de manera que los autores de la presente investigación las consideran necesarias e imprescindibles; sin embargo, creemos pertinente ofrecer sobre ellas las siguientes consideraciones.
En principio, reconocer que las altas exigencias del deporte contemporáneo en el que se superan constantemente los records y marcas, requiere en cuanto a motivación se refiere, su más alto nivel de desarrollo, para convertirse en un eficiente regulador de la conducta y personalidad del deportista, en pos de alcanzar los rendimientos más satisfactorios. González23 expresa que existen motivos superiores que pueden manifestarse en la personalidad sin la existencia de un sistema autorregulador estable que determine las distintas líneas de conductas, de modo que es importante cerciorarse de que las cualidades encontradas en esas pruebas sean eficientes reguladoras de la conducta de los sujetos. En segundo lugar, se deben tener en cuenta las limitaciones propias sobre el uso de los test en sentido general, sobre este particular.24
Este hecho se constata en muchas de las investigaciones de este paradigma en las que se emplean por lo regular un único instrumento para comprobar determinada cualidad motivacional. Esta afirmación prueba la necesidad de confirmar y corroborar los datos aportados por los sujetos, en este caso atletas, a través de diferentes técnicas, observando el fenómeno, la conducta, las valoraciones en diferentes momentos e incluso circunstancias para obtener un resultado o diagnóstico certero y confiable, cuestiones, como ya se dijo, con las que no se ha sido suficientemente consecuentes.
No ajeno a lo expresado, es la importancia de asumir el estudio de la motivación como un proceso dinámico, en la que el sujeto adulto tiene un carácter activo en su determinación con su acción transformadora de sí mismo y de su realidad, de ahí que resulte importante evaluarla regularmente para percatarnos de los posibles cambios y transformaciones que puedan sucederse.
Otro aspecto relacionado, es la no explotación de técnicas como la observación, en aras de estudiar y diagnosticar la motivación.
En tercer lugar, está lo concerniente a las características de la estructura de las pruebas, por lo general cuestionarios con escalas valorativas, que tienen la limitante de conseguir respuestas cerradas, que anulan la posibilidad de fundamentar abiertamente los juicios, valoraciones y comportamientos,23 concediéndole por tanto un valor especial a las técnicas abiertas. La propuesta realizada por autores como González,23,25Valdés,26Rivera,27 y Domínguez28 para el estudio de la motivación mediante del empleo del método clínico, con técnicas abiertas puede ser una alternativa eficiente de estudio.
En cuanto a la relación de lo cognitivo y lo afectivo en el estudio de la motivación, aunque es enunciado desde las concepciones cognitivistas, no la asumen como unidad y peculiaridad distintiva, privilegiando las operaciones y procesos cognoscitivos, criterio este también compartido por Fernández,1 de ahí que esta limitación se visualice igualmente en el orden metodológico a momento de concebir el contenido de los test y la interpretación de los resultados; los siguientes parámetros asumidos por González25 en el diagnóstico de la motivación con los que se coincide pudieran salvar este sesgo:
Conocimiento sobre el contenido de la profesión, de las particularidades de las tareas a desarrollar y de las características personales necesarias para su exitoso desempeño.
Manifestación emocional en la expresión del contenido y ante las actividades relacionadas con su motivación.
Elaboración personal cuando expone sus conocimientos de forma reflexiva, se plantea objetivos futuros y se realiza un análisis de sus posibilidades de alcanzarlos.
Efectividad de la motivación, teniendo en cuenta la posición que asume ante las cuestiones relacionadas con su motivación.
Por último, se considera que independientemente del paradigma que se asuma en el diagnóstico de la motivación, éste debe requerir la enunciación y explicación de sus características, y como ya se explicó, asumir como principio metodológico la multiplicidad de técnicas, la regularidad en su evaluación, el carácter abierto de las mismas y aprovechar siempre que sea posible la propia actividad deportiva donde pueden observarse toda la variedad de manifestaciones del sujeto. En tal sentido, toda modalidad deportiva tiene implícita el trabajo de la motivación como componente psicológico primordial en el proceso de dirección del entrenamiento deportivo, incluyendo el boxeo como modalidad profesional y olímpica.29,30
Sustentados en los fundamentos asumidos, el propósito de la investigación es diagnosticar la motivación en boxeadores a través de indicadores de la preparación psicológica.
MÉTODOS
La muestra estudió a 16 atletas del equipo provincial de Boxeo de la categoría de mayores de Guantánamo, Cuba, que representaron el 100 % de la matrícula; con una edad promedio de 22 años, que entrenaron con una frecuencia de 6 veces por semana, en 5 de ellas dos sesiones de entrenamiento. La escuela deportiva es de régimen de internamiento.
La investigación se realizó en dos etapas. La primera de determinación de los parámetros, componentes e indicadores para el diagnóstico, sustentados esencialmente en los referentes de González25 y Domínguez,28 con la conveniente aplicación de métodos teóricos.
La segunda propiamente de diagnóstico de la motivación, se utilizaron: composición, con el título: para mí el Boxeo significa…, la técnica de los diez deseos, en la que el sujeto expresó sus principales deseos en orden jerárquico y el completamiento de frases deportivas, estas se aplicaron a nivel grupal al inicio de la preparación general del proceso de entrenamiento. La entrevista y observación por un período de tres semanas, la primera para ir esclareciendo las posibles dudas o contradicciones surgidas y corroborando la información obtenida. Por su parte, la observación sistemática además de recoger los datos del componente conativo de la motivación, sirvió para la constatación de datos de otros componentes. La guía de observación elaborada respondió a una escala de 1 a 5, de menos favorable a más favorable, de acuerdo al contenido de cada indicador, siendo los valores 4 y 5 los más positivos a destacar, teniendo en cuenta lo exigente de la actividad deportiva.
En la interpretación y análisis cualitativo de los resultados también se emplearon las siguientes categorías:
Amplitud y profundidad de los juicios y valoraciones referidas por el atleta sobre el deporte.
Valoración afectiva de amor, admiración o deseo por el deporte.
Implicación afectiva y personal del contenido expresado.
Expresión consciente y un elevado nivel de elaboración personal
La multiplicidad de técnicas permitió triangular los resultados.
RESULTADOS
Como consecuencia del análisis y la sistematización de los fundamentos teóricos se propuso: Indicadores señalados en la tabla 1.
COMPONENTES | INDICADORES | TÉCNICAS |
---|---|---|
Componente cognitivo de la motivación hacia el deporte. | Identificación de los principales motivos de la personalidad del atleta. | 10 deseos, Composición (C), Completamiento de frases CF |
Conocimiento del contenido del deporte y de sus exigencias, de las formas y vías para acceder a la satisfacción de las principales metas y motivos deportivos y de las características personales necesarias para obtenerlas | Entrevista Observación Composición | |
Amplitud y profundidad de los juicios y valoraciones sobre los contenidos del deporte. | Valoraciones cualitativas de los métodos y técnicas | |
Orientación consciente de la personalidad hacia motivos deportivos. | Observación C, CF Valoraciones cualitativas de los métodos y técnicas | |
Expresión consciente y con alto nivel de elaboración personal del contenido expresado. | Observación Valoraciones cualitativas de los métodos y técnicas | |
Componente afectivo de la motivación hacia el deporte. | Valoraciones afectivas de amor, admiración o deseo hacia el deporte. | C, CF, Observación |
Valoraciones afectivas de desagrado o indiferencia sobre los contenidos deportivos. | Observación Valoraciones cualitativas de los métodos y técnicas | |
Implicación afectiva y personal con el contenido expresado. | ||
Componente conativo de la motivación hacia el deporte. | Asistencia y puntualidad al entrenamiento y competencia. (A) | Observación |
Relación atleta/entrenador. (B) | Observación, Entrevista, CF | |
Comunicación, relación atleta- atleta. (C) | Observación, C.F | |
Disposición a entrenar y competir. (D) | Observación | |
Valoraciones y juicios de desagrado o indiferencia sobre contenidos deportivos. (E) | Observación, CF | |
Expresión de desaprobación ante conductas negativas de los atletas hacia el deporte. (F) | Observación | |
Expresión de aprobación de las conductas positivas de los atletas hacia el deporte. (G) | Observación | |
Valoración afectiva de amor, admiración o deseo sobre el deporte.(H) | Observación | |
Aporte de información sobre condiciones del deporte (sistemas de entrenamientos, contrarios, etc.) (I) | Observación | |
Manifestaciones de interés por las actividades extras del entrenamiento, docente deportiva, recreativas y otras. (J) | Observación | |
Orientación consciente a la consecución de los motivos deportivos. (K) | Observación | |
Sacrificio de otros motivos que compiten con los motivos deportivos. (L) | Observación | |
Participación activa en las tareas del entrenamiento. (M) | Observación | |
Cumplimiento de todas las tareas planificadas.(N) | Observación | |
Grado de esfuerzo y aprovechamiento del entrenamiento. (Ñ) | Observación | |
Conductas de perseverancia ante obstáculos y resultados adversos.(O) | Observación, Entrevista | |
Coincidencia de la orientación de la personalidad con los motivos deportivos.(P) | Análisis integral de los instrumentos utilizados |
Los resultados de la técnica de los diez deseos evidenciaron los principales motivos referidos delimitándose como prioridad los deportivos, familiares, superación, materiales y de reconocimiento, metas deportivas a largo plazo poco dinamizadoras y movilizadoras de la conducta. El 56 % de los atletas refirió a los motivos deportivos en el primer nivel de la jerarquía motivacional, el 18 % los de superación e igualados en un 12 % los familiares y materiales. En tal sentido, los principales motivos de la personalidad y su posición en la jerarquía motivacional pudieron valorarse como parte de la figura.
Con respecto a la valoración cualitativa (tabla 2) se comportó de la siguiente manera:
La tabla 2 evidencia que el 87,5 % de los atletas indicaron que sienten amor, admiración por el deporte, solo en el 25 % mostraron amplitud y profundidad en los juicios sobre el deporte y la implicación afectiva, así como el nivel de elaboración personal solo se evidencia en el 31,2 %.
Sobre la técnica de Completamiento de Frases, la tabla 3 evidencia las categorías evaluativas y sus respuestas. Los principales motivos referido en la prueba son los deportivos, familiares, superación y materiales; metas deportivas inespecíficas, no objetivas y poco medibles, centradas en el resultado con pobres proyecciones futuras. Se expresó predominio en cuanto a dificultades en la relación atleta entrenador, agrado y satisfacción por el Boxeo, buenas relaciones interpersonales atleta-atleta y reconocimiento de indisciplinas en cuanto a falta de esfuerzo, llegadas tardes e inasistencias al entrenamiento.
La tabla 3 indicó que el 81,2 % posee valoraciones afectivas de amor y admiración por el deporte, en el 37,5 % se observó amplitud y profundidad de sus juicios sobre el deporte, en el 43,7 % implicación afectiva y solo en el 31,2 % alto nivel de elaboración personal.
La tabla 4 evidencia los datos obtenidos de la entrevista y la observación, obteniéndose indicadores satisfactoriamente representados en el equipo, tales como las relaciones interpersonales entre los atletas (C) en un 94 %, aporte de información sobre el deporte, aprobación de conductas positivas hacia el deporte (G), desaprobación de conductas negativas (F), valoraciones afectivas de amor, agrado y admiración por el deporte (H) y cumplimiento de todas las tareas del entrenamiento (N), representados en un 87 %, 75 %, 62 %, 75 % y 62 % respectivamente, además del bajo porciento de desagrado-indiferencia ante los contenidos deportivos (E), observados en un 6 %.
En lo relacionado con las manifestaciones de interés por las actividades extras del entrenamiento (J) se destacó mayor participación en las recreativas, con dificultades en las docentes-deportivas con creciente interés por el resultado final, y no en la asimilación de los contenidos. El aporte de información por los atletas (I) es esencialmente sobre las características de los contrarios y las competencias. El resto de los indicadores tienen insuficiencias.
Se destacó en la entrevista el conocimiento del deporte, de las condiciones atléticas que poseen y de las potencialidades deportivas, metas deportivas inespecíficas centradas en el resultado y falta de proyección futura en cuanto al deporte.
DISCUSIÓN
Sin desestimar las valoraciones y resultados que en el orden individual facilitó el estudio, se ofrece a continuación la caracterización de la motivación del equipo en general. El análisis y la triangulación de los resultados aportó lo siguientes resultados.
En cuanto al componente cognitivo de la motivación, los principales motivos de la personalidad de los atletas redundan en deportivos, de superación, familiares, materiales y de reconocimiento. Lo anterior es de suma importancia, dado que la representación cognitiva del sujeto debe representarse correcta y motivacionalmente por la actividad que realiza,(31,32 induciendo una necesidad implícita de reconocimiento y resultados deportivos, aspecto que tributa directamente al incremento sistemático del rendimiento deportivo, dado que la motivación determina la dirección, intensidad y sentido del comportamiento humano.1,2,3,4,5,6,7,8
Son los motivos deportivos los predominantes en el primer nivel de la jerarquía motivacional,33 pero este porciento es insuficiente si se toma en consideración el carácter individual de este deporte y la constatación de que no regulan de manera efectiva el comportamiento. Hallazgo que se refuerza al reflejarse metas deportivas inespecíficas, a largo plazo, no medibles, con pobres proyecciones futuras y esencialmente centradas en resultados, además de la no prevalencia de juicios y valoraciones profundas con respecto a la actividad que practican, ni un elevado nivel de elaboración personal, cuestión como ya se explicó, que limita la movilización de los recursos psicológicos necesarios para el exitoso desempeño de la actividad, a pesar de que exista conocimiento de la exigencia del deporte, de las particularidades de las tareas a desarrollar, de las condiciones atléticas y potencialidades deportivas personales.
En cuanto al Componente afectivo de la motivación, predominan valoraciones afectivas y sentimientos de amor y admiración por el deporte; el rechazo, la desaprobación y la indiferencia ante conductas negativas relacionadas con la actividad deportiva coexisten; sin embargo, se muestran receptivos una vez que les son explicadas.
Prevalecen relaciones de amistad y camaradería entre los miembros del equipo, experimentan sensaciones de agrado y gusto por la actividad mayormente expresados en las competencias en las que participan activamente (atletas muy competitivos, les gusta competir), factor de suma importancia para el logro de altos rendimientos deportivos.34 Aunque en número mayoritario el deporte tiene un valor emocional para los atletas, no es evidente en similar por ciento, la implicación afectiva o el comprometimiento para sí, de ahí que no sea representativo en los resultados la elaboración personal, no ejerciendo verdadera función reguladora.
En cuanto al componente conativo de la motivación, existen manifestaciones de indisciplinas, ausencias recurrentes, impuntualidades, dificultades en la comunicación atleta- entrenador, conductas con las que sacrifican los motivos deportivos y el aprovechamiento y cumplimiento de las tareas del entrenamiento. Aunque predominan en número la alta disposición voluntaria para entrenar, esta todavía es insuficiente, prevalece la participación en todas las tareas en el gimnasio, pero el grado de esfuerzo, entrega y aprovechamiento no es suficiente, obstaculizando la entrega total y esforzada a las sesiones de entrenamiento. Existe además movilización insuficiente de la conducta ante obstáculos y resultados adversos.
La participación en actividades colaterales al entrenamiento esencialmente recreativas es buena, no así en las docentes deportivas, en las que se muestra mayor interés en el resultado final y no en la asimilación de los contenidos. Estos resultados demuestran que no existe una adecuada orientación en la consecución de los motivos deportivos expresados.
La relación interpersonal entre los miembros del equipo es muy positiva, con una adecuada comunicación entre ellos. Aportan información sobre sobre cuestiones relacionadas con el Boxeo con mayor énfasis en lo referido al estudio de los contrarios, las competencias y el análisis táctico de situaciones.35) Manifiestan conductas de aprobación ante comportamientos positivos y desaprobación e indiferencia ante hechos negativos. En sentido general, muestran estados anímicos positivos durante el entrenamiento.
El porciento de coincidencias de la orientación de la personalidad de los atletas con motivos deportivos debe incrementarse, mostrándose un predominio de orientación personológica a motivos materiales.
El uso de técnicas abiertas, la sistematicidad de la observación de la conducta en la actividad deportiva, constituyen elementos de gran valor en el diagnóstico de la motivación de los atletas, permitiendo la expresión espontánea del conocimiento, reflexiones, vivencias y experiencias personales y comprobación la confirmación, y corroboración de los hallazgos.
La caracterización de la motivación de los atletas a través de los componentes afectivos, cognitivos y conativos de la motivación ofrece una visión completa e integradora de la motivación, permitiendo visualizar los indicadores con más o menos desarrollo, mostrando su potencial para convertirse en motivos efectivos en la regulación de la conducta, lo que adquiere significado para la intervención.
En el equipo de Boxeo, los motivos deportivos no regulan efectivamente la personalidad en pos de alcanzar los mejores rendimientos en la actividad.