Introducción
El fútbol es un deporte que, a pesar de sus características aeróbicas, demanda en el deportista la realización de movimientos de corta duración y alta intensidad del metabolismo anaeróbico,1 puesto que es un deporte donde los jugadores deben desarrollar movimientos explosivos de corta duración intercalándolos con periodos breves de descanso.2
Además, durante un partido de fútbol resultan necesarios una serie de factores que permiten a los jugadores alcanzar la excelencia en este deporte.3 La importancia de tales necesidades condicionales del fútbol en la obtención del rendimiento óptimo han sido objeto de estudio.4 Así mismo, se encuentra literatura sobre la incidencia de las características antropométricas para que el jugador desempeñe de manera eficaz sus funciones durante la competición.5,6
A lo largo de un partido los jugadores de fútbol realizan desplazamientos a intensidad media y baja,7,8 también de forma reiterada deben efectuar, a altas velocidades y aceleraciones, una gran variedad de esfuerzos que son determinantes en la competición, que a pesar de que son menores en número y tiempo,9 como la carrera a máxima velocidad o sprint,10 estas aumentan las posibilidades de anotar un gol en los momentos más cruciales de un juego, debido a que existe un buen desempeño de la capacidad de potencia.1,11 Por tanto, la capacidad del jugador de fútbol para producir acciones de alta velocidad y habilidades motoras se conocen por incidir en el rendimiento.12
De ahí que sea fundamental el desarrollo de algunas capacidades físicas específicas en individuos jóvenes para el rendimiento de alto nivel y que piense que estas capacidades puedan estar influenciadas por variables antropométricas.13 Por otra parte, diversos estudios han concluido que la masa grasa es un factor limitante de las capacidades físicas relacionadas con el rendimiento deportivo,14,15 y que el exceso de grasa corporal tiene una repercusión negativa en el rendimiento del fútbol.16
Por ende, el objetivo del presente estudio fue determinar la influencia del índice de masa corporal, la masa grasa y la masa libre de grasa en la velocidad con cambios de dirección en jóvenes futbolistas.
Métodos
Esta investigación es descriptiva de tipo correlacional, con enfoque cuantitativo y una muestra a conveniencia.
Los participantes de este estudio fueron 21 futbolistas, quienes optaron por participar voluntariamente; no obstante, previamente se les informó del objetivo del estudio. Por ello, tanto los deportistas como sus padres o representantes legales firmaron un consentimiento informado por escrito, autorizando la divulgación de los datos obtenidos con fines investigativos, siempre respetando la confidencialidad de los jugadores.
La medición de la masa corporal y talla se realizó siguiendo los parámetros establecidos en el protocolo del Colegio Americano de Medicina del Deporte17 y el porcentaje de tejido adiposo se determinó mediante la bioimpedancia eléctrica con el monitor automático OMRON® BF-306.
Para evaluar el rendimiento de la velocidad se utilizó el Test de sprint 20 metros con cambios de dirección (20 Meters Swerve Sprint Test) (Fig. 1), el cual se ha utilizado previamente con otros deportistas18 y con jóvenes futbolistas.19
Los datos fueron analizados en el paquete estadístico PSPP en el cual se aplicó la prueba de normalidad de Shapiro-Wilk y el Coeficiente Correlacional de Pearson (95% de confianza y un p-valor de 0,05).
Estas pruebas se llevaron a cabo de acuerdo con las normas éticas de la Declaración de Helsinki.
Resultados
La tabla 1 contiene los datos del promedio y desviación estándar de la edad, peso, talla, índice de masa corporal (IMC) y experiencia en la práctica del fútbol de los participantes.
Tabla 1 Caracterización de los participantes
Jugadores (n = 21) | Edad (años) | Masa corporal (kg) | Talla (m) | Experiencia en el fútbol (años) |
---|---|---|---|---|
Promedio | 15,10 | 54,81 | 9,68 | 4,81 |
Desv. Estándar | 2,36 | 10,49 | 36,73 | 2,14 |
En la tabla 2 se observan unas desviaciones estándar bajas con respecto al índice de masa corporal (IMC), porcentaje de grasa corporal, masa libre de grasa, y el Test de sprint 20 metros con cambios de dirección (SCD) del test, así mismo cabe resaltar que todas estas variables obtuvieron una distribución normal (p > 0,05).
Tabla 2 Datos del índice de masa corporal y el test de sprint 20 metros con cambios de dirección
Jugadores (n = 21) | Índice de masa corporal (kg/m2) | Grasa corporal (%) | Masa libre de grasa (%) | Velocidad con cambios de dirección (s) |
---|---|---|---|---|
Promedio | 18,67 | 12,10 | 87,90 | 6,42 |
Desv. Estándar | 4,79 | 3,93 | 3,93 | 0,61 |
En la tabla 3 es posible determinar que no existió una relación significativa entre el IMC, la masa grasa (%) y la masa libre de grasa (%) con la velocidad con cambios de dirección (p > 0,05). Igualmente, solo se pudo evidenciar que el IMC obtuvo una tendencia negativa moderada (r = -0,14), mientras que la masa grasa (r = -0,06) y la masa libre de grasa (r = 0,06) obtuvieron relaciones ligeras.
Discusión
Los resultados obtenidos en el estudio permitieron identificar que no existió una tendencia significativa, ni positiva ni negativa, entre el tejido adiposo y el rendimiento de la velocidad en jóvenes futbolistas.
Por otra parte, teniendo en cuenta los resultados del estudio realizado por Bustos-Viviescas y otros,19 los futbolistas obtuvieron un tiempo de 7,44 ± 0,53 s en el Test de sprint 20 metros con cambios de dirección, por lo que al comparar con los participantes de este estudio se puede identificar un mejor rendimiento de esta variable con respecto al valor de referencia; no obstante, la edad promedio de este estudio es superior por lo que esta diferencia puede estar justificada en este parámetro.
Aistotelis y otros20 comprobaron que la grasa corporal es un factor que determina el rendimiento en jóvenes jugadores, pues en su estudio la grasa corporal afectaba el rendimiento del sprint de 10 m, 20 m, 30 m y la agilidad en futbolistas entre los 10 y 18 años. Esta misma tendencia se reflejó en un estudio realizado por Sporis y otros.21
Por otra parte, un estudio de Zanini y otros13 concluyó que existe una relación entre el porcentaje de grasa corporal y la agilidad y el poder explosivo de las extremidades inferiores (agilidad y salto vertical) en jóvenes jugadores de fútbol. Sin embargo, el presente estudio no presentó esta influencia negativa. Los resultados aquí expuestos son similares a los obtenidos en investigaciones previas.22,23 Por otro lado, mientras Parseh y Solhjoo24 estudiaron la relación entre el IMC y la velocidad y encontraron resultados similares al de este estudio, Moradi y Esmaeilzadeh25 encontraron que no existía una influencia entre ambas variables en escolares de educación superior.
Cabe resaltar que se ha observado una especificidad de posición de las características antropométricas en diferentes categorías de edad.26 Del mismo modo, en jugadores jóvenes de fútbol la posición de juego influencia en estas características antropométricas y la condición física, según algunos autores,27,28 por lo que se recomienda para futuras investigaciones evaluar una mayor muestra y, a su vez, diferentes grupos de edades para evidenciar en qué rangos de edades la grasa corporal es un predictor del rendimiento de la velocidad en jóvenes futbolistas.
Entre las principales limitaciones de este estudio se destaca el haber realizado la evaluación de la grasa corporal por bioimpedancia eléctrica, por ello, se recomienda para futuras investigaciones emplear una evaluación antropométrica por un evaluador de la Sociedad Internacional para el Avance de la Kinantropometría (ISAK) y realizar la correlación de las mismas variables por posición de juego de los deportistas. También, repetir esta investigación en otros deportes de conjunto en los que los cambios de dirección resulten determinantes del desempeño deportivo.
En conclusión, se sugiere que la adiposidad no es un predictor significativo de la velocidad con cambios de dirección en jóvenes futbolistas. En consecuencia, es recomendable que para mejorar este indicador de rendimiento deportivo es necesario relacionarlo con otras variables, como la fuerza, potencia, coordinación motora, entre otras.