INTRODUCCIÓN
El envejecimiento poblacional es en la actualidad uno de los fenómenos demográficos de mayor trascendencia mundial, el 11,5 % de la población tiene 60 o más años de edad, considerándose que en el año 2050 alcanzará el 22 %. Este proceso se produce por el aumento de la esperanza de vida secun dario a la disminución de la natalidad y de la mortalidad infantil y por edades, entre otros factores, producto de las mejorías ocurridas en los sistemas de salud. Este he cho está presente tanto en los países desarrollados don de los ancianos constituyen aproximadamente el 20 % de la población, como en aquellos en vías de desarrollo donde viven alrededor de las tres cuartas partes de este grupo poblacional.1,2 El envejecimiento poblacional no es un fenómeno exclusivo de las sociedades modernas, está considerado como uno de los logros más importantes de la humanidad, se transforma en un problema si no se es capaz de brindar soluciones adecuadas a las consecuencias que del mismo se derivan.3
Cuba se encuentra entre los países en desarrollo con mayor envejeci miento poblacional; uno de los países más envejecidos de América Latina, esta situación se ha agudizado en los últimos años y se intensificó de manera significativa en el año 2010, que terminó con 17,6 % de la población con más de 60 años.4 Según los resultados del censo de población y viviendas del año 2012, el 18,3 % de los cubanos son ancia nos, con una esperanza de vida al nacer de 77,97 años.5
En la provincia Pinar del Río, la población de 60 años y más representa el 18,3 %, los municipios San Juan y Martínez y San Luis ocupan los primeros lugares con 19,3 % y 19,0 % respectivamente y una esperanza de vida al nacer del 78,1 %.6
El envejecimiento humano es un fenómeno universal e inevitable y está relacionado con el estado de salud por la transición epidemiológica de las enfermedades, con aumento de las enfermedades crónicas no trasmisibles. Ello provoca que los adultos mayores (AM) hagan mayor uso de los ser vicios sociales y de salud y generen mayores gastos con el empleo de más recursos, siendo necesario una mejor planificación de los mismos.7
El bienestar en los ancianos depende de las condiciones de vida que les ofrezca el medio donde se desenvuel ven, exigen la satisfacción de sus crecientes necesidades psicológicas, socioeconómicas, biológicas y funcionales,8) por tanto la calidad de la atención en salud que se brinde es de vital importancia en la calidad de vida de los adultos mayores, de ahí lo necesario de evaluar la calidad de la atención en salud dada a las personas de este grupo de edad.9
La calidad de la atención fue definida como el "grado en el cual los servicios de salud para individuos y población mejoran la posibilidad de lograr los resultados deseados en salud y son congruentes con los conocimientos profesionales actuales. Implícito en las diversas definiciones se encuentran los objetivos de la calidad de la atención en Cuba como: el buen desempeño profesional, el uso eficiente de los recursos, garantizar el mínimo de daños, y lograr la satisfacción del paciente y los familiares.10,11
En Cuba, la Ley No. 41 de la Salud Pública en su artículo 29 de la Sección Quinta de la Resolución Ministerial No. 33, establece el tratamiento a los ancianos mediante acciones de promoción, prevención, curación y de rehabilitación de índole biopsicosocial dentro del Sistema Nacional de Salud, en coordinación con las demás instituciones del estado y la colaboración de las organizaciones sociales y de masas, tendentes a lograr una vida activa y creativa en este grupo de edad y define a los hogares de Ancianos como instituciones de convivencia a largo plazo, dedicada a la atención integral y continuada de los adultos mayores, que por diversas causas médicas o sociales no pueden mantener una vida autónoma y no puedan ser atendidos en su situación de dependencia.12,13
A partir de lo anterior se realizó esta investigación, con el objetivo de evaluar la calidad de la atención en salud y de enfermería que se brinda a los adultos mayores.
MÉTODOS
Se realizó una investigación descriptiva y longitudinal con los adultos mayores del Hogar de Anciano “Carlos Castellanos” de Pinar del Río durante el año 2013.
El universo lo constituyeron 80 ancianos válidos ingresados en el momento de la recogida de datos, con condiciones personales, física y psíquica, que les permitía realizar de forma autónoma las actividades básicas de la vida diaria y estuvieron dispuestos a participar en la investigación. También formaron parte del universo 17 enfermeras relacionadas con su atención.
Para evaluar la calidad de la atención se aplicó un instrumento diseñado por los autores y validado por los directivos que participaron en el Diplomado “Dirección de salud III”, gestión en los servicios de enfermería, donde se tuvieron en cuenta los criterios para la evaluación de la calidad establecidos por Avedis Donabedian de estructura, proceso y resultado, las variables fueron obtenidas en este mismo orden (tabla 1).
La captura de la información se realizó mediante la creación de Base de Datos en EXCEL, transcribiendo los mismos en los instrumentos elaborados para tal fin. El procesamiento se efectuó a través del programa SPSSS versión 19,0 y Epidat 3.1.
Previamente se realizó el análisis exploratorio, mediante el empleo de métodos matemáticos de Estadística Descriptiva. Ello permitió la detección y subsanación de errores, con la mejora de la calidad del dato obtenido.
Para caracterizar los grupos de estudio, según variables estudiadas, se manejaron los datos derivados de la aplicación de los instrumentos en los disímiles períodos de evaluación, se calcularon medidas de resumen para variables cualitativas: frecuencias absolutas y porcentajes.
Para realizar el estudio se obtuvo la autorización de la dirección del Hogar de ancianos, previa explicación de sus características. También se obtuvo el consentimiento de los ancianos y las enfermeras a quienes se explicó las características y objetivos de la investigación y se garantizó la confidencialidad de los resultados. La investigación se efectuó siguiendo lo establecido en los principios éticos recogidos en la Declaración de Helsinki y revisiones posteriores.
RESULTADOS
Al evaluar los recursos humanos existentes para la atención del adulto mayor (tabla 2) se puede observar que los médicos, estomatólogos, psicólogos y trabajadores sociales se encontraban cubiertos al 100 %, mientras deben existir 17 enfermeras y existen 16 (94,11 %) y las asistentes para la atención a los servicios de enfermería de 21, cuentan con 19 (90,47 %).
Cuando se analizaron los recursos materiales que se consideraron necesarios para una atención adecuada (tabla 3), se pudo constatar que el equipamiento técnico muestra 27 (93,10 %), relacionado con las roturas existentes, mientras los demás renglones analizados se comportan al 100 % de completamiento.
Los procesos de atención registrados en las historias clínicas fueron evaluados de aceptable, aunque se constató que de 52 ancianos a los que se le debía hacer tacto rectal, se le realizó a 47 (90,38 %), el examen de mama de 28 a 26 (92,85 %), evaluación multidisciplinaria de 80 ancianos a 73 (91,25 %) y con PAE aplicado según morbilidad de 32 se le realizó a 29 (90,62 %) (Tabla 4).
Al realizar el análisis de la evaluación del conocimiento de las enfermeras sobre el Reglamento general de hogares de anciano, se obtuvo que el 100,00 % lo conocían, en cuanto a la aplicación del PAE se pudo observar que de 17, conocían que se aplicaban 16 (94,11 %).
Al explorar la satisfacción, se obtuvo que de 80 adultos mayores, 79 (98,75 %) expresaran satisfacción con la atención recibida.
DISCUSIÓN
El logro de la prolongación de la vida es consecuencia del desarrollo científico mundial unido al conjunto de medidas estatales, sociales y culturales que han permitido el incremento de la esperanza de vida al nacer y particularmente del trabajo realizado por los profesionales de enfermería.14)
En la investigación de los recursos humanos señalados como necesarios para la atención al adulto mayor, aunque aceptable según los estándares establecidos para este estudio, se señala como deficitario los recursos humanos de enfermería. La enfermera, como parte del equipo de salud desempeña una importante labor en este tipo de instituciones, por el vínculo afectivo que logra con los ancianos, es una de las figuras asistenciales que más cerca de ellos se encuentra, lo cual contribuye a satisfacer sus necesidades y les ofrece una adecuada atención. Además, coopera integralmente en todas las actividades para lograr que los residentes se sientan satisfechos con la atención que se les brinda.15
La ancianidad es un grupo etáreo vulnerable a los problemas biológicos, sociales y psicológicos, el colectivo de autores considera que la enfermera adiestrada para el manejo de los senescentes representa un eslabón importante en los procesos a desarrollar en los hogares de ancianos, por lo que es fundamental el completamiento de la fuerza laboral para lograr que la atención brindada sea de calidad. Los servicios de internamiento de adultos mayores deben estar cubiertos necesariamente con asistentes para la atención a los servicios de enfermería, ya que garantizan una mejor atención para las funciones básicas e instrumentadas de la vida diaria de los adultos mayores.
Similares resultados fueron publicados en la investigación “Calidad de la atención en salud al adulto mayor”,9) donde se detectaron dificultades relacionadas con los recursos humanos de enfermería, mientras difiere en cuanto a los insuficientes recursos médicos, estomatólogos y psicólogos encontrados en su investigación.
De los recursos que se señalaron como necesarios para una atención adecuada al adulto mayor, el completamiento del equipamiento técnico adecuado presentó dificultades relacionadas con roturas existentes, sin embargo no constituye un problema que persiste en la institución, ya que el Programa de Atención Integral al Adulto Mayor es priorizado por el Sistema Nacional de Salud, el cual garantiza los recursos necesarios para las instituciones sociales con internamiento.
Resultados similares a los encontrados en este estudio fueron hallados por Morales 16 y por Miranda Guerra y cols.,9) en que la dotación de los recursos materiales en la evaluación de la estructura tiene limitaciones que han sido reconocidas en la medición de la calidad de los servicios sanitarios. Se considera que puede existir un deterioro de la calidad si no son cumplidos los elementos mínimos exigidos en la planificación.
De la competencia profesional del personal de salud depende la selección y ejecución de las acciones más efectivas y eficientes que conviene al problema de salud afrontado, aun con las limitaciones de los recursos existentes.17 Los autores del trabajo consideran que se debe insistir en el adecuado manejo y cuidado de los instrumentos manipulados por el personal médico y paramédico para prolongar la vida útil de estos equipos.
Al analizar los procesos de atención registrados en las historias clínicas el presente trabajo difiere de Miranda Guerra y cols.9) y de Morales Sánchez,16) presentando que la mayoría de ellos (8) se encuentran evaluados de aceptable, los autores consideran que el examen físico y el interrogatorio son elementos importantes para lograr una buena orientación diagnóstica, indispensable para poder complementar el diagnóstico de los enfermos o sus complicaciones.
Los resultados alcanzados en la vacunación coinciden con los publicados por otros autores,9) el alto nivel de cumplimiento de su administración está dado por un adecuado sistema de vigilancia y control llevado a cabo por el personal de enfermería, además de la disponibilidad de la vacuna.
La pesquisa activa de diferentes tipos de cáncer presentó indicadores aceptables, pero es importante destacar que estas acciones deben estar encaminadas al diagnóstico precoz del cáncer de próstata y mama, pues los tumores malignos son la segunda causa de muerte en la provincia.
La evaluación multidimensional para la clasificación de los ancianos quedó dentro de los parámetros establecidos, no obstante resulta necesario mejorar este indicador, de forma tal, que los pasos establecidos se cumplan y el paciente sea orientado sin dificultades, para lograr una mayor calidad de la asistencia. La aplicación del PAE se evaluó de aceptable, los enfermeros dedicados a la atención al adulto mayor tienen la responsabilidad de la auto preparación y educación continuada en correspondencia con los avances tecnológicos, tanto clínicos como en el trato y manejo adecuado de estos pacientes.17) El colectivo de autores considera que la exigencia por el cumplimiento de este proceder podría ser la clave para mejor el modo de actuación del personal de enfermería, si se tiene en cuenta que la Enfermería es a la vez un arte y una ciencia que requiere de la comprensión y la aplicación de los conocimientos y técnicas específicas de la disciplina.18
Mediante el proceso de atención de enfermería se identifican las necesidades básicas afectadas de los pacientes y se establecen sus prioridades, se realizan acciones que posibilitan brindar una atención más específica, sin embargo el personal de enfermería solamente aplicó el PAE al 90,6 % de las morbilidades atendidas en ese servicio, aunque este aspecto se evalúa de aceptable continúa siendo una debilidad, ya que debe ser aplicado al 100 % de los adultos mayores con alguna morbilidad.
Cumpliendo con los lineamientos establecidos en el reglamento de los hogares de ancianos, el personal de enfermería que labora en estas instituciones debe dominarlo para ofrecer un servicio de calidad, con un trabajo mancomunado entre los servicios que se prestan, lo que se evidencia en la presente investigación ya que el personal de enfermería desarrolla sus funciones en correspondencia con lo establecido, se muestra que el 100 % del personal de enfermería tiene dominio del reglamento de la institución. Estos resultados coinciden con los publicados por Miranda Guerra y cols.9) cuando expone que según Benito Narey se debe tener presente que para medir calidad y satisfacer las necesidades de a quién se le presta un servicio, es necesario conocer las expectativas de las personas a quienes se les brinda de la forma más humana posible y, además, cumplir los reglamentos, normas y procedimientos establecidos.
A través de las encuestas se detectó que aunque el criterio de evolución fue de aceptable, aun existen dificultades con la decisión del personal de enfermería ante los motivos por los que se aplica el PAE. Mediante la observación de la historia clínica se identificó que las principales deficiencias estaban enmarcadas en el establecimiento de las prioridades de los diagnósticos y el planteamiento de las acciones de enfermería.
La enfermera responsable de la gestión del cuidado debe considerar los valores, actitudes y conocimientos de la disciplina que le brindan una visión distinta y específica de la gestión de los cuidados. Así deberá ejercer un liderazgo comprensivo que motive a los usuarios internos hacia la mejoría continua del cuidado.6
En relación con la atención recibida por parte del personal de enfermería, históricamente se denota insatisfacciones por el personal que la demanda, no ocurriendo así en la presente investigación, ya que el personal vinculado a este servicio posee valores y aptitudes que le permiten tratar a adultos mayores, considerando sus necesidades individuales.
Teniendo en cuenta que estos pacientes en su mayoría no poseen apoyo familiar de manera permanente, el personal de enfermería representa el elemento afectivo más cercano, por lo que ellos le dan mayor importancia al trato oportuno recibido por el personal de enfermería.
En estudios revisados se han publicado resultados similares a los encontrados en esta investigación, Miranda Guerra y cols.9) encontraron que las opiniones de los ancianos con respecto al personal de enfermería fueron favorables. La enfermera puede contribuir a fomentar la confianza de los ancianos en sí mismos o fortalecerla, de acuerdo con las posibilidades de cada individuo; mediante orientaciones acertadas debe alentarlos a conservar o acrecentar su autosuficiencia, así como ayudarlos a optimizar sus funciones físicas, sociales y psicológicas durante los períodos de cambio en su estado de salud.19
Los autores del presente trabajo coincidimos con las palabras de Ramos Domínguez20) y Pérez Maza21) en la satisfacción de los usuarios cuando de calidad se trata, las que se exponen a continuación: "...la satisfacción es un valor esencial para alcanzar una calidad de vida plena y con una gran importancia política para la legitimación del sistema político". Por tanto, "el nivel de satisfacción constituye el segundo indicador del desempeño global de los sistemas de salud y de atención de salud", si se evalúa conjuntamente "la calidad de la atención o sea capacidad de solución de problemas y formas de prestación".
Los resultados de este estudio coinciden con Cintra Vega y Soria Bell15) por el alto porcentaje que obtuvo de satisfacción, lo que demuestra la ardua labor del equipo de salud y, por ende, el buen reconocimiento de los adultos mayores. Se sienten respetados y existe preocupación hacia su persona, la institución mantiene un confort satisfactorio; además, el grado de conformidad dentro de la institución es adecuado ya que se sienten satisfechos.
En conclusión, la estructura existente para garantizar la atención en salud y de enfermería al adulto mayor no presenta insuficiencias en lo relativo a recursos humanos y materiales, que unido a la no presencia de problemas organizativos y de calidad de las historias clínicas, y en la instrumentación y aplicación del PAE, influyen positivamente en la calidad del proceso de atención; además, no hay insuficiencias en la satisfacción de los usuarios por lo que no se muestran debilidades importantes en la calidad de la atención al adulto mayor.