Introducción
La Moringa oleífera es un árbol originario de la India, que se encuentra distribuido en África, Arabia, Suramérica, en las Islas del Pacífico y del Caribe. Se desarrolla rápido y constituye una especie de gran plasticidad ecológica, pues crece en diferentes condiciones de suelo, precipitación, temperatura y altitud; además, es de fácil de propagación, tanto por semilla como por material vegetativo.1,2,3
El programa nacional cubano de la agricultura urbana y suburbana tiene entre sus prioridades la promoción, venta y divulgación del cultivo casero y a nivel comunitario de la Moringa oleífera. Por ello, han sido editados volantes, folletos, plegables y se ha capacitado al representante de la agricultura en cada consejo popular, con vistas a brindar asesoramiento técnico a la población y orientar dónde encontrar la planta y sus posturas.4
Diversas partes de la planta (hojas, semillas, flores, frutos y las raíces) contribuyen a la alimentación por su excelente valor nutricional. No obstante, se le atribuyen múltiples beneficios para el bienestar general del ser humano, entre ellos:1,2
Alimento animal, por su importante valor nutricional. Se emplea en la alimentación de peces, aves, ganado bovino y porcino, ya que su composición nutricional es similar a la de la soya,5 de esta manera contribuye indirectamente a una mejoría de la alimentación del ser humano.
Las semillas oleaginosas de la Moringa oleífera se pueden emplear para la producción de biocombustibles (biodiesel y bioetanol).6
El aceite extraído de la semilla de la Moringa oleífera se usa para hacer cosméticos.7 Su empleo como humectante, acondicionador, emoliente para la piel, así como ingrediente en jabones, ungüentos, cremas y protectores solares es importante.
La semilla tiene empleo como clarificador de miel y del jugo de la caña de azúcar y también por sus propiedades floculante, reductora de la turbidez y de la contaminación bacteriana.4
Las semillas de la especie vegetal Moringa oleífera se emplean en varios países, como es el caso de Cuba, como alternativa para la sustitución de coagulantes químicos en el tratamiento de las aguas residuales (purificación del agua). Este efecto también se puede emplear en la preparación de quesos.8
La torta de Moringa oleífera, obtenida después de la extracción del aceite, es bioestimulante para las bacterias heterotróficas, las cuales tienen capacidad para degradar hidrocarburos aromáticos policíclicos y biorremediar suelos artificialmente contaminados. De ahí que, este subproducto de Moringa oleífera se pueda utilizar en la degradación del petróleo crudo de suelos contaminados con esta sustancia.9
Se puede utilizar como bioplaguicida (pesticida) en la jardinería de mercado (árboles de sombra, setos, pantalla visual y auditiva, incluso como cortavientos), fertilizante y agente de limpieza.4,10
Su pulpa se puede emplear para hacer papel prensa y papel celofán, y su leño da un excelente carbón.4,10
Las flores presentan actividad caseinolítica por la presencia de iones de calcio dependientes de aspártico, cisteína, serina y proteasa, lo cual tiene aplicación potencial en la industria láctea.11
Su uso en el campo de la salud del ser humano es ampliamente reconocido.12
El empleo de la Moringa oleífera en el campo de la salud ha sido, durante años, más bien empírico, se basa en la tradición oral y, en muchos casos, en publicaciones de carácter general. Esto representa un reto de tipo investigativo para los tres niveles de atención de salud de nuestro país (Cuba). Recordar, de manera sintética y actualizada, algunos de los efectos benéficos más importantes de esta extraordinaria planta resultan de utilidad, en especial para los médicos y las enfermeras de la familia del primer nivel de atención, donde la aplicación de los productos derivados de esta planta pudiera representar un complemento a la terapéutica convencional de varias enfermedades frecuentes en la población que ellos atienden.
La presente revisión tuvo como objetivo describir de manera general, los efectos benéficos de la Moringa oleífera en la salud de las personas.
Métodos
Se realizó la búsqueda de literatura sobre el tema en estudio durante el mes de agosto de 2020. Se utilizaron como buscadores de información científica a Pubmed, Scielo, Google y Google Académico. La estrategia de búsqueda incluyó los siguientes términos como palabras claves: Moringa oleífera, nutrición, efectos benéficos. Se evaluaron artículos de revisión, de investigación y páginas Web que, en general, tenían menos de 10 años de publicados, en idioma español, portugués e inglés, y que hicieran referencia específicamente al tema de estudio a través del título. Una vez identificados los artículos de interés, se consideraron como criterios de elección para la presente revisión: 1) que examinaran la problemática del efecto de la Moringa oleífera sobre la salud de las personas; y 2) que abordaran la temática a través de cualquier metodología de investigación (cuantitativa, cualitativa, investigación operativa, otras). Fueron excluidos los artículos que no cumplieron con estas condiciones. Esto permitió el estudio de 68 referencias bibliográficas, de las cuales se citaron 36 en el presente artículo.
Desarrollo
La Moringa oleífera es un árbol de hasta 12 m de altura, hojas pinnadas, flores en panículas, zigomorfas, pentámeras y bisexuales, además tiene un fruto tipo cápsula y semillas oleaginosas con tres alas.7 La planta también conocida como Moringa, se clasifica desde el punto de vista de la Botánica Forestal de la siguiente manera (Tabla 1):13
Muchas plantas, entre ellas la Moringa oleífera, son reconocidas por sus altos contenidos de fibra y compuestos fenólicos, lo que sugiere la presencia de un importante potencial nutracéutico y funcional, debido a sus variados efectos sobre el organismo del ser humano, lo que ha generado un incremento de su consumo en el mercado de suplementos. Por tanto, el empleo en el campo de la nutrición humana del género Moringa (Moringa oleífera Lam o Moringa oleífera), se debe a la relación entre una dieta sana y la disminución del riesgo de padecer enfermedades no transmisibles; de ahí, que esta planta sea patentada por su uso terapéutico.12,14
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha estudiado el uso de la Moringa oleífera durante décadas como un suplemento proteico, de bajo costo, para ser usado en los países pobres de todo el mundo que sufren de desnutrición.5 Asimismo, diversos estudios han identificado más de cuarenta compuestos con actividad antioxidante en esta planta, sugiriendo su gran potencial como ingrediente, en el desarrollo de alimentos funcionales innovadores.14
El forraje de Moringa oleífera contiene altas cantidades de proteína, por lo que se puede considerar como un complemento en la nutrición animal, como ya se señaló con anterioridad. La inclusión de esta planta, en hasta un 50 % de la dieta de diferentes animales, aumenta la ganancia diaria de peso, lo que disminuye el uso de suplementos comerciales para cubrir sus requerimientos, sobre todo en la época seca,15,16 lo cual indirectamente contribuye a mejorar la alimentación y la economía de la población.
La composición nutricional de las hojas de la Moringa oleífera incluye aminoácidos como arginina, histidina, isoleucina, leucina, lisina, fenilalanina, metionina, treonina, triptófano y valina; vitaminas del tipo de los carotenos (A), tiamina (B1), riboflavina (B2), niacina (B3) y vitamina C, así como minerales como el calcio, cobre, hierro, magnesio, fósforo, potasio y zinc. También presenta un alto contenido de antioxidantes (vitaminas A y vitamina C, carotenoides, flavonoides y fenoles, fundamentalmente) que actúan contra los síntomas del envejecimiento prematuro, protegiendo nuestras células del ataque de los radicales libres,3 lo cual nos da una idea de sus cualidades para ser usada como un suplemento nutricional. Por ende, la Moringa oleífera es una planta que ayuda a solucionar problemas de seguridad alimentaria y a prevenir múltiples enfermedades asociadas a carencias de proteínas, carbohidratos, minerales y vitaminas.17
Además, el aceite extraído de la semilla de la Moringa oleífera presenta rendimientos de hasta un 39 %, con la característica de tener una composición química donde predomina el ácido oleico (± 70,6 %). Igualmente, el contenido de carbohidratos totales en el polvo de hojas secas de moringa es de 50,81 g/100 g y de 24,36 g/100 g en el polvo de semilla, y comprende fibra alimentaria, azúcares y almidones. El polvo de hoja secas y el polvo de semilla de Moringa oleífera presenta valores menores de carbohidratos totales que alimentos de uso común en la dieta del ser humano, entre ellos: la quinua, frijol, maíz, arroz y trigo, los cuales oscilan entre 61 y 81 g/100 g.18
A su vez, la Moringa oleífera contiene alrededor de 6,75 g de fibra cruda/100 g del polvo de hojas secas y 10,24 g/100 g del polvo de semilla y alimentos como la avena, pan, pastas integrales y lentejas cocidas, contienen de 5 a 10 g de fibra dietética/100 g de alimento,18 lo que la hace comparable con estos productos. Estos aspectos tienen una repercusión positiva en la alimentación de cualquier persona, en particular aquellas con trastornos en el metabolismo de los lípidos, proteínas y carbohidratos.
El amplio consumo humano de Moringa oleífera, como parte de la dieta y de remedios terapéuticos durante siglos, sin que se reporten casos de alergias y toxicidad, podría parecer un aval suficiente de su inocuidad. Sin embargo, el conocimiento acumulado no bastaría si no estuviese respaldado por evidencias científicas. Afortunadamente, la mayoría de las pruebas confirman los elevados márgenes de seguridad de los extractos de hojas, semillas y de otras partes de la planta.1
La medicina ayurvédica le atribuye propiedades a la Moringa oleífera para el tratamiento de ciertas dolencias como el asma, la epilepsia, las enfermedades oculares y de la piel, la fiebre y las hemorroides.19 Otras propiedades farmacológicas beneficiosas atribuidas a esta planta y de las cuales se ha obtenido evidencia científica, incluye efectos o acciones de tipo antioxidante, nefroprotectora, hepatoprotectora, neuroprotectora y retardadoras del envejecimiento.20,21
Las hojas frescas trituradas de Moringa oleífera son de utilidad para el tratamiento coadyuvante de varias enfermedades crónicas no transmisibles, entre ellas la diabetes mellitus (hipoglucemiante e insulino sensibilizador),22,23,24 dislipidemias (hipocolesterolémico),25 obesidad,26 hipertensión arterial,27) entre otras. Esto se debe, sobre todo, al contenido total de fenoles y de flavonoides que contiene, el cual es mayor al de otros vegetales (coliflor, espinacas, repollo, brócoli, o los guisantes, por ejemplo.28
Entre los efectos favorecedores reportados, también se señalan los cardioprotectores, anticancerígenos y quimiopreventivos. Dichas propiedades farmacológicas se atribuyen a la pterigospermina y a los glucosinolatos, isotiocianatos, ácidos fenólicos (catequina, ácido elágico, epicatequina), flavonoides (quercetina, kaempferol, miricetina), esteroles, vitaminas, glucósidos y compuestos terpenoides entre otros, contenidos en esta milagrosa planta.9)
La corteza de la Moringa oleífera es un aperitivo digestivo, la goma es un diurético y abortivo, el aceite es usado para enfermedades de la próstata. Se emplea en la medicina tradicional para tratar artritis, anemia, desnutrición, enfermedades bronquiales y de la piel, tuberculosis, problemas oculares y síntomas del climaterio.20,21,29 Además, se indica que tiene acción antimicrobiana, antifúngica, inmunomoduladora,20,21,29 lo que aporta un efecto coadyuvante de gran utilidad en el tratamiento de dichas enfermedades.
Simultáneamente, se describe que esta planta tiene actividad antiviral contra los virus del Herpes simple, Epstein Barr, hepatitis, rinovirus y el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH);30) al mismo tiempo, se describe que sus flores, vainas y hojas son usadas como antihelmíntico.4 Se relata también, otros posibles usos como afrodisiaco, antiespasmódico, analgésico, antipirético y antinflamatorio, estimulante cardiocirculatorio, agente antiulcerogénico y antilitiásico y antidiarreico, entre otros.31
En los últimos tiempos se han implementado herramientas ecológicas contra los mosquitos, vectores de varias y peligrosas enfermedades, incluidos los insecticidas botánicos. Se ha reportado que la Moringa oleífera puede inhibir el crecimiento de larvas de varios tipos de mosquitos (Fig. 1), lo que hace a esta planta un prometedor candidato no químico, con posible uso en la erradicación de vectores.32,33,34,35
Para etnobotánicos de Bolivia y Estados Unidos, el uso de algunas de las plantas utilizadas en Latinoamérica puede ayudar a controlar algunos de los síntomas observados en los cuadros de infecciones respiratorias. Sin embargo, “no existen pruebas de que puedan prevenir o curar el contagio con el virus SARS-CoV-2, como se ha estado difundiendo”,36 lo cual es extensivo para la Moringa oleífera.
No obstante, algunos usos atribuidos a la Moringa oleífera todavía no tienen confirmación científica y requieren de una concienzuda investigación de cara al futuro. Esto constituye una limitación para cualquier artículo encaminado a recoger y sintetizar los conocimientos respecto a las propiedades de esta extraordinaria planta.
Si bien estos son los usos más frecuentes registrados a escala mundial, para generalizarlos es necesario hacer ensayos clínicos en humanos, metodológicamente confiables, con vistas a obtener resultados de óptima calidad, así como consultar las investigaciones más actuales y confiables sobre el tema en estudio. De esta manera, se podrá facilitar información veraz a las autoridades correspondientes, de forma tal que estos puedan emitir decisiones acertadas respecto al uso de esta planta.
En conclusión, la Moringa oleífera es una planta apreciada por sus propiedades nutricionales, nutracéuticas y funcionales. Ejerce un efecto benéfico en la salud de las personas, atribuibles fundamentalmente a sus propiedades antioxidantes, insulinosensibilizantes e inmunomoduladoras, con amplias consecuencias de protección sobre varios órganos y de equilibrio en el metabolismo de los carbohidratos, los lípidos y las proteínas. Igualmente, se plantea que posee efectos anticancerígenos, antiinflamatorios y actividad antimicrobiana, antifúngica, antiviral y antihelmíntica, entre otras cualidades. De ahí su empleo como suplemento nutricional y coadyuvante en la prevención y el tratamiento de múltiples enfermedades.