Mi SciELO
Servicios Personalizados
Articulo
Indicadores
- 
 Citado por SciELO Citado por SciELO
Links relacionados
- 
 Similares en
    SciELO Similares en
    SciELO
Compartir
Revista Cubana de Salud Pública
versión On-line ISSN 1561-3127
Rev Cubana Salud Pública v.30 n.4 Ciudad de La Habana sep.-dic. 2004

Dos enfoques sobre los medicamentos y la industria farmacéutica
Resumen
Se comparan dos enfoques sobre los medicamentos a partir de la posición que ocupan en la sociedad, la industria farmacéutica mundial y la cubana. Se analizan cinco componentes relacionados con la cadena del medicamento y el ambiente en que esta se desarrolla. Los componentes hacen referencia a los siguientes temas: papel de esta industria en el mercado, como espacio de compra-venta de productos y movilización de recursos financieros. Influencia sobre el poder político para generar decisiones que logren mantener e incrementar el mercado. Tratamiento del prescriptor como un cliente que es necesario atraer para aumentar las ventas de medicamentos. Atención a los pacientes reales o potenciales como consumidores actuales o futuros, que puede incluso actuar sobre los prescriptores para ampliar el mercado. Estos componentes se analizan en el marco de la actual sociedad mundial globalizada. En contraposición se analizan los propósitos de la industria farmacéutica cubana en la cadena del medicamento en el contexto de una sociedad socialista.
Palabras  clave: INDUSTRIA FARMACÉUTICA; MEDICAMENTOS; MERCADO; PRESCRIPTORES;  CONSUMIDORES; CLIENTES; CUBA.     
 
Introducción
En 1897,  Félix Hoffman, fabricante de tintes de la casa de productos químicos  BAYER, en Alemania, modificó una sustancia proveniente de la corteza del  sauce y creó el ácido acetil salicílico.    
 
Surgió  así el primer medicamento industrial vendido bajo una forma de especialidad  farmacéutica (nombre preciso y envase propio) comercializado con el nombre  de aspirina.    
 
Cien años después más de 100 000  fármacos compiten en el mercado mundial de medicamentos y la Industria  Farmacéutica es hoy, quizás la industria más lucrativa del  planeta.1    
 
Esto ocurrió porque  los medicamentos, que ya existían desde la aparición misma del hombre,  como sustancias naturales que se administraban a los enfermos para  curarlos, se convirtieron desde entonces y de manera creciente, en  la tecnología médica más frecuentemente usada y de mayor  disponibilidad en la historia de la medicina para recuperar la salud y evitar  las enfermedades.    
 
Pero estos medicamentos los produce, en número  cada vez mayor, una industria que ha devenido, junto con otros factores socioeconómicos  y ambientales, indispensable para el mantenimiento y recuperación de la  salud humana.    
 
Si los medicamentos son sustancias químicas (y biológicas) que salvan vidas, previenen enfermedades y alivian el dolor y el sufrimiento del ser humano y la gran industria farmacéutica mundial (PHARMA) los produce, crea fuentes adicionales de trabajo y financia, casi todas las investigaciones que producen estos conocimientos, ¿por qué, entonces, la gran PHARMA no puede hacer hoy, lo que la industria farmacéutica cubana hace con los médicos y sus propios profesionales, técnicos y trabajadores en función de los medicamentos y el bienestar de su pueblo?
Porque hay un conflicto de intereses alrededor de los medicamentos entre  las necesidades reales de la población y la PHARMA en una sociedad de mercado.      
 
Según una de sus definiciones, el conflicto de intereses es  el conjunto de condiciones que provocan que un juicio de valor profesional, sobre  un tema dado, pueda ser influenciado, inapropiadamente, por un segundo interés.2    
  
El segundo interés modifica, la real apreciación y opinión de él o los que están opinando sobre un tema dado y este segundo interés es prioritario para el que enjuicia.
Componentes del conflicto de intereses
La industria farmacéutica  capitalista tiene como principal objetivo maximizar las ganancias y es muy poco  probable que las organizaciones orientadas a la rentabilidad, dediquen muchos  esfuerzos para solucionar los problemas de salud de los países en desarrollo,  donde viven las dos terceras partes de la población mundial y donde los  gobiernos no pueden asumir el gasto en medicamentos que requieren sus pueblos.    
  
Por otra parte, las innovaciones de esta industria farmacéutica  se hacen en los segmentos del mercado más lucrativo, o sea, en los medicamentos  que responden a la demanda de salud de los países del primer mundo.    
  
La transformación de la industria farmacéutica, de un propósito altruista a un objetivo de rentabilidad, la podemos estudiar desde cinco componentes diferentes y complementarios:
- El mercado.
- El poder político.
- El prescriptor como cliente.
- El medicamento como bien de consumo.
- El paciente como consumidor.
El mercado
La industria de la  guerra es la que mueve mayores recursos financieros en el mundo (un millón  de dólares cada 30 segundos), le sigue la industria farmacéutica  (un millón de dólares cada 83 segundos).    
 
La venta de  medicamentos en el mundo sobrepasa los 380 billones de dólares anuales.1  La rentabilidad de la industria farmacéutica ha crecido en los últimos  30 años a un ritmo mayor que cualquier industria del planeta (fig. 1).    
  
Fuente:  Public Citizen update of Stephen W. Schode Meyer Calculation Competition and Prieng  Issues in the Pharmaceutical Market, PRIME Institute, University of Minessota  based on data foundir Fortune magazine, 1958 to 1999; Fortune magazine, April  2002, Fortune 500. (www.fortune.com).    
 Fig. 1. Rentabilidad de la industria  farmacéutica y de todas las industrias juntas seleccionadas por Fortune  500 en los últimos 30 años.
Los medicamentos más vendidos  en el mundo responden lógicamente a las necesidades de salud de los países  ricos. Las afecciones crónicas no trasmisibles (enfermedades cardiovasculares  y cerebrovasculares, del sistema nervioso central, respiratorias y degenerativas),  constituyen el patrón epidemiológico de morbilidad y mortalidad  de estos países (fig. 2).    
 
Fuente:  IMS-Health-Drug monitor ww.imshealth.com    
 Fig. 2. Medicamentos más vendidos  en el mundo.
Las afecciones cardiovasculares constituyen hoy la principal  causa de muerte de los países industrializados y lógicamente los  medicamentos que dan respuestas a estas enfermedades (hipertensión arterial,  cardiopatía isquémica, insuficiencia cardíaca) son los más  vendidos.3,4 Le siguen los medicamentos que se  utilizan en las afecciones del sistema nervioso central de orden psíquico  (tranquilizantes, ansiolíticos, hipnóticos) que modifican la conducta  de las personas. El impacto de los problemas sociales en las sociedades desarrolladas  (drogadicción, violencia, marginación, inseguridad) repercute en  el desempeño diario de los individuos y afecta su estabilidad emocional.  Los medicamentos clasificados como alimentación y metabolismo, se refieren  a las vitaminas, los oligoelementos (magnesio, calcio, hierro) y los llamados  antioxidantes. Existe un boom publicitario sobre los supuestos beneficios  de estos productos en la calidad de vida de las personas.     
 
Se venden  ilusiones como que los antioxidantes retrasan el envejecimiento, dan vitalidad,  rejuvenecen; se juega con el viejo sueño de la humanidad de la fuente de  la eterna juventud. Está todavía por demostrarse científicamente  alguno de estos efectos.     
 
Sin embargo un tercio de la población mundial no tiene acceso regular a los medicamentos esenciales5 y la mayoría de la población en el Tercer Mundo muere de enfermedades cuyos tratamientos no tienen relación con los medicamentos más vendidos en el mundo.
El poder político
Este inmenso mercado de que  hablamos está concentrado. Las dos terceras partes del mercado mundial  de medicamentos está en manos de 20 grandes monopolios farmacéuticos.  Pero no solo se trata de una concentración financiera. En el caso de los  Estados Unidos, el lobby farmacéutico en Washington, se ha hecho  tan poderoso como el lobby judío y el de la industria militar alrededor  del poder político.    
 
Según informó Public Citizen, una organización norteamericana de protección al consumidor, este lobby gastó 262 millones de dólares en influencia política en el período electoral (19992000), beneficiando, fundamentalmente al Partido Republicano, cuentan con un equipo de 625 personas (más de una por cada miembro del Congreso) al que se les pagó 92,3 millones de dólares en el 2001.6
El prescriptor como cliente
Las  publicaciones y propaganda sobre los medicamentos y sus beneficios abarcan una  amplia gama de anuncios que saturan las revistas médicas y no médicas,  los periódicos, la televisión, Internet y otros medios de comunicación  masivos.    
 
Las revistas médicas, consideradas el vehículo  más serio y seguro para transmitir conocimientos médicos documentados,  han sido objeto de diversas críticas.    
 
Un artículo publicado  por el periódico Los Angeles Times, en 1999, refería que la famosa  revista médica New England Journal of Medicine (NEJM) había violado  su propia política numerosas veces en los últimos años publicando  artículos de investigadores que tenían vínculos con compañías  farmacéuticas y no se habían revelado potenciales conflictos de  intereses.7 La propia revista NEJM había  publicado, en 1988, un reporte que revelaba que casi todos los investigadores  que defendieron la eficacia de los bloqueadores de los canales de calcio en el  tratamiento de la hipertensión arterial habían tenido vínculos  con las compañías productoras de medicamentos.8    
  
Para finalizar el tema de las publicaciones, se añade un reporte  publicado por la revista Western Journal of Medicine, en 1999, donde revelaba  que en un estudio realizado sobre un grupo de revistas médicas de gran  prestigio y alto impacto como Journal of the American Medical Association (JAMA),  NEJM y otras, se puso de manifiesto que habían recibido ingresos estimados,  por concepto de anuncios farmacéuticos, entre $ 715.000 y 18 millones de  dólares anuales.9 Puede imaginarse el  lector el grado de dependencia que pueden tener las revistas con patrocinadores  que aportan 18 millones de dólares en un año.    
 
¿Publicarían  un ensayo clínico que demostrara que alguno de esos medicamentos que el  patrocinador apoya, no es eficaz o seguro?     
 
Los visitadores médicos  (representantes de ventas) son el instrumento más potente que tienen las  compañías farmacéuticas para que los médicos modifiquen  sus patrones fármaco-terapéuticos en beneficio de los medicamentos  que produce su compañía.    
 
Los visitadores médicos  son personas seleccionadas, que se entrenan por las compañías farmacéuticas  para visitar a los médicos y transmitirles personalmente, cara a cara,  las bondades de los productos farmacéuticos que ellos patrocinan;  son personas amables, de buena presencia física, inteligentes, buenos comunicadores  y con conocimientos de los medicamentos que patrocinan.    
 
Su impacto puede evaluarse en los dos ejemplos que ha continuación selecciono:
- Un artículo publicado en el influyente periódico The New York Times, el 11 de enero de 1999, informaba que los visitadores médicos crecieron en los Estados Unidos, entre 1994 y 1998, de 35 000 a 56 000, llegando a 1 visitador médico por cada 11 médicos (datos más recientes dicen que hoy ya disponen de 81 000 visitadores). La industria gastó 5,3 billones de dólares en los primeros 11 meses de 1998 en visitas a consultorios y un billón más en eventos de promoción con médicos (ya ha alcanzado los 2.1 billones). Este incremento del 60 % de visitadores médicos habla de la importancia que le prestan las compañías farmacéuticas a este instrumento.10
- Un reporte publicado por la prestigiosa revista médica British Medical Journal, en 1999, informaba que en un estudio realizado sobre 300 médicos, el 60 % de ellos estimaba que los visitadores médicos eran una fuente importante de información y el 8 % estimó que además, los visitadores les traían reportes relevantes publicados en revistas médicas.11 He ahí el impacto. Un grupo significativo de médicos cree que esta es una fuente de información importante y relevante, es decir, que una persona, que tiene intereses comerciales con una firma farmacéutica es la más confiable fuente de información médica.
El medicamento como bien de consumo
Desde hace años, la gran PHARMA,  ha venido tratando a los medicamentos como un bien de consumo, algo así  como un perfume o un reloj. Se trata ya de vender medicamentos para situaciones  que no son enfermedades e incluso se venden medicamentos que no son necesarios  y que pueden ser dañinos.    
 
Pondré algunos ejemplos:
El  Finasteride es un medicamento utilizado para el tratamiento de la hiperplasia  prostática benigna. Desde hace unos años la firma Pfizer lo promueve  para el tratamiento de la calvicie masculina (Pérez J. Los  medicamentos y la industria farmacéutica. Publicación del Ministerio  de la Industria Básica al Consejo de Dirección y jefes y técnicos  de su primera reserva. MINBAS 2003:10). La calvicie en el hombre después  de los 50 años no es una enfermedad. Los riesgos del uso del Finasteride  abarcan la impotencia, la reducción de la líbido, dolores testiculares  y problemas en la eyaculación, que no siempre aparecen de manera explícita  en los prospectos del producto. ¿Merece la pena someter a un paciente a  estos riesgos para que se trate la calvicie?    
 
Un caso más dramático  es quizás el de la Eflornitina. Este producto fue desarrollado por la firma  norteamericana Marion-Merell Dow en 1985 para el tratamiento de la enfermedad  del sueño.12    
 
Esta enfermedad  mata 150 000 personas cada año, principalmente en África. Como el  tratamiento costaba una pequeña fortuna y por lo tanto estaba fuera del  alcance de los afectados, se abandonó su producción. Posteriormente,  en 1995, la compañía Hoechst compró a Marion-Merell Dow y  transfirió los derechos de mercado de la Eflornitina a la OMS. Desde el  2000, la OMS, junto a Médicos Sin Fronteras de Francia y otras organizaciones  no gubernamentales, están buscando algún patrocinador para producir  y comercializar este producto en esa indicación.    
 
Sin embargo,  la firma Bristol Meyers Squibb la está produciendo con el nombre de Vaniga  en crema, para el tratamiento del vello facial femenino. Como nota  curiosa Gillette Company es copatrocinador del producto.    
 
Este es un  ejemplo del tratamiento del medicamento como bien de consumo.    
 
Independientemente  de lo anterior, existen muchos fármacos en el mundo que son innecesarios  y a veces riesgosos.    
 
En un libro sobre medicamentos ya clásico, se planteaba que en el mercado mundial el 80 % de los fármacos para la diarrea no tienen ningún valor y uno de cada dos contiene un antimicrobiano innecesario. Que más de cuatro de cada cinco fármacos para la tos y el catarro común contienen ingredientes ineficaces y uno de cada dos contiene ingredientes dañinos. Por último, señalaba que más del 80 % de los preparados vitamínicos existentes no deben ser recomendados.13
El paciente como consumidor
La estrategia de la industria farmacéutica  es maximizar las ganancias; una de las tácticas es promocionar intensamente  algunos productos fuertes o de éxito (Blockbuster  Drugs) para incrementar sus ventas. Se dice que es un medicamento de éxito  aquel que sobrepasa la cifra de un billón de dólares vendidos en  el año.14 El número de Blockbuster  Drugs en el mercado ha crecido cada año.    
 
En 1999, los  15 Blockbuster Drugs más relevantes ingresaron 21 billones de dólares,  ya en el 2000 habían ascendido a 19 productos con ingresos de 27 billones  de dólares y en el 2001 ya habían alcanzado los 29 medicamentos  exitosos con ingresos de 34 billones de dólares, casi el 10  % del mercado mundial en ese año (fig. 3).     
 
Fuente:  National Institute for Health Care Management, Prescription Drug Expenditures  in 2000: The Upward Trend Continúes, May 2001 and Prescription  Drug in 2001: Another year of Escalating Costs, April 2002.    
 Fig. 3.  Los medicamentos más fuertes y su participación en el mercado farmacéutico  minorista en EE.UU.    
 
Merck gastó en anuncios para promocionar  el producto VI0XX (Rofecoxib) un tipo de analgésico con bajo riesgo de  reacciones adversas digestivas, 160 millones de dólares en el 2000, lo  cual es más de lo que gastó la compañía Pepsicola  en promocionar Pepsi (125 millones) y la compañía Anheuser Busch  en la cerveza Budweiser (146 millones).15    
  
Pero no todos los anuncios se deben creer. En el 2001 la agencia regulatoria  norteamericana (FDA por sus siglas en Inglés) tuvo que amonestar a la compañía  Pfizer por crear la impresión que uno de sus productos líderes,  el Lipitor (Atorvastatina), estaba indicado para reducir el riesgo de desarrollar  una enfermedad coronaria, hecho que no tenía ninguna evidencia científica  hasta ese momento.16    
 
También  en el 2001, la Food and Drug Administration (FDA) amonestó a la compañía  Merck por usar materiales de publicidad engañosos para la venta  del VI0XX (Rofecoxib)17 y la compañía  Schering-Plough, en el 2003, enfrentó una acusación de la Oficina  del Fiscal de Boston, Massachusetts, en Estados Unidos por otogar financiamientos  y otros recursos de valor a los médicos para comercializar medicamentos  en usos no aprobados por la autoridad regulatoria. También la compañía  Warner-Lambert está bajo investigación por promover usos no aprobados  del anticonvulsivante gabapentina (Neurotin).18    
  
Como ejemplo final del tratamiento al paciente como consumidor tenemos  el proyecto de la compañía Pfizer (la primera compañía  farmacéutica del mundo) de construir un parque con el nombre de Pfizerworld,19  algo así como una Disneylandia, para el disfrute de niños  y adultos. En su parque, Pfizer, hará exhibiciones educativas  sobre medicamentos. El parque se construirá, a un costo de 12 billones  de dólares, en la Florida.    
 
Este análisis que hemos hecho  de la industria farmacéutica mundial, con ánimos de lucro, se diferencia  de la industria farmacéutica cubana en que ésta tiene un propósito  de servicio en función de las reales necesidades de medicamentos de la  población.     
 
Esta diferencia de objetivos se puede apreciar en  algunos enfoques de las acciones y valores de ambas organizaciones.    
 
En la tabla se contrastan los diferentes enfoques de ambas industrias.
TABLA. Diferencias de enfoques entre las industrias farmacéuticas mundial y cubana en diferentes áreas de acción
| Industria farmacéutica mundial | Industria farmacéutica cubana | 
| - (Enfoque rentabilidad) | - (Enfoque humanístico) | 
| - Ganancia | - Satisfacer necesidades | 
| - Eficacia | - Efectividad-seguridad-conveniencia | 
| - Novedad química | - Novedad fármaco-epidemiológica | 
| - Promoción | - Información evidencias | 
| - Diversidad | -Accesibilidad | 
| - Fusiones corporativas | - Fusión con médicos | 
| - Marcas | -Genéricos | 
| - Precios | -Equidad | 
| - Consumidor | -Paciente | 
 La  gran PHARMA tiene como su principal objetivo, la ganancia, y Cuba la satisfacción  de las necesidades de medicamentos de la población, incluso los medicamentos  en Cuba están subsidiados. La insulina que usan los diabéticos cubanos  se compra en el mercado mundial a $ 7.50 USD y se vende al paciente en un peso  veinte centavos en moneda nacional (bulbo de NPH de 10 cc).    
 
La PHARMA  tiene un enfoque solo de eficacia del medicamento, con propósitos de registro  del producto por las autoridades regulatorias de los países y casi siempre  esa eficacia es evaluada en ensayos clínicos contra placebo (preparación  farmacéutica que no contiene ningún principio activo) y no contra  otros medicamentos ya disponibles para esa indicación. En Cuba se hace  un enfoque de efectividad (o sea, de los resultados de su uso en la práctica  clínica habitual), un enfoque de seguridad (el producto que menos reacciones  adversas produzca) y un enfoque de necesidad comparada con otros fármacos  ya conocidos y disponibles en el mercado.    
 
La PHARMA prioriza la novedad  química, Cuba la novedad fármaco terapéutica, o sea, que  signifique una ventaja en el tratamiento de los pacientes en relación con  los ya existentes.    
 
La PHARMA centra sus tácticas en la promoción  y la diversidad de los medicamentos, la industria cubana no anuncia los productos  farmacéuticos, el Ministerio de Salud Pública distribuye información  con evidencias científicas y garantiza la accesibilidad de toda la población  a los medicamentos que requieren.    
 
Las industrias de la PHARMA se fusionan,  creando gigantescos monopolios de producción y distribución de medicamentos;  la industria se une con el Ministerio de Salud Pública para diagnosticar  y satisfacer las necesidades farmacoterapéuticas de la población.    
  
La PHARMA trata de privilegiar los medicamentos de marca que son los más  caros, en Cuba se priorizan los genéricos, de igual calidad y menor precio  junto con la equidad de los servicios de salud.    
 
Por último la  PHARMA, como hemos visto, trata al enfermo como un consumidor, nosotros  como un paciente, un ser humano afectado física y psíquicamente  que requiere atención médica, que es un derecho del pueblo y un  deber del Estado.    
 
Por estas razones la Industria Farmacéutica Cubana, el Grupo Empresarial QUIMEFA del Ministerio de la Industria Básica, se une con los prescriptores y científicos del Ministerio de Salud Pública para consultar, discutir y establecer un proyecto de desarrollo de medicamentos que tiene como único propósito la salud de nuestro pueblo, siendo esto imposible en otros contextos sociales.
Conclusiones
La Revolución  Socialista que el pueblo cubano construye, concibe la salud como un derecho humano  esencial, un componente principal de la calidad de vida y un objetivo estratégico  en el desarrollo de la sociedad.    
 
El Sistema Nacional de Salud creado  bajo esta concepción tiene como componente esencial, en la prevención,  recuperación y mantenimiento de salud, los medicamentos y la Industria  Farmacéutica Cubana tiene la responsabilidad de garantizar los medicamentos  necesarios con la calidad y en el lugar requerido, para que pueda ser usado oportunamente  por nuestro pueblo, según los principios que rigen nuestra Sociedad Socialista.    
  
El sentido humanista del propósito de la Industria Farmacéutica  Cubana sobrepasa y desplaza el carácter mercantilista del concepto permanente  industrial, basado en el incremento progresivo de la rentabilidad, que prevalece  en las sociedades de consumo.    
 
El profesor Gianni Tognoni, uno de los grandes de la farmacoepidemiología mundial sentenció: Los medicamentos no tienen derecho a existir, solo como instrumentos de servicio, sueño de un derecho de salud prioritario a los intereses del mercado.20 Cuba ya ha logrado ese sueño.
Summary
Two approaches on drugs are compared on the basis of the position of the world drug industry and the Cuban drug industry in the society. Five components related to the drug chain and its context are analyzed. These components refer to the following topics: Role of this industry in the market as a space of purchase-sale of products and financial resource mobilization; influence over the political power to generate decisions that keep or expand the market; treatment of the prescriber as a client to be attracted to the industry so as to increase drug sales; attention to be paid to real or potential patients as present or future consumers who could act upon the prescribers towards market expansion. These components were analyzed in the context of today´s world globalized society. In contrast, the purposes of the Cuban drug industry in the drug chain within a socialist society were discussed.
Key words: DRUG INDUSTRY; DRUGS, MARKET; PRESCRIBERS,  CONSUMERS; CLIENTS, CUBA.    
 
Referencias bibliográficas
1. Antezana F, Velasquez G. Drugs and Health Sector Reform. Health Economics 1996:12.
2. Kassiner JP, Angell M. Financial conflicts of interest in biomedical research. New England J Med 1991;329:573-6.
3. Sabía Ud... Boletin AIS-LAC 2001;37:3.
4. Lipitor leads the way in 2003. [cited 2004mar25] Available from: http://www.imshealth.com/online.
5. Stolley P, Laporte JR. The public health, the University and Pharmacoepidemiology. En: Strom B. Pharmacoepidemiology. 3ª ed. Chichester: John Willey and Sons,LTD;2002.
6. Poderoso lobby de la Industria Farmacéutica en Washington. Boletín AIS-LAC 2001;58:3.
7. Gottlieb S. Medical societies acussed of being beholden to the drugs industry. British Med J 1999;319 (7221):1321.
8. Stelfox HT, Clima G, ORourke, Detsy AS. Conflict of interest in the dedate overcalcium-channel antagonist. New England J Med 1998;338:101-6.
9. Glassman PA, Hunter-Hayes J, Nakamura T. Pharmaceutical advertising revenues and physicians organizations: how much is too much?. Western J Med 1999;171:239.
10. Zugev A. Drug representatives sales. New York Times 1999 jan 11;Sec. A-1:13.
11. Siegel J. Israel health insurer curbs activities of drug representatives. British Med J 1999;319:1324.
12. Pecoul B, Chirac P, Troville P, Pinel J. Access to essential drugs in poor countries. A lost battle? J Am Med Assoc 1999:281:361-7.
13. Chetley A. Medicamentos problema. 2ª ed. Chimbote (Perú): Roberto López Editor;1995.
14. Pharmaceutical rank most profitable industry, again. Public citizens Congress Watch. Public Citizen2002;April 17:3.
15. Algunos hechos y falacias de la industria farmacéutica. Boletín AIS-LAC 2003;69:6.
16. Pharmaceutical rank most profitable industry, again. Public citizen´s Congress Watch. Public Citizen 2002;April 15:4.
17. Abrams T. Warning letter to president and CEO Merck & Co., Inc. Department of Health & Human Services.17/9/2001.(www.fda.gov).
18. Charatan F. Schering Plough is acussed of overchanging and obstructing justicie. British Med J 2003:326:1233.
19. Pzifer construirá parque con zonas temáticas. Boletín AIS-LAC 2001;58:6.
20. Tognoni G. La cultura del medicamento. Medicamentos y Salud 1998;2(1):24.
Recibido: 31 de marzo de 2004. Aprobado: 21 de julio  de 2004.    
 Julián Lázaro Pérez Peña. Línea  No. 310, apto. 21, entre H e I, Vedado, Plaza, Ciudad de La Habana. 
1 Especialista de II Grado en Administración de Salud. Máster en Salud Pública.

 
 








 Servicios personalizados
Servicios personalizados Articulo en XML
Articulo en XML Referencias del artículo
Referencias del artículo
 Enviar articulo por email
Enviar articulo por email
 Permalink
Permalink




