Introducción
Las donaciones se realizan a través de personal proveniente de los bancos de sangre. Puede ser realizada en un local central donde radican los mismos o en lugares que son preparados al efecto. Los bancos de sangre constituyen unidades de vigilancia epidemiológica porque durante las actividades de selección médica del donante y la pesquisa de infecciones a través de pruebas de laboratorio, se reconocen individuos con riesgo de padecer o portar alguna enfermedad, por lo que estas personas aparentemente sanas, deben incorporarse al sistema de atención médica. Por otra parte, mediante la vigilancia postransfusional se pueden identificar receptores de sangre con enfermedades infecciosas adquiridas por esa vía. 1
La importancia de la sangre fue reconocida por el hombre desde los primeros tiempos, pues observó que cuando ésta se perdía, sobrevenía la muerte. Con el descubrimiento de la circulación sanguínea por William Harvey en 1816, se concibió la idea de administrar la sangre de forma directa en el torrente sanguíneo.
Se comenzó con la transfusión de sangre de animales a seres humanos. En 1900 se descubre el sistema sanguíneo ABO por Lansteiner. En 1944 se introduce el citrato de sodio como anticoagulante. 2
En el año 2017 Cuba cerró con una tasa de 3,1 donaciones por cada 100 habitantes, fue la provincia de Pinar del Río la que tuvo una tasa más alta (3,8 donaciones por cada 100 habitantes). 3
En el año 2014 se notó que en el Policlínico Hermanos Cruz había gran cantidad de individuos que se encontraban aptos para donar que no estaban dispuestos a hacerlo.
El proceso de educación para la salud relacionado con las donaciones de sangre que se desarrolla en el Policlínico Hermanos Cruz de Pinar del Río resulta asistémico, atomizado y descontextualizado, lo que no contribuye a que todos los pacientes aptos no dispuestos a donar se incorporen de manera activa al proceso de donaciones de sangre en esta área de salud, garantiza su calidad y contribuye al cumplimiento de este programa del MINSAP.
Esta investigación tiene como objetivo evaluar un programa educativo sobre donaciones de sangre a pacientes aptos no dispuestos a donar del Policlínico Hermanos Cruz.
Métodos
Se realizó una investigación cuasiexperimental con diseño preprueba posprueba con un solo grupo, con el objetivo de evaluar un programa educativo sobre donaciones de sangre a pacientes aptos no dispuestos a donar del Policlínico Hermanos Cruz durante el período 2015 a 2018.
El universo fue de 501 pacientes aptos no dispuestos a donar de los consultorios seis, 14, 16, 50, 55 y 56 que cumplieron los criterios de inclusión.
Aptos no dispuesto a donar se consideró todo el paciente que manifestó no poder o no desear donar sangre en ningún momento y no padecer de: diabetes mellitus, anemia, trastornos psiquiátricos, ni epilepsia. Tampoco debía haber presentado hepatitis B o C, ni llevar menos de un año en Cuba. El apto debía tener un peso mayor de 55 kg o no tomar medicamentos que no fueran antihipertensivos. En caso de haberse colocado tatuaje o piercing, debía esperar un año después de realizado el procedimiento para ser declarado apto para donar.
Criterios de inclusión se tuvo en cuenta:
Disposición a participar en el estudio.
Haber sido clasificado como individuo apto no dispuesto a donar.
Entre los criterios de salida estuvieron:
Baja por fallecimiento o cambio de domicilio fuera del área de los consultorios seis, 14, 16, 50, 55, 56 de los sujetos a investigar.
Decisión de los aptos para donar de abandonar el estudio una vez comenzado el mismo.
Se evaluó el nivel de conocimientos iniciales de los individuos aptos para donar no dispuestos mediante una encuesta inicial. Luego fue aplicado un programa educativo que incluyó la impartición de una clase mensual hasta completar tres clases sobre el proceso de donaciones. Las clases fueron impartidas de forma individual en cada vivienda o en el consultorio. La encuesta final se calificó de acuerdo a una clave.
La información obtenida fue procesada estadísticamente en una base de datos automatizada y se agrupó en tablas para mejor exposición y análisis. Se calcularon las frecuencias absolutas, relativas porcentuales. Se utilizó la prueba de x2 McNemar al 95 % de certeza para comparar los resultados y el cambio obtenidos en ellos como corresponde a un estudio de antes y después en muestras pareadas, donde cada individuo antes de la intervención es su propio control. Se tuvieron en cuenta las consideraciones bioéticas establecidas para este tipo de investigación.
Resultados
La mayoría de los individuos aptos no dispuestos a donar se encontraban en el sexo masculino (53,69 %). El grupo de edades predominante fue el de 50 a 54 años para toda la muestra (12,97 %) y para el sexo femenino (7,58 %). En el caso del sexo masculino el grupo de edades predominante fue el de 25 a 29 años (8,98 %). La edad media de la muestra era de 34,33 años (Tabla 1).
Tabla 1 Distribución de la población apta no dispuesta a donar según grupos de edad y sexo. Policlínico Docente Hermanos Cruz
Grupo de edad | Masculino | Femenino | Total | |||
---|---|---|---|---|---|---|
No | % | No | % | No | % | |
18 a 19 | 16 | 3,19 | 11 | 2,20 | 27 | 5,39 |
20 a 24 | 30 | 5,99 | 26 | 5,19 | 56 | 11,18 |
25 a 29 | 45 | 8,98 | 25 | 4,99 | 70 | 13,97 |
30 a 34 | 29 | 5,79 | 30 | 5,99 | 59 | 11,78 |
35 a 39 | 23 | 4,59 | 24 | 4,79 | 47 | 9,38 |
40 a 44 | 26 | 5,19 | 22 | 4,39 | 48 | 9,58 |
45 a 49 | 29 | 5,79 | 28 | 5,59 | 57 | 11,38 |
50 a 54 | 27 | 5,39 | 38 | 7,58 | 65 | 12,97 |
55 a 59 | 26 | 5,19 | 19 | 3,79 | 45 | 8,98 |
60 a 64 | 18 | 3,59 | 9 | 1,80 | 27 | 5,39 |
Total | 269 | 53,69 | 232 | 46,31 | 501 | 100 |
Media | 33,77 | 34,99 | 34,33 | |||
Desviación estándar | 13,50 | 12,61 | 13,09 |
La mayoría de los aptos no dispuestos a donar manifestaba que no donaban por miedo a la punción (38,12 %), seguido por los que manifestaban desconocimiento sobre el proceso de donaciones (32,14 %) (Tabla 2).
Tabla 2 Distribución de la población apta no dispuesta a donar de acuerdo a causas por las que no donan
Causas por las que no donan | Frecuencia absoluta | Frecuencia relativa porcentual |
---|---|---|
Miedo a la sangre | 13 | 2,59 |
Miedo a la punción | 191 | 38,12 |
No le hace falta | 3 | 0,60 |
Desconocimiento sobre el proceso de donaciones | 161 | 32,14 |
Falta de interés | 20 | 3,99 |
Falta de tiempo | 11 | 2,20 |
Miedo a la pérdida de sangre | 19 | 3,79 |
Piensan que requieren altas kilocalorías de alimento | 48 | 9,58 |
Falta de voluntad | 35 | 6,99 |
Total | 501 | 100 |
Al inicio del programa educativo, predominaba el nivel de conocimientos bueno en cuanto a utilidad de la sangre (38,92 %) y los productos que se obtienen de la sangre (60,28 %); el regular en cuanto a donación voluntaria de sangre (57,29 %), sangre de la donación (52,10 %) y lo que sucede con una donación (46,11 %), y el malo cuando una persona no puede donar (60,48 %), requisitos para donar (53,49 %) y la punción en las donaciones (36,93 %). Finalizado el programa educativo, más del 80 % obtuvo el nivel de conocimientos bueno en todos los acápites. En el caso del nivel de conocimientos global sobre el proceso de donaciones, en la etapa inicial predominó el malo (65,87 %). Finalizado el programa predominó el bueno (86,03 %) (Tabla 3).
Tabla 3 Nivel de conocimientos sobre donaciones de sangre antes y después de la aplicación del programa educativo

Se mostraron que todos los valores del chi cuadrado de Mcnemar son mayores que 3,84 en el nivel de conocimientos bueno al inicio y al final de la investigación, lo que demuestra que para un 95 % de certeza la mejoría de los niveles de conocimientos no fue de forma casual (Tabla 4).
Discusión
Los resultados de esta investigación coinciden con los de Martín Godins M et al. 4 en un estudio en un banco de sangre de Belo Horizonte, Brasil, donde la mayoría de los aptos para donar eran del sexo masculino (52,3 %). No coincide con respecto al grupo de edades, donde en la investigación de Martín Godins M et al. 4 predominaban los jóvenes entre 18 y 28 años de edad.
Coincide con lo reportado por Kumar Mishra S et al. 5 donde la mayoría de los aptos no dispuestos a donar eran del sexo masculino (55 %). En cuanto a la edad media, coincide con lo reportado por Guarnaccia C et al. 6 donde ésta era de 35,10 años entre los no donantes.
En un estudio realizado por Abdel Gader AGM et al. 7 en Arabia Saudita se pudo apreciar que un 5 % de los no donantes tenían miedo a todo el proceso, un 16 % refería que no lo hacía por carencia de tiempo. En otro estudio realizado por Shakeri MT et al. 8 un 51 % no donaba por inaccesibilidad al banco de sangre.
El estudio realizado por Nwogoh B et al. 9 en Benin, Nigeria, el 71,2 % de los que no donaban afirmaba que donar tenía graves consecuencias. Por otro lado Kalargirou AA et al. 10 un 36 % de los aptos no dispuesto a donar no donaban porque no encontraban seguro el proceso de donaciones.
Según Alfouzan N, 11 un 45 % de los participantes decía que no donaba por la carencia de tiempo. Este resultado se debe a que todos los pacientes con conocimientos buenos al inicio se mantuvieron así; sin embargo, en el caso de los que tuvieron conocimientos malos en la encuesta inicial cambiaron a nivel de conocimientos bueno al final del programa educativo la mayoría de los participantes.
Los niveles de conocimientos malo al inicio de la estrategia coinciden con lo reportado por Legarda Ceballo AA, 12 donde la mayoría de los participantes no sabía con claridad las cuestiones básicas acerca del proceso de transfusión, el uso de la sangre, la necesidad de la sangre y la edad mínima para donar.
En un estudio realizado por Bilal M et al. 13 el 54 % de los participantes manifestaban que con la ingestión de alcohol no se podía donar y 78 % que no podían donar con hepatitis B. Sin embargo, de manera global no conocían todos los requisitos para poder donar.
Son importantes las políticas que promueven las donaciones voluntarias. Para ello es necesario incorporar el altruismo como forma de motivación. 14 Cuba es un país en donde el altruismo se fomenta desde edades tempranas.
Es necesario que estos participantes hayan incrementado el nivel de conocimientos en cuanto a la donación voluntaria de sangre. En muchos países se tiene una representación de que no se cobra por ella. El altruismo debe ser la principal motivación para que donen las personas. 6
Es válido señalar sobre la importancia de los requisitos para poder donar individuos que presentan anemia, si conocen que no se puede donar por esta razón, se tratarían dicha entidad nosológica para incorporarse a la donación. 15
En otro estudio realizado por Raza N, 16 la mayoría de los participantes eran rechazados por no llevar identificación. En Cuba el documento de identificación es el carnet de identidad, de ahí la importancia de conocer que se debe llevar dicho documento a la hora de donar.
Es importante elevar el nivel de conocimientos sobre importancia de las donaciones de sangre. Akhter S et al. 17 afirman en su estudio que las personas sentían menos motivación para donar cuando no se les decía qué productos se obtenían de la donación y lo que sucede con la misma.
Mishr S et al. 5 en su estudio hallaban que los que donaban tenían un mayor nivel de conocimientos con relación a la utilidad de la sangre que los que no lo hacían. Se debe educar a las personas sobre los beneficios físicos, psicológicos y sociales del acto de donar para las demás personas. Esto se hace extrapolando la estrategia de promoción de salud de Vileda Oliveira de Sa PH et al. 18 sobre los ejercicios físicos.
La promoción de salud ayuda a abordar las problemáticas locales de salud como es el caso de la necesidad de sangre para el país. 19 La educación en salud debe tener en cuenta las características del país y de la región en que se va a aplicar. Se debe partir de una investigación inicial de los sujetos. Según Paulo Freige, citado por Quintão Fagundes D et al. 20 esta educación debe ser realizada en círculos de cultura en donde el emisor esté en igualdad de condiciones al receptor.
Conclusiones
La mayoría de los individuos aptos no dispuestos a donar fueron del sexo masculino. El grupo de edades predominante fue el de 50 a 54 años. La edad media fue de 34,33 años. La principal causa por la que no donaban los individuos era el miedo a la punción. El programa educativo aplicado mejoró de forma global el nivel de conocimientos relacionado con donaciones de sangre de los no dispuestos a donar