Introducción
Los míxomas son los tumores cardíacos benignos, primarios, más frecuentes en adultos, 1-4 representan más del 50 % de los tumores de este tipo. Se presentan entre los 30 y los 60 años con un predominio en las mujeres, su localización más frecuente es la aurícula izquierda (75 %) seguido de la aurícula derecha (20 %) y sólo un 4 % se localiza en los ventrículos. 1-5 En un 90 % de los casos son tumores solitarios (esporádicos), pero pueden formar parte de síndromes familiares que se hereda de forma autosómica dominante con afectación cutánea y endocrina, descrito en 1985 como Complejo de Carney, 1,2 esta forma de presentación es menos "benigna" en donde existen míxomas múltiples y con alta posibilidad de recurrencia.
Hasta 1952 el diagnóstico del míxomas cardiaco era casi siempre post mortem, el advenimiento de la ecocardiografía cambia esta situación, se convierte en la herramienta de elección a pesar de la limitante para definir con certeza la naturaleza del tumor. 5,6
La cirugía es la única terapéutica posible y la recidiva del tumor es rara, aparece entre 1-5 % de los pacientes operados, 1-9 en 1967 Gerbode y colaboradores advirtieron, acerca de la recidiva de los míxomas, incluso en aquellos pacientes en los que se realizaba una amplia extirpación quirúrgica y se consideraban como “curados”. 10,11 La poca información sobre las características de los tumores cardiacos en nuestro medio, motiva la realización de este trabajo, con el objetivo de describir las características clínicas, ecocardiográficas y terapéuticas aplicadas a los pacientes diagnosticados con masas cardiacas y su evolución.
Caso clínico 1
Paciente femenina de 57 años, en 18 febrero del 2008 acudió al centro de diagnóstico integral y refiriendo disnea a los esfuerzos moderados y palpitaciones, al realizar ecocardiografía transtorácica se detectó una masa única en aurícula izquierda (AI) de gran tamaño, de pedículo largo insertado en el tabique interauricular, de gran movilidad y con protrusión a través de la válvula mitral que provocaba la obstrucción de la misma confirmándose míxoma auricular izquierdo (MAI). Se remite al Hospital Militar de Caracas donde se práctica intervención quirúrgica de resección amplia a nivel de la inserción del tumor que incluyó parte del tabique interauricular, creándose una comunicación interauricular la cual se reparó con parche de pericardio autólogo.
Periódicamente se realizó una consulta cada 4 meses, donde además del interrogatorio y el examen físico minucioso, se le realizó anualmente una ecocardiografía transtorácica. La paciente se ha mantenido asintomática y con examen físico negativo. No obstante, en la última ecocardiografía realizada, se le constata masa tumoral en A.I. que mide 30 x 39 mm con un área 10.8 cm2, con pedículo corto insertado en el tabique interauricular, poca movilidad, que no llega al plano valvular mitral por lo cual no provoca obstrucción mecánica, presenta además insuficiencia valvular mitral grado II. (Fig. 1 y Fig. 2)
Caso clinico 2
Paciente masculino de 48 años de edad, raza blanca, procedencia rural de profesión obrero agrícola, con antecedentes de hipertensión arterial que acude a consulta porque hace un mes viene presentando dolor precordial punzante, difuso generalmente a los esfuerzos, acompañado de palpitaciones, vértigos, sudoración, frialdad, tos seca con sensación de desmayo y fatiga.
Al examen físico, ruidos cardiacos rítmicos, soplo proto-sistólico en cuarto espacio intercostal izquierdo y borde esternal en posición de decúbito supino. En ecocardiografía transtorácica se apreció masa tumoral (mixoma auricular izquierdo) de 58 x 39 mm, densa, movible con pedículo largo y movimiento pendulante, adherido al septúm interauricular que protruye un 50 % el plano valvular mitral al ventrículo izquierdo durante la sístole sin provocar insuficiencia mitral. Se remite al cardiocentro de Santiago de Cuba, donde se confirma el diagnóstico por ecocardiografía transesofágica y previa coronariografía, el 22-10-2018 se realiza tratamiento quirúrgico de extirpación y resección del tumor sin complicaciones ni traumas. (Fig. 3 y Fig. 4)
Se observa masa tumoral redondeada, regular, de aproximadamente 6,5 x 4 mm, adosado al septum interauricular con movimiento pendulante y protruyendo desde la aurícula izquierda sobrepasando el plano válvular mitral hacia el ventrículo izquierdo.
Discusión
Existen un grupo de pacientes con mixomas cardiacos y mayor probabilidad de recidiva, como los que entran dentro del denominado complejo de Carney, quienes además presentan mixomas cutáneos y mamarios, lesiones cutáneas pigmentadas (lentigos, nevos azules), enfermedad adrenocortical con hiperactividad endocrina, que se transmite como herencia autosómica dominante. 1,2) Este grupo de pacientes con mixomas recidivantes y antecedentes familiares tienen una edad menor de presentación.
Otras posibles causas de recurrencia tienen que ver con la técnica quirúrgica como la resección incompleta 9 o el implante intracardíaco del tumor original durante la manipulación del mismo, también se ha señalado la posibilidad de la proliferación de un segundo foco tumoral y de la recidiva a pesar de una resección quirúrgica adecuada. 4-7
Los mixomas cardíacos producen interleucina-6 (IL-6) lo que explica los hallazgos de reacción inflamatoria e inmune observada en estos pacientes, un aumento en la producción de esta citoquina se asocia a comportamiento biológico diferente en los mixomas recidivantes, mostrándose más agresivos y con mayor posibilidad de recurrencia. 3-9
Dependiendo de su localización, tamaño y movilidad, las manifestaciones clínicas y humorales frecuentemente se comportan a semejanza con otras patologías cardiacas y sistémicas lo que suele confundir el diagnóstico diferencial entre ellas; las formas clínicas de presentación más frecuentes son episodios síncopales de corta duración, arritmias cardíacas, edema pulmonar y síntomas de bajo gasto cardiaco. En más del 30 % de los pacientes se presentan manifestaciones embólicas por fragmentación del tumor. 3,11
El traumatismo constante sobre el aparato valvular durante las fases del ciclo cardíaco, provoca lesión directa en las estructuras perivalvulares ocasionando insuficiencia valvular.3-9