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Humanidades Médicas
versión On-line ISSN 1727-8120
Rev Hum Med v.3 n.1 Ciudad de Camaguey ene.-abr. 2003
Página de la historia |
Autores |
JorgeÁlvarez Vázquez. Lic. en filosofía. Profesor Titular. Instituto Superior de Ciencias Médicas Carlos J. Finlay. Camaguey. Cuba. Director del Centro para el Desarrollo de las Ciencias Sociales y Humanísticas en Salud (CENDECSA) email: jav@finlay.cmw.sld.cu |
Malaria. - El descubrimiento del parásito de la malaria correspondió a C.L.A. Laveran (1845-1922), quien informó del hecho en el año 1881. El papel del mosquito en la evolución del parásito de la malaria, fue un descubrimiento de Donald Ross (1857-1932), con lo que aporta en el año 1898 un prueba concluyente del ciclo vital completo del parásito. Un año después, en 1899 G. B. Grassi (1854-1925) y A. Bignami (1862-1929), demuestran que la fase sexual del plasmodio, sólo puede tener lugar en el anófeles mosquito.
Mestre y Domínguez (Antonio J. Andrés) Ilustre médico, académico e intelectual cubano. Nació el 18 de octubre de 1834. Murió el 10 de julio de 1887.Después de los estudios elementales, Mestre cursó el bachillerato en Ciencias en la Facultad de Filosofía de la Real Universidad Literaria de la Habana. Alcanzó tal título tras cuatro años de concienzudos estudios, caracterizados por notas sobresalientes. Con sólo 17 años ingresó en la Facultad de Medicina y al vencer las materias del tercer curso, a causa de las negativas condiciones académicas para las venideras asignaturas del Plan de Estudio, en las que se concentraban las clínicas y de carácter práctico, la familia complació las expectativas del joven prospecto al planear su salida hacia Francia, uno de los más grandes centros de la medicina mundial de entonces. Embarcó Mestre rumbo a Europa el 10 de julio de 1885. Uno de los Aspectos que llama la atención dentro del quehacer de Mestre como estudiante de medicina en París, fue su relación con el colectivo de jóvenes estudiantes cubanos que, persiguiendo los mismos objetivos que él, se vieron reunidos en la capital francesa. Hacia finales de los años 50 del siglo XIX correspondió a estos estudiantes de medicina crear una Sociedad para contribuir a desarrollar la medicina en la Isla, e integrarla a los notorios avances de la medicina mundial. Crearon una Revista mensual que se publicó con el nombre de "El Eco de París" a partir de mayo de 1858 y hasta febrero de 1859. En lo adelante, hasta febrero de 1860, en que deja de editarse, se publicó bajo el título de "La Emulación Médica". Por aquella época fue el único periódico médico publicado en español en París, cuyo principal destino fue siempre llegar a los estudiantes y claustro de la Universidad de la Habana con lo más avanzado de las ciencias médicas en sus páginas. A mediados del año 1861 Antonio Mestre se está preparando para rendir sus exámenes finales. Terminó los ejercicios que dieron paso al Doctorado el 2 de agosto, con una tesis que tituló: "Estudios sobre los Vértigos". Esta era una monografía de 50 páginas estructurada en un sumario que contenía las consideraciones generales sobre el tema escogido, una reseña histórica que se iniciaba con Hipócrates, para cerrar con los estudios de más actualidad y en las conclusiones proponía una clasificación de los vértigos. Luego de revalidar su título en España, exigencia insoslayable impuesta por las autoridades coloniales, Antonio Mestre llega a La Habana el 21 de Abril de 1862. Desde su arribo y hasta el año 1881, Se desempeñó como eminente profesor universitario en disciplinas médicas como, Fisiología, Clínica Médica, Patología Médica, Medicina Legal y Toxicología. Entre los años 1881 y 1883 el Gobierno Universitario lo invitó a impartir la asignatura Historia de las Ciencias Médicas. El Programa de esta asignatura fue de la creación del propio Mestre y en él recogía las definiciones, teorías y los conocimientos que sobre las ciencias médicas se tuvieron desde la antigüedad hasta el siglo XIX. Desde el 23 de noviembre de 1863 Antonio Mestre fue aceptado como Académico de número en la Real Academia de Ciencias Médicas, Físicas y Naturales de la Isla de Cuba. Antonio Mestre, además de actuar como secretario de la Corporación, resultó el científico ideal, por su vocación como publicista para dirigir, desde su fundación el 14 de agosto de 1864, la más trascendente publicación científica cubana de la época, los Anales de la Academia de Ciencias Médicas, Físicas y Naturales. Antonio Mestre también resultó ser miembro ilustre de instituciones como la Sociedad de Estudios Clínicos y la Sociedad Antropológica de la Isla de Cuba. En sus publicaciones y actividades científicas brilló como un grande de la ciencia cubana. Algo extraordinario para la época significa la influencia que ejerció su artículo titulado "Deontología Médica", que fuera acogido por la Sociedad de Socorros Mutuos, institución que en los primeros meses de 1879 exhortó a los médicos a asociarse para luchar por sus intereses y velar por la integridad y el prestigio profesional. El Artículo mencionado fue el emblema para reclamar la urgencia de un código moral, esforzarse por subsanar los errores cometidos en los diagnósticos y combatir los abusos de profesionales inescrupulosos en la prescripción de medicamentos con fines de lucro. La bibliografía activa del Dr. Antonio Mestre se produce entre los años 1835, siendo aún estudiante, y se extiende hasta 1913; y asciende a la cifra de 126 títulos.