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Revista Habanera de Ciencias Médicas
versión On-line ISSN 1729-519X
Rev haban cienc méd v.6 n.1 Ciudad de La Habana ene.-mar. 2007
EDITORIAL
LA COMPLEJIDAD DE LAS CIENCIAS MEDICAS Y SU OBJETO DE ESTUDIO. VISION CIENTIFICO-TECNICA Y ETICA PARA REFLEXIONAR SOBRE SUS FUTURAS PROFESIONES
(Palabras de bienvenida a los estudiantes de nuevo ingreso en el Acto de recibimiento al curso 2006-2007, en representación del Claustro en la Facultad ICBP Victoria de Girón)
Profesor Ubaldo González Pérez. ubaldo.gonzalez@infomed.sld.cu
Profesor Auxiliar. Jefe del Departamento de Psicología. Presidente de la Cátedra Calidad de Vida, Salud y Felicidad del ICBP Victoria de Girón.
La Universidad Médica de La Habana, en nuestra Facultad Victoria de Girón, les da la bienvenida, y este Claustro se compromete a ofrecerles sus experiencias profesionales con dedicación, así como sus principios éticos encarnados en la solidaridad internacionalista y humanizadora que brindan nuestro Estado y profesiones, evidenciado el trabajo realizado en 91 países, como aporte a las conquistas del derecho a la vida y la salud de las mayorías, sin retórica ni vana jactancia. También enseñarles las cosas que no están en los libros, como es equivocarse, rectificar y discrepar con humildad. Que nuestro modesto ejemplo de Estado y profesión, sea la savia que alimente su formación científico-técnica y humanista.
Bienvenidos a nuestro Centro de estudios.
No vengo a dar un discurso ni consejos, sino a brindarles algunas reflexiones sobre las profesiones que han seleccionado, las que generalmente no coinciden con lo que se cree sobre el trabajo en las Ciencias Médicas. La imagen que históricamente se asocia al médico es la de un enfermo en el lecho del hospital, la cual ha sido transformada en forma radical, por el desarrollo de la sociedad. Los invito a que pensemos juntos en torno a estas reflexiones:
Las condiciones que propician la salud, la enfermedad y la muerte se transforman con la evolución de la sociedad. Están relacionadas con cada época, cada comunidad, cada cultura, con las formas de distribución de las riquezas, condiciones de trabajo, cada estilo de vida, las características de las relaciones humanas que mantenemos y la personalidad de cada individuo y otras, excepto cuando se trata de un defecto hereditario o propio. Quiere esto decir que los ricos, los pobres, los alcohólicos, los fumadores, los obesos, los que viven sin higiene, los angustiados y los que viven en comunidades y lugares geográficos particulares, tienen diferentes probabilidades de enfermar y morir.
Al llegar un enfermo a un hospital, supongamos que todo sale bien porque usted hace un diagnóstico y un tratamiento correcto y el paciente cura. ¿A qué lugar regresa ese paciente?: a sus condiciones de vida habituales, donde está la mayoría de los factores que influyeron en su enfermedad o en la conducta que lo llevó a enfermarse o accidentarse. ¿Con nuestra labor intrahospitalaria realizada, se ha cambiado la posibilidad de esta persona para enfermar de nuevo?
Para mejorar la salud de la población y disminuir las enfermedades y la muerte hay que trasladarse a la comunidad, estudiarla y transformarla, valorar y mejorar el Medio Ambiente, el centro laboral y los estilos de vida de las personas; hay que modificar la calidad de la vida y la sociedad como un todo para generar una cultura de la salud. Por eso, las Ciencias Médicas tienen que salir del aula tradicional universitaria hacia esos nuevos lugares y laboratorios, donde se estudie al ser humano y su entorno. Para eso se están transformando los planes de estudio; no es un capricho, es recoger la experiencia de la evolución de las ideas más progresistas en la historia de la sociedad y las Ciencias Médicas; las ideas del Padre de la Medicina del trabajo, Bernardino Ramazzini, de los economistas y los higienistas europeos de finales del siglo XIX, entre ellos, Federico Engels, describiendo la situación de salud de la clase obrera en Inglaterra, los progresos de la Epidemiología del continente americano que incluye a nuestro Finlay, la Sociología Médica de Henry Sigerist, la valentía por desenmascarar las verdaderas causas del hambre del brasileño Josué de Castro y la rica experiencia de las conquistas de la salud pública cubana revolucionaria, que han sido un ejemplo para el mundo.
Cuando la comunidad, el Medio Ambiente, la familia y los estilos de vida andan bien, habrá menos enfermedades y harán falta menos hospitales. Si se luchara sólo contra los defectos genéticos y los gérmenes, harían falta menos hospitales. Cuando imperan la iniquidad, la ignorancia, la violencia, la contaminación del Medio Ambiente, la pobreza y los estilos de vida inadecuados y un estrés mantenido, harán falta muchos hospitales, pero éstos no podrán resolver el problema.
Por todas esas características, los servicios de salud no pueden ser una mercancía que se venda sólo a los que saben identificar esa necesidad y comprarla. Tienen que ser una actividad social, solidaria, humanizadora, educadora y moral, responsabilidad del Estado, con participación de la comunidad y los individuos, que fomente una cultura sanitaria y una responsabilidad individual ante la salud.
Lo expuesto evidencia que los profesionales de las Ciencias Médicas no tendrían completa su profesión, si no conocen el concepto de justicia y equidad, las supersticiones de la cultura y sus consecuencias en la salud, las formas en que el mercado manipula la conciencia de las masas para inculcarles hábitos de consumo que dañan la salud y llenan el bolsillo a los productores, así como las características de la sociedad y la personalidad humana que llevan a las adicciones y a la indolencia ante la salud propia y ajena. Saber cómo se forma un cuerpo sano y una personalidad equilibrada.
Para detectar los problemas que puedan afectar la salud y trabajar en su prevención, así como problemas subjetivos y administrativos, por insuficiencias, dogmatismo, oportunismo, que obstruyan su trabajo y deber ético-profesional, o nuevas necesidades que ya no pueden seguir esperando, tendrá que ser crítico y transformador, partiendo de ideas esenciales del concepto de Revolución expuesto por Fidel: Es sentido del momento histórico; es cambiar todo lo que debe ser cambiado; es igualdad y libertad plenas; es ser tratado y tratar a los demás como seres humanos; es emanciparnos por nosotros mismos y con nuestros propios esfuerzos, es desafiar poderosas fuerzas dominantes dentro y fuera del ámbito social y nacional; es defender valores en los que se cree al precio de cualquier sacrificio; es modestia, desinterés, inteligencia y realismo...... es luchar por nuestros sueños de justicia para Cuba y para el mundo, es la base de nuestro patriotismo, nuestro socialismo y nuestro internacionalismo.
Tienen que saber Etica, porque hasta la igualdad sin un sentido ético, se puede convertir en igualitarismo o en formas de injusticia. Veamos ejemplos que ya se discuten en el mundo:
a) Dos personas aspirantes a recibir transplante de riñón tienen compatibilidad con el donante de un único riñón, uno es una persona de buen estilo de vida y conducta social respetable, la otra es alcohólica y fumador irreducible, que causó un accidente de transito en una de sus borracheras y provocó lesiones a varias personas; decidir quien de los dos recibe el riñón es un dilema ético que el personal de salud debe saber conducir.
b) La capacidad de la tecnología médica actual permite mantener a una persona en vida vegetativa sin posibilidad de recuperación, sin conciencia de sí ni de los demás. La familia mantiene la esperanza de un milagro y con las mejores intenciones y deseos inconscientes de alejar lo más posible su sufrimiento por la muerte del familiar, pide que mantengan al familiar instalado al equipamiento de reanimación, pero el paciente puede sentir los dolores por el ensañamiento del tratamiento. Continuar o no este ensañamiento es otro dilema ético.
Como hemos visto, han matriculado para desempeñarse en una profesión que exige que los problemas sean vistos formando parte de un sistema complejo, donde en el individuo enfermo no se puede separar lo biológico de la sociedad, la comunidad, la familia, el Medio Ambiente, los estilos de vida y la personalidad. Donde la penicilina que salva a muchos pacientes puede matar a otros por una susceptibilidad particular. Donde un operado de un tipo de cáncer se considera que no debe sobrevivir 5 años, y otro operado del mismo tipo de cáncer sobrevive 20. Donde dos niños tomando la misma agua de un Círculo Infantil, uno adquiere Giardia y el otro nunca se infecta. Para comprender los derroteros de la salud, el bienestar y la enfermedad, hay que aprender a interpretar la diversidad de interacciones, de cualidades y sus posibilidades infinitas de cambio. No hay que asustarse, la concepción dialéctica de nuestra filosofía y nuestra ciencia nos ayudará a entender esta complejidad de la salud y la enfermedad.
Para entender esta complejidad, no se puede subestimar ninguna asignatura, pero hay que interrelacionarlas todas y ellas con la realidad y con lo casual; las asignaturas son como los pisos de un edificio, no puede eliminarse ninguno de ellos, pero sí se puede tratar de organizar conjuntos de conocimientos extraídos de todas ellas que funcionen como principios o guías de acción general para el trabajo en estas profesiones, que se los puedo recomendar desde este primer día en la universidad. Estos pueden ser, entre otros:
1- Una visión epidemiológica y salubrista , que significa conocer las condiciones en que se origina y evoluciona cada una de las enfermedades para diferenciarlas y poder adoptar las políticas de acción y organizar los servicios de salud para enfrentarlas.
2- Un profundo conocimiento de las estructuras y funciones del organismo , desde su origen hasta las edades avanzadas, pasando por las etapas de su desarrollo para entender las variaciones en cada momento de la vida en las condiciones que enfrenta.
3- Comprender los mecanismos que permiten defenderse de las agresiones y restablecer el equilibrio, que es uno de los principios del mantenimiento de la salud y la recuperación de las enfermedades.
4- Interpretar las relaciones entre los genes y el ambiente, y las asociaciones de ambos con la salud y la enfermedad de modo que se fundamente el origen de las enfermedades a las que se les denomina multifactoriales.
5- Un pensamiento científico , para adquirir los métodos que faciliten entender la complejidad y la lógica de los problemas y las soluciones que propongamos.
6- Un conocimiento de la personalidad humana , que les permita comprender al ser humano, sus debilidades y virtudes, admitirlo, apoyarlo y, sobre todo, educarlo.
7- Un sentido ético y de solidaridad internacional en función de las mayorías, que nos distinga como personas y como nación, que ya corre por el Mundo como ejemplo de la defensa de los derechos humanos a la vida y la salud.
Muchas gracias, y recuerden siempre: Este claustro les abre los brazos y los exhorta a preguntarles a sus profesores, en aulas y pasillos, todas sus dudas; porque del esfuerzo de ustedes por vencer la timidez al preguntar y de la paciencia y esfuerzo de sus profesores al explicarles, puede depender la vida de muchas personas.