Introducción
La adolescencia es la etapa de la vida en la que se presentan grandes cambios físicos, psicosociales, cognitivos y se determina la forma de comportarse en la adultez. Entre estos cambios se destaca la adquisición de habilidades para la independencia sexual.1
Actualmente, la sexualidad y la salud reproductiva han cobrado relevancia entre los profesionales dedicados a la salud pública, por el impacto social que han producido en las nuevas generaciones, que se manifiesta en el incremento de las enfermedades de transmisión sexual y el embarazo no deseado. Diversos estudios muestran que una proporción importante de adolescentes lleva a cabo prácticas sexuales de riesgo como es el inicio temprano de la vida sexual, varias parejas sexuales, escaso uso de preservativo y el consumo de alcohol y otras drogas.
Datos a nivel mundial señalan que 18% de los adolescentes han tenido su primera relación coital antes de los 15 años, con una media mundial en 16,5 años; en Europa son más precoces con medias de 15 años, mientras en Asia son más tardías, con medias de 19 años. Estudios realizados en España refieren que la edad media de inicio de la vida sexual es 15 años: sin embargo, estudios recientes definen medias de 14 años, así como el uso de preservativo en menos de 50%. En América Latina la edad media de inicio de la vida sexual varia de 13,5 a 16 años y la utilización del preservativo menos de 30% Por otra parte, una gran proporción de adolescentes realiza prácticas sexuales sin utilizar condón, aun cuando tienen múltiples parejas.2,3,4,5
Las consecuencias de las conductas sexuales de riesgo; se han manifestado por indicadores alarmantes en la salud del adolescente, así tenemos que la Organización Mundial de Salud (OMS) reporta un incremento de 15% anual de Infecciones de Trasmisión Sexual (ITS) en adolescentes; 11% de embarazos en jóvenes entre 14 y 19 años y la práctica de relaciones protegidas mediante el empleo de preservativo en menos de 8%.6
En estudios realizados en Ecuador, la edad media de inicio de las relaciones sexuales fue entre 15 y 16 años con mínima diferencia en los dos sexos; de ellos, 50% tuvieron más de 2 parejas sexuales y menos de 30% utilizaron preservativo.7,8) Con respecto a sus consecuencias el Ministerio de Salud Pública del Ecuador (MSP) reportó una incidencia de 294 935 casos de infección de trasmisión sexual, de los cuales 4 412 son de VIH/sida, siendo la población joven la más afectada.9 Por otra parte, el Instituto Nacional de Censo y Estadísticas (INEC) 2012, manifestó el incremento en los últimos años del embarazo en las adolescentes, con una tasa de fecundidad de 11% entre 15 y 19 años.10
Por razones prácticas y teóricas, la mayoría de las investigaciones se ha enfocado en las conductas de riesgo como el inicio temprano de la vida sexual, múltiples parejas sexuales y el uso del condón, sin considerar el contexto psicológico y social en el cual se desarrollan los adolescentes, como el nivel educacional, la influencia de grupos pares y familiar; fuente primaria de socialización, que ejerce una fuerte influencia en el comportamiento sexual de los adolescentes.1
La familia tiene una función primordial como factor protector o condicionante en el desarrollo de conductas de riesgo en la salud sexual de los adolescentes; lo que al parecer la carencia de unidad y la ausencia de relaciones positivas dentro de la familia, como la participación, la confianza, las manifestaciones de afecto incrementan estas conductas de riesgo.
En lo referido a salud sexual de los adolescentes, algunas familias se cohíben de hablar sobre estos temas y las dudas son resueltas por fuentes externas a la familia que quizás no le brindan al adolescente la mejor información, lo que puede derivar en actitudes y prácticas erróneas frente a su vida sexual.11
En Ecuador, existen pocas investigaciones que evalúan la conducta sexual de riesgo como tal, ya que se han dedicado a las consecuencias de estas conductas como es el embarazo y las ITS, por su impacto económico y social.
En esta investigación se evaluaron las conductas sexuales de riesgo del adolescente (inicio temprano de la vida sexual, múltiples parejas y utilización inconsistente del condón), el conocimiento de la prevención de estas conductas y su relación con algunas características de la familia como la tipología (ontogénesis) y funcionamiento familiar.
El problema de investigación: ¿Cómo influye el funcionamiento familiar en la conducta sexual de riesgo en los adolescentes de la comunidad de Yanayacu?
Objetivo
Considerando que el funcionamiento familiar tiene una relación directa con la conducta sexual de riesgo en adolescentes, que la misma constituyen una importante problemática de salud y teniendo en cuenta que en nuestro trabajo diario hemos detectado situaciones de disfunción familiar, nos propusimos como objetivo determinar la influencia del funcionamiento familiar y la conducta sexual de riesgo en adolescentes de la comunidad de Yanayacu.
Material y métodos
Se realizó un estudio observacional, relacional de corte transversal. El universo estuvo conformado por 71 adolescentes entre 14 y 19 años de la comunidad de Yanayacu, Cantón Salcedo, provincia de Cotopaxi, de enero de 2015 a mayo de 2016.
Después de obtener la firma del consentimiento y asentimiento informado, se aplicaron los siguientes instrumentos:
Encuesta sobre la vida sexual del adolescente, modificada a partir de dos instrumentos, la guía para medir el comportamiento de riesgo en adolescentes, elaborada por la división de protección social y salud y el Banco Interamericano de Desarrollo, así como el inventario de factores protectores y de riesgo según Andrade y colaboradores.9
Ficha familiar para clasificar a la familia del adolescente según su ontogénesis (nuclear, extensa o ampliada). Test FF-SIL del funcionamiento familiar aplicado a padres o tutores del adolescente; validados por varios estudios de Latinoamérica entre ellos Chile, Cuba, Uruguay, con un coeficiente de confiabilidad de 0.94 lo que demuestra que es un test confiable.13,14
Se recogieron las siguientes variables: la edad de inicio de la vida sexual (Adolescencia temprana y media 10 a 16 Adolescencia tardía 17 a 19); tipo de parejas sexual (Novio/a, Amigo/a, Pareja, ocasional, Otros); métodos anticonceptivos utilizados durante la primera relación sexual (Si, No); número de parejas sexuales (Menos de dos, dos o más); frecuencia del uso del preservativo (Nunca, A veces, Siempre); consumo de alcohol (Sí, No); y el conocimiento de la prevención de las consecuencias de estas conductas (Sí, No).
Tipo de Familia: Nuclear (monoparental, biparental). Extensa (padres, hijos, con o sin nietos). Ampliada (otros parientes que no pertenezcan al tronco de descendencia).
Funcionamiento familiar: Funcional (70 a 57 puntos), Moderadamente funcional (56 a 43 puntos) Disfuncional (42 a 28 puntos) Severamente disfuncional (27 a 14 puntos) La información obtenida fue procesada a través de una base de datos en el software de procesamiento estadístico SPSS.20. Se presentó la información en tablas de frecuencias y contingencia y gráficos. En el caso de la edad, se calcularon estadígrafos de tendencia central. Para evaluar la posible asociación entre variables cualitativas se utilizó el test de independencia Chi Cuadrado. Se fijó un intervalo de confianza de 95%.
Componente ético específico de esta investigación se siguieron los principios de la ética médica: Beneficencia y no maleficencia, autonomía, respeto y justicia de acuerdo con la Declaración de Helsinki. Por tratarse en su mayoría de adolescentes menores de edad, se solicitó a cada adolescente y sus padres o tutor, el consentimiento y asentimiento informado.
Resultados
Conductas sexuales | Sexo | Total | p | |||||
---|---|---|---|---|---|---|---|---|
Masculino | Femenino | |||||||
No. | % | No. | % | No. | % | |||
Edad de inicio de la vida sexual | ||||||||
10 a 16 | 12 | 80 | 13 | 65 | 25 | 71,4 | 0.45 | |
17 a 19 | 3 | 20 | 7 | 35 | 10 | 28,6 | ||
Parejas sexuales | ||||||||
una | 5 | 33,3 | 14 | 70 | 19 | 54,3 | 0.044 | |
2 y más | 10 | 66,6 | 6 | 30 | 16 | 45,7 | ||
Uso de preservativo | ||||||||
Sí | 9 | 60 | 5 | 25 | 14 | 40 | 0.036 | |
No | 6 | 40 | 15 | 75 | 21 | 60 | ||
*Otras conductas | ||||||||
Sí | 8 | 53,3 | 2 | 10 | 10 | 28,6 | 0.007 | |
No | 7 | 46,7 | 18 | 90 | 20 | 71,4 |
*Relaciones sexuales con parejas ocasionales, práctica sexual vaginal-oral, consumo de alcohol en la última relación sexual
La Tabla 1 muestra que 49,3% iniciaron su vida sexual coital, con una edad media de 15.7 años ± 1,9. El porcentaje de mujeres fue mayor con 57,1%, el inicio de la vida sexual fue en 71% durante la adolescencia temprana y media con mínima diferencia entre los dos sexos. En relación con el número de parejas sexuales, 45,7% manifiesta haber tenido más de dos parejas sexuales y menos de 40% utilizó preservativo existiendo diferencias significativas según sexo con p <0.05. Entre otras conductas sexuales menos frecuentes, se identificó pareja ocasional en las relaciones sexuales, consumo de alcohol en la última relación sexual y práctica coital vaginal y oral. Con una p de 0,007 lo que se considera estadísticamente significativo.
Método de Prevención de embarazo | Con vida sexual | Sin vida sexual | |||
---|---|---|---|---|---|
No. | % | No. | % | ||
Preservativo | 29 | 82,9 | 18 | 50 | |
Abstinencia | 2 | 5,7 | 3 | 8,3 | |
PAE | 2 | 5,7 | 7 | 19,4 | |
Ninguna | 2 | 5,7 | 8 | 22,2 | |
Total | 35 | 100 | 36 | 100 | |
p= 0.027 | |||||
Método de Prevención de * ITS | |||||
Preservativo | 15 | 42,9 | 13 | 36,1 | |
Abstinencia | 1 | 2,9 | 5 | 13,9 | |
Ninguno | 19 | 54,3 | 18 | 50 | |
Total | 35 | 100 | 36 | 100 | |
p= 0.24 |
La Tabla 2 muestra que de los 35 adolescentes que iniciaron su vida sexual, 94,3% manifestó tener conocimiento sobre la prevención del embarazo y su principal método de protección fue el preservativo con 82,9%, existiendo una relación significativa en las que tuvieron o no vida sexual con una p <0.05. Por otro lado, 54,3% desconocía el preservativo como método de prevención de ITS.
Entre los 71 adolescentes, 58% pertenece a familias extensas y ampliadas, en estas últimas, 66% de los adolescentes iniciaron la vida sexual.
Funcionamiento familiar | Inicio de la vida sexual | Total | ||||
---|---|---|---|---|---|---|
Sí | No | |||||
No. | % | No. | % | No. | % | |
Funcional | 8 | 23 | 14 | 39 | 22 | 31 |
Moderada | 11 | 31 | 8 | 22 | 19 | 27 |
Disfuncional | 16 | 46 | 14 | 39 | 30 | 42 |
Total | 35 | 100 | 36 | 100 | 71 | 100 |
Fuente: Test del funcionamiento familiar FF-SIL.
La Tabla 3 muestra que predominaron las familias con riesgo (moderadas y disfuncionales) y de los 27 adolescentes, 77% que iniciaron su vida sexual pertenecían a estas familias.
Funcionamiento familiar | Conductas Sexuales de Riesgo | |||||
Inicio temprano de vida sexual | Más de dos parejas sexuales | No uso de preservativo | ||||
No. | % | No. | % | No. | % | |
Funcional | 4 | 11,4 | 4 | 11,4 | 2 | 5,7 |
Moderada | 8 | 22,9 | 8 | 22,9 | 5 | 14,3 |
Disfuncional | 13 | 37,1 | 4 | 11,4 | 14 | 40 |
p- valor | 0.27 | 0.044 | 0.007 |
La Tabla 4 muestra que se identificó que existe asociación entre el funcionamiento familiar y las conductas sexuales relacionadas al no uso de preservativo, el tener varias parejas sexuales y otras (pareja ocasional en la primera relación sexual, el no uso de preservativo, consumo de alcohol en la última relación sexual).
Discusión
El comienzo vivencial de la adolescencia, está marcado por desconocimientos, mitos, miedo e inseguridad que llevan a muchos adolescentes a experimentar conductas de riesgo, que amenazan su calidad de vida y su posterior desarrollo como individuos.
La salud del adolescente es un elemento clave para el progreso social, económico y político del país. Cuando los adolescentes no consiguen llegar a la edad adulta en condiciones óptimas de salud y educación.
De un total de 71 adolescentes, 49,3% inició su vida sexual coital, con una edad media de 15.7 años ± 1,9. El porcentaje de mujeres fue mayor con 57,1%, el inicio de la vida sexual fue en 71% durante la adolescencia temprana y media con mínima diferencia entre los dos sexos. En relación con el número de parejas sexuales, 45,7% manifiesta haber tenido más de dos parejas sexuales y menos del 40% utilizó preservativo; entre otras conductas sexuales menos frecuentes se identificó pareja ocasional en las relaciones sexuales, consumo de alcohol en la última relación sexual y práctica coital vaginal y oral. La mayoría de estas conductas resultaron significativas en relación al sexo con una p menor de 0.05.
Según la legislación ecuatoriana una relación antes de los 14 años debe presumirse como agresión sexual, dato que se confirma en esta investigación, pues se detectaron dos casos de violación cuyo agresor fue un pariente cercano (primo).12
Esta investigación coincide con estudios realizados en Ecuador, quienes plantean que la edad media de inicio de relaciones sexuales fue de 15 años y que de los adolescentes sexualmente activos, 50% tuvieron más de 2 parejas sexuales y menos de 40% utilizaron preservativos.13,14
A criterio de los autores, la edad de inicio de las relaciones sexuales es cada vez más precoz, la mayoría de los adolescentes se ubican en la adolescencia media, etapa que casi culmina con los cambios biológicos secundarios y podría considerarse como riesgo preconcepcional; además en el aspecto psicológico no están preparados para establecer una relación de pareja estable y afrontar las consecuencias de su actividad sexual temprana (embarazo, infecciones de trasmisión sexual).
La educación sexual es el método preventivo más eficaz para erradicar riesgos y consecuencias en la salud del adolescente. De ello se deduce la gran responsabilidad de la sociedad en sensibilizar a la familia, medios de comunicación y centros docentes sobre la educación sexual como ya se hace en casi todos los países en desarrollo. Por lo expuesto, en esta investigación se indagó a los adolescentes sobre sus conocimientos relacionados con las conductas sexuales de riesgo y las consecuencias para su salud personal, familiar, el resultado relevante se expone en esta sección.
Entre los 35 adolescentes que iniciaron su vida sexual, 94,3% manifestó tener conocimiento sobre la prevención del embarazo y su principal método de protección fue el preservativo con 82,9%, existiendo una relación significativa en las que tuvieron o no vida sexual con una p <0.05. Por otro lado, 54,3% desconocían al preservativo como método de prevención de ITS.
Es importante resaltar que la mayoría de los adolescentes tiene conocimientos sobre prevención del embarazo y menos de la mitad de ellos sobre las ITS, asumiendo que el preservativo previene el embarazo y poco sobre las ITS, situación que los hace vulnerables a las ITS, cuestión que merece ser investigada con mayor profundidad en el futuro a fin de valorar la presencia de otras variables que podrían distorsionar tal conocimiento.
La familia con adolescentes se ve tensionada y enfrentada a una serie de situaciones complejas; como resultado surgen familias disfuncionales, cuyos integrantes no solo viven perturbaciones de valores, sino tienen dificultad de asumir la autocrítica.
Las características del funcionamiento familiar, constituyen un factor predisponente en las conductas sexuales de riesgo en la adolescencia; es decir, las características positivas o negativas del funcionamiento familiar potencian o inhiben las autoevaluaciones positivas del adolescente en los distintos dominios de su vida (familia, escuela, sociabilidad y apariencia física), a su vez importantes predictores del inicio de la vida sexual de los adolescentes.
Entre los 71 adolescentes, 58% pertenece a familias extensas y ampliadas; en estas últimas, 66% de los adolescentes iniciaron la vida sexual. Este comportamiento se debe a que en este tipo de familias, los adolescentes reciben poca atención por sus progenitores o tutores, pues con frecuencia, el centro de atención son los nuevos integrantes (nietos).
Predominaron las familias con riesgo (moderadas y disfuncionales) 77 % de los adolescentes que inició su vida sexual pertenecían a estas familias. No resultó significativo en relación con el sexo e inicio de la vida sexual. (Tabla 3).
Es preocupante conocer que la mayoría de adolescentes que inició su vida sexual pertenezca a familias de riesgo, teniendo en cuenta que un porcentaje considerable de adolescentes viven con familiares (tíos, abuelos, hermanos, otros) quienes expresan no tener la “suficiente confianza y habilidades para hablar de temas relacionados con la sexualidad” y que “estos temas deber ser abordados por sus padres”. En este contexto, los padres o tutores han perdido autoridad y habilidades para el cuidado y desarrollo de sus hijos.
Los adolescentes, en su mayoría, no perciben buena comunicación, unión y adaptabilidad con sus padres o tutores. Por un lado, manifiestan sobreprotección y control excesivo que no permiten que el joven decida de forma independiente.
Estos resultados coinciden con lo señalado por algunos investigadores quienes informan que más de 50% de adolescentes que iniciaron su vida sexual se encuentran en las familias moderadamente funcionales y disfuncionales, quienes perciben poca comunicación y afecto por sus familias.15,16,17
Como mostramos en la Tabla 4 se identificó que existe asociación entre el funcionamiento familiar y las conductas sexuales relacionadas al no uso de preservativo, el tener varias parejas sexuales y otras (pareja ocasional en la primera relación sexual, el no uso de preservativo, consumo de alcohol en la última relación sexual). Estas conductas provocan que los adolescentes sean vulnerables a contraer infecciones de trasmisión sexual y embarazo no planificado; en la actualidad son indicadores alarmantes que vive el país y la comunidad de Yanayacu no queda exenta.
Los resultados de esta investigación tienen como limitación que el diseño del estudio fue transversal y que se realizó con adolescentes pertenecientes solo a la comunidad de Yanayacu.
Conclusiones
Los resultados indican que el sexo femenino tuvo mayor frecuencia de conductas sexuales de riesgo. Con respecto al conocimiento de la prevención del embarazo, la mayoría de los adolescentes consideró al preservativo como método de planificación, pocos lo conocían como prevención de las ITS. Existió predominio de familias extensas y ampliadas, la mayoría de adolescentes convivían con familias de riesgo. Se demostró asociación entre el funcionamiento familiar y las relacionadas con el no uso de preservativo.