Introducción
En la actualidad, el estrés laboral es uno de los principales problemas que producen la aparición temprana de síntomas musculoesqueléticos (SME); sin embargo, también están asociados a un trabajo repetitivo, posturas inadecuadas, manejo manual de materiales, el sedentarismo vinculado a la obesidad, la fatiga crónica etc.1,2
Según la declaración de la Organización Mundial de la Salud (OMS), los trastornos musculoesqueléticos (TME) se relacionan con el trabajo, cuando las condiciones laborales y actividades las inducen significativamente, y estos son el resultado de un deterioro progresivo por acumulación de microtraumatismos asociados principalmente a posturas forzadas y repetitivas.2
Los cirujanos dentistas están propensos a padecer de TME por las características de su trabajo, las posturas inadecuadas, asimétricas y estáticas, debido a que requieren de una alta concentración y atención.3
La ergonomía en Odontología es la encargada de organizar el trabajo de manera que el equipo de salud bucodental consiga el máximo rendimiento con el máximo confort y el mínimo esfuerzo físico y psicológico.4,5
Durante muchos años el enfoque de las investigaciones se ha centrado en identificar la prevalencia de los TME y la aplicación de la ergonomía en los cirujanos dentistas; sin embargo, las investigaciones no se adaptan a un contexto sociocultural en todos los países, debido a que en muchos de los países en Latinoamérica, las universidades no tienen cursos preclínicos y clínicos que fomenten una conciencia sobre la importancia de la ergonomía en Odontología, esto dificulta que se puedan comparar los resultados de una investigación con los realizados en países desarrollados, debido a que en estos últimos, se fomenta el desarrollo de cursos de ergonomía en su planificación universitaria, además de que los estudiantes en Odontología trabajan en las clínicas con un asistente dental, denominado trabajo a cuatro manos, esto reduce el tiempo y esfuerzo durante el trabajo.3,6,7
El conocimiento sobre las posturas ergonómicas y su práctica durante el trabajo clínico es fundamental, debido a que permite la prevención de la aparición temprana de síntomas musculoesqueléticos. La frecuencia de los problemas implica la necesidad de su prevención en cada tipo de trabajo.8,9
Por este motivo, el objetivo de la presente investigación fue determinar la relación entre las posturas de trabajo y la aparición temprana de síntomas musculoesqueléticos en los estudiantes de Odontología de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos.
Material y Métodos
Se realizó un estudio observacional, descriptivo y transversal. La población estuvo conformada por 354 estudiantes, entre 20 y 30 años, del décimo ciclo de la Facultad de Odontología de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM), que estaban realizando activamente la atención en la clínica de pregrado en el perÍodo académico 2016-I y II.
El cálculo de tamaño muestral se determinó con un nivel de confianza de 95 %, dio como resultado una muestra de 70 estudiantes; esta selección fue por el método aleatorio simple.
Criterios de selección
Los criterios de inclusión fueron estudiantes matriculados en el curso de Estomatología integrada que realizaron atención durante 40 horas semanales en la clínica de pregrado, además de haber realizado todas las actividades clínicas durante el año académico y haber aceptado voluntariamente su participación en el estudio. Los criterios de exclusión fueron estudiantes que hubieran sufrido algún accidente y que hubiesen presentado algún problema musculoesquelético que les haya impedido realizar sus actividades clínicas normalmente.
Técnicas e instrumentos
El primer instrumento utilizado fue la lista de verificación postural basada en el Balanced Home Operating Position (BHOP), que constaba de 10 ítems y fue validado en nuestro contexto latinoamericano por Bendezú.10
Se realizaron cuatro observaciones durante la atención odontológica para evitar que los estudiantes se percataran de la presencia del investigador.
El segundo instrumento fue el Cuestionario Nórdico de Kuorinka,11 el cual es utilizado en Europa y países asiáticos; sin embargo, en Latinoamérica no se tiene evidencia de su empleo, por ello fue validado por un juicio de expertos en el tema a nuestro contexto.
El investigador entregó el Cuestionario Nórdico de Kuorinka a cada uno de los participantes para que fueran resueltas en un tiempo promedio de 10 minutos, siempre con una supervisión constante del investigador para resolver cualquier duda al respecto.
Para el análisis de los resultados se empleó el paquete estadístico SPSS v 21.0; se elaboraron tablas de frecuencias, contingencia y gráficos de barras. La asociación de las posturas y la aparición temprana de SME fue evaluada por la prueba de Chi Cuadrado con un nivel de significancia de p<0,05.
Consideraciones bioéticas
El protocolo de estudio y el consentimiento informado estuvieron de acuerdo con las normas éticas de la Declaración de Helsinki.12
Resultados
Durante el desarrollo de la investigación todos los participantes (n=70) siguieron las indicaciones del estudio. El 42,6 % (n=31) fue del género masculino y 57,4 % (n=39), del género femenino.
Se encontró que del total de observaciones realizadas (n=2800), 77,1 % (n=2047) presentó posturas incorrectas. (Tabla 1).
El 65,7 % (n=46) de los estudiantes indicó que la zona que presentó mayor frecuencia de SME fue la zona dorsal/lumbar: mientras 62,9 % (n=44) de los estudiantes indicó que fue la zona del cuello. (Figura 1).
El tiempo de padecimiento de los SME que más predominó en el cuello, hombro, codo/antebrazo y muñeca/mano fue entre 6 meses y 1 año, mientras que en la zona dorsal/lumbar predominó un tiempo entre 1 y 2 años. (Figura 2).
El nivel de intensidad de los SME que predominó en las zonas del cuello (52,6 %), hombro (50 %) y muñeca/mano (40,9 %) fue el nivel moderado, mientras que en la zona dorsal/lumbar (43,9 %) predominó un nivel de intensidad fuerte (43,9 %). (Figura 3).
No se encontró relación estadísticamente significativa entre las posturas de trabajo y la aparición temprana de síntomas musculoesqueléticos en todas las zonas evaluadas; p>0,05. Asimismo, el género no evidenció ser un factor de riesgo para la aparición temprana de estos síntomas. (Tabla 2).
Discusión
La aparición temprana de SME relacionados con la postura en el trabajo es uno de los principales factores de riesgo para la salud ocupacional que afectan a los estudiantes de Odontología y cirujanos dentistas.
En el presente estudio no se encontró una asociación entre las posturas de trabajo y la aparición temprana de SME en los estudiantes de décimo ciclo de la Facultad de Odontología de la UNMSM; sin embargo, existe una mayor predisposición a presentarlos. Esto fue similar a lo encontrado por Bendezú, et al,10 quienes encontraron una correlación positiva (+0,494) entre la ejecución de posturas de trabajo y la percepción e intensidad de dolor postural según zona de respuesta evaluada (manos, antebrazos, zona dorsal, lumbar, cervical); sin embargo, no hubo diferencia significativa.
Hayes, et al,13 en un estudio longitudinal de 3 años evidenciaron que existe una relación directa significativa entre los TME y las posturas incorrectas en los estudiantes de Odontología. Además, mencionaron que esto se debió a que el nivel de conocimientos sobre ergonomía fue deficiente.
Valachi, et al,14 encontraron una asociación positiva entre la presencia del dolor y el tipo de postura específica como: torsión del tronco, movimientos laterales de los hombros, elevación de los codos, realizadas por un largo período de tiempo.
Con respecto a los tipos de postura, se halló que un alto porcentaje de los estudiantes realizó posturas incorrectas durante su atención clínica (77,1 %). Este resultado tiene similitud con el obtenido en el estudio realizado por Bendezú, et al,10 quienes encontraron que 77,7 % presentó posturas incorrectas, de acuerdo con la lista de verificación postural, basada en el Balanced Home Operating Position.
En este estudio no se halló una asociación significativa entre la percepción de los SME y el género. Por otro lado, Díaz-Caballero, et al,15) encontraron que las mujeres tienen una mayor predisposición a presentar SME (83 %) en comparación con los varones (74 %); p>0,05.
Con respecto a la intensidad de los SME, se demostró que para las zonas del cuello, hombro y muñeca/mano predominó la intensidad de tipo moderada, mientras que en la zona dorsal/lumbar predominó el tipo fuerte. Talledo, et al,16 evaluaron los TME relacionados con el trabajo en estudiantes de Odontología y encontraron que los participantes percibieron la mayor intensidad de dolor en la zona cervical (3,16 cm). Asimismo, Rising, et al,17 encontraron que más de 70 % de los estudiantes de Odontología experimentó dolor cervical, en hombros y espaldas en el tercer año de estudios universitarios.
Con respecto a la percepción de SME según zona corporal se halló que la zona de mayor respuesta a dichos síntomas fue la zona dorsal/lumbar (65,7 %), seguida por la del cuello (62,9 %); mientras que la zona del codo/antebrazo presentó el porcentaje más bajo (15,7 %). Asimismo, Khan, et al,18 encontraron que los TME fueron más frecuentes en el cuello (82 %) y la espalda baja con 64 % de los participantes. Hayes, et al.13 encontraron que 64,29 % presentó TME en la región cervical, seguido de 57,94 %, quienes refirieron dolor en la espalda baja. Además, refirieron que los estudiantes que no realizaron ejercicio regular experimentaron mayor riesgo de dolor lumbar (OR=4,88; 1,75-14,9). Por otro lado, Yaduka, et al.19 encontraron que las zonas de mayor prevalencia, según la literatura, son las zonas de cuello y la muñeca. Batool, et al,20 quienes estudiaron a 108 estudiantes de Odontología, encontraron que la espalda era la zona de mayor afectación durante el trabajo clínico (72,77 %).
El tiempo de padecimiento de los SME que más predominó para las zonas del cuello, hombro, codo/antebrazo y muñeca/mano fue entre 6 meses y 1 año, mientras que para la zona dorsal/lumbar predominó un tiempo entre 1 y 2 años.
Bedi, et al,21 mencionaron que los odontólogos son más vulnerables a los TME y es uno de los principales riesgos para la salud ocupacional, debido a sus largas horas de trabajo y el mantenimiento de las mismas posturas que causen patologías como tendinitis, sinovitis, tenosinovitis, síndrome de túnel carpiano y la bursitis. Además, encontraron que después de aplicar las medidas ergonómicas los SME se redujeron en la cervical de 47,8 % a 21,7 %, en el hombro de 39,1 % a 17,3 %, y en los codos de 26 % a 21,7 %; p<0,05.
Se recomienda que se instauren programas educativos desde el primer año de estudios en Odontología, que realicen promoción de la salud e intervenciones institucionales para reducir el riesgo de la aparición temprana de SME. Asimismo, realizar más investigaciones de tipo observacional a largo plazo, estudios tipo cohorte, exámenes físicos y evaluaciones periódicas para determinar que existe una correlación entre la aparición temprana de SME y las posturas no ergonómicas empleadas en Odontología.
En las limitaciones de la presente investigación está la ausencia de estudios más precisos para determinar el grado de contracción muscular (grado cinemático) que originan estos TME como la electromiografía dinámica de superficie, debido a que ofrece objetividad para observar si existe o no riesgo ergonómico.
Conclusiones
En la población estudiada no se encuentra una asociación significativa entre las posturas de trabajo y la aparición temprana de síntomas musculoesqueléticos en los estudiantes de Odontología; sin embargo, existe una predisposición a presentar este tipo de trastornos musculoesqueléticos en etapa temprana debido a la postura incorrecta empleada durante su trabajo clínico.