Introducción
Las competencias investigativas pueden determinarse a partir de “unidades”, momentos donde se lleva a cabo el proceso de investigación. Se encuentran como posibles unidades: integración de la información, descubrir problemas, trabajo en equipo, regulación del desempeño, disposición para manejar las incertidumbres, compromiso social y la formación en ética.1
Castro-Rodríguez2 define la competencia investigativa como el conjunto de conocimientos, destrezas y actitudes necesarias para lograr un desempeño efectivo en el proceso investigativo, para Velázquez y Mena,3 es un conjunto de habilidades metacognitivas, instrumentales, perceptuales y de construcción metodológica que desarrollan la actividad de investigación.
En las ciencias de la salud las competencias investigativas son un pilar fundamental en la formación del estudiante. Durante la labor asistencial primero se recoge información válida y valiosa (anamnesis y/o exámenes), los datos encontrados son analizados y se plantea una hipótesis (diagnóstico presuntivo), se identifican variables (factores asociados o causales), se planifican acciones para responder a una pregunta (estrategia terapéutica), se realiza el estudio y se obtienen nuevos datos (se trata y se sigue al paciente), se analizan los diversos datos y se acepta o se rechaza una hipótesis (se convalida o no el diagnóstico), finalmente se redacta un informe final (epicrisis).
En la educación médica existen intervenciones que se basan en la formación investigativa y que han mejorado estas competencias; las principales tendencias radican a través de los “programas de investigación de verano”,4,5,6,7 “programas de investigación con mentores (grupos de investigación)”,8) “redes para la excelencia investigativa biomédica”,9,10 “pasantías en investigación”,11 “prácticas basadas en evidencias”,12 “programas para formar ayudantes en investigación”,13,14 “método de proyectos”,15 y “voluntariados en investigación médica”.16
Pese a la existencia de estrategias que mejoran las competencias investigativas se cuenta con escasos instrumentos que hayan valorado sus dimensiones (planificación del proyecto, resolución de problemas, diseño metodológico, análisis de datos o información, manejo de técnicas, administración del tiempo, dominio de la literatura científica, etc.) La mayoría de las intervenciones basan sus resultados en la percepción del estudiante o en la valoración de la producción científica, no profundizan en los conocimientos, destrezas y actitudes respecto al proceso investigativo. Otros estudios consideran la valoración de diversas competencias sin hacer énfasis en las investigativas.17,18
Medir una competencia implica asignar valores (numerales) a características observables a través de instrumentos de medición. Los instrumentos que miden competencias tradicionalmente han sido las escalas, cuestionarios e inventarios; estos siguen un proceso riguroso de validación que permiten constatar que las mediciones se aproximan a la realidad. Monitorear y evaluar las competencias estudiantiles en un determinado contexto son fundamentales para valorar los procesos que se realizan dentro de una Facultad. Los instrumentos de medición deben desarrollarse para un propósito en un contexto determinado.19 En este sentido, los instrumentos que miden las competencias investigativas resultan útiles para analizar cómo las estrategias pedagógicas desarrollan habilidades, conocimientos y actitudes útiles para el proceso investigativo.
El presente artículo tiene como objetivo sintetizar la información más actualizada sobre los estudios que utilizaron instrumentos de medición que valoraron las competencias investigativas en estudiantes de las ciencias de la salud.
Los instrumentos recopilados permitirán conocer en qué contextos se han aplicado, qué dimensiones han sido valoradas y qué propiedades métricas han evidenciado; esto con la finalidad de que puedan ser replicados en otros estudios o puedan ser utilizados para mejorar sus propiedades de medición.
Material y Métodos
Para el presente estudio se utilizó la revisión de la literatura como una técnica que permite identificar, evaluar y sintetizar los conocimientos científicos, académicos y/o prácticos.
El protocolo seguido en la revisión incluyó como población de análisis a los artículos empíricos que diseñaron instrumentos de medición o valoraran las competencias investigativas en estudiantes de las ciencias de la salud (Medicina humana, Odontología, Psicología, Farmacia, Tecnologías médicas, Enfermería y Obstetricia). Las preguntas que orientaron la revisión fueron: ¿Qué instrumentos de medición existen? ¿En qué contextos se aplicaron tales instrumentos? ¿Qué propiedades métricas evidencian los instrumentos de medición?
La revisión utilizó los artículos de las bases de datos: MEDLINE (vía PubMed), Scopus, Google académico, ScienceDirect, Redalyc y SciELO desde los últimos diez años: 2009 (enero) hasta diciembre de 2019. La limitación temporal se realizó para buscar los artículos más actuales. Encontrados los artículos se complementó con una búsqueda a través de las referencias bibliográficas para detectar publicaciones que no fueron identificadas electrónicamente.
Las palabras clave seleccionadas fueron evaluadas a partir del tesauro del Medical Subject Headings (MeSH). El algoritmo de búsqueda en las bases de datos fue: (“Research Skills” OR “Research competence” OR “Research competencies” OR “Research experience” OR “Research learning” OR “Research capacity” OR “Investigative competences”) AND (“Development” OR “Developing” OR “Improve” OR “Improving” OR “Evaluation” OR “Increasing” OR “Assessment” OR “Training” OR “Measurement” OR “Develop”) AND (“Tools” OR “instruments”).
La selección de los artículos se basó en los siguientes criterios de inclusión: publicaciones en inglés o español, artículos de estudios originales (empíricos) que hayan evaluado las competencias investigativas en el nivel superior; publicaciones empíricas que hayan validado instrumentos de medición relacionados con las competencias investigativas. Se excluyeron estudios realizados en estudiantes de posgrado o docentes, publicaciones que no hayan medido alguna competencia investigativa, estudios que no presenten el instrumento de medición, publicaciones que no definan el instrumento utilizado en la medición.
Inicialmente fueron seleccionados todos los títulos, para después eliminar las publicaciones no relevantes; en la primera búsqueda se encontraron 2547 artículos. Durante una segunda etapa se utilizaron los filtros de cada base de datos seleccionando las opciones de “búsqueda por tiempo”, “excluir revisiones” y “búsqueda de artículos”, principalmente en las bases Scopus, PubMed y SciELO. Los artículos resultantes fueron analizados a través de sus resúmenes; el autor seleccionó de forma independiente todos los resúmenes. Luego se obtuvieron los artículos que cumplían los criterios de inclusión. Tras esta búsqueda, se analizaron los artículos relevantes y las referencias bibliográficas para añadir más artículos que cumplían con los criterios. (Figura).
Para el análisis de los datos se utilizaron tablas dinámicas de Excel; esto permitió organizar la información de acuerdo con las categorías diseñadas y descubrir subcategorías o propiedades. Los datos extraídos incluyeron: contexto de la definición (autor, año y lugar), objetivo del estudio, contexto de la evaluación (muestra de estudio, lugar), diseño de estudio, tipo de instrumento de medición, estructura y consideraciones del instrumento.
Resultados
La búsqueda encontró 14 artículos que cumplieron los criterios de inclusión, siete de los cuales fueron aplicados en estudiantes universitarios y los otros en egresados (graduados y docentes). La mayoría de los estudios se realizaron en el campo de la Enfermería.20,21,22,23,24,25
Tres artículos tuvieron un diseño de validación de instrumentos,20,22,26 un estudio tuvo un diseño cuasiexperimental25 mientras que los demás presentaron un diseño descriptivo transversal.
Cuatro artículos utilizaron instrumentos tomando como base a otros autores23,24,27,28 mientras que en el resto se utilizaron instrumentos elaborados por ellos mismos. Todos los instrumentos fueron escalas y presentaron categorías del tipo ordinal-Likert.
El instrumento más extenso presentó 64 ítems,24 mientras que el más escueto presentó 5 ítems.29 Las principales dimensiones en las que se agruparon los ítems incluyeron: búsqueda de información y comunicación científica,25 iniciativa personal, creatividad, autoconfianza, manejo del tiempo, enfoque en resultados, superación de retos, capacidad de adaptación, comunicación, relaciones interpersonales y trabajo en equipo,26 actitud sobre su formación investigativa: difusión del conocimiento, construcción del proyecto, lectura crítica, identificación y resolución de problemas.21
De los estudios encontrados, el instrumento “Nursing research questionnarie” fue creado en el estudio de Corchon et al., 201020) donde se plantean las dimensiones de: características sociodemográficas, conocimiento en investigación, interés por la investigación, limitantes para participar, autoevaluación de competencias, confianza para liderar una investigación y preferencias e intereses en el posgrado. Por su parte, el estudio de Mubuuke y Businge 201930 plantea las dimensiones de: autorreporte de competencias investigativas, participación en actividades investigativas y satisfacción con el entrenamiento investigativo recibido.
Múltiples estudios crearon sus instrumentos en forma de escalas (Likert), es así como Hueso-Montoro et al., 201625 plantean las dimensiones de búsqueda de información y comunicación científica; mientras que el estudio de Arias et al., 201926 plantea las dimensiones de: iniciativa personal, creatividad, autoconfianza, manejo del tiempo, enfoque en resultados, superación de retos, capacidad de adaptación, comunicación, relaciones interpersonales y trabajo en equipo.
Algunos estudios basaron sus instrumentos en otros ya creados y adaptaron nuevas dimensiones, Abubakar et al., 201824 crea una escala con 64 ítems sobre la base del estudio de Awaisu et al., 2015.31; en tanto que McHugh et al., 201627 crea una escala de 30 ítems de acuerdo con el “Health Service Executive” creado por Mc Hugh y Byme, 2014.32 Asimismo el estudio de Torres et al., 201723 crea una escala de 30 ítems a partir del instrumento creado por la Universidad de Memphis.33
Algunos estudios indican dimensiones relacionados con las actitudes investigativas y las etapas del método científico. Ochoa-Vigo et al., 201621) crean una escala de 22 ítems con las dimensiones de: actitud sobre su formación investigativa, difusión del conocimiento, construcción del proyecto, buscar información y lectura crítica, identificar y resolver problemas. Gonzalez et al., 201728 plantean preguntas relacionadas al: planteamiento del problema, elaboración del marco teórico, búsqueda de la información, tipo de investigación y diseño, muestreo, recolección y análisis de datos e informe investigativo/publicación, también, se encontraron estudios que no indicaban sus dimensiones.34,35 Cabe indicar que se encontró un estudio peruano que plantea una escala de 7 ítems con las dimensiones de: interés por la investigación y los conocimientos y prácticas relacionadas a la investigación.36
Discusión
El trabajo asistencial en las ciencias de la salud no solo requiere competencias clínicas para la prevención, diagnóstico y tratamiento de las enfermedades; sino que también demanda habilidades para el manejo de las relaciones interpersonales (ya sean con el paciente, familiar u otros profesionales) y habilidades que le permitan indagar y ser crítico con la evidencia científica que respalde un tratamiento.37 Se incluyen dentro de estas competencias a la gestión de la información y la capacidad de comunicar la ciencia. En este sentido un profesional competente clínica y científicamente facilita la toma de decisiones y produce estudios que permitan un avance en un determinado campo.
Los estudiantes con mejores competencias investigativas evidencian una mejor transición a la etapa del posgrado, así como los alienta a identificar problemas y diseñar soluciones apropiadas a través de la investigación en sus prácticas laborales rutinarias.38 Formar competencias investigativas en estudiantes es producto de la investigación formativa como estrategia didáctica; la valoración de tal formación a través de listas de cotejo, rúbricas e instrumentos de medición son parte del proceso de evaluación de la Educación Superior.39
En las ciencias de la salud existe una limitada cantidad de investigadores por lo que la formación de competencias investigativas desde el pregrado es una de las estrategias para abordar tal limitación.40,41
La participación de estudiantes en actividades de investigación permite seguir desarrollando mayor interés por la investigación incluso después de haberse graduado.42,43 Pese al potencial que se tiene por aumentar el interés de los estudiantes para participar en la investigación, existe poca información sobre las competencias investigativas autoinformadas por parte de estudiantes o medidas en ellos. En el presente estudio se encontró poca información sobre instrumentos que midieran las competencias investigativas, de los 14 artículos incluidos tres presentaron un proceso de validación completo mientras que el resto mostró instrumentos construidos por los investigadores sin reportar información sobre su construcción y sus propiedades.
Las prácticas investigativas han sido estudiadas principalmente desde la mirada de las “barreras” para hacer investigación y las “actitudes” hacia el proceso investigativo. Existen instrumentos útiles para estos motivos tales como los estudios de Hicks,44 Bjorkstrom y Hamrin;45 Funk et al.,46 Parahoo y McCaughan.47 Sin embargo, la mayoría de ellos adolecen de un modelo teórico45 o no presentan el proceso de validación del instrumento.48 En ese sentido es interesante analizar otros instrumentos que evalúen las competencias investigativas que desarrolla un estudiante y en qué contextos han sido aplicados para su replicabilidad.
De los instrumentos analizados, el “Nursing research questionnarie” (NRQ)20 presentó el proceso de validación más completo y confiable desde su construcción; fue concebido para medir la cultura de investigación en Enfermería teniendo en cuenta tres conceptos principales: capacidad de investigación, actividad relacionada con la investigación y los factores que influyen en el desarrollo de la investigación. Una característica a destacar del NRQ, en comparación con otros instrumentos similares encontrados en la literatura,47,49 es que ofrece la posibilidad de estudiar los factores que influyen en la investigación desde una perspectiva positiva, mirando a los facilitadores junto con las barreras.
Los instrumentos de medición deben probarse en diferentes contextos (universidades, hospitales, centros laborales, etc.), deben ser traducidos al contexto en que se aplican (español, inglés, etc.), y considerar los participantes que serán evaluados (estudiantes, graduados, profesionales). En ese sentido muchos de los instrumentos evaluados requieren múltiples pruebas para analizar con mayor detenimiento sus propiedades métricas (mejorar la validez y confiabilidad de la herramienta y su relevancia para otros contextos). También deben usarse con muestras más grandes y en más estudios porque, aunque algunos de los resultados del trabajo piloto son prometedores, la evaluación psicométrica de una herramienta es un proceso acumulativo y continuo que podría durar todo el tiempo que se use el instrumento.50,51
Aunque muchos de los instrumentos valorados en el presente estudio reportan información de forma “autoinformada”, debe considerarse que este autoinforme/autopercepción a veces puede dar lugar a un sesgo cognitivo en el que los encuestados sobreestiman su competencia debido a la superioridad ilusoria. Por otra parte, los instrumentos de medición muchas veces no recogen algunos aspectos cualitativos como opiniones o experiencias por lo que es recomendable complementarlos con estudios exploratorios que busquen competencias investigativas. Los instrumentos evaluados en el presente estudio pueden aplicarse de forma longitudinal, luego de intervenciones educativas y ser valorados en un contexto universitario y contexto pos universitario (laboral/profesional).
Las informaciones provenientes de estas fuentes de evaluación precisan de la elaboración de constructos psicométricamente robustos, los cuales demuestren su validez y consistencia, e incrementen la credibilidad de los resultados entre los evaluadores.50 No obstante, son pocos los trabajos publicados sobre las propiedades psicométricas de los constructos y rúbricas empleadas en investigaciones de este tipo.51,52
La escala propuesta por Qiu et al.,22 reflejó elevados valores de consistencia interna, similares a los ya propuestos por Gething et al.,53 con una mejor consistencia interna que las Escalas de calificación de autoevaluación de capacidad de investigación desarrolladas por Pan y Chen.54 Aunque la escala de Qiu et al.22 fue unidimensional, las competencias investigativas pueden agruparse en dimensiones como: como aprendizaje teórico, recuperación de literatura, recopilación de datos, análisis de datos, redacción de artículos, etc.
También es recomendable que aquellos estudios que valoraron las propiedades psicométricas internas se complementen con propiedades externas tales como la validez de criterio, validez predictiva y el rendimiento del instrumento. Las aproximaciones cualitativas podrían aumentar el número de ítems y dimensiones no consideradas en un inicio. Aunque tres estudios presentaron validación de un instrumento de medición de las competencias investigativas, estos no se encuentran en español, a excepción del que se menciona por el Grupo de Investigación Historia, Enseñanza y Profesionalización de la Psicología en el Cono Sur.28
Conclusiones
El desarrollo de competencias investigativas resulta importante para el sector universitario y profesional; la revisión encontró pocos estudios que valoraron las competencias investigativas a través de instrumentos de medición. Tres estudios presentaron las propiedades métricas de los instrumentos por lo que podrían ser replicados y/o traducidos para su aplicación en distintos contextos de las ciencias de la salud.