Introducción
La transmisión de conocimientos ha sido una preocupación constante de la Humanidad. Desde la oralidad, la palabra escrita, la enseñanza ha sido imprescindible para garantizar la preparación de las nuevas generaciones. Por muchas décadas, la enseñanza tradicional, con la figura del profesor como proveedor y portador por excelencia de saberes, normas, valores, frente una masa de pasivos estudiantes, receptores distantes de determinada materia, sentencio los resultados de un proceso inevitablemente dialectico y colectivo. Las nuevas y revolucionarias condiciones de la vida política, social, económica y tecnocientífica de las últimas décadas, con la masificación del acceso a las tecnologías de punta, han dejado a la enseñanza tradicional desmantelada: no es posible continuar intercambiando en el aula pretendiendo que los estudiantes son sujetos pasivos de conocimiento, cuando su acceso a las áreas de conocimiento se han hecho cada vez más frecuentes y profundas. Como nuevo método de intercambio se inicia la implantación de un tipo de enseñanza que se centra en el estudiante, durante el proceso de enseñanza, los modos en que este interactúa con el conocimiento, potenciando la apropiación creativa y la formación de saberes válidos a partir de sus propias experiencias, donde no queda cabida a la reproducción típica del aprendizaje tradicional, con frecuencia superficial.
Este estudio expone algunas de las generalidades y aspectos teóricos más relevantes en la enseñanza problémica, pasando a la presentación de algunas de las experiencias que los profesores han incorporado a la actividad docente en el caso de la asignatura Teoría Sociopolítica, materia del tronco común dentro del Sistema de Educación Superior en Cuba, imprescindible para el cumplimiento de los objetivos de la Nueva Universidad, que aplica hoy en Cuba el Plan E de Estudios, actualizando el Proceso Docente Educativo, encaminado a la formación de los profesionales comprometidos y capaces que demanda nuestro país.
Desarrollo
El vertiginoso desarrollo de las condiciones económicas, sociales, políticas de las últimas décadas han transformado por completo el escenario en que ha de desarrollarse la Educación Superior en la práctica de una sociedad de cualquiera; si aspira a mantenerse a la altura de los requerimientos del entorno laboral altamente competitivo que la rodea, y al que, está cada vez más comprometida a entregar profesionales capaces y poseedores de no pocas competencias. De allí que resultan en esta coyuntura ya obsoletos algunos de los métodos con que, hasta hace relativamente poco tiempo, eran preparados los profesionales que interactuaban con la realidad social. Se demanda entonces encontrar nuevos métodos de enseñanza en los que la posición de los estudiantes diera un cambio radical: pasando de una posición meramente de oyentes y totalmente pasiva a tener una participación activa y de liderazgo de su propio proceso de asimilación y construcción de nuevos conocimientos, sin perder la figura del profesor como guía certera de estos procesos. De este modo, se ha erigido la enseñanza problémica, como un punto de inflexión para las Ciencias de la Educación, como una de las vías más eficaces para lograr un aprendizaje desarrollador, creativo y provechoso en los estudiantes y profesores, para los que se ha convertido, sin lugar a dudas, unos de los principales retos de los últimos años, en medio de lo que es hoy un reclamo de un entorno social urgido por un firme desarrollo de las ciencia y la tecnología; teniendo en cuenta que, el papel de la Universidad de hoy debe ser garante del perfeccionamiento constante de los estilos y formas de aprendizaje, en función de cumplir con las exigencias sociales a las que se debe, al quedar constatado que el aprendizaje y la enseñanza tradicionales son totalmente incompatibles con la realidad de la que somos partes.
Resulta entonces válido recoger algunos de los principales postulados teóricos sobre los que se han basado nuestra práctica diaria y el cúmulo de experiencias alcanzadas, teniendo este conocimiento de la enseñanza problémica como herramienta fundamental, para el cumplimiento de los objetivos de la Nueva Universidad, que en Cuba implementa el Plan E de Estudios, a tenor de las modificaciones necesarias en el sistema educacional cubano.
Muchos estudios refieren que, en el proceso de enseñanza problémica se plantea el objetivo de aproximar la metodología de la enseñanza a los requerimientos de la época, donde el rol del profesor no es el de mero comunicador de conocimientos de forma acabada y absoluta, sino sustancialmente dinámica y dialéctica, todo un agente de cambios. En este caso, su deber es el orientar a los estudiantes, tareas que les interesen que, necesariamente los lleven a buscar vías, formas, medios novedosos y autogestionados para dar solución a la tarea encomendada, lo que favorece no sólo la adquisición de nuevos conocimientos, sino de métodos de acción, de investigación esenciales superiores a los que contaba. "Por eso sostenemos que la educación del futuro deberá desarrollar la inteligencia de las personas no sólo desde el punto de vista de los conocimientos útiles, sino, y esto es fundamental, de las habilidades intelectuales y técnicas con miras a la resolución de problemas y a la toma de decisiones, siempre teniendo en cuenta que la sociedad contemporánea es, ante todo, cambiante, innovadora y creativa en razón del inusitado avance de la ciencia y la tecnología”. (Ramírez, 1986)
No es que esta perspectiva, centrada principalmente en el estudiante excluya los valores y las herramientas valiosas del conocimiento tradicional, sino que retoma sus principios didácticos fundamentales. Su particularidad radica en que debe garantizar una nueva relación de la asimilación reproductiva de los nuevos conocimientos con la creadora a fin de reforzar la actividad del estudiante. Para ello, es imprescindible que los docentes sean capaces de organizar y propiciar situaciones que favorezcan el aprendizaje desarrollador de los contenidos que se imparten, de un modo progresivo, valiéndose de estrategias que tengan en cuenta las características de los estudiantes a los que se dirigen, con el fin de lograr una asimilación similar en el auditorio, haciendo protagonistas del proceso de aprendizaje a los propios estudiantes, por medio de métodos de elaboración conjunta de determinado saber, aprovechando los elementos que puedan resultar más llamativos para los educandos. Todo esto implica el cambio hacia el nuevo paradigma, que requiere elevar el arsenal cognoscitivo, cultural y metodológico de los profesores, haciendo mayor énfasis en algo más que la simple asimilación de conocimientos por parte de los estudiantes, que ya en este caso deben ser capaces de darle respuesta a problemas con sus propias herramientas, ya sea individualmente o por medio del trabajo en equipo.
Es preciso entonces señalar los principios fundamentales de la enseñanza problémica:
La relación del contenido de la ciencia con su método de enseñanza.
El establecimiento de la unidad de la lógica de la ciencia con la lógica del proceso docente.
La consideración del nivel de desarrollo de las habilidades de los estudiantes. (Martínez, 1995)
De esto se desprende otra de las cuestiones esenciales de la enseñanza problémica, que tiene que ver con los modos con los que se estimula el desarrollo de un conocimiento creador en los estudiantes, que se basa fundamentalmente en la orientación de tareas como principales promotoras de contradicciones que propicien la búsqueda de alternativas por el estudiante que tienen como fruto un nuevo conocimiento, que debe compatibilizar con el que posee con anterioridad, nacido de la propia necesidad del estudiante de darle solución a la tarea orientada en el aula. No puede olvidarse que las contradicciones surgidas en el proceso de enseñanza - aprendizaje fungen como las fuerzas motrices del conocimiento creativo en los estudiantes; estas van desde lo que expone el profesor en clases, lo que asimilan de eso los educandos, hasta las habilidades de estos para aplicar en la práctica los conocimientos teóricos aprehendidos en clases. Para que estas contradicciones logren impulsar el conocimiento problémico, deben ser interiorizadas por los estudiantes, quienes deben sentir la necesidad de superarlas, estando siempre acordes a las posibilidades cognoscitivas de los aprendices, lo que ha de exigir de ellos, en todo momento, acciones determinadas dirigidas a obtener un nuevo conocimiento o aplicar uno que ya tenía , pero sobre una situación completamente novedosa, que les sirva para dar solución al problema que se le presenta como parte de la tarea orientada.
De este modo puede constatarse que es este " un tipo especial de enseñanza cuya esencia consiste en que la asimilación de los conocimientos puede darse no sólo mediante el recuerdo del material docente (reglas, leyes, teorías) sino mediante su elaboración lógica por los propios estudiantes, o sea, en el proceso de actividad independiente. Tal actividad desarrolla no sólo la memoria sino las capacidades de pensamiento del estudiante, lo enseña a pensar" (Majmutov, 1972). Con la asimilación de conocimientos, bajo el esquema problémico, se tiene como resultado el consecuente aprendizaje, el que debe entenderse como una actividad en la que los sujetos son capaces de cambiar, modificar su conducta, de modo que los conocimientos adquiridos lo conduzcan a nuevas y mejores formas de comportamiento.
Bajo el método de enseñanza problémica, el aprendizaje puede realizarse de varias maneras, en dependencia de las características del grupo de estudiantes con el que interactúa el profesor, la situación social que rodea esta actividad, entre otras variables que pueden tener incidencias significativas en este proceso. El aprendizaje cooperativo es uno de los más difundidos y con mejores resultados en la práctica, por la gama de posibilidades que les brinda tanto a estudiantes como el propio maestro. Este trabajo cooperado tiene como premisa fundamental el trabajo en equipo, viendo a este como un todo en que cada componente aporta elementos imprescindibles para el correcto funcionamiento de la unidad. En este caso, son los estudiantes los encargados de transmitirle de manera clara al resto de sus compañeros los conocimientos que todos deben defender y compartir, por medio del empleo de ejemplos cercanos, sin perder de vista la responsabilidad contraída por cada uno de los miembros del equipo, que cuenta con un líder definido para organizar el trabajo del conjunto. Es responsabilidad del profesor en ese caso vigilar por el cumplimiento de los objetivos de la actividad, así como la garantía de que cada integrante tiene una tarea bien definida a realizar y por la que le será evaluada su participación individual e incidirá en la calificación que obtenga el equipo.
Esta metodología permite, además de fomentar el aprendizaje cooperativo, sobre la base de la enseñanza problémica, rescatar valores y normas que por el contexto en que se desarrolla la actividad son importantes y que definitivamente contribuyen al componente formativo del estudiante y se presenta como una excelente oportunidad de retroalimentación del profesor con sus educandos y entre sus propios compañeros de otros equipos compartiendo experiencias y socializando los conocimientos adquiridos durante la actividad docente. Se ha podido comprobar que al aplicar los métodos problémicos, los conocimientos obtenidos no son superficiales y que los estudiantes se forman una relación cognoscitiva adecuada de cada objeto de estudio y de la actividad en general, además de asimilar la técnica de trabajo independiente de forma más eficaz. Es importante para ello, la vinculación con los problemas cotidianos de la vida y de las ciencias en particular (Martínez, 1995).
Por tanto, la enseñanza problémica se define como el momento inicial del pensamiento, que se encuentra o se crea, para el cual el estudiante no tiene respuesta a la interrogante formulada, pero siente que puede y debe hacerlo. Esta se presenta de distintas maneras:
Comparación entre dos objetos, fenómenos o procesos que puedan generar dos o más opciones.
Situación cuyo contenido está basado en dos puntos de vista opuestos, pero parcialmente aceptables o verídicos que dependen de sus contrarios, se complementan.
Situaciones en las que se manejan dos criterios opuestos sobre un tema, de los cuales el acertado es aparentemente erróneo.
Situaciones basadas en relaciones causa-efecto, en las que la causa puede transformarse en efecto y viceversa.
La puesta en práctica de los contenidos asimilados constituye uno de los mayores retos a los que se enfrenta el educando como parte del proceso de enseñanza - aprendizaje. Proceso que continúa fuera de la comunidad universitaria en áreas múltiples del saber. El urgente reclamo social al que se debe la Enseñanza en todos los niveles, llama hoy a elevar el rigor y la profundidad de los conocimientos como elementos imprescindibles para formar los profesionales que la realidad socioeconómica y la coyuntura política actual reclaman. Esto ha revolucionado los procedimientos teórico - prácticos dispuestos por la enseñanza tradicional, al transformar los modos de actuación de profesores, bajo las nuevas condiciones de su entorno.
Los profesores universitarios en la actualidad proceden de diversas ramas del conocimiento, con escasa formación pedagógica, y por lo general, inexpertos en la aplicación del método problémico. De allí, que resulte imprescindible aprehender estas competencias por medio de cursos postgrados, que brinden herramientas efectivas para la puesta en práctica de este método docente. La realidad en las aulas supera cualquier delirio de ciencia y ficción, si se tiene en cuenta que los adelantos científico - tecnológicos, a disposición de los estudiantes despoja al conocimiento como patrimonio exclusivo del profesor.
Con respecto a los métodos, estos constituyen las etapas del proceso de actividad creadora que se desarrolla de forma gradual. Entre los más conocidos se encuentran: La exposición problémica, el método de búsqueda parcial, la conversación heurística y el método investigativo. La práctica muestra que el proceso de la enseñanza problémica genera diferentes niveles tanto de las dificultades intelectuales de los estudiantes como de su activación cognoscitiva. La enseñanza problémica estimula y posibilita el desarrollo del pensamiento crítico, creativo y productivo del estudiante. Estas pueden materializarse en las distintas formas de organización del proceso pedagógico; no obstante, la primera modalidad se encuentra con mayor frecuencia en la clase, donde se observa la solución individual o por grupos, de problemas. La segunda se encuentra en las actividades prácticas y de laboratorio durante la clase y, la tercera modalidad en las clases y en las actividades extraclases.
Las modalidades presencial y semipresencial de estudios, destierran en su concepción la emisión unilateral, autoritaria y preponderante del profesor de un determinado conocimiento. Las clases, como espacio ideal para desarrollar las habilidades y competencias de los educandos a partir del sistema de conocimientos y actividades docentes, orientadas por el profesor. Basada en las potencialidades que desarrolla el estudiante, quien juega el rol principal desde el punto de vista didáctico en el Plan de Estudios E.
El trabajo en la modalidad Curso por Encuentros se basa, en lo instructivo en aclarar las dudas que surjan a partir del estudio independiente, debatir y ejercitar, evaluar su cumplimiento, orientar los objetivos y aspectos del nuevo contenido, lo que requiere un esforzado estudio independiente por parte de los estudiantes, lo que los pone de cara a la resolución de problemas, basándose en los conocimientos adquiridos previamente y los que han de adquirir para darle solución a las tareas encomendadas por nuestra parte, quiere decir esto que en nuestro caso potenciamos el estudio independiente como principal vía para la asimilación de nuevos conocimientos, lo que nos exige hacer énfasis en la aclaración de las dudas como modo de salvar las lagunas de conocimientos que puedan surgir durante es estudio individual.
La clase encuentro, posee bondades para desarrollar la enseñanza problémica pues permite el desarrollo de análisis colectivos y el trabajo en equipo, como elementos por medio del cual se introduce el aprendizaje cooperativo y colaborativo, potenciando las relaciones de los estudiantes, el desarrollo de sus habilidades sociales y valores personales, lo que facilita a los profesores el control y la evaluación de la actividades de cada estudiante, teniendo en cuenta sus características personológicas, entre otros elementos.
Desde el punto de vista didáctico, el trabajo con los objetivos de la clase se garantiza que los estudiantes conozcan qué es lo que se quiere lograr de ellos a través del estudio, de manera activa y consciente. La experiencia para implementar la enseñanza problémica se ha enfocado en la orientación de trabajos independientes, principalmente por medio de la realización de tareas, de la exposición de valoraciones críticas al respecto de determinado tema de estudio, e incluso la preparación de pequeñas ponencias para ser expuestas frente al resto del grupo. En todos los casos se busca lograr en los estudiantes la realización de análisis integrales sobre fenómenos socioculturales, en los que ellos sean capaces de establecer relaciones con anteriores contenidos, basados esencialmente el paso de la abstracción a la generalización de determinado concepto o hecho de estudio.
La asignatura Teoría Sociopolítica, forma parte de la Disciplina Marxismo-Leninismo, de significativa importancia en la formación cosmovisiva y político-ideológica del profesional comprometido con el proyecto social cubano. Desarrolla aspectos teóricos y metodológicos que permiten estudiar, explicar y propiciar las acciones transformadoras que caracterizan al egresado de la Educación Superior. La asignatura, por su construcción rigurosa, novedosa y creativa, ha ido alcanzando también mayor aceptación por parte de los estudiantes y las comisiones nacionales de las diferentes carreras universitarias.
Teoría Sociopolítica, tal y como es comprendida en la actualidad estudia, partiendo de un enfoque marxista y tercermundista, los elementos teóricos fundamentales de los procesos políticos contemporáneos, de las relaciones políticas internacionales, de las principales corrientes políticas actuales, entre las cuales se le dedica un espacio priorizado a la transición política al socialismo, en especial al sistema político cubano.
En las condiciones actuales del mundo y, concretamente de nuestro país, consideramos que la asignatura tiene un valor teórico y práctico no sólo porque satisface demandas de los perfiles profesionales, sino también porque contribuye, en estrecho vínculo con otras asignaturas de la disciplina y con otras disciplinas de los planes de estudio, a la materialización del proyecto integral de trabajo educativo de los diferentes años y carreras y a la formación cultural integral de los futuros egresados (Álvarez, 1988; Colectivo de autores, 1996; Díaz Pendás, 2002; Duharte Díaz, 2008).
Debido a la convocatoria realizada por la Primera Conferencia Nacional del Partido Comunista de Cuba (PCC) en el año 2011 de actualizar la enseñanza del Marxismo Leninismo y adecuarla a las necesidades de la actualidad cubana, se incorporó la enseñanza problémica al análisis del tema Sistema Político cubano. Por tanto, sus contenidos contribuyen a la formación de actores claves en el perfeccionamiento del Sistema Político cubano, desde las actividades evaluativas correspondientes a trabajos de curso, evaluación de la práctica laboral y de culminación de estudios, atendiendo a la complejidad progresiva prevista en los objetivos de años y la carrera. A partir de la propuesta de los documentos rectores de la política económica y social del país y los objetivos a los que se tributa para la formación integral del profesional en formación.
El examen referido al sistema político cubano constituye espacio ideal para la metodología de la enseñanza problémica, precisamente porque los sujetos del proceso docente participan directamente como actores políticos dentro del proyecto socialista, para construir una alternativa diferente al capitalismo, lo que lo hace más complejo, pero a la vez más creativo e interesante. Este tema, al igual que el referido al socialismo, es uno de los más amplios y generadores de pensamiento reflexivo y crítico del programa por conjugar de un modo relevante y atractivo las perspectivas teóricas y la práctica cotidiana.
Conclusiones
La enseñanza problémica permite el desarrollo de tres componentes esenciales en los planes de estudios: el componente académico, que garantiza la adquisición por parte de los estudiantes de los contenidos básicos. El componente laboral que incluye las habilidades propias del ejercicio de la profesión y se desarrolla a través de la resolución de problemas propios de la especialidad, y el componente investigativo que introduce al estudiante en la investigación científica. La pedagogía problémica constituye una propuesta de enseñanza acorde con las tendencias contemporáneas de la educación superior. Esta metodología promueve el papel protagónico del estudiante como un sujeto activo, constructor de su aprendizaje, capaz de asumir un compromiso con los procesos docentes investigativos.