INTRODUCCIÓN
El proceso de capacitación de los profesores universitarios que se desempeñan en el campo de la salud asume características particulares, ya que deben prepararse no solo en el área del conocimiento de su profesión, sino también desde el punto de vista docente para poder adaptarse a las nuevas tendencias en el campo de la educación superior. Al respecto se requiere preparación académica, pedagógica, ética y político-humanista, aspectos incluidos en sus evaluaciones.
Las obligaciones familiares y laborales limitan el tiempo que estos docentes dedican al estudio. Resulta difícil acoplar estas necesidades en medio de un clima organizacional complejo y la presión asistencial que caracteriza a las instituciones de salud en general, y en particular al Hospital Clínico Quirúrgico “Hermanos Ameijeiras”. Por lo tanto, para asumir esas responsabilidades y además continuar el proceso de capacitación permanente, el profesional activo debe optar con frecuencia por la modalidad de educación a distancia.1,2
Las ventajas de la educación a distancia para garantizar la adquisición de conocimientos dentro y fuera del ámbito universitario son bien conocidas y constituyen una buena alternativa en el contexto actual, donde la sobrecarga laboral y las complejidades de la vida moderna dificultan el acceso presencial a las aulas tradicionales.1,2,3 En este sentido, las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC) se constituyen en elemento básico que permite el logro de estos objetivos;1,2,3,4 sin embargo, su aplicación aún es un reto. Ya adentrado en el siglo XXI, el adulto de estos tiempos puede considerarse todavía un “inmigrante digital” que debe acoplarse a la generación propia de nativos digitales; para ellos la adquisición de habilidades en el entorno virtual requiere tiempo y esfuerzos adicionales.5,6
En el curso académico 2015-2016 se desarrolló un curso dirigido a los profesores de la Universidad de Ciencias Médicas de la Habana cuya temática central fue la formación de valores. En el centro de posgrado “Hermanos Ameijeiras” este curso, dirigido a un claustro de más de 250 profesores, se realizó de forma semipresencial. El objetivo de esta investigación fue mostrar sus opiniones sobre esta novedosa experiencia en la institución.
MÉTODOS
Se realizó un estudio observacional sobre la aplicación de la educación a distancia en el curso dirigido a los docentes del centro de posgrado “Hermanos Ameijeiras”, desarrollado desde diciembre 2015 hasta marzo de 2016. En esta edición semipresencial participaron 258 profesores, los cuales constituyeron el 72,4 % del total de docentes del claustro que imparte educación de posgrado de 36 especialidades médicas; la muestra quedó constituida por las primeras encuestas respondidas por 50 de ellos.
En su diseño se utilizó la plataforma gratuita para el desarrollo de este tipo de instrumento, disponible en el sitio Survey Monkey: www.es.surveymonkey.com y a la cual los participantes pudieron acceder una vez concluido el curso. Dicha plataforma envía una alerta por correo electrónico a los investigadores cada vez que una encuesta es completada y entregada, eso permitió identificar e incluir las primeras 50 con todos los ítems respondidos, las que conformaron la muestra.
Los métodos teóricos empleados fueron:
Análisis-síntesis e inducción-deducción: facilitaron el proceso de búsqueda, selección y apreciación crítica de la literatura nacional e internacional sobre educación a distancia, el estudio de los documentos vigentes que norman el posgrado y la didáctica de la educación superior así como la confección de la encuesta en forma de cuestionario. Resultaron indispensables para acometer el acto de planeación del curso a distancia, en particular la definición de los objetivos y su interrelación con los demás elementos del proceso docente educativo, así como su presentación en el aula virtual correspondiente a la universidad virtual del centro de posgrado “Hermanos Ameijeiras”.
A manera de pilotaje, se realizó una primera edición del curso, en pequeña escala, entre los meses de septiembre a diciembre de 2015. Los profesores seleccionados para participar en esta prueba fueron todos los que matricularon en la edición del curso Pedagogía Básica para la Educación Superior (25 en total), que se imparte con carácter anual a los docentes con categorías de instructor y asistente. Ellos evaluaron de excelente la modalidad a distancia empleada para su desarrollo. Tras esta experiencia positiva, la siguiente edición a gran escala, fue dirigida al resto de los docentes del centro.
Previamente, se desarrolló un taller preparatorio para los profesores que, por cada especialidad, asumieron el rol de tutores (46 en total). En dicho taller, según tuvieran o no experiencia anterior, los tutores fueron iniciados o entrenados en la tarea a desempeñar en el entorno virtual. La autora principal de este estudio habilitó una consulta docente para resolver los problemas que dificultaran el trabajo independiente en esta modalidad de la educación a distancia.
Como en la edición piloto, el curso fue diseñado en el aula virtual de la página web de la institución, sobre plataforma Moodle 2.5. En este espacio se habilitaron recursos informativos, literatura básica y complementaria y guías orientadoras por temas; como recursos evaluativos se desarrollaron cuestionarios y actividades interactivas (foros abiertos y foros de preguntas y respuestas) que evidenciaron la factibilidad del intercambio y sus potencialidades. Los matriculados en el aula virtual fueron organizados por grupos, en correspondencia con la especialidad y con su tutor designado. Las actividades evaluativas diseñadas permitieron tanto la evaluación individual como grupal. El periodo lectivo fue flexible y los tiempos de duración entre temas fueron extendidos convenientemente para poder resolver las dificultades tecnológicas y de aprendizaje que surgieran durante su desarrollo.
El curso concluyó con un taller presencial que sirvió para intercambiar ideas y experiencias, reflexionar, debatir sobre el tema e integrar conocimientos. Este taller siguió un patrón uniforme en todos los grupos, de acuerdo con una guía que fue previamente elaborada. Se orientó el empleo de técnicas grupales para facilitar su ejecución y las conclusiones fueron recogidas en un modelo de informe final. El taller fue evaluado por el tutor responsable y por sus participantes (autoevaluación y coevaluación).
Como método empírico, se solicitó a los participantes que respondieran un cuestionario de forma anónima donde plasmaran su opinión. Incluyó aspectos generales y específicos para evaluar elementos vinculados al proceso docente educativo y los tecnológicos; por último, se solicitó su apreciación sobre la posibilidad de recomendar la modalidad a distancia en actividades futuras. Los aspectos relacionados con el proceso docente educativo fueron calificados según una escala de 0 a 10 puntos.
Los datos resultantes de la encuesta se incluyeron en una base de datos y fueron procesados mediante el empleo de medidas de tendencia central (promedio, mínimo y máximo) y análisis porcentual.
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Las primeras 50 encuestas recibidas correspondieron al 19,4 % del total realizado. El promedio de edad de los encuestados fue de 63,1 años (máximo 72, mínimo 33). Según la categoría docente, profesores se declararon como titulares, 16 auxiliares, 20 asistentes y 7 instructores. El 62 % de los participantes, o sea 31, negaron tener experiencia previa en el entorno virtual.
Se exploró la opinión de los docentes sobre aspectos del proceso docente educativo, presentes en el curso recibido:
Elemento evaluado/Puntos otorgados (promedio)
Cumplimiento de objetivos 9,58
La motivación para la reflexión 9,54
Calidad de los instrumentos evaluativos 9,66
Posibilidad para debate e intercambio 8,60
Calidad de los recursos utilizados en el aprendizaje 9,20
Motivación para la actividad independiente 9,00
Tiempo disponible para la realización de las actividades 7,52
Beneficios recibidos en cuanto al aporte de conocimiento 9,00
Numerosos encuestados (24/50, 48 %) refirieron presentar dificultades que influyeron en su desempeño durante el curso: problemas de conexión, 14; no poseer computadora, 3; insuficientes conocimientos para interactuar en el entorno virtual, 4; 3 no declararon cuáles fueron sus dificultades.
Al indagar la posibilidad de solucionar las dificultades confrontadas, 6 de ellos aquejaron no encontrarles solución (25 %). Las dificultades no resueltas fueron la falta de computadoras (3) y la imposibilidad de conectarse vía modem (1), dos de los participantes no las definieron.
La mayoría de ellos consideró la experiencia como positiva (48/50, 96 %). Solo dos profesionales estuvieron en desacuerdo: uno de ellos, un profesor titular que expresó haber tenido “muchas dificultades” a pesar de tener experiencia previa en este tipo de actividad; y el otro, un profesor auxiliar, sin experiencia previa, que no tuvo dificultades durante el desarrollo del curso. Ambos tienen en común el haber otorgado las calificaciones más bajas a los aspectos didácticos, sin embargo, sí recomiendan aplicar esta modalidad de curso.
A pesar de las dificultades identificadas, con la excepción de tres del total de las encuestas analizadas, los profesores encuestados afirmaron que recomendarían esta modalidad. Al analizar estos casos, los tres tienen en común las dificultades con la conexión y uno de ellos, la imposibilidad de conectarse vía modem.
El centro de posgrado “Hermanos Ameijeiras” tiene su escenario docente en el hospital clínico quirúrgico del mismo nombre. Este centro, de tercer nivel, posee una tecnología avanzada que lo hace referente a nivel nacional; y por tanto, tiene una elevada carga asistencial; además ofrece cobertura docente a un gran volumen de residentes nacionales y procedentes de varias naciones en 46 especialidades médicas. En adición, tiene una amplia actividad en la superación y capacitación profesional y técnica. Dadas estas condiciones, la posibilidad de implementar las diferentes formas de educación a distancia, con el auxilio de las tecnologías de la información y las comunicaciones constituye una alternativa ventajosa para este claustro docente muy a tono con las tendencias actuales, según refieren varios autores.1,3,7
Desde el año 2003, los estándares de la Unesco8) sobre las competencias de los docentes aconsejan la implementación de las TIC, porque permiten mejorar el ejercicio profesional de maestros y profesores no solo en el plano docente, sino en todas las áreas de su labor y mediante su articulación con la pedagogía, el programa de estudios y la organización escolar.2,9) En concordancia con este planteamiento, la realización del curso de valores en esta modalidad constituye una fortaleza al combinar estas opciones en su concepción.
El problema abordado resulta interesante. En general se considera que los “nativos digitales” manejan “el idioma y la lógica” de la tecnología digital con fluidez y naturalidad. Esta brecha digital tiene dos implicaciones preocupantes en el campo de la enseñanza: para los docentes, en su mayoría “inmigrantes” resulta complejo el aprendizaje de estas tecnologías y frecuentemente se resisten a su aprendizaje, lo que hace difícil que se produzca un proceso enseñanza aprendizaje significativo; para los “nativos digitales”, en su mayoría estudiantes, los sistemas tradicionales de enseñanza no satisfacen las necesidades de la nueva generación. Ambas situaciones tienen consecuencias negativas en los resultados del aprendizaje y en el compromiso de los alumnos.6,7,9 En consecuencia, resulta loable y beneficioso cualquier esfuerzo que se haga por contribuir al desarrollo de las competencias digitales de los docentes, definidas desde hace algunos años por varios estudiosos,6,10,11 como esenciales junto al resto de las competencias tradicionales para el desempeño del profesor universitario del siglo XXI. Desarrollar las competencias digitales de los docentes del centro de posgrado “Hermanos Ameijeiras” forma parte de las estrategias de superación concebidas por su departamento de posgrado.
Las dificultades principales planteadas por los encuestados fueron de tipo tecnológico y aunque algunas de ellas no pudieron ser solucionadas, no constituyeron una limitante para que la experiencia resultante fuera positiva en opinión de casi la totalidad de los encuestados. Estas dificultades coinciden con los hallazgos de otros autores 6,11 en cuanto a la dificultad en el acceso a las computadoras y la carencia de competencias necesarias; sin embargo, pese a que la mayoría no estaba familiarizado con este tipo de actividad, y teniendo en cuenta las dificultades presentadas, los criterios emitidos reflejan un alto grado de satisfacción con esta modalidad. Este resultado coincide con el estudio de Tsankov et al.3
Para que el docente se involucre exitosamente en proyectos de innovación utilizando las tecnologías, debe existir compatibilidad entre estas y sus creencias pedagógicas; por ello necesita analizar el proceso enseñanza aprendizaje y sus objetivos, de manera que valoren las posibilidades de su aplicación para conseguir resultados positivos.7,9
Sobre los aspectos pedagógicos del curso, las opiniones recogidas evidencian que el elemento peor calificado fue el tiempo disponible para la realización de actividades. Le sigue en orden de importancia el referido a oportunidades para el intercambio. A criterio de los autores, estas opiniones guardan íntima relación con las dificultades expresadas sobre la conexión y las insuficientes habilidades para interactuar en el entorno virtual. Como indica el promedio de edad de la muestra, se trata de un grupo de profesionales que pertenecen a la categoría de “inmigrantes” en la era digital, lo que explica en parte, las insuficiencias referidas, en coincidencia con lo estudiado por otros autores1,5) Además, es posible que la ausencia de actividades sincrónicas influya en la percepción de insuficiente oportunidad para el debate e intercambio.
No fue analizado el total de las opiniones vertidas sobre el curso, se trata de un estudio monocéntrico, con características muy particulares (página web propia, intranet hospitalaria, numerosos puntos de red diseminados en toda la institución). Las limitaciones de este estudio hacen que sus resultados no sean extrapolables a otras instituciones. No obstante, como plantean otros autores,11) los resultados obtenidos permiten afirmar la factibilidad de realizar propuestas de superación pedagógica para los docentes incluyendo las modalidades de educación a distancia complementadas con encuentros que faciliten la consolidación e integración de los conocimientos.