INTRODUCCIÓN
El tráfico ilegal de especies, si bien es un problema a nivel mundial, para Cuba resulta particularmente grave, si se tiene en cuenta que dentro de la región del Caribe es la isla de mayor extensión, lo que, unido a su cercanía al continente, diversidad de ecosistemas e historia biogeográfica la hace un núcleo clave para la conservación de la biodiversidad en el Caribe insular. En el archipiélago cubano, habita el mayor número de especies de plantas y vertebrados de las Antillas y alberga un elevado porcentaje de especies exclusivas (Mancina et al., 2017). Según Carmona y Arango (2011) una de las mayores implicaciones de esta problemática, consiste en la pérdida de la diversidad generada por una fuerte presión hacia la extinción de especies, esto unido al deterioro del hábitat por rupturas en las cadenas tróficas tienen implicaciones que se pueden considerar como catastróficas no solo a nivel local, sino en un sentido más amplio, a nivel global. La protección de la vida silvestre y el patrimonio natural debe ser un principio ético básico de cualquier sociedad que contemple en su modelo de desarrollo y economía, el uso sostenible de los recursos naturales, particularmente la biodiversidad (Alonso et al., 2020).
El comercio de vida silvestre se considera el tercer mercado ilegal más grande del mundo, después del tráfico de drogas y armas Wyler y Sheikh, 2008; Barber-Meyer, 2010), y está evaluado entre los diez billones de dólares año (Wilson-Wilde 2010). Según el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, cerca de 100 especies desaparecen diariamente del planeta por la destrucción del hábitat, la caza indiscriminada y el comercio ilegal (Nassar et al., 2000). Cerca de la tercera parte de las especies de aves son capturadas para el mercado de mascotas (Harris et al., 2016). Este comercio destaca como una amenaza importante para muchas especies en peligro de extinción (Bird Life International 2000), pero los estudios realizados no son suficientes para evaluar su impacto real (Wright et al., 2001). Sorprendentemente, no existe algún programa de supervisión intensa y sostenida para evaluar los efectos del comercio sobre las poblaciones de aves silvestres o para buscar la manera de hacerlo sostenible (Gilardi 2006).
El tráfico ilegal de aves silvestres causa impactos directos sobre la biodiversidad, y reduce a muchas poblaciones hasta cerca de la extinción (TRAFFIC 2016); la extracción de aves de sus hábitats naturales, podría también afectar a especies de plantas, de las cuales son sus dispersores principales de semillas. Cuando una especie está en peligro, se recolecta para abastecer el comercio ilegal, puede fácilmente alcanzar niveles insostenibles (Sodhi et al., 2004); la demanda de individuos atractivos tiende a remover los de mejor rendimiento reproductivo, y esto reduce este parámetro en las subsecuentes generaciones (Paquette y Lapointe, 2007). Además, este comercio implica una amenaza para los humanos, las especies nativas y los animales de cría (Gómez y Aguirre, 2008; Daut et al., 2016); por ejemplo, el transporte ilegal de grandes cantidades de animales vivos podría facilitar el movimiento de patógenos a nuevas regiones (Smith et al., 2009). En áreas urbanas, los escapes de aves enjauladas son frecuentes (Roll, Dayan y Sim-Berloff, 2008; Plasencia Escalona (2012) y las pueden desplazar o exterminar (MacGregor et al., 2011). Asimismo, ocasionan daños a la economía (Romero et al., 2006).
Por otra parte, las condiciones del comercio son degradantes y aquellas especies que pueden establecerse se convierten en colonizadoras exitosas (e.g. Myiopsitta monachusBatllori y Nos, 1985) y/o invasoras que amenazan la biodiversidad (Wilcove et al., 1998), ya que compiten con las especies nativas: los animales son enjaulados masivamente, sin agua ni comida, sufren de estrés, luchan, se mutilan y mueren (TRAFFIC 2016), y los que sobreviven, sufren de abusos con consecuencias drásticas como la reducción de su expectativa de vida (Vanstreels et al. 2010).
Las aves ocupan el tercer lugar en las preferencias de mascotas a nivel mundial y se estima que el tráfico de estas podría llegar a los tres millones de ejemplares al año, de los cuales casi 80 000 provienen del Caribe (CITES 2016). El Caribe insular es uno de los 25 sitios de mayor importancia en el mundo en materia de conservación de la biodiversidad (Myers et al., 2000). Esta región provee de hábitat para muchas especies de aves residentes y migratorias (Wiancko et al., 2011).
Las actividades de mantenimiento de aves en cautiverio son comunes a lo largo de Cuba en ambientes rurales y urbanos; estas aves raramente provienen de reproductores legales, y son en su mayoría capturadas del medio. Por ejemplo, los polluelos de psitácidos son removidos del hábitat de anidación para su venta (Wright et al., 2001; Cañizares et al., 2006). La mayoría de las especies de aves son comercializadas como mascotas y unas pocas especies se utilizan como alimento (Mugica et al., 2006). Aunque existen leyes que prohíben el comercio de vida silvestre en Cuba, parecen ser poco conocidas y no se aplican adecuadamente, a pesar de la presencia de instituciones responsables de la vida silvestre como el Centro de Inspección y Control Ambiental, el Cuerpo de Guardabosques y la Empresa Nacional para la Protección de la Flora y la Fauna. El comercio local de aves podría tener un impacto sustancial sobre la conservación de las poblaciones, pero permanece sin cuantificar en Cuba; además, sin la información detallada sobre las especies comercializadas y el número de ejemplares involucrados, es imposible juzgar exactamente el impacto de este comercio.
Numerosos son los ejemplos que ponen de manifiesto la captura y comercialización ilegal de varias de las especies de aves canoras y ornamentales a todo lo largo y ancho del país, muchas de las cuales son endémicas y cierto número de ellas se encuentran en algunas de las categorías de amenaza, entre esta pueden citarse a: García et al. (2011), González et al. (2012), Ferrer et al. (2017), Mancina et al. (2017), Izquierdo et al. (2020), González et al. (2020), Gómez et al. (2022) y Hernández et al. (2022). Por estas razones, esta investigación tuvo como objetivo: Evaluar el comportamiento de la captura y comercio ilegal de aves silvestres en la localidad "Finca Pedregal Dagame" del municipio de Artemisa, provincia de Artemisa.
MATERIALES Y MÉTODOS
Ubicación del área de investigación
La investigación se realizó desde noviembre de 2020 hasta mayo de 2021 en la localidad "Finca El Pedregal Dagame" a 13 km al sur de provincia de Artemisa.
Métodos
Aplicación de las encuestas
Se aplicó una encuesta anónima a personas que residen en la localidad "Finca el Pedregal Dagame" que participan en la captura y comercialización de aves canoras y ornamentales, evaluándose los siguientes indicadores: económico, social, medioambiental y comercio ilegal.
Para recopilar esta información se utilizó como herramienta fundamental un cuestionario anónimo realizado a pobladores que comercializan aves ilegalmente en el municipio (cazadores), para conocer las principales problemáticas y propuestas de alternativas para minimizar el comercio ilegal, realizándose diferentes preguntas:
Abiertas: permitieron al encuestado exponer libremente sus consideraciones e informaciones.
Cerradas: incluían las posibles respuestas que podían ser seleccionadas por el encuestado. A su vez, las preguntas cerradas que se usaron fueron de los tipos: bivalentes (daban dos posibles respuestas, las cuales eran, por supuesto, excluyentes y antónimas) y con alternativas excluyentes (ofrecían varias respuestas posibles, pero que se rechazaban mutuamente).
En dichas encuestas, se indaga acerca de las diferentes especies de aves silvestres que gozan de mayor popularidad entre los llamados pajareros para ser mantenidas en cautiverio, cuáles son las áreas de caza que más utilizan en el municipio, los métodos de captura más utilizados por ellos, el propósito de las capturas, tratando de paso de determinar el estado de vida en que son extraídos los individuos de su estado natural. Ello permitiría conocer la etapa del año en que debían fortalecerse los mecanismos de protección mediante el cuerpo de guardabosques, para evitar o minimizar dichas capturas. Igualmente, las encuestas incluyen un análisis sociocultural de los pajareros, lo cual facilitaría la instrumentación de un sistema de educación medioambientalista de los mismos y de la población implicada en sentido general. Se consideró, además, que estos individuos tienen como objetivo fundamental la obtención de dinero, la encuesta incluyó también un análisis de los precios a los que se cotizan las diferentes especies de aves, para precisar cuáles de ellas serían las más amenazadas por este concepto.
Para el procesamiento de la información, se utilizó el método empírico de encuestas estructuradas (Giraldo 2008; Jiménez et al., 2010), aplicadas con una distribución al azar. El número de personas encuestadas se calcula usando la fórmula planteada por Gabaldón (1980) Ecuación 1.
Dónde
n |
tamaño de la muestra |
N |
tamaño del universo (total población) |
Z |
nivel de confianza de la estimación, considerando el 95 % de confianza |
p |
probabilidad de aceptación (0,5) |
q |
probabilidad de rechazo (0,5) |
e |
error (10 %) |
Para la actualización de los nombres científicos de cada una de las especies comercializadas ilegalmente, así como categoría de permanencia en Cuba, grado de endemismo y estado de amenaza, se tuvo en cuenta la Lista Anotada de las Aves de Cuba de Navarro (2022).
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Principales características de los actores sociales: nivel de escolaridad y ocupación
Nivel de escolaridad de los encuestados
Las encuestas fueron aplicadas a un total de 72 personas, todos hombres y cazadores en su totalidad, con una edad media de 40 años, los que reconocen que realizan la caza ilegal de diez especies de aves silvestres. El nivel de escolaridad de los encuestados (Figura 1). Los resultados de la figura coinciden con los de García et al. (2011) en trabajos realizados sobre comercio ilegal en localidades de Cuba oriental y occidental. González et al. (2018) señalan que cada vez son más los niños y jóvenes que se observan en sitios donde se comercializan pájaros los domingos, que desde pequeños comienzan a crearse esa mentalidad negociante ilícita.
Ocupación de los encuestados
En la Figura 2, aparecen representadas las diferentes categorías ocupacionales a las que se dedican las personas que capturan y comercializan las especies de aves declaradas por estos. Se destacan con el mayor porcentaje (57 %) los trabajadores por cuenta propia, seguidos por los que se dedican a otras actividades con (19 %) y los estudiantes con (13 %) y trabajadores estatales con (11 %). Estos resultados coinciden con los de García et al. (2011) en trabajos realizados sobre captura y comercio ilegal de aves canoras y ornamentales en municipios de la región Central y Oriental del país, los que reportan como a los que más se dedican a estas actividades a estas mismas categorías ocupacionales.
Especies de aves capturadas y comercializadas en la localidad estudiada
Según las declaraciones de los cazadores ilegales encuestados, las especies de aves que son capturadas y comercializadas por ellos se muestran en la Tabla 1.
Nombre científico | Nombre vulgar | Orden | Familia | ES | CA |
azulejo | Passeriformes | Cardinalidae | RI-T | LC | |
tomeguín de la tierra | Passeriformes | Emberizidae | RP | LC | |
cabrero | Passeriformes | Phaenicophilidae | RP | LC | |
monjita tricolor | Passeriformes | Estrildidae | RP | - | |
mariposa | Passeriformes | Cardinalidae | RI-T | VU | |
paloma rabiche | Columbiformes | Columbidae | RB | - | |
azulejón | Passeriformes | Cardenalidae | RI-T | LC | |
degollado | Passeriformes | Cardenalidae | RI-T | LC | |
codorniz | Galliformes | Phasianidae | RP | - | |
torcaza cuellimorada | Columbiformes | Columbidae | RP | - |
Simbología: Estatus (ES): RI-T=Residente Invernal y Transeúnte; RP= Residente Permanente; C-RP= Común Residente Permanente; A (local), RP=Abundante, Residente Permanente; A-RB= Abundante Residente Bimodal Categoría de Amenaza (CA): LC=De preocupación menor; VU=Vulnerable.
De las diez especies de aves reportadas por los cazadores ilegales, siete son canoras y ornamentales, mientras que otras tres (Zenaida macroura, Colinus virginianus y Patagioenas squamosa son especies cinegéticas). Las especies Zenaida macroura y Colinus virginianus aparecen en el calendario de caza que el Ministerio de la Agricultura edita cada año, mientras que para Patagioenas squamosa no está autorizado su aprovechamiento, por lo que se incumple con lo legislado al respecto. También al capturar a Patagioenas squamosa se viola la Resolución 160/2011 del Ministerio de Ciencia Tecnología y Medio Ambiente, en la que se establecen los compromisos contraídos por Cuba con Instituciones Internacionales, a través de las cuales se demandan acciones dirigidas a la conservación de especies de especial significación como: CITES (Convención Internacional de Especies Amenazadas de la Flora y Fauna Silvestres), SPAW (Protocolo relativo a las Áreas y la Flora y la Fauna Silvestres Especialmente Protegidas de la Región del Gran Caribe y CMS (Convención sobre la Conservación de las Especies Migratorias de Animales Silvestres)
Las especies reportadas se agrupan en un total de tres órdenes, siendo el Passeriformes el mejor representado con un total de siete especies, agrupándose además en un total de 7 familias, siendo las familias Columbidae y Cardenalidae las de mayor número de especies (2 y 4 respectivamente). Los resultados obtenidos coinciden parcialmente con los de García et al. (2011) en la región Oriental y Central y con Ferrer et al. (2017) en la región Central del país, los que también reportan como comercializadas a las especies Tiaris olivaceus, Passerina cyanea y Passerina ciris. Se destaca en estos resultados el reporte de Pheaucticus lidovicianus, especie esta no incluida en los trabajos citados anteriormente. Se distingue por su canto y su contribución a la dispersión de semillas en los ecosistemas donde habita. González et al. (2020) la reporta entre las aves más capturadas ilegalmente en Cuba.
Época del año y estado de vida en que son capturadas las aves en la naturaleza por los cazadores ilegales de la localidad
Las capturas de las especies de aves migratorias de invierno que nos visitan se realizan durante los meses de octubre a marzo, cuando estas se encuentran en el país, mientras que las residentes permanentes son capturadas en cualquier época del año.
El estado de vida en que son capturadas estas aves en la naturaleza, según refieren los encuestados (Tabla 2).
Especies | Huevos | Pichones | Juveniles | Adultos |
- | X | X | X | |
- | - | - | X | |
- | - | - | X | |
- | - | X | X | |
- | - | - | X | |
- | - | X | X | |
- | - | X | X | |
- | - | - | X | |
- | - | - | X | |
- | - | - | X |
Según resultados de la encuesta, el 31 % son extraídas en estado juvenil, el 62,5 % en estado adulto solamente y el 6 % en estado de pichones. Los resultados respecto a los diferentes estados en que son extraídas las aves de la naturaleza coinciden con los de Ferrer et al. (2017) y Gómez et al. (2022), quienes realizaron estudios sobre comercio ilegal en las regiones oriental y central de Cuba y obtuvieron que la mayoría de las aves son capturadas en los estados de juvenil y adulto.
Métodos de captura empleados para obtener las aves de la naturaleza
El reguilete o jaula trampa (Figura 3 a, b, c) es el método más utilizado por los cazadores ilegales para la captura de las aves, pero no para todas ellas. Este método solo lo utilizan en las especies Passerina cyanea, Tiaris olivaceus, Lonchura malacca, Passerina caerulea y Pheaucticus lidovicianus, mientras que para los cabreros usan lasos y la lira (Figura 4), instrumento un tanto peligroso para las aves porque cuenta con pegamento que puede dañar al animal. Para Zenaida macroura, Colinus virginianus y Patagioenas squamosa se utilizan otros métodos como es el empleo de casillas y trampas de lazo.
Estos mismos medios empleados para la captura de las aves en la naturaleza son los mencionados por García et al. (2011) y Ferrer et al. (2017).
Uso de las especies de aves que son capturadas
Los usos que exponen dar los encuestados a las aves capturadas aparecen reflejados en la Figura 5, donde se aprecia que el 10 % corresponde a la venta y otras actividades, el 20 % son destinadas a mascotas, para la venta y otras actividades y 70 % de estas especies son destinadas a mascotas y a la venta. Resultados que coinciden con los criterios de García et al. (2011), Ferrer et al. (2017) y González et al. (2020) quienes plantean que las aves capturadas ilegalmente son utilizadas como mascotas y muchas de ellas son extraídas del país a través de las fronteras, otras son utilizadas en actividades religiosas y también practican competencias de cantos, empleándose algunas especies (Phonicara canora) en peleas como si se tratase de gallos de pelea.
Precios a los que son comercializadas las especies de aves capturadas
En la Tabla 3, se muestran los precios a los que son comercializadas las especies de aves silvestres capturadas ilegalmente en la localidad, el valor más elevado (400 CUP) correspondió a Passerina ciris, siguiéndole en orden de importancia las especies Pheucticus lidovicianus y Passerina caerulea, con precios que fluctúan entre los 250 y 300 pesos. Debe señalarse que estos precios son fijados a las especies después de ser capturadas y que han aprendido a alimentarse. Estos precios varían en función de su estado de desarrollo (juvenil o adulto), colorido del plumaje, así como de su canto. De acuerdo con los criterios de los encuestados, de las especies capturadas, las más preferidas son las siguientes: mariposa, azulejón, azulejo y degollado. García et al. (2011), Ferrer et al. (2017) y Gómez et al. (2022), refieren también a estas especies entre las más preferidas y comercializadas a lo largo y ancho del país (Tabla 3).
Clasificación de las aves según su permanencia y grado de amenaza
Las especies capturadas se agrupan según su permanencia en el territorio nacional en: cinco Residentes Permanentes (RP), cuatro Residentes Invernales (RI) y una Residente Bimodal (RB). De acuerdo con el grado de amenaza, cinco especies son de preocupación menor (LC) y una está en la categoría de vulnerable (VU). La especie clasificada como vulnerable es Passerina ciris, de cuyos ejemplares que nos visitan durante el periodo invernal son capturados numerosos individuos cada año en diferentes regiones del país, muchas de las cuales mueren a consecuencia de su mal manejo y a que se estresan con gran facilidad al ser capturadas.
CONCLUSIONES
La mayor incidencia en la captura de aves de forma ilegal es sobre las especies Passerina cyanea, Tiaris olivaceus, Lonchura punctulata y Pheucticus lidovicianus.
En la localidad se capturan y comercializan diez especies de aves silvestres, siendo las más representativas: Passerina cyanea, Tiaris olivaceus, Lonchura punctulata y Pheucticus lidovicianus.
Cuentapropistas y personas con mayor nivel de escolaridad son las que tienen mayor incidencia en el comercio ilegal de aves silvestres, destacándose como las especies más comercializadas Pheucticus ludovicianus, Passerina ciris y Passerina caerulea.
Los cuentapropistas y las personas con un nivel de escolaridad de preuniversitario son los de mayor incidencia en el comercio ilegal de aves silvestres.