INTRODUCCIÓN
El acceso a la información es el motor del siglo XXI y una de las marcas diferenciadoras de las sociedades en la actualidad. La tendencia global de publicación de datos gubernamentales, con el objetivo de fomentar la cultura de participación ciudadana en la gestión del Estado, es la base de lo que se conoce como transparencia.
En tanto las Ciencias de la Información entienden a su objeto de estudio como un fenómeno social, en los últimos 20 años patentizan un marcado interés por reconocer y estudiar las teorías sobre las políticas públicas y al Estado como escenario de saberes y prácticas informacionales.
La preeminencia de la información en formato digital y la democratización del acceso a través de Internet caracterizan las dinámicas del Gobierno de la Información, al punto de afirmarse que “después de pensar que pasábamos de la sociedad de la información a la sociedad del conocimiento regresamos a los orígenes de los procesos de automatización y parece que los datos vuelven a ser esenciales (…) en la bibliografía científica de casi cualquier campo científico e incluso en los medios no especializados.” (Hernández, 2016)
Por los retos interdisciplinares que supone la implantación del Gobierno Electrónico y por el activismo ciudadano en la gestión del Gobierno Abierto, los estudios informacionales amplían su espectro más allá de bibliotecas, archivos y museos, para comprometerse con el éxito de las políticas públicas en general y específicamente en cuanto a la calidad de la información y el acompañamiento para el desarrollo de políticas de información y comunicación.
El Gobierno Electrónico y el Gobierno Abierto tienen una fuerte relación pero son realidades sutilmente diferentes. El primero se enfoca en las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) y sus herramientas para la transformación de los procesos administrativos, en especial para adaptar su quehacer a un espacio diferente al analógico. Para su implantación se requiere un fuerte proceso inversionista y un conjunto de infraestructuras de datos que permitan acometer procesos ágiles, por lo que el Gobierno Electrónico se identifica como el núcleo duro y primero del Gobierno de la Información. Mientras, el Gobierno Abierto promueve repensar las bases de la Administración Pública y garantizar su gestión desde un conjunto de valores, como la transparencia, el derecho al acceso de información y la libertad de expresión. En este sentido, se identifica como un núcleo líquido o suave, y también segundo, del Gobierno de la Información.
El Gobierno Abierto obviamente se apoya en las TIC, pero para su desarrollo requiere del impulso de la cultura digital en toda la sociedad y comprender su papel primordial en este modelo de gobierno, basado en la apertura y el diálogo. Sandoval (2015) considera que “el Gobierno Abierto es producto de un debate histórico por el derecho de los ciudadanos a tener acceso a la información gubernamental.”
Con una visión estratégica, Tapscott y Williams (2011) sentencian que el Gobierno Abierto “brinda la oportunidad única de revisar el funcionamiento de la administración, las aportaciones y los procedimientos del sector público y, en última instancia, el modo en que los gobiernos interactúan y se comprometen con sus ciudadanos.”
Como concepto “paradigma” (Oszlak, 2013), se plantea que el Gobierno Abierto abarca nociones del Gobierno Electrónico y otras que tienen que ver con la gestión social del conocimiento. Por ello, en la literatura se encuentran referencias constantes a los datos del gobierno abierto, la protección de datos sensibles, la ética, la innovación y la co-creación, entre otros elementos. Esta es la razón por la que se le considera una noción integradora y un nivel superior a la noción de Gobierno Electrónico.
El Gobierno Abierto puede visualizarse como un ecosistema, según Acosta y Plata (2016), donde la administración pública, el sector privado y la ciudadanía interactúan con los datos abiertos en procesos de comunicación, participación y colaboración, en escenarios de transparencia gubernamental e inclusión tecnológica.
En este trabajo se ofrece el primer reporte de la evaluación realizada en 2019 a los sitios Web de los ministerios de la República de Cuba según las dimensiones de validación del principio de transparencia, con el objetivo de mostrar el comportamiento de esas plataformas estratégicas para la información sobre la ejecución de las políticas públicas y el establecimiento del diálogo ciudadano, como forma de contribuir con su mejoramiento.
MÉTODOS
Se optó por una investigación cuantitativa de tipo descriptiva donde se caracterizaron los rasgos de cada uno de los sitios Web de los ministerios de la República de Cuba, con el fin de conocer su situación actual respecto a las dimensiones del principio de transparencia para el Gobierno Abierto.
La pesquisa tuvo un diseño no experimental, transversal, y se realizó sin manipular deliberadamente las variables, observándose los fenómenos tal y como se presentaban en su contexto natural y centrado en analizar el nivel o estado de las diversas variables en un momento dado.
En Cuba existen 22 OACE, los cuales tienen a su cargo la “dirección y administración de una o varias ramas o subramas de la economía, o de actividades políticas, económicas, culturales, educacionales, científicas, sociales, de seguridad o de defensa.” (Constitución de la República de Cuba, 1976)
Para la selección de la muestra se realizó una búsqueda exploratoria de los sitios Web oficiales de los ministerios cubanos con el objetivo de verificar la disponibilidad y accesibilidad de cada uno en las plataformas Google (http://www.google.com) y Ecured (http://www.ecured.cu) durante las primeras dos semanas del mes de marzo de 2019. Como resultado, se obtuvieron 16 sitios oficiales con las cualidades requeridas para su evaluación, a saber:
Ministerio de Ciencia Tecnología y Medio Ambiente (CITMA) http://www.citma.gob.cu/
Ministerio de Cultura (MINCULT) http://www.ministeriodecultura.gob.cu/
Ministerio de Economía y Planificación (MEP) https://www.mep.gob.cu/es
Ministerio de Educación (MINED) https://www.mined.gob.cu/
Ministerio de Educación Superior (MES) https://www.mes.gob.cu/es
Ministerio de Energía y Minas (MINEM) https://www.minem.gob.cu/
Ministerio de Finanzas y Precios (MFP) http://www.mfp.gob.cu/inicio/portada.php
Ministerio de Industrias (MINDUS) https://www.mindus.gob.cu/es
Ministerio de Justicia (MINJUS) https://www.minjus.gob.cu/
Ministerio de la Construcción (MICONS) http://www.micons.gob.cu/
Ministerio de la Industria Alimentaria (MINAL) http://www.minal.gob.cu/
Ministerio de las Comunicaciones (MICOM) http://www.mincom.gob.cu/es
Ministerio de Relaciones Exteriores (MINREX) http://www.minrex.gob.cu/
Ministerio del Comercio Exterior y la Inversión Extranjera (MINCEX) http://www.mincex.gob.cu/
Ministerio del Comercio Interior (MINCIN) http://www.mincin.gob.cu/
Ministerio del Turismo (MINTUR) https://www.mintur.gob.cu/
El proceso de elaboración del instrumento de evaluación se organizó en tres etapas:
1ra etapa: Para la identificación y estudio de diferentes metodologías de evaluación y estándares establecidos por diferentes organizaciones promotoras de la Transparencia y el Gobierno Abierto.
2da etapa: Para el filtrado y estructuración de los indicadores recolectados para obtener una versión en borrador del instrumento.
3ra etapa: Para el proceso de consultas con un panel de expertos, con el propósito de depurar la versión en borrador y asignar ponderaciones a todos los componentes del instrumento.
Para seleccionar los indicadores se revisaron críticamente distintas metodologías, con énfasis hispanoamericano, como las siguientes:
Guía sobre indicadores de transparencia Comisión Presidencial de Transparencia (COPRET) de Guatemala (www.oas.org/juridico/pdfs/mesicic4_gtm_guia.pdf)
Índice de Gobierno Abierto (IGA) y la Transparencia de Colombia (http://www.anticorrupcion.gov.co/Paginas/indice-gobierno-abierto.aspx)
Índice de Transparencia Activa en Línea de Uruguay (https://www.cainfo.org.uy/itael/)
Índice de Transparencia de las Comunidades Autónomas (INCAU) de España (https://transparencia.org.es/indice-de-las-comunidades-autonomas-incau/)
Índice de Transparencia del Sector Público Costarricense (ITSP) (http://www.dhr.go.cr/red_de_transparencia/indice_de_transparencia_del_sector_publico.aspx)
Métrica de Gobierno Abierto: Metodología aplicada por el INAI (Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos) de México (http://rendiciondecuentas.org.mx/wp-content/uploads/2017/03/ReportedeResultadosMetricafeb17.pdf)
Se revisaron también estándares establecidos por organizaciones dedicadas a la promoción de la Transparencia, el Derecho a la información pública y la Apertura de datos, como los Estándares de Transparencia y Estándares de Rendición de Cuentas de Open Goverment Standarts y los Estándares de Transparencia de Datos del IAB Technology Laboratory.
De todo lo anterior, se extrajeron 16 dimensiones, 42 variables, 38 subvariables y 156 indicadores, los cuales se filtraron y seleccionaron de acuerdo a los siguientes elementos:
Concordancia con la comprensión teórica del principio de transparencia del Gobierno Abierto.
Relación con los estándares internacionales establecidos por organizaciones líderes en el movimiento de Gobierno Abierto.
Aplicación al contexto cubano actual y su sector administrativo.
Grado de relevancia según el número de repeticiones del indicador en cada metodología.
El instrumento resultante comprende cuatro dimensiones de evaluación de la transparencia:
Acceso a la Información: Evalúa la información de carácter público disponible en el sitio, su calidad y accesibilidad. De esta manera vela por la ejecución del Derecho de Acceso a la Información Pública.
Rendición de Cuentas: Evalúa la información pública institucional del sitio relacionada con el cumplimiento de los objetivos, competencias y responsabilidades, tanto institucionales como de los funcionarios públicos que las conforman.
Relación con la Ciudadanía: Evalúa los espacios y los medios que la institución pone a disposición de los ciudadanos a través del sitio para participar en los procesos de planificación, control y evaluación institucional, de modo que se produzca una retroalimentación.
Datos Abiertos: Evalúa la publicación en el sitio de conjuntos de datos y su calidad.
A estas dimensiones aplicaron 13 variables y 56 indicadores:
Para Acceso a la Información
Información institucional básica: Evalúa la disponibilidad de la información sobre el ministerio, funciones generales y departamentales, marco jurídico aplicable y estructura organizativa. (5 indicadores)
Información del personal institucional: Evalúa la disponibilidad de información de carácter público vinculada con el recurso humano contratado para cumplir con las funciones institucionales. (4 indicadores)
Servicios y procesos institucionales: Evalúa la disponibilidad de información vinculada a servicios y trámites para acceder a ellos, así como los medios informativos. (5 indicadores)
Herramientas para el acceso a la información: Evalúa la existencia de herramientas para facilitar el acceso a información pública. (6 indicadores)
Derecho a la Información: Evalúa el reconocimiento y garantía del ejercicio de derecho a la información pública por parte de los ciudadanos que debe estar reflejada en el sitio de la institución. (2 indicadores)
Para Rendición de Cuentas
Finanzas públicas: Evalúa la disponibilidad de información vinculada al uso de los fondos públicos, como presupuesto, ejecución presupuestaria y reportes financieros. (5 indicadores)
Planes y cumplimiento: Evalúa la disponibilidad de planes institucionales e informes de cumplimiento actualizados. (6 indicadores)
Para Relación con la Ciudadanía
Invitación a la participación ciudadana: Evalúa la disponibilidad de invitaciones para que el público general participe del quehacer institucional, por medio de denuncias, quejas, sugerencias, audiencias, etc. (2 indicadores)
Espacios de diálogo: Evalúa la disponibilidad de mecanismos de participación como, formularios, foros, encuestas, redes sociales y espacios interactivos en línea. (5 indicadores)
Toma de decisiones: Evalúa la disponibilidad de información actualizada de los acuerdos tomados por los funcionarios públicos de las instituciones, incluso antes de ser aprobados. (3 indicadores)
Contraloría de servicios: Evalúa los espacios disponibles para que la ciudadanía dirija quejas, denuncias, sugerencias, opiniones acerca de los servicios que brinda la institución pública. (3 indicadores)
Para Datos Abiertos
Tipo de datos: Evalúa la naturaleza de los datos publicados por la institución relacionados con la información pública que debe estar disponible y con el sector evaluado. (4 indicadores)
Calidad de los datos: Evalúa las cualidades que necesitan los datos para ser usables y reutilizables por la ciudadanía. (6 indicadores)
La evaluación de los sitios Web de los ministerios de la República de Cuba, se llevó a cabo aplicando el método heurístico. Dicho proceso se realizó en tres etapas:
1ra etapa: Destinada a conformar el panel de expertos.
2da etapa: Destinada a analizar, revisar y discutir los componentes del instrumento de evaluación.
3ra etapa: Destinada al análisis basándose en el instrumento.
Para conformar el equipo de expertos se seleccionaron nueve profesionales con las siguientes características:
Que fueran especialistas en el área de la información y/o la comunicación.
Que tuvieran las competencias necesarias para la evaluación de sitios Web.
Que contaran con experiencia y habilidades de navegación en la Web.
El proceso de evaluación se basó únicamente en la información disponible en los sitios Web oficiales de los ministerios cubanos, con los accesos y páginas públicas que estaban visibles para cualquier ciudadano, indistintamente de su rol o posición, por lo que esta metodología se orientó a la perspectiva del ciudadano. Los expertos navegaron por el sitio Web de la institución tratando de encontrar la información requerida por el indicador. En el caso de que la información no se encontrara en el sitio sino enlazada a la Oficina Nacional de Estadísticas e Información (ONEI) también se tuvo en consideración.
Para la obtención de los resultados se aplicó el siguiente proceso matemático:
Valores | Valor de la información |
1 | Completa |
0,7 - 0,9 | Casi completa |
0,4 - 0,6 | A medias |
0,1 - 0,3 | Escasa |
0 | Nula |
Cada variable y dimensión posee un peso total de 1, siendo necesario calcular el promedio de cada sección del instrumento hasta obtener el Índice General de Transparencia del sitio. Para ello se realizaron las siguientes operaciones:
Finalmente se obtuvo un valor entre 0 y 1. Este valor se multiplicó por 100, para conocer el por iento de transparencia del sitio Web. El por ciento se ubicó en una tabla de ranking, como la siguiente, para el mejor reconocimiento de los resultados.
Por ciento | Categoría |
80 - 100 % | Excelente |
60 - 79 % | Bien |
40 - 59 % | Regular |
20 - 39 % | Insuficiente |
0 - 19 % | Mal |
La transparencia como eje del gobierno abierto
La transparencia es la acción de mostrar el funcionamiento del gobierno para el escrutinio ciudadano. Sobre esta base, Quintanilla (2012) alega que “no sólo se debe informar lo que se realiza, sino cuáles son los objetivos y sobre todo los resultados esperados para invitar a la sociedad a participar; ello posibilita además que los poderes y niveles de gobierno actúen de forma conjunta.” Entonces, la transparencia está relacionada con la apertura. Por un lado, la apertura de los Estados a la reestructuración y formulación de nuevas políticas gubernamentales; por otro, la apertura de datos, sin restricciones.
La transparencia parte del derecho de cada ciudadano a la información, de acuerdo con el Artículo 19 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos (1948), lo cual implica:
El derecho de acceder a la información; esto incluye las facultades de:
El derecho a informar, que incluye:
El derecho a ser informado, que contiene las facultades de:
Para facilitar la comprensión del principio de transparencia, Sandoval (2017) elabora el “modelo de las dos puertas” que adopta la Teoría de los Sistemas y en el cual los registros, datos e información constituyen las entradas. El elemento principal que selecciona, adapta y transforma los datos se denomina “caja negra”. Las salidas de este sistema serían los reportes, estadísticas, registros o fichas con la correspondiente calidad y claridad generadas como nueva información y devuelta al ambiente externo.
Las leyes de transparencia tienen como finalidad la correcta implementación de las políticas para el fortalecimiento y consolidación de la democracia en la sociedad. En general, suponen “un cambio de paradigma en las relaciones entre las instituciones y la sociedad, los medios de comunicación, el mundo académico, organizaciones no gubernamentales, etc., ya que incorpora una serie de derechos y obligaciones.” (Dabbagh, 2016)
La gestión de este tipo de leyes no es mero acto vanguardista de los gobiernos sino una respuesta a la necesidad de fortalecer la confianza pública, institucional y económica pues son herramientas contra la corrupción. Ferreira (2012) sostiene que la transparencia “permite visibilizar lo bueno y lo malo que se hace u omite en el Estado, y de esa manera ilumina el juicio político que premia o castiga la calidad del desempeño de autoridades y funcionarios.”
El contexto cubano
La sociedad cubana atraviesa cambios en todos los ámbitos, en los que formas emergentes de comprensión y asimilación del conocimiento son, a la vez, causa y efecto de un nuevo ciclo de desarrollo e innovación. La información y la comunicación, en este escenario, son elementos clave para su funcionamiento y transformación.
Los gobiernos, en todos los niveles, son potentes generadores de datos y de información pública en virtud de las actividades que realizan, por lo que es complejo el proceso asociado a la rendición de cuentas de sus actos. La información pública adquiere valor a partir de la utilidad de los servicios y programas que se ofrezcan para la resolución de problemas y la toma de decisiones inteligentes por parte de los ciudadanos, empresas y todo tipo de organizaciones.
En el país, el desarrollo de las TIC y la evolución de la Sociedad de la Información impulsan la ejecución de acciones de rendición de cuentas. De esta manera, se redoblan los esfuerzos para la publicación y diseminación de información transparente y de calidad que realmente propicie la participación de todas y todos en los procesos gubernamentales y que cuenta con los siguientes y fundamentales respaldos:
La nueva Constitución de la República de Cuba (2019), alude en sus artículos 55, 56, 64 y 92 al derecho de cada ciudadano a recibir del Estado información “veraz, adecuada y oportuna”, a conocer lo que conste de cada uno en registros públicos, a colaborar e interactuar con las autoridades y a participar en el ejercicio púbico del Gobierno.
El Proyecto de Conceptualización del Modelo Económico y Social Cubano de Desarrollo Socialista (2016), en su Capítulo 1, plantea que las TIC y la automatización sirven para propiciar una activa participación ciudadana.
La Política Integral para el Perfeccionamiento de la Informatización de la Sociedad Cubana (2017), se sustenta en principios generales para potenciar el acceso de los ciudadanos al empleo de las TIC, así como desarrollar y modernizar todas las esferas de la sociedad en apoyo a las prioridades del país.
El Plan Nacional de Desarrollo 2019-2030, que abraza el reconocimiento moral y jurídico de la igualdad de derechos y deberes de la ciudadanía y de las garantías para hacerlos efectivos, incluyendo el derecho a la información veraz, transparente y oportuna. Como parte de las transformaciones del Modelo se pretende “perfeccionar la participación democrática a todos los niveles, en especial, el control popular y el involucramiento ciudadano en la solución de los problemas que afectan a cada territorio, centro de trabajo o comunidad. Lograr una efectiva comunicación social, con énfasis en su calidad y en el acceso oportuno a la información pública.” (Plan Nacional de Desarrollo, 2016)
El Decreto-Ley 281 (2011), que establece que el Sistema de Información del Gobierno, como conjunto integrado de los sistemas informativos del país que interactúan para satisfacer las necesidades informativas relacionadas con los objetivos y planes del Gobierno en todos los niveles, en los ámbitos económico, social, demográfico, geográfico, medioambiental, de funcionamiento de sus órganos y en otros que se decidan. Se compone de los sistemas informativos del Gobierno Central, de los Organismos de Administración Central del Estado (OACE), administraciones locales del Poder Popular y el resto de las entidades empresariales y presupuestadas del país, que gestionan información relevante para el Gobierno.
Los OACE son divisiones funcionales del Estado cubano con responsabilidad en el suministro de información pública. Por la importancia e impacto de los ministerios en el desarrollo del país, resulta necesario hacer una evaluación de sus sitios Web para comprobar el estado de transparencia de esas plataformas y contribuir con sugerencias que posibiliten la futura gestión del Gobierno Abierto en Cuba.
La primera investigación sobre el estado de los sitios Web ministeriales realizada desde la academia de las Ciencias de la Información en Cuba (Ruiz, 2014), se ajustó a los criterios del Gobierno Electrónico, incipiente en esos momentos en el país. Conocida la declaración del Presidente de la República de Cuba (Milanés, 2019) a propósito de la conclusión de la primera fase de desarrollo del Gobierno Electrónico y por la favorable evolución de las condiciones tecnológicas para que cubanas y cubanos ejerzan su derecho a la información en el ciberespacio, el reporte que ahora se presenta se centra en los postulados del Gobierno Abierto, como una continuación dialéctica del Gobierno Electrónico.
RESULTADOS
Índice de transparencia
El Índice General de Transparencia (IGT) es el nivel de transparencia alcanzado entre todos los sitios Web evaluados y se expresa en por ciento. Se determinó que el IGT es de 26 %, con fecha de cierre de la evaluación el 30 de marzo de 2019. Este valor, posicionado en la tabla de ranking, demostró que la transparencia de los sitios Web ministeriales cubanos es insuficiente.
El Índice de Transparencia (IT) es el nivel de transparencia alcanzado por cada sitio Web evaluado y se expresa en porcentajes. (Fig. 1)
Nótese que los valores de cada sitio Web alcanzan desde 9 % hasta 42,6 %; por lo que en ningún caso se sobrepasó la categoría de regular. Los sitios Web más altos en el ranking pertenecieron al MINAL, MFP y MINREX con 42,6 %; 37,6 % y 37,4 % respectivamente. Los sitios Web más bajos en el ranking concernieron al MES, MINDUS y MINJUS con 9 %; 12 % y 12,3 % respectivamente.
En la figura 2, se muestra el nivel de cercanía de los resultados del IT según las dimensiones en las que se evaluó la transparencia.
En la figura 3, aparecen los resultados generales obtenidos para cada dimensión, los cuales se comentan de los más favorables a los menos favorables.
Acceso a la Información
Esta dimensión alcanzó el 53,7 % (regular). Fue la dimensión con mejores resultados, con un valor mínimo de 24,4% (MINED) y máximo de 78 % (MINAL). Existen deficiencias que obstaculizan la transparencia de la información pública de los ministerios cubanos; por ejemplo, más del 62,5 % de la muestra no presentó ningún apartado o encabezado en el sitio donde se reconozca o incite el derecho de acceder a esta información y el 43,8 % de los sitios no tiene actualizada la información. Se verificó también que en el 81,3 % de los sitios no se publican las obligaciones de los funcionarios, por lo que la ciudadanía no puede conocer las responsabilidades que deben honrar.
Datos Abiertos
Esta dimensión alcanzó el 24,7 % (insuficiente), con valores desde 0 % hasta 58,3 %. Del total de sitios evaluados, 7 (43,7 %), que corresponden a los sitios de MEP, MES, MIC, MINDUS, MINED, MINEM y MINJUS, no publican datos de ninguna naturaleza. En los sitios con datos publicados se advierten niveles razonables de usabilidad y autenticidad, aunque en ningún caso se alcanza la excelencia ya que las características de completitud, actualización, legibilidad y disponibilidad en masa se muestran deficientes.
Relación con la Ciudadanía
Esta dimensión alcanzó el 18,5 % (mal), con valores desde 2,5 % hasta 45 %. A pesar de no adoptar valores nulos, los resultados no alcanzaron un valor significativo. Las vías de retroalimentación con la ciudadanía en los sitios evaluados no son eficaces pues son escasos los ejemplos de uso de las redes sociales, foros de opinión o un simple formulario.
Rendición de Cuentas
Esta dimensión logró el 7,4 % (mal). Fue la peor renqueada pues en el 56,3 % de los sitios se alcanzaron resultados nulos y el sitio con mejores resultados (MEP) apenas alcanzó el 35 %. Estos valores verifican la ausencia de información relacionada con la gestión sistemática y el cumplimiento anual de las funciones de los ministerios, que no publican siquiera los informes de rendición de cuentas presentados a la Asamblea Nacional del Poder Popular.
DISCUSIONES
La filosofía del Gobierno Abierto requiere la generación de cambios en varias áreas de la sociedad, como la tecnológica y la administrativa. El Gobierno Abierto aboga por la mejora de la relación gobierno-ciudadanía, el constante diálogo entre agentes y en tres principios fundamentales: Transparencia, Participación y Colaboración.
La transparencia es una condición insoslayable para alcanzar el Gobierno Abierto en cuyo proceso es imprescindible publicar la información referente a los asuntos públicos del gobierno. Se basa en el derecho de acceso a la información pública, la libertad de expresión y la apertura de datos y procesos.
Las metodologías iberoamericanas de evaluación de transparencia son referentes útiles para el diagnóstico preliminar de los sitios Web ministeriales en Cuba. Los sitios evaluados alcanzaron un índice de transparencia insuficiente y esto confirma la existencia de un escenario complejo que la administración pública cubana debe asumir, en su conjunto, como un reto de transformación y desarrollo.